Disclaimer: Harry Potter es propiedad de J.K Rowling. Esta historio tampoco es de mi autoría, es una traducción AUTORIZADA del fic "Love and Other Misfortunes" de SenLinYu
N/T: ¡Hola! Bueno, es la primera vez que hago este tipo de cosas pero quiero agradecer a SenLinYu por darme su consentimiento para poder publicar esta gran historia. Dejo también el link a la publicación original por si alguien lo desea: s/12833681/1/Love-and-Other-Misfortunes
AMOR Y OTROS INFORTUNIOS
(Love and Other Misfortunes)
Por: SenLinYu
Capítulo 1
Hermione Granger estaba por la página setenta y cinco en su revisión de la Ley de Derechos del Hombre-lobo cuando un memorándum con forma de mariposa revoloteó en su oficina y aterrizó en su pisapapeles.
Señorita Granger,
Tengo un asunto que me gustaría discutir con usted. Sé que está bastante ocupada, pero si tiene algún tiempo esta tarde, por favor pase por aquí. Mi asistente la dejará pasar a verme inmediatamente.
Emeliory Bogfeld
Secretaria de Vínculos Mágicos
Departamento de Regulación y Control de las Criaturas Mágicas
Hermione parpadeó ante la nota. Emeliory y ella trabajaban en diferentes sectores del departamento de criaturas mágicas y, en los últimos tres años, nunca habían cruzado caminos aparte de un saludo ocasional en el ascensor. La especialidad de Hermione era legal, pelear por los derechos de seres mágicos subrepresentados como hombres-lobo, elfos domésticos, y centauros; mientras que Emeliory estaba en una rama más antigua y establecida, especializándose en términos de negociación entre seres mágicos y magos en el caso de un vínculo mágico.
Hermione frunció los labios y se preguntó acerca de qué podría Emeliory querer reunirse. Probablemente, se dio cuenta, se trataba de cómo la Ley de Derechos del Hombres-lobo podría coincidir con la división de vínculos mágicos. Los vínculos de Hombre-lobo eran raros, pero había registros de ellos en la historia mágica.
Hermione mordisqueó la punta de su pluma. En el caso de un enlace de hombre-lobo las ramificaciones legales podrían ser difíciles. Ella no había estudiado el sistema legal de los Vínculos de Seres Mágicos porque el área no era su especialidad y no figuraba en el borrador actual de la Ley de Derechos del Hombre-lobo. Pero, se dio cuenta, si el proyecto de ley pasaba, sentaría un precedente que podría usarse para impulsar una Enmienda de Derechos de Vinculación en el futuro.
Con un pequeño gemido, se cubrió los ojos con el brazo y se encogió para sus adentros al pensar en todas las nuevas revisiones de la LDH que la consideración de vínculos mágicos probablemente necesitaría. Tendría que repasar todo de nuevo, palabra por palabra. ¿Cómo pudo haber pasado por alto algo con tan grandes ramificaciones potenciales? Un dolor de cabeza comenzó a arrastrarse hacia ella, la tensión irradiaba desde su cuello.
—Durmiendo en el trabajo otra vez, ¿Eh, Granger?
Los ojos de Hermione se abrieron y se sentó para encontrar a Draco Malfoy recargándose sobre su escritorio. Desde la graduación, cuando comenzó a ser preparado para hacerse cargo de la propiedad Malfoy, se había vuelto cada vez más y más como Lucius Malfoy. Llevaba túnicas y capas mágicas, incluso ahora en el auge del verano, y se escurría por el Ministerio y entraba en las oficinas como si fuera su dueño. Solía entrar de repente en la oficina de Hermione especialmente a menudo, fingiendo apoyo por sus causas, pero ella no dudaba que preocupándose sólo por asegurarse de que no estaba pasando nada que pudiera impedir que los Malfoy acumulen una fortuna aún más absurda.
Hermione solo lo soportaba porque Narcissa Malfoy había financiado su programa de educación para hombres-lobo para cuidar a niños huérfanos o desheredados que habían sido mordidos durante la guerra. Hermione había comenzado su campaña para el programa casi inmediatamente después de la guerra, pero en medio de los esfuerzos de reconstrucción su recaudación había hecho poco progreso. Estaba lista para desesperar cuando Narcissa Malfoy apareció con una llave de una bóveda de Gringotts y se la entregó, sin condiciones o preguntas. Hermione sabía que la estaban comprando, pero no había estado en posición de rechazarla; soportaría a Malfoy recargándose a cambio de dar a 126 niños lobo la oportunidad de crecer de forma segura.
