The only 95: Que tal queridos lectores aquí su escritor The only 95, tal vez me conozcan por mis fic's EL COMIENZO (Mi fic principal), MI LITTLE GALGE (Ya actualice así que las amenazas de muerte a mi persona disminuyeron) y SPIKE THE HUNTER (El más popular de los 3 hasta ahora). Vengo trayéndoles un nuevo fic especialmente creado por esta fecha y creo que ya según la descripción saben de que se trata siendo esta una pareja nada común, bueno no la hago más larga así que ¡A LEER SE A DICHO!
MLP no me pertenece, sus derechos están reservados a sus respectivos creadores, yo solo hago esto con fin de entretener a los lectores y bla, bla, bla.
Era de noche en una común granja de rocas propiedad de la familia Pie conocidos por su gran seriedad entre todos los ponis. La noche parecía una tranquila noche como otras de no ser por…
PUM! PUM!
Unos disparos al aire hicieron huir a tres ponis en la oscuridad con lo que parecía una pequeña caja de madera; no se podía apreciar la apariencia de eso desconocidos ponis.
-¡Vuelvan aquí ladrones! – grito un poni terrestre de pelaje color marrón claro, crin gris y Cutie Mark de un pico; llevaba un sombrero y grandes patillas. Aquel poni no era otro que el miembro masculino de la familia Pie, Igneous Rock el cual tenía una escopeta entre sus cascos.
-Querido tendremos que llamar a la guardia real, es la tercera vez que nos roban – dijo una yegua terrestre de pelaje gris pálido, crin verde grisáceo y Cutie Mark de tres rocas; lleva unos anteojos dorados. Ella era la esposa del poni Igneous Rock, su nombre Cloudy Quartz.
-Ya te dije que conmigo basta y sobra para acabar con esos maleantes, además dudo que la princesa les brinde ayuda a unos simples granjeros.
-Pero tienes que saber que tenemos 4 hijas a las que cuidar – el poni pareció reconsiderarlo – además nada perdemos con intentarlo querido.
-Mamá, papá ya se fueron esos sujetos – dijo la voz preocupada de una potrilla de pelo rosado, crin del mismo color pero esponjado con una Cutie Mark de globos de distintos colores.
Su padre rápidamente guardo la escopeta y cambiando a un semblante más tranquilo se acerco a su hija.
-Descuida Pinkamena, ya se fueron, tu madre y yo nos aseguraremos que no se atrevan a acercarse – una linda sonrisa adorno el rostro de la potrilla – ahora porque no vas a dormir con tu hermana Maud.
-De acuerdo papá – fue lo último que dijo dando saltos hacia el cuarto de su hermana mayor.
-Traeré un papel, la pluma y la tinta; mejor tener listo la carta que mañana temprano pasa el cartero.
-De acuerdo – soltó un pesado suspiro y se fue a la sala.
…
Temprano en la mañana en el castillo de Canterlot la monarca se encontraba en el balcón de su cuarto elevando el sol como siempre lo hacía para sus queridos ponis.
Luego de eso bajo yendo a la sala del trono mientras los soldados y sirvientes le deseaban los buenos días haciendo la típica reverencia a pesar de que a ella no le gustaba ese tipo de formalidades.
Una vez llegado a su trono tomo asiento preparándose para sus deberes reales que eran el papeleo y unas que otras veces tener una reunión con los ponis aristócratas, aunque hoy no era el caso.
-Manehattan necesita urgentemente guardias – leyó la carta que tenia sostenía frente a ella con su magia mientras se llevaba una taza de té a su boca – *últimamente los guardias son muy pedidos, extraños los viejos tiempos donde no abundaba tanto la violencia* – vio con mucha pena al costado de su trono – *Como quisiera que estés aquí hermana* – pensó decaída la princesa, luego se sacudió la cabeza y siguió leyendo el resto de cartas; de nada serviría lamentarse, lo hecho, hecho esta.
Curiosamente todas las cartas eran del resto de ciudades o pueblos que necesitaban guardias o soldados ya que la tasa de crimen en Equestria había subido a niveles alarmantes estos últimos años.
