Ivan a la misma casa, la de las aguilas, y como ellas querían volar libres, sobre sus mundos de papel.

Era el último año de clases para ambos. Los extasis dominaban sus vidas. És en esos momentos que un Ravenclaw está más atento a cousas que no salen en los libros.

"¿Desde cuando está Rose tan morena?" se descubrió pensando Scorpius Malfoy una tarde en la biblioteca. "¿Y desde cuando te fíjas en ella? És tu amiga." Miró para otra parte para quitarse de la cabeza la imagen de los bronceados hombros de su compañera. Entonces vio un Griffindor que estaba mirando en su dirección. Pero no lo miraba a él. Si no a ella. "¿És bonita, pero porque tiene que mirarla? Se la va a comer con los ojos."

– Oye, Rose.- Dijo esta vez para que lo oyera- ¿Le hiciste algo a ese Griffindor? Pensé que me miraba a mi. Pero no se le cae la baba así por mi.

– ¿Y si fuera gay? Scorpius, tu estás muy bien, podría babear por ti.

Esa afirmación quedó pendente entre los dos, Scorpius enrojeció y ella agachó la cabeza y se puso a dibujar en la esquina derecha de su papel.

Durante el resto de la tarde ambos estuviron esquivos y por vez primera en siete años Rose no le dió las buenas noches a Scorpius con un beso en la mejilla.