En este mundo intentaste

En este mundo intentaste

no dejarme solo atrás

no hay otra manera,

recé a los dioses: déjenla quedarse

los recuerdos liberan el dolor interno,

ahora sé porque.

¿Por qué? ¿Porqué me abandonaste? No puedo entenderlo, no puedo comprenderlo, sé que lo hiciste por mi, pero ¿a que precio?, no, era demasiado alto, no estaba dispuesto a pagarlo, ¿pero tú si, verdad? Si, siempre fuiste más valiente, siempre le plantaste cara a todo, luchaste por lo que amabas, por lo que querías… no cómo yo, sólo me quedé mirando como morías, impotente, inútil, estúpido, si, soy todas esas cosas, lo sé y lo admito, lo soy por no luchar, por dejarme caer, por arrastrarte a aquello…

Todos mis recuerdos

te mantienen cerca.

En momentos de silencio

Imagino que estas aquí

todos mis recuerdos

te mantienen cerca

tus silenciosos susurros,

lagrimas silenciosas.

¿Y donde va un alma cuando muere? No lo sé, y tal vez eso sea lo peor, no eras una humana, por tanto, tu alma no ha ido a la sociedad de almas; tú ya eras un alma ¿Dónde has ido?, desearía saberlo para acompañarte a ese lugar, para estar contigo una vez más, para mirarte a los ojos, enana, para besarte, para abrazarte y nunca más dejarte ir…

Me hiciste prometer que intentaría

encontrar mi camino para regresar a esta vida.

Tengo la esperanza que hay una forma

de saber que estas bien.

Recuerdo otra vez todo lo que vales

entonces puedo seguir adelante.

Y volví, y luché, pero ¿para qué? con ello no conseguí que volvieras, no conseguí aliviar mi dolor, no conseguí eliminar las lágrimas de Orihime, la rabia de Renji, o el dolor de tu hermano… Hablé con él, ¿sabes? Se quitó su máscara por un momento y pude ver al auténtico Byakuya, lloró, bueno, lloramos; te quería muchísimo, ¿lo sabías? es una pena que ya no pueda decírtelo…

Todos mis recuerdos

te mantienen cerca.

En momentos de silencio

Imagino que estas aqui

todos mis recuerdos

te mantienen cerca

tus silenciosos susurros,

lagrimas silenciosas.

Y ya solo me quedan los recuerdos, un par de fotos que nos hicimos y mi memoria… pienso en ti todos los días, a cada segundo, y me vuelvo a preguntar ¿qué hice mal? en que momento tuviste que entrar en esa batalla, en que momento te interpusiste entre esa espada y yo… pero ya no hay nada que hacer ¿verdad? no… ya no quiero vivir, pero tampoco quiero morir, porque ni siquiera en la muerte podré estar contigo, y eso es lo que más me duele, saber que no volveré a verte… bueno, miento…

Juntos en todos esos recuerdos, veo tu sonrisa;

todos los recuerdos que tanto amo.

Amada mía, sabes que te amare hasta el final de los tiempos.

…lo que más me duele, es que no pude decirte… que te quiero.