Aclaraciones: Todo es el punto de vista de Yao

Capítulo I: Mi niñera se llama Yao

¿Qué harías si una gran colección de tu personaje preferido se ofreciera en una subasta? De seguro juntarías todo el dinero que tienes ahorrado y lo comprarías, ¿No? Pues yo no tengo la misma suerte, me acabo de enterar que en unos tres meses se organizara una subasta en la ciudad y uno de los artículos a subastar en la gran colección de Shinatty-chan. Claro que me la compraría pero no tengo ni un centavo.

Me pare de la cama y suspire, solo tengo: Posters de Shinatty-chan, peluches, Cd´s, almohadas y cobijas. Pero la subasta incluye: relojes, lapiceras, gomas, lápices, mochilas ¡Todo lo que he deseado! ¿Por qué no soy rico?

-Hermano- una voz me llamo.

-¿Qué quieres Kiku?- ¿Acaso no ve que estoy deprimido? No se cómo juntare tanto dinero.

-Escuche tu monólogo y decidí ayudarte- Kiku te amo me darás un préstamo ¡Sí!

-Busque en google y dice que si te falta dinero puedes vender…- ¿Mi cuerpo? – Tus cosas por internet-.

-¿Estás loco?- le cuestione – No quiero deshacerme de mis cosas, ¿Qué tal si eres un buen chico y vendes todo ese manga tuyo?-

Me miro con cara de "Estas loco" y luego me siguió hablando de un sinfín de cosas, no le preste mucha atención ya que estaba pensando en la manera de vender las cosas de Im Yong Soo sin que se diera cuenta.

-¿Y si trabajas?- Me sugirió – Sabes cocinar-.

-Ni loco me meto en un restaurante para terminar lavando platos-

¿Qué puede hacer un adolescente sin experiencia laboral y urgido para ganar dinero? Sin llegar a algo pervertido claro. Tal vez me postule para ser un chico anuncio o entregue comida china en una moto, si eso suena bien.

-Niñera-.

-¿Qué?- pregunté con asombro.

-Has cuidado de todos nosotros por tanto tiempo, tienes experiencia cuidando niños-.

-Buena idea- le aplaudí – Solo necesito un ayudante…- en eso me volteo para ver que desapareció.

¡Traidor! Me sugiere una idea y luego huye como una chica que está a punto de casarse con el hombre que no ama, en conclusión debo de dejas de ver las novelas de Yong.

Niñera no es mala idea pero necesito de ayuda, no puedo hacerlo todo yo. Entre en la habitación de Kiku, pero algo me deslumbro tanto poster de anime me cegaba.

-Oye Kiku- lo sorprendí leyendo -¿Qué lees?-.

-N-nada, solo son cosas- intentaba quitar su manga de mi vista.

-Vamos quiero verlo- insistí para quitárselo de las manos y lo que vi me sorprendió muchísimo -¿Son dos hombres teniendo…?-.

Me distraje y me lo quito de las manos, ya sabía que le gustaba lo que él llama "Hentai" y "Yuri", ¿Pero no sabía de esto?

-Solo estaba investigando- me dijo –Nada malo, solo curiosidad-.

No dejaba de ruborizarse y se veía tan lindo que me daba ganas de apretarle las mejillas, pero esto es serio, como hermano mayor debo de saber las actividades ilícitas de los demás.

-Kiku- suspire.

-No es nada ilegal- ni siquiera me dejo hablar – Solo fue pura curiosidad, ahora si me disculpas necesito terminar mis dibujos y no me puedo concentrar si me estás viendo-.

Kiku nunca actuaba así, incluso para sacarte del baño o cualquier otro cuarto te lo pedía amablemente, debió de estar muy exaltado en ese momento.

Mi siguiente objetivo fue Li, corrí hacía su habitación y…

-No- me contestó.

-Pero si no he dicho nada- me queje.

-Pero no me quiero involucrar en una de tus aventuras- me dijo sin apartar la mirada de su celular.

-Está bien- le advertí –Pero si quitaras tú vista de tu aparato verías mi cara de decepción, mírala-.

-Se ve igual-

Ese niño era muy listo ¿Qué tanto vera en ese teléfono? Parece que estuviera hablando con alguien, ¿Acaso los críe tan mal?

Me abstuve de preguntarle a Yong puesto que luego se pone raro conmigo y con Kiku así que mi siguiente víctima fue Mei.

Entre a su habitación y el rosa invadió mis ojos, toda su habitación estaba decorada con cosas que según ellas son "lindas" y tenía prendido el estéreo con música infernal.

-¿Qué haces?- Me sorprendió por detrás -¿Acaso quieres que te maquille?-.

-¡Aiyah! Claro que no-.

-¿Entonces?-

Le conté toda la historia y esperaba que eso la convenciera para que me apoyara en estos tiempos difíciles.

We dance in a disco ball, in this disco world~

Esta niña definitivamente carecía de oídos, escuchar la misma música todo el día.

-Hermano no quiero que te sientas mal pero no te ayudare-.

Me lo suponía, no estaría mal que compartiera algo de su dinero.

In the disco we kiss, in the night we love~

-Pero no estés triste puedes acompañarme y escucharemos música juntos-.

Al escuchar esto salí corriendo del pasillo, no de la casa. Ya era malo escuchar su música a alto volumen todo el día.

