Un joven de 25 años se encierra en la cocina de su casa. Sinte su respiración agitada pues el sabe que eso era incorrecto y el temor a que su Lady lo descubriera sólo aumentaba su excitación. Mira su reloj para darse cuenta que el tiempo se le agotaba y ella pronto los buscaria. Busca con su mirada a su víctima hasta que la encuentra.

La ve tan candente como la recordaba. Adrien curva una sonrisa al verla tan indefensa y provocativa. En pasos tembloroso se acerca a su presa y la toca pero la suelta al instante: culpa ardiente, siempre aparece en ésos momentos tan peligrosos.

Decide quitarse su camisa para atacar con esta. El calor desaparece pero se enciende una nueva fuente de calor: el.

Podría esperar a que todo se calme pero ya no soportaba ese deseo de probarla.

Escucho un ruido: debe de ser ella. Su princesa a quien tanto ama, pero debía ser honesto la estaba engañando pero lo que estaba haciendo ella no se lo podría ofrecer, no aún, no ahora... además si ella no lo sabia no la lastimar ¿ verdad? . Si verdad. Además soborno a los kwamis para que no dijeran nada.

Sabe que debe apurarse ya que su amada no tardaría en llegar a la ecena del delito. Mira una última vez a la morena que yace en sus manos pensando en cada forma de saborearla. Limpia sus labios al sentir un hilo de saliva calledo por ellos. Poco a poco la acera más y más a él. Pero lo interrumpen en el último según yo.

_ ¿Adrien?

El individuo escucha esa voz que tanto le gusta pero lo aterra a la vez. Nervioso como en varías otras oacciones no sabe que hacer al estar contra la espada y la pared Contesta casi sin aliento.

_¿Si, Marinette?

_ ... ¿Podrías por favor dejar de describir como te comes las galletas que prepare y venir a ayudarme con las compras?

_Su celosa esposa aparece y le dirige la más sarcástica mirada que puede hacer, avergonzado por sus actos decide ir a ayudarla no sin antes reservar esa galleta para el.

_¡Deja esas galletas para nuestros padres!

_Ya voy linda, ya voy.

Y resignado por esa derrota se dirije a ayudar a su mujer mientras los kwamis se burlan de él.

_Volveré...

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Hola nuevamente mi segundo Dic inspirado en otro que leí hace mucho tiempo.

Agadesco a los que leen lo que escribo y más a los que comentan. Y me disculpo por mi hirografia.

Y como dijo Adrien, volveré.