-No me gusta esto pero tendré que enviar a los nuevos reclutas a pesar que no estén totalmente entrenados – dijo para sí misma ya teniendo una idea de cómo dividir sus tropas pero en eso se percato de la última carta la cual comenzó a leer.
``Mis más sinceros saludos Princesa Celestia, quien le envía esta carta es un humilde granjero de rocas las cuales cultivamos yo, mi esposa y mis 4 hermosas hijas que son lo más importante en mi vida. Le envió esta carta para decirle que últimamente hemos sido víctimas de ladrones que se llevan por las noches lo que ganamos con esfuerzo y sudor. Tal vez no seamos ponis importantes pero le pido que por favor nos envíe algún tipo de ayuda, no le pido todo un ejército de soldados, hasta con uno basta y sobra ya que temo mas por mis hijas que son mi mundo al igual que mi esposa. Espero no haberle quitado su tiempo Princesa. Se despide atentamente su súbdito, Igneous Rock´´
Ni bien termino de leer la carta se sintió conmovida por las palabras de aquel poni que acudía a su ayuda preocupado por lo que les pueda pasar a sus hijas.
-No puedo ignorar al llamado de ayuda de uno de mis ponis, necesito que vaya un soldado para que ayude a aquella familia pero… ¿Quién?
Estuvo considerando las posibilidades, necesitaba a un soldado de confianza pero a la misma vez que no llegue a intimidar a la familia.
Al rato fue saca de sus pensamientos al oír un ruido de pelea en el patio del castillo.
Por la curiosidad se dirigió hacia ese lugar encontrándose con un joven unicornio de pelaje blanco, crin de dos tonalidades de azul con la Cutie Mark de un escudo; ella de inmediato identifico al joven unicornio, era el hermano mayor de su nueva aprendiz Twilight Sparkle. Su alumna siempre le contaba que era el mejor hermano que pudo tener amable, cariñoso y leal; siempre jugaba con ella sabiendo la condición que Twilight no tenía ningún amigo.
La princesa pudo comprobar que lo que decía su aprendiz era verdad, de primer casco conociendo al joven unicornio que para su edad presentaba un gran talento como soldado según le contaba el capitán de la guardia solar.
-Descansa soldado – dijo un unicornio ya mayor de edad.
-De… de acuerdo… capitán – jadeando de cansancio mientras se sentaba en el pasto habiendo concluido su entrenamiento.
-Veo que está entrenado muy bien al nuevo recluta capitán – la princesa se acerco caminando tranquilamente y con una sonrisa al par de unicornios.
-¡Princesa! – Hiso una reverencia al igual que Shining Armor.
-No es necesaria tanta formalidad Capitán – el unicornio volvió a erguirse – quisiera hablar con el soldado Shining Armor.
-En que la puedo servirle Princesa – hablo con respeto a la monarca del sol.
-Tengo una misión especial para ti Shining – el nombrado presto atención – necesito que vallas y cuides a una familia que trabaja en una granja de rocas ya que últimamente están siendo asaltados por bandidos.
-¿Solo yo? – pregunto un poco sorprendido.
-Sí, será una buena forma de prepararte para lo que te espera más adelante, tu misión será resguardarlos hasta que captures a los ladrones.
-Lo hare princesa – dijo decidido llevando uno de sus cascos a la frente.
-Muy bien, empaca tus cosas y si deseas despídete de tu familia y de tu hermanita.
Shining Armor se fue galopando hasta el campamento por sus cosas bajo la atenta mirada de Celestia y el Capitán.
-Tan rápido estas entrenando a tu reemplazo jijiji – se rio tapándose la boca con su casco.
-El chico tiene talento y corazón, no dudo que pronto llegara a ser el Capitán más joven en tomar el puesto.
…
-Aquí me bajo, gracias por todo – dijo Shining a un poni con una carreta el cual se despedía del soldado.
Luego de alistar sus cosas y llevando su armadura se despidió de su familia informándoles sobre su primera misión, aunque su hermanita no lo tomo muy bien al rato comprendió que era su deber como soldado y más cuando la propia Princesa le había encargado la misión. Shining tomo un tren a Ponyville y de ahí una carreta indicándole el lugar al que quería ir.
-Sera mejor presentarme a la familia.
Llego a la granja que extrañamente no tenía ningún cultivo en el campo, solo rocas, rocas y más rocas dejando muy confundido al unicornio el cual ya estaba frente a la puerta de la casa.
Toc! Toc! Toc!
Toco la puerta que a los segundos fue abierta por un poni terrestre con una cara que notaba mucha seriedad.
-Mucho gusto señor, mi nombre es Shining Armor y soy el soldado que envió la Princesa Celestia para ayudarlos con su problema – dijo cordialmente con un casco en la frente.
El poni se quedo examinándolo de arriba abajo para solo soltar unas simples palabras.
-No eres muy joven para ser un soldado – menciono manteniendo esa seriedad tan característica.
-De hecho si pero eso no me detiene en lo absoluto señor.
No era la primera vez que alguien se lo decía, aun recordaba a aquellos soldados mayores que él; que solían burlarse al considerándolo un inútil e incluso le obligaban a limpiar los cuartes aunque no dejaba que dichas burlas lo afectaran, esforzándose aun mas pero lo que él no sabía es que su hermanita vio todo eso cuando le quiso hacer una visita sorpresa y ella le conto a la princesa que mando a castigar a tan abusivos soldados.
-Pasa – dijo sin mostrar ninguna emoción el padre de familia.
Una vez adentro pasaron al comedor donde estaba reunida toda la familia.
-Familia, él es el soldado que envió la Princesa – todos los miembros se pararon y se acercaron a donde estaban ellos – déjame presentarte a mi esposa Cloudy Quartz.
-Mucho gusto señora.
-Igualmente – tenía la misma seriedad que su esposo.
-Mi hija Maud Pie.
-Hola – saludo con una voz y Mirada sin emoción haciendo pensar a Shining que ella salió igual a sus padres.
-Mi otra hija, Marble Pie - La niña no respondió simplemente se escondió detrás de su padre, al parecer era muy tímida – Limestone Pie – la nombrada dio un paso al frente y le dio una mirada de disgusto al unicornio.
-No pareces fuerte, dudo que un debilucho como tu pueda con esos ladrones.
-Limestone que te he dicho de sobre ser descortés con los invitados – le regaño a su hija la cual solo desvió la mirada molesta – debe disculparla.
-Jejeje no se preocupe – dijo con una sonrisa incomoda el unicornio.
-¡HOLA! – Apareció frente al unicornio haciendo que callera de espalda por el susto – MI NOMBRE ES PINKAMENA DIANE PIE ES UN GUSTO CONOCER A NUEVOS PONIS DIME TE GUSTAN LAS FIESTAS PORQUE A MI ME ENCANTAN ORGANIZARLAS Y QUE TODOS LOS PONIS EN ELLAS SE DIVIERTAN – dijo todo eso a una increíble velocidad dejando muy confundido al unicornio.
El patriarca de los Pie soltó un suspiro mezclado de cansancio y vergüenza.
-Ella es mi hija Pinkamena Diane Pie, es… hiperactiva.
Shining se levanto y se quedo viendo a la potrilla que tenía al frente, porque siendo como es más los colores que tenía, desentonaba totalmente con aquella familia seria.
-Bueno tenemos un cuarto para que se acomode y pueda comenzar con la vigilancia joven soldado.
Y así comienza la vida del joven soldado Shining Armor viviendo junto con la familia Pie y la pequeña potrilla rosa.
The only 95: La verdad estoy muy animado con este nuevo fic ya que había visto una imagen con estos dos personajes y una pequeña, minúscula y casi inexistente mención que le hicieron en un fic que leí y pues me encanto de inmediato la idea tanto que me era imposible sacarla de mi cabeza, no sé qué opinaran ustedes así que me despido no olviden dejar su buen review y si veo que a ustedes les gusta como a mi pues continuare la historia, eso es todo se despide su amado escritor, nos leemos luego.
