N/A: ADVERTENCIA! PRIMERO LEE ESTO ANTES DE QUE TE DECEPCIONES

Esta historia no es un fic propiamente dicho ni un crossover, esta historia y sus protagonistas son propios. Estoy usando algunos personajes ya creados que me sirven de inspiración en esta historia y que serán usados como personajes secundarios (la mayoría de los personajes son OC, es decir creados por mi) y puede ser cambiada su personalidad para lograr el propósito de la narración. Este escrito no es ni continuación de Bleak Blade, Bleach, Guilty Crown o Togainu no chi, sólo he tomado prestados algunos personajes.

Muy bien pues si así aún estas dispuesto a leer que comience la fiesta...

Los personajes usados serán lo siguientes (puede que a futuro meta a más lo cual será avisado al inicio de cada capítulo):

Yukio-Bleach

Girge- Break Blade

Gai- Guilty Crown

Shiki- Togainu no chi


CODE NOIR

By: Kyomi120500

ARCO: PROLOGO

Capítulo 1:

El fantasma bajo el cerezo.

Era una noche con luna llena iluminando el parque central. El aroma de las flores y la brisa de primavera hacían recordar a cualquiera que la estación estaba iniciando con la gran gama de sensaciones que lo acompañaban. El reflejo del astro se reflejaba claramente en la laguna de aquél sitio haciendo más placentero el paseo alrededor del estanque.

Era muy tarde, el reloj que se alzaba encima de las baldosas marcaba la medianoche mientras una figura femenina caminaba por el solitario paseo del parque. Llevaba su largo cabello color bronce recogido en una coleta dejando ver su esbelto cuello. Tenía rasgos estilizados aunque era pequeña de complexión, y si no fuera porque vestía un traje de oficina color azul marino cualquiera la confundiría con una estudiante de preparatoria por las facciones delicadas de su rostro. Sus ojos amatista se enfocaban en el camino de piedras dejando ver una gran tristeza que se escapaba por su mirada.

Suspiró deteniendo su caminada y miró a su lado. Se subió al barandal de concreto del puente por el que pasaba dejando sus cosas a un lado junto a un maletín marrón con los documentos de su labor. Esa tarde había sido una pesadilla para ella en el trabajo todo porque entregó su confianza y esperanzas ciegamente al peor tirano de la historia. Recordó lo que le habían dicho tiempo atrás sus compañeras de trabajo.

-Te dije que te alejarás de él. Él es nuestro supervisor y tiene poder sobre nosotras.

-Ese cretino, tiene esposa pero eso no le impide andar de mujeriego.

-¿De verdad creíste en esa palabras de amor que te dijo? Deja ya tu mundo de fantasía, este es el mundo real. La única razón por la que se te acercó fue por tu eficiencia en el trabajo. Él sólo te usó mientras lo sacarás de apuros – decía alguien más.

Con este último recuerdo el rostro de la mujer hizo una mueca de coraje en su boca. Era cierto, ella era una mujer muy fantasiosa y soñadora, le encantan los cuentos de hadas aunque pareciera infantil a sus ya 19 años y siempre espera a alguien que la saque de esta vida monótona y la haga feliz como los finales de princesa que adoraba. Pensó amargadamente en sus supuestas citas con aquél hombre y recordó lo superficiales que eran, aunque en ese momento no se diera cuenta ya que, debido a su inmadurez, siempre tendía a usar el filtro rosa, palabra que le designaron sus amigas por ser propensa a fantasear.

Miró hacia abajo observando el profundo y oscuro estanque. Aunque supiera nadar el alcohol que había tomado en el bar harían el trabajo por ella.

De pronto escuchó un ruido detrás sacándola de su trance de depresión. Era un perro negro de raza labrador que la miraba con inteligencia. Ella le devolvió la mirada y por un segundo casi juró que el can había suspirado. Dándose la vuelta tras el acto, éste continuó con su recorrido.

-¡Ni siquiera puedo importarle a un perro!- decía para sus adentros llorando de coraje.

