AU: Este es el primer capítulo con que no iba a escribir algo super-mega-hiper-extra-extenso así que a los que les gustan este tipo de cosas perdonadme.

Este es el prólogo de una historieta #Karmy que he escrito con todo mi amor para los fans españoles y latinoamericános (Hispanoparlantes en general) o para tí, sí, que te he pillado, que estás con el traductor de google.

Por lo tanto perdonadme por lo corto que es y pronto habrá más, y 80% de probabilidades de mejor.

Disclaimer: No me pertenece ni Faking it, ni Karma, ni Amy, ni MTV en general. El fenómeno Karmy es nuestro con que JÁ.


Prólogo

Siempre me han gustado las películas y las series, sí, era una de esas personas en el mundo que realmente las vivía, y que cuando se acababan casi lloraban más porque ya había terminado que por el echo de que fuese un final triste o algo similar.

Siempre había pensado, aunque más bien me habían inculcado, que me dedicaría a la medicina o a la investigación de algún fósil pero realmente no era lo que quería estudiar y por una vez quise enfrentarme a la gente que no pensaba igual que yo, ya que no era tímida pero siempre tragaba con las palabras de la gente a la que supuestamente debía respetar, cuando ellos no lo hacían conmigo. Solo había una persona que destacaba en aquel círculo de relaciones tan pequeño que tenía, y realmente le debo la vida a esa persona. Mi mejor amiga.

Sí, ella ha conseguido que me manifieste tal y como soy, y que disfrute de la vida como si fuese el último día que iba a vivirla, que hiciese lo que me gustaba y no lo que pretendía gustar a todo el mundo, porque algo se me pegó de su aplastante personalidad...

Por eso mismo me matriculé hace 2 meses 'Pacific Academy of Arts' la academia de Artes más importante de Texas, y seguramente de algún estado más. Hace 2 meses que pedí la beca, y por lo que me pude enterar leyendo algunos tweets de la academia enviarían muy pronto el correo a los seleccionados, ya que era una academia muy inaccesible, por lo menos para la gente normal, es cierto lo que dicen, con dinero todo era más fácil.

Mi padre era un importante empresario, realmente podría haberle dicho que me pagase la inscripción, pero no me hubiese parecido justo por todas aquellas personas que pedían beca. Un rubor corría por mis mejillas cuando mi hermana con una excelente cara asqueada me tocó la puerta a grito de 'Tienes correo, abre la puerta, pero recuerda que no soy tu chacha...' Seguramente ella estuviese esperando alguna revista de cotilleos a la que estaba suscrita o algo parecido.

Como estaba tumbada en la cama me levanté y tiré los cascos del ipod que ya reproduccian mi banda sonora de día a día, Lily Allen. Cogí la carta y ella se retiró encerrándose en su habitación, por desgracia estaba en frente de la mía entonces tenía que encontrar su aborrecible cara todos los días.

Toqué el serigrafiado de la carta, ponía claramente en tonos azules blancos y naranjas "Pacific Arts Academy". Mi corazón estaba totalmente alterado, como si fuese la primera vez que recibía una carta.

Me tomé unos instantes para abrirla, realmente si me denegaban el acceso me entristecería porque tendría que ir a la universidad de Texas a estudiar medicina. Ese era el trato que hice con mis padres.

Con el dedo índice tiré del pequeño papel pegado al dorso de la carta y la abrí cogiéndo con delicadeza su contenido.

"Estimada señorita Raudenfeld.

Muchas gracias por postular para pertenecer a nuestra prestigiosa academia. Todos los años nos llegan solicitudes desde todas las partes de Estados Unidos, incluso algunas extranjeras a modo de beca erasmus, por eso sabemos elegir muy bien a nuestros alumnos.

Lamentablemente las becas son muy excasas, pero usted ha tenido la suerte de recibir una beca de admisión por parte de la Fundación Harvey, por ello solo tendrá que pagar los gastos de mantenimiento.

Esperamos contar con usted en el próximo curso.

Bienvenida a la Academia.

ATT: Rector de 'Pacific Arts Academy"

Abrí los ojos como platos y justo cuando íba a salir de casa para correr, gritar, y vivir mi momento de eufória me estaba llamando la única persona con la que quería hablar en ese momento.

"¡Karm!" Grité aún eufórica por la noticia, pequeñas lágrimas caían por mis ojos.

"Amy, ¿Que pasa? ¿Estás bien?"

"Es... Jodidamente genial, me aceptaron en la Academia!"

"Me alegro un montón, ese era tu sitio y lo sabes. Por cierto..."

"¿Ocurre algo?"

"¿Te seguiré teniendo que llamar para levantarte por la mañana?"

"Supongo que... ¿Qué estás insinuando Karma?"

"Que a una persona también la aceptaron en la PAA."

"¡¿Te presentaste y no me dijiste nada?!"

"¡Amy, no nos separaremos ni en la carrera! ¡Es perfecto!"

"Sí... Wee.. ¿Por qué no me lo contaste?"

"Es que.. Quería darte una sorpresa y así si no me aceptaban... ¿Oye que cursarás?"

"Producción y realización, ¿Tú?"

"Interpretación y drama... Ya sabes, quiero ser la famosa que nos saque de Austin y así poder regocigarme en los mejores teatros recogiendo un premio y agradeciéndote lo mucho que me has inspirado y bla bla bla..." Hizo un pequeño movimiento con su pelo echándoselo hacia atrás sugerentemente... Me recordó a Snooki de Jersey Shore. Pequeña pero presumida Ashcroft. Me había acostumbrado a esos gestos, y estaba bien.

"Sí, sí, ya te querré ver en Hollywood al lado de Jennifer Lawrence." Pude oírla algo decepcionada de pronto, no sabía a que vino eso.

"Te tengo que dejar... Tengo que irme con mis padres a ver jugar a mi primo en Oak Hill... El baloncesto y eso.. Me aburriré, y me moriré en mi asiento, luego vendrás y recogerás mis restos quemados... ¿Tienes que hacer algo?" Bonita forma de pedirme que la acompañase. Dramática Karma Ashcroft.

"Es que no sé..."

"Porfi, porfi, porfi, porfi, porfi, porfi, porfi... Venga, yo te ayudé hace 7 años a colocar las estrellas en el techo de tu habitación." Abrí los ojos como platos.

"Hace SIETE años..."

Un silencio incómodo se quedó en medio de la conversación.

"Oh vamos, está bien... Pero me debes un mcflurry." Murmuré cediéndo ante mi mejor amiga.

"Sabes que te quiero, en 20 minutos estoy allí, he quedado con mis padres cerca de Hester con que podemos ir de desde allí, será divertido. Te dejo, me tengo que preparar, ¡Adiós!" Tuve que penstañear varias veces pues me había dicho todo eso tán rápido que en un abrir y cerrar de ojos tenía el móvil pitándo que la llamada había finalizado.

Me tiré sobre la cama unos segundos, hacía rato que estaba lista pues quería ir al supermercado para comprar galletas y palomitas, en mi cuarto practicamente me encerraba con que me gustaba siempre tener preciadas posesiones en el primer cajón de mi mesilla.

Me da que tendría que ir en otro momento a comprar... Porque cuando Karma quiere la atención de Amy, Karma quiere la atención de Amy casi todo el día.


PD: Si descubres qué tiene que ver la beca de Amy con la historia que va a tener tanta importancia en próximos capítulos te doy un premio, déjame una review con la respuesta. CHAN CHAN CHANN CHANNNNN.

Y sin más dilación: Tengo hambre.