Me acosté en el jardín y reflexione un rato, necesito de alguien que me ayude con el trabajo de niñera ¿Quién podría? En ese momento llame a todos mis amigos pero recibí la misma respuesta…

-Perdón Yao, pero necesito entrenar si quiero ser el mejor bateador- me dijo Alfred.

-Lo siento, pero ser el presidente del club de magia y del consejo estudiantil es agotador- sentenció Arthur.

-Me gustaría mon ami, pero necesito concentrarme en esta nueva receta- contestó Francis.

-Me alagas pero, tengo prácticas de fútbol- respondió Antonio.

-Ve~ sería genial, amo a los niños pero necesito terminar unos cuadros para el club de arte-

Fue un horrible, gigantesco y rotundo "No". Siempre que necesitas de alguien por alguna razón todos están ocupados ¿Coincidencia? El alma solidaria de la gente se pierde día a día.

En eso escuche unos ruidos en los arbustos ¿Sera una ardilla? Y entonces apareció, el ángel que el cielo me quiso dar y el que me ayudaría con mi misión.

-¿Necesitas ayuda?- me preguntó.

-Iván- corrí a abrazarlo hasta que me di cuenta de lo que estaba haciendo –Perdón, es que estaba desesperado-.

-No te preocupes- tartamudeo –Esta bien-.

-No sabes cómo necesitaba de alguien que me ayudase a cuidar niños, apareciste en el momento justo- estaba muy alegre –Espera ¿Qué estabas haciendo ahí?-.

Vaciló por un momento, se veía muy nervioso y empezaba a ponerse como uno de los tomates de Antonio.

-Solo estaba recolectando ¿Nueces?- me sonrió –Nada extraño-.

Decía todo eso mientras recolectaba unas nueces que se encontraban esparcidas en el jardín.

-¿Por qué no las compras?-.

-Porque son más ricas si vienen del jardín de Yao- contestó alegre.

Se veía tan tierno, pero debo de concentrarme y no dejar que su dulzura afecte mi sistema nervioso.

-Iván- lo mire mientras le sostuve ambas manos -¿Aceptarías ser mi compañero? En las buenas y en las malas; aunque los niños griten, pataleen y lloren, y tal vez no ganemos mucho-.

-Acepto-.

-Muy bien- sonreí –Nuestra misión ahora es encontrar trabajo, pegaremos anuncios por toda la ciudad y nos promocionaremos en toda la escuela-.

-Suena divertido-.

-Sí que lo será- le contesté.

Esa misma tarde Mei nos ayudó tomándonos muchas fotos para los anuncios y Kiku nos ayudó con el diseño del letrero.

-Muy bien- dije – A pegar letreros-.

Y como ejercito de hormigas cada uno de nosotros se dedicó a pegar letreros por toda la calle hasta que no quedaba ninguno.

-Ahora solo es cuestión que lo anuncien en la escuela, muchos tienen hermanos menores- comentó Mei.

-Tal vez deberías crear esas canciones que usan como mensaje subliminal- añadió Yong.

-Cálmate Yong, solo es un servicio de niñeras- le regaño Li.

Nos dirigimos a la casa e Iván nos acompañó para la cena, nos despedimos y me dirigí a dormir.

-Mañana será un gran día-.

Ring Ring~

Ese molesto despertador me levantó antes de tiempo, pero cuando tenga mi hermosa alarma de Shinatty-chan todo será mejor y solo se escuchara su…

Meow Meow

Por ahora tendría que conformarme con mi horrible alarma y correr si quería ser el primero en el baño, cosa que conseguí. Me duche y me vestí listo para este día.

-El desayuno- grite y como si tratase de un ejército todos mis hermanos bajaron.

Inmediatamente después de comer corrimos hacía la estación de autobuses más cercana.

-¿Todos traen dinero?-

Ellos asintieron.

-¿Yong?- volví a preguntar.

-Te juro que sí-.

Nos subimos en el primer camión que nos dejara cerca de la escuela. Yong terminaba sus deberes de anoche, Li seguía embobado con su tecnología, en serio ¿A quién le habla? Mei escuchaba su música del demonio, Kiku leía algo de manga y Linh estaba absorta en su libro.

Nos bajamos y estábamos listos para dar la gran noticia "Yao abre su servicio de niñera". Sería un éxito.

-Buenos días- saludó Iván con la misma energía de ayer -¿Paso algo?-

Negué con la cabeza, aún tenía la esperanza de que algo llegaría. Llegó, tarde pero llegó.

Era la hora del almuerzo y me senté con mi compañero esperando alguna noticia. Él jugaba con su comida y yo estaba contemplando lo blanco del techo.

-Mon dieu! Que caras tan largas- se nos acercó Francis -¿Por qué la tristeza?-.

-No hemos conseguido nada- conteste sin dejar de mirar al techo, ese techo tiene algo atrayente.

-Pero si consiguieron trabajo- nos guiño el ojo –Mañana no estaré en casa y…-

-¡Enserio! Gracias Francis- Lo interrumpí.

-No es nada- guiño de nuevo – Espero que no sea una molestia-.

Fin del capítulo I

Siguiente capítulo: ¡Giselle Bonnefoy es un desastre!

Nada más para agregar Li es Hong Kong y la persona con la que habla es Emil ok no XD pero eso quiero pensar. Uds imaginen a quien quieran.

Se me ocurrió la idea ayer que me desperté no sé porque imagine un Yao de niñera y aquí lo traigo. Como verán esto es un humilde prólogo, la historia comienza más adelante.

Y Linh es Vietnam.

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Los amo