—No estaba durmiendo, Malfoy —dijo remilgadamente, sonrojándose débilmente. Malfoy había entrado una vez en su oficina y la encontró durmiendo debajo del escritorio. Aún no lo había superado—. Me acabo de dar cuenta de que necesito hacer otra revisión completa de la LDH, y ya que que se supone que estará lista para la asamblea del Wizengamot para el martes, eso significa que probablemente viviré de la poción pimentónica durante los próximos cinco días.
— ¿De nuevo?, Pensé que dijiste que estaría lista hoy —las cejas de Malfoy se arquearon.
—También pensé que estaría lista, hasta que recibí un memo de Emeliory Bogfeld pidiendo una reunión —levantó la nota para mostrarle a Malfoy—. Nuestros sectores en el departamento nunca se han cruzado antes, así que solo puedo imaginar que tiene preocupaciones sobre el precedente legal de la LDH respecto a los vínculos mágicos.
— ¿Qué? —Malfoy le quitó la nota de los dedos y la leyó él mismo—. Hablé con su asistente la semana pasada con respecto a la LDH, ella no mencionó que el Departamento de Vínculos tuviera alguna preocupación con respecto a los precedentes. A menos que…—sus ojos se estrecharon y su voz se apagó antes de arrojar la nota de vuelta al escritorio abruptamente.
—Me ocuparé de esto —dijo deslizándose de la habitación.
— ¡Malfoy! —gritó Hermione, saltando de su escritorio—, ¡Malfoy, espera!
Ella lo persiguió, más allá de su asistente y por el pasillo antes de finalmente alcanzarlo. Las piernas de él eran considerablemente más largas que las de ella, y tuvo que trotar para seguirle el ritmo.
—Malfoy, sinceramente, no me importa. Quiero asegurarme de que todo esté perfecto con la LDH antes de enviarla. No queremos correr ningún riesgo de que el Wizengamot vote en contra y nos fuerce a esperar hasta el próximo año para reenviarlo. Los derechos del hombre-lobo necesitan una reforma ahora. Además, esto es mi culpa, debí haber consultado con el departamento de vínculos mientras redactaba la LDH en primer lugar. La nota de Emeliory parecía muy agradable, estoy segura de que solo tiene unas cuantas preocupaciones, hacer otra revisión completa es mi prerrogativa.
El ritmo de Malfoy no aflojó en absoluto y, frustrada, ella agarró su muñeca para frenarlo. El segundo en que su mano lo tocó, él se giró y de apartó de ella como si le quemara.
—No me toques, Granger —siseó viciosamente.
Hermione sintió como si la hubieran abofeteado. Malfoy y ella no eran exactamente amigos, pero la ira en su expresión parecía excesiva dados los años que habían trabajado juntos. Le sorprendió lo dolida que se sintió por eso. Tropezó levemente y se enderezó. Se encontró a sí misma buscando su rostro, medio esperando que él le ofreciera una excusa o una explicación. Malfoy y ella eran diferentes ahora, eran colegas; no concordaban con todo, pero después de todos esos años, habían superado eso.
Pero si Malfoy notó la expresión de dolor en su rostro, no dio ninguna indicación y continuó como si nada hubiera pasado.
—Me haré cargo de esto —reiteró —. No te molestes con Bogfeld.
Caminó por el pasillo otra vez, y Hermione no intentó detenerlo.
Al regresar a su oficina se dejó caer en su silla y miró las revisiones que había estado haciendo minuciosamente por lo que había parecido la milésima vez. Si iba a tener que volver a revisarla de todos modos, no tenía sentido terminar... lo que significaba que su agenda para el resto del día estaba vacía.
Al diablo con Malfoy, resopló, poniéndose de pie. Iba a encontrarse con Emeliory.
La sucursal de Vínculos Mágicos estaba escondida en el Departamento de Criaturas Mágicas cerca de la entrada del visitante. Hermione nunca había estado en el pasillo, y se dio cuenta de que era bastante absurdo, dado que había estado trabajando allí tres años. Tan pronto como la asistente, Astoria Greengrass, vio a Hermione, tocó un pequeño adorno brillante y dijo:
—Hermione Granger está aquí para verla.
—Hazla pasar —la voz tintineante de Emeliory respondió de inmediato.
Astoria señaló hacia la puerta y Hermione entró.
