N/A: HOLAS!! ... al fin publiqué uno de mis fics de Harry Potter. Así que como es el primero tenganme compasión...

A ver explico: como lo dice en el summary, es una historia de tres parejas (ya las averiguarán más tarde), dedicaré más o menos 1 capitulo a cada pareja y lo que pasa entre ellos. Todas las historias se entrelazan... no se preocupen, ADVERTENCIA!!!: Hay una sola pareja que es la principal... van a averiguarla pronto.

Jajajajaja... Bueno a leer!

Disclaimer: No hago esto por dinero sino por diversión... así que Harry Potter sigue perteneciendo a J.K. Rowling... BUAAAAAAAAAAAAAAA!!


Capitulo 1: Una Vista al futuro


Ambos se abrazaron fuertemente. Al fin solos. Era como un sueño maravilloso. Se besaron dulcemente, recordando sus tiempos de adolescentes, cuando esto recién comenzaba. Se notaba a leguas que se amaban. Se separaron por unos segundos y sonrieron tímidamente.

Ya era tarde en la noche, habían pasado ya ocho horas desde la última vez que se habían tocado. Les era imposible separarse el uno del otro por mucho tiempo, era una dulce adicción. Los ojos azules de él se cruzaron con los caramelos de ella, sus miradas expresaban mucho más que amor. La mirada se cerró, sellándose ellos, en un apasionado beso.

Las túnicas de ambos ya habían pasado al olvido reposando en un rincón de la habitación, la blusa de ella se encontraba arrugada en el suelo, el sweater de él reposaba cerca de su polo arrojado a lo lejos. De pronto se oyó un tintineo de botellitas de cristal y como se deslizaba una mesa unos pocos centímetros. Habían chocado con la mesa de noche sin darse cuenta. Unos libros cayeron al suelo con un sonido seco. Ambos rieron despreocupadamente a la vez que se inclinaban hacia atrás besándose.

Calló el silencio, solo se oían las respiraciones de ambos amantes que se contemplaban el uno al otro en la oscuridad de la noche. Repasaban todos y cada uno de las facciones del otro para recordarlas por siempre. Esa noche, que no fue ni la primera y prometía no ser la última, se amaron con toda su intensidad, de todas las maneras posibles, con todo lo que llevaban en su ser, entregándose el uno al otro.


Las 8:30 en punto. El despertador sonó haciendo que uno de los amantes se sobresaltara interrumpiendo su sueño. Él alejó su brazo de ella con flojera e irritación para apagar ese horripilante sonido. Maldiciendo por lo bajo se acurrucó junto a ella abrazándola por detrás. Sus cuerpos se apegaron causando un calor agradable causando un escalofrío en la espalda de él. Los cabellos de ella, que eran largos rizos marrones bañados con la luz de la mañana, estaban distribuidos por la almohada muy desordenadamente. Comparados con los cabellos de ella, los rizos rojos de él no se le igualaban en la longitud, pero para un cabello de hombre, eran bastante más largos de lo habitual. El color de su cabello era lo que más resaltaba, un rojo fuego, tan rojo como las llamas que arden en el infierno. A lo largo de su rostro, unas pequeñas pecas se asomaban; le daban un pequeño aire infantil que era parte de su atractiva personalidad.

La pareja dormitaba plácidamente ese sábado a la mañana.

En el piso de abajo se oyó un estruendo. Alguien había sido expulsado desde la chimenea, golpeando fuertemente un mueble de la sala. La persona se quedó unos segundos inmóvil asimilando el dolor en la cabeza y el sitio en donde se encontraba. Un joven de cabellos azabache desalineados se puso de pie con dificultad y tocándose la parte afectada de su cráneo. Recogió sus gafas y se las acomodó. Murmuró algo que sonó como un "odio los polvos floo..." y se sacudió el hollín.

Con la cara aún un poco sucia, subió las escaleras y tocó la puerta de la habitación principal. Nadie le contestó al llamado. El joven se sonrió a si mismo y abrió la puerta.

Una luz fuerte penetró la alcoba. El joven de gafas había abierto las cortinas y miraba a la pareja acurrucada en la cama cubierta únicamente por una delgada sábana. El joven no pudo evitar sentir sus mejillas arder ante la escena tan reveladora, pero la había presenciado tantas otras veces que era de esperarse. Sacudiendo a su amigo ligeramente sin mirar, intentó no pensar en lo que había ocurrido la noche anterior y no sonrojarse más de lo que ya estaba.

El pelirrojo tardó unos segundos en abrir los ojos y dirigir su mirada a la bestia horripilante que se atrevía a interrumpirle el sueño por segunda vez.

-Maldita sea Potter... ¡Es muy temprano!... vente dentro de tres horas