Regresó a su objetivo pero era tarde, muy tarde, con esa pausa se le había escapado el valor. Pensó en cómo fácilmente se echaba para atrás debido a su cobardía y suspiró resignada bajándose del pedestal.

-¡ ¿Quién moriría por ese imbécil?- se dijo así misma. No era la primera vez que se había entregado en cuerpo y alma a un hombre y tampoco lo era el ser botada.


Al parecer de otros, Sena era muy poco realista y siempre construía una imagen sobre idealizada de los hombres con quienes salía la cual siempre terminaba en decepción. Pensaba que eso no le pasaría con su actual novio y supervisor, ya que él era muy caballeroso y le decía cosas hermosas que harían sonrojar a cualquier dama. Las palabras de amor que juraba y sus promesas de separarse de la esposa que ya no amaba para estar con ella la habían conmovido a tal grado de ignorar el año ya transcurrido dejando estancada su relación.

Un día mientras tomaba un descanso en la sala de espera, Sena vio a su amado en el corredor por lo que se le acercó dispuesta a saludarlo.

-No puedo creerlo ¡Sacaste ese trabajo como si nada! En verdad te envidio- escuchó la castaña deteniéndose en el acto. Su supervisor hablaba con un colega del trabajo mientras disfrutaban de un café expreso.

-Todo gracias a Sena del departamento de ventas, ella ha hecho todo el trabajo. Si le pido algo sé que lo hará por mí –la castaña sintió un calor en su corazón pensando que Allen la alababa por sus habilidades lo cual la hacía muy feliz, pero pronto su alegría se vería destrozada.

-¿Así que ella es la nueva víctima? Ya sé que sales sólo por su capacidad pero ¿no crees que sea un poco mezquino que la uses de esa forma? Digo, ella está muy enganchada contigo pero tú pareces que sólo la usas como una criada.

-No la trato como una criada, es mi criada. Sólo bastan unas palabras tan superficiales para que haga cualquier favor que le pida y lo mejor es que ha durado más que las otras haciéndome la vida más fácil. Me obedece fielmente cómo si se tratara de un perro.

-Nunca cambiarás, siempre tan retorcido-dijo su compañero llevándose un trago a sus labios – ¿y qué harás si se da cuenta que sólo la usas?

-Si te es inútil un objeto lo más obvio es tirarlo. Haré que renuncie al trabajo como he hecho con las otras- contestó Allen mientras tiraba el vaso desechable a la basura y se alejaba con su colega por el pasillo.

Sena no soportaba las emociones que iban creciendo en su pecho: ira, enojo, desprecio pero aún más grande que ellas era el dolor. Dolor de saber que fuiste traicionada, dolor por saber que no era nada más que una herramienta para su jefe, dolor por no haber escuchado las advertencias de sus compañeras con mayor experiencia, dolor por defender a capa y espada a aquel hombre frente a los malos rumores que le rodeaban. Todo eso y mucho más para explicar le dolieron en el pecho y esa tarde abandonó sus labores para encerrarse en el baño a llorar para desahogarse.

- Sí que soy patética – apoyó su cuerpo en la pared – fui usada– una débil carcajada, llena de dolor inundo en el baño – patética y débil– se apoyó más, sus piernas temblaban – patética – repitió en un susurro y poco a poco fue cayendo sentado en el suelo. No pudo evitar que un gemido de dolor se escapara de su garganta.

Más calmada regresó a su puesto horas más tarde ante la mirada curiosa de sus colegas quienes prefirieron no preguntar nada. Para su desgracia apareció la persona que menos quería ver en ese momento.

-Sena ¿Dónde has estado? Me tenias muy preocupado- la mencionada bajó la cabeza y dirigió la vista al suelo, sus labios se abrieron como si estuviera a punto de decir algo pero ningún sonido salía de ellos - Cómo sea ¿tienes el reporte que te pedí esta mañana?

