"Está oscuro... No se oye nada... Pero se esta tan cómodo... Tan a gusto..." pequeñas nubes de conciencia pasaban cerca ella tocando la membrana del huevo en el que se encontraba, parecían ser insectos.
Pero ocasionalmente captaba una conciencia mas grande que aquellas junto a una enorme "¿Que podrá ser?" se preguntaba la pequeña criatura que vivía dentro del huevo "Me gustaría saber lo que es" Golpeaba el huevo intentando abrirse paso al exterior cada día pero con escaso éxito. Pasaba el tiempo en completo silencio con la única compañía de las conciencias pero sin atreverse a comunicarse con ellas, intentando romper el cascaron que la rodeaba. Una noche empezó a notar que una parte del huevo cedía y logro romperlo por aquella parte, por aquella puerta a la libertad. Con un trozo de cascaron encima de la cabeza se asomo fuera del huevo. Todo estaba oscuro, tan solo iluminado por un par de antorchas enanas, se deslizó lentamente fuera del huevo deshaciéndose de la membrana que la recubría mirando todo alrededor con una ávida curiosidad aquel mundo en el que acababa de nacer.
"¿Pero que es todo esto?"-se preguntaba la dragona mientras iba explorando- "Empiezo a sentir algo de hambre"- Empezó a soltar chillidos en la oscuridad a ver si alguien le hacía caso
Con este recuerdo una pequeña dragona de un color azul como el mar abría sus azulados ojos y se estiraba soltando un bostezo tras echarse una breve siesta sobre el hombro de un elfo de pelo verde oscuro, ojos ambarinos, de tez blanca que la miraba con dulzura
-¿Que tal has dormido pequeña?- Sonrió mientras le acariciaba el lomo dulcemente.
Bueno aquí tenéis un pequeño Prologo de lo que va a ser la historia que voy a crear y que espero que la disfrutéis.