La oficina de Emeliory le recordaba a Hermione a la de una psicóloga muggle y, a diferencia de las típicas oficinas del ministerio, ya sea monótonas o absurdamente ostentosas, parecía tener la intención de tranquilizar a los visitantes. Había pinturas en las paredes, y plantas con flores reposando en los estantes. Incluso había un juego completo de hermosa porcelana inglesa para el té y una canasta de pasteles de hadas. El escritorio de Emeliory, en lugar de mirar a la puerta, estaba en una esquina y había varías sillas laterales grandes, y un sofá en el centro de la habitación.
—Señorita Granger —dijo Emeliory, levantándose de su escritorio y acercándose a ella —, estoy muy halagada de que pudiera hacer tiempo en su agenda para reunirse conmigo hoy. Sé que es una persona terriblemente ocupada.
A Hermione Emeliory Bogfeld le recordó a su madre. Tenían los mismos ojos y voz melódica, parecida a un pájaro. Y Aunque confortable y adecuado para una mujer madura Emeliory estaba elegantemente vestida mientras parecía maternal al mismo tiempo.
—Por supuesto, señorita Bogfeld, despejé mi agenda tan pronto como recibí su nota. Lamento mucho no haberla consultado antes. Me di cuenta de mi error en el momento en que leí la nota. ¿Cree que hay alguna posibilidad de que podamos hacer las revisiones necesarias a tiempo para que el Wizengamot vote el martes, o debería presentar una solicitud para una extensión?
Emeliory parpadeó.
— ¿Revisiones? —cuestionó.
—Sí —Hermione siguió presionando—. Sobre la LDH. Tengo que admitir que ni siquiera se me había ocurrido que la LDH podría tener un efecto sobre el precedente establecido en el caso de un vínculo de Hombres-lobo. Fue descuidado de mi parte, lo sé. En verdad no sé cómo lo pasé por alto. Pero por supuesto que debemos ser muy cuidadosos en el fraseo de la LDH para asegurarnos de que no tenemos una cláusula en algún lado que preocuparía al Wizengamot y voten en contra. Realmente no he estudiado la ley de vinculación, así que por supuesto cederé a lo que crea que sería aconsejable.
—Oh —Emeliory inclinó la cabeza hacia atrás y río.
Hermione de repente se dio cuenta que no tenía ni idea de porqué Emeliory la había llamado. Claramente no tenía nada que ver con la LDH.
—No tengo ninguna preocupación sobre la LDH. Revisé el borrador que envió a los sectores la semana pasada y estoy bastante impresionada con el trabajo que ha hecho. Los derechos del hombre lobo han sido ignorados por demasiado tiempo y estoy muy contenta de ver que tienen un abogado como usted para representarlos. Y, en cuanto a las implicaciones legales en relación con el departamento de vinculación, no necesita preocuparse ni un poco. Las leyes con respecto a la vinculación son tan antiguas como las colinas y están escritas para incluir todos los enlaces de seres mágicos, estoy legalmente facultada para representar a los hombres lobo en caso de unión mágica.
—Oh —dijo Hermione, dándose cuenta que realmente no sabía nada sobre la estructura legal de los vínculos de seres mágicos.
—Ahora, ¿Por qué no se pone cómoda, nos sirvo una taza de té y le digo porqué le pedí que se reúna conmigo?
Hermione se sentó en el borde de una silla con respaldo lateral y aceptó té y un pastel de hadas.
—Ahora —Emeliory dijo, sentándose en el sofá con su propia taza de té. —, señorita Granger, sé que ha trabajado en el departamento de Criaturas Mágicas durante tres años, pero ¿Qué sabe usted sobre el vínculo mágico específicamente? Soy consciente de que es algo que no está cubierto en el plan de estudios de Hogwarts, pero también he escuchado cuentos sobre su curiosidad apasionada.
—No mucho —Hermione admitió, un temor repentino se apoderó de ella y se dio cuenta de por qué estaba allí—. Sé que los lazos mágicos tienen diferentes niveles de aparición dependiendo de los seres mágicos. Se considera raro entre los hombres lobo, los centauros y los vampiros, pero entre las veela, los elfos domésticos y los que tienen rastros de sangre de hada, es intrínseco a su magia y ciclo de vida.
Emeliory asintió —Sí, y como es intrínseco a su magia, es mi trabajo negociar lo que eso significa entre las dos partes. En ocasiones es una situación muy difícil. El Ministerio, por supuesto, se opone a coaccionar a los magos, sin embargo, cuando tienes la vida de otro individuo en juego, es muy importante que el individuo mágico comprenda la gravedad de su elección. ¿Conoce los diferentes tipos de vínculos que pueden ocurrir?
—Hay una vinculación física, que ocurre cuando la sangre se mezcla y causa una especie de conexión fantasma entre el ser y el mago. Luego hay una vinculación de dependencia mágica, como lo que se ve en los elfos domésticos, donde su voluntad de vivir puede depender de servir a una cierta línea de sangre. Y luego está —Hermione se atragantó y se volvió ligeramente rosada—, la unión de pareja, donde el ser mágico distingue a un individuo mágico con el que se unirá con el propósito de casarse y reproducirse.
Emeliory hizo un sonido por lo bajo — ¿Y esta es su idea de no saber mucho sobre los enlaces mágicos? Sabes más sobre eso que la mayoría de los sangrepura. Aunque, debo modificar su entendimiento de cómo funciona la unión de pareja. Por lo general, ocurre mucho más orgánicamente de lo que la mayoría piensa. Un ser mágico no solo selecciona de manera repentina a un individuo mágico, sino que se siente atraído por ellos y se enamora de ellos de la misma manera que cualquier persona se enamora. Se necesita un cierto nivel de cercanía para que el vínculo empiece a formarse. No puede ser simplemente alguien a quien pasas en el vestíbulo o una celebridad de la que se siente atraído. Y el ser mágico tiene un agudo sentido interno de lo que es compatible, emocional, mental y mágicamente; son mucho más estrictos sobre esas cosas que la mayoría de los magos. —Emeliory sonrió levemente antes de continuar,
—Pero, una vez que un ser mágico alcanza el punto de querer unirse, no pueden dejar de amar. Su vida se basa en convencer al individuo mágico de corresponderle. Una vez que el vínculo se sella, se convierte en codependiente. Afortunadamente, la mayoría del tiempo, las dos personas tienen una relación mutua y entrar en el vínculo es solo el siguiente paso... pero ocasionalmente es más complicado que eso, y es entonces cuando entro yo.
Emeliory hizo una pausa y miró fijamente a Hermione.
—Como estoy segura de que ya ha adivinado, señorita Granger, la razón por la que le pedí que viniera aquí es porque me han pedido que represente a un ser mágico que la ha elegido a usted como su pareja.
Hermione parpadeó, casi esperando que toda la situación fuera una alucinación causada por la falta de sueño.
— ¿Estás segura?
—Lo estoy. La razón por la que me han traído como mediadora es porque el ser mágico en cuestión está convencido de que usted no puede y no va a reciprocar sus sentimientos. Él ni siquiera quiere que lo sepas porque tiene miedo de que aceptes la unión como una cuestión de conciencia. Así que se ha resignado a morir en lugar de ponerla en una situación en la que se sienta coaccionada. Sus padres vinieron a mí, y me suplicaron que le presentara la situación para su consideración.
— ¿Y se le permite hacer eso?
—Él está enamorado, y las personas que aman toman decisiones irracionales a veces. Especialmente cuando han formado un apego en la medida en que lo hace un ser mágico. Debo admitir que esta es la primera ocasión en la que estoy en una posición de abogada que en una posición de mediación.
— ¿Y es alguien con quien soy razonablemente cercana? —Hermione estaba destrozando su cerebro tratando de adivinar quién podría ser. Las familias con sangre mágica eran a veces extremadamente reservadas, especialmente las que descendían de las hadas. Pero dada la certeza del individuo de que ella lo rechazaría, eso implicaba a Slytherin.
— ¿Cuánto tiempo tengo para decidir? ¿Qué le está pasando a esta persona mientras tanto?
Emeliory tomó un sorbo de té con una deliberación que solo podía ser una ganancia de tiempo.
—No iba a decírselo, porque es el tipo de información que puede sentirse coercitiva. ¿Estás segura de que quieres saber?
—Siempre me ha gustado estar completamente informada sobre las decisiones que tengo que tomar —Hermione respondió con firmeza —, si no me lo dice, encontraré la información de otra manera.
—Generalmente —dijo Emeliory lentamente —, una vez que el vínculo comienza a manifestarse, el ser mágico tiene uno o dos años antes de necesitar actuar por el impulso. Cuando pasa ese periodo, los síntomas comienzan a surgir. El vínculo debe compartirse, así que sin la otra parte, sus niveles mágicos superan lo que un cuerpo puede manejar físicamente. La magia los come desde el interior, los sentidos comienzan a desvanecerse, y el impulso de unión aumenta, tienen fiebre y puede causar alucinaciones. Existen pociones de enmascaramiento para esos síntomas, pero requieren una dosis constantemente mayor y finalmente dejan de funcionar. Muchas veces se toma una poción de represión de libido al mismo tiempo como precaución, ya que las ganas de aparearse pueden ser abrumadoras. Una vez las pociones dejan de funcionar por completo, todo progresa rápidamente. Los sentidos se pierden por completo y el individuo se vuelve delirante. La fiebre aumenta hasta que finalmente sus órganos fallan y en ese punto mueren.
— ¿Y en qué parte de esa progresión está esta persona en este momento?
—De acuerdo con sus padres, él no les dijo que se había comenzado a manifestar un vínculo. Solo se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo porque las pociones comenzaron a perder su eficacia —Emeliory dijo en voz baja.
Hermione sintió como si todo su mundo hubiera podido desmoronarse en el curso de una taza de té.
—Entonces realmente no tengo tiempo para pensar en eso —dijo, con más calma de la que sentía—. ¿Hay alguna forma de reunirse con esta persona y ver si hay alguna posibilidad de que esto funcione? ¿Hay alguna manera de coordinar eso, teniendo en cuenta lo en contra que está de incluso revelarse a sí mismo?
Emeliory abrió la boca para responder cuando de repente se escuchó una conmoción fuera de la oficina. De repente hubo una explosión y la puerta estalló en llamas y se abrió de golpe cuando Draco Malfoy irrumpió,
— ¡Bogfeld! No me importa lo que mi madre te prometió, si tan solo le susurras una palabra a Granger sobre mí, voy a quemar tu oficina... —
Su voz se cortó con un sonido de ahogo al ver a Hermione.
—Pues, Sr. Malfoy, que agradable sorpresa —dijo Emeliory, sorbiendo su té con calma como si la puerta de su oficina no hubiera sido demolida por una bola de fuego—. La señorita Granger y yo justamente estábamos hablando de usted.
Hermione y Malfoy se miraron el uno al otro durante unos segundos mientras se daban cuenta de cada uno de ellos. Malfoy se recuperó primero y de repente se veía muy enfermo.
—Maldita sea, Granger —dijo en voz baja —, no podía escucharme solo una vez en tu vida.
Luego giró sobre sus talones y desapareció por la puerta encendida.
Astoria estaba balbuceando una explicación, pero Hermione estaba demasiado aturdida para escucharla.
Malfoy había formado un apego a ella. Malfoy. No estaba segura de si estaba más estupefacta porque nunca había notado que él era en parte un ser mágico, aparentemente enamorado de ella, o que estaba muriendo.
Sin decir una palabra más a Emeliory, saltó y persiguió a Malfoy por segunda vez ese día.
—Malfoy —le gritó. Él aceleró. Corriendo por el pasillo detrás de él, maldita sea la dignidad, volvió a gritar—. ¡Malfoy!
Él estaba acercando al ascensor y no había forma de que lo atrapara.
Finalmente, frustrada, sacó su varita y, preparándose para la cantidad de regulaciones que estaba a punto de violar,
— ¡Petrificus Totalus!
Congelado en el medio del pasillo, finalmente lo alcanzó y, al girar para mirarlo, se puso las manos en las caderas para enfrentarlo.
—Draco Malfoy, no puedo creerte. Tú eres sin duda la persona más problemática y cobarde que he conocido en toda mi vida.
Aunque su expresión estaba congelada, ella podía ver sus ojos destellar de dolor, pero siguió presionando.
—Ni siquiera estoy seguro de lo que encuentro más ridículo en este momento, de que hiciste explotar la puerta de Emeliory Bogfeld, o de que preferirías morir antes que admitir que te gusto. Ahora, voy a descongelarte, pero te vas a quedar y hablarme de esto o iré a tu casa y hablaré con tu madre —su voz tembló un poco ante la idea de volver a visitar Malfoy Manor—, y preferiría no hacerlo.
Sosteniéndolo en el lugar para evitar que se caiga, lanzó el hechizo.
— ¿Te vas a quedar? —ella preguntó.
Malfoy todavía se veía tan enfermo como cuando salió de la oficina de Emeliory, pero asintió.
—Por favor, deja de tocarme, Granger —dijo con tono áspero.
—Oh —ella soltó su brazo cuando comprendió su reacción esa mañana— ¡Oh!
En la fracción de segundo que la compresión la golpeó, Malfoy logró recuperar la compostura.
— ¿Quieres hablar aquí? ¿O tenías un lugar específico en mente? —inquirió categóricamente.
— ¿Mi oficina estaría bien?
Él asintió brevemente y, sin esperar a que ella lo guiara, caminó por el pasillo hacia su oficina.
Estaba ya tumbado en una silla cuando ella lo alcanzó. Aparentemente se había calmado en el camino y su fría máscara indolente había vuelto a su lugar mientras se sentaba al otro lado del escritorio.
—Granger —dijo arrastrando las palabras, antes de que ella pudiera abrir la boca—, antes de que me interrumpas con la, estoy seguro, infinita cantidad de preguntas que tienes, me gustaría asegurarme de que una cosa es muy clara: no voy a enlazarme contigo. Honestamente, me importa un comino lo que sientes al respecto, prefiero morir.
Hermione sintió como si estuviera experimentando latigazo emocional. No le gustaba Malfoy y no tenía ningún interés en casarse mucho menos 'vincularse' actualmente, pero de todos modos, era muy difícil no sentirse herida cuando alguien decía que prefería morir que casarse contigo y realmente tener la intención llevarlo a cabo.
—Ya veo —dijo ella—. ¿Es porque soy hija de muggles?
Algo vaciló en la cara de Malfoy por un momento antes de que rodara los ojos hacia el techo como si estuviera aburrido por su previsibilidad —Sí.
— ¿Y no porque estés enamorado de mí y tienes miedo de que aceptaré porque me siento coaccionado por la idea de ser responsable de tu muerte?
Malfoy apartó la vista del techo y la miró. Su rostro estaba horriblemente pálido y sus ojos grises brillaban febrilmente, Hermione no podía creer que no lo hubiera notado antes.
— ¿Es eso lo que Bogfeld te dijo? —soltó una carcajada—. Merlín, Granger, ¿podrías ser más crédula? A Bogfeld le pagan, el ministerio y estoy seguro que mi madre ahora lo hace generosamente, para hacer que los lazos mágicos suenen lo suficientemente románticos como para que idiotas como tú lo acepten. No es romántico y no estoy enamorado de ti, solo tengo una criatura dentro de mí que te encuentra ideal para procrear. Y desafortunadamente para los dos, preferiría morir antes que involucrarme en algo tan vil —se burló de ella.
Hermione se sintió insegura. No confiaba en las afirmaciones de Malfoy, era un Slytherin después de todo, y había lidiado con su manipulación en el departamento durante años. Pero, tampoco podía negar su argumento en contra de Emeliory. La mujer era representante de los seres mágicos, era su trabajo que magos consistieran a la vinculación sin coerción... y una vez que el vínculo estaba hecho, sus medios para el fin eran irrelevantes, todos pensaban que eran felices.
Sin embargo, argumento de Malfoy tenía menos sentido. Los slytherins era ambicioso y en su experiencia, generalmente poco éticos; morir como un mártir para evitar tener que "aparearse" tenía muy poco sentido. Si Malfoy realmente la odiaba tanto, entonces no le importaría si ella se sentía culpable o era forzada en el vínculo, él estaría vivo y podría seguir su camino feliz.
—No me hago ilusiones sobre que esto sea romántico, Malfoy. Simplemente me resulta difícil creer que te resulte preferible morir. Siempre he pensado que eres más egoísta que eso.
La misma expresión indescifrable apareció en la cara de Malfoy otra vez.
—No te engañes pensando que esto es algo noble, Granger —su voz era fría y plana—. Quizás no te hayas dado cuenta a lo largo de todos estos años, pero te aborrezco. El hecho de que una parte de mí te encuentre atractiva en absoluto es la cosa más vil que me ha pasado. Y, aunque no voy a negar que la atracción existe, eso no significa que la aceptaré hasta el punto de tener que tocarte alguna vez.
Él se levantó abruptamente.
—Creo que esas son todas las preguntas que voy a responder por hoy. Si quieres saber algo más, puedes escribirme.
Entonces él se había ido.
Hermione se quedó sentada en su escritorio por un largo tiempo después de que él se fuera, su mente girando mientras procesaba la información conflictiva con la que había sido inundada esa tarde.
Finalmente se levantó y recogió la LDH parcialmente revisada.
—Parvati, —le dijo a su asistente, colocando la mitad revisada de la LDH en la recepción—, voy a estar fuera de mi oficina por el resto del día. Por favor, baja esta sección de la Ley de Derechos del Hombre-lobo para que la impresión se actualice, traeré el resto mañana por la mañana.
Entonces Hermione Granger fue a la biblioteca.