Entonces ella cerró los puños con fuerza y apretó la mandíbula mientras temblaba de ira.

-Sena ¿Qué ocurre?- dijo el hombre mientras acercaba su mano a la mejilla derecha de la chica.

Fue cuando ella ya no lo soportó más y alejó esa mano aventándola con desprecio con un hábil manotazo.

-No se te ocurra tocarme cretino- dijo mientras alzaba su vista. Su mirada se hacía fría y llena de resentimiento –Si quieres el reporte hazlo tú, ya estoy cansada de ser tu criada.

Sin más tomó sus cosas y se fue tan rápido como pudieron darle sus piernas ignorando los cuchicheos de todos en esa sala por la escena hecha. Esa tarde, ella se había desahogado en un bar el cual frecuentaba cuando sufría decepciones amorosas, incluso el dueño ya la conocía.


-Creo que me pasé con las copas-dijo Sena mientras buscaba un lugar por los arbustos donde volver el estomago; el aire fresco del parque que le pegaba en la cara no hacía otra cosa más que empeorar su estado.

Alzó la mirada limpiándose la boca con la mano de ese trago amargo mientras se apoyaba en un roble, fue entonces cuando lo vio: arriba de la colina donde se alzaba un cerezo se encontraba un joven de negro y cuyo rostro estaba cubierto con una máscara blanca.

Tal vez fue la brisa que movía sus cabellos color azabache, los pétalos de cerezo que caían con gracia alrededor o la luz de la luna que caía sobre él haciéndolo parecer como un ser fuera de este mundo… no lo sabía pero se embelesó por tal escena. De pronto escuchó una voz proveniente del lugar manteniendo una conversación que era inaudible a sus oídos. Miró a su alrededor y vio al mismo perro negro de antes moviendo el hocico.

-… Espera un momento ¡¿El perro habla?- se dijo para sus adentros sorprendida mientras daba un paso atrás pisando accidentalmente una rama la cual crujió.

El hombre dirigió su cabeza hacia su dirección atemorizando a la mujer, no por ser sorprendida sino que aunque los ojos del hombre estuviesen cubiertos, ella podía sentir una miraba fría y hostil que la atravesaba en todos los sentidos. Los escalofríos recorrieron su cuerpo presa del pánico, pero era incapaz de moverse. Cerró los ojos con fuerza como medio de protección.

-¿Qué será de mí? -pensó.

Pasaron tres, siete, diez segundos y nada. Decidió abrir los ojos lentamente y dirigió dudosa su mirada hacia arriba de la colina. No había alguien, ni perro ni el hombre de negro.

-Definitivamente dejaré el alcohol- dijo como veredicto asumiendo que lo que vio fuese una ilusión. No era la primera vez que sus fantasías hacían de las suyas y continuó con su camino, aún debía salir del parque.


Notas de autora:

Espero que la historia les haya interesado, he hecho este capítulo con mucho cariño, sus opiniones y sugerencias son bien recibidas.

Antes que nada esta historia es más de misterio y ciencia ficción, no esperen una historia llena de amor aunque si habrá un poco de esto entre nuestros protagonistas pero a un ritmo lento ya que desde mi perspectiva deben darse las ocasiones para que ellos comiencen a conocerse y a entenderse y sobre todo a cambiar algunos rasgos de su personalidad.

Siempre quise hacer una historia con elementos sobrenaturales y personas con habilidades especiales como serían los X-men, Heroes, y varios animes cómo la última que vi Darker than Black. De hecho verán un parecido en el protagonista con Hei, el personaje principal de Darker tan Black pero sólo lo usaré como inspiración por lo que no piensen que será una secuela o fanfic de esta serie, pero aunque su actitud sea igual de fría es mucho más agresiva.

La historia se irá complicando: organizaciones secretas, mayores enemigos y un pasado que desvelar para encontrar la naturaleza de nuestra protagonista y sobre todo un poco de gore, aunque también pondré un fuerte compañerismo y añadiré aliados con un objetivo en común. Así que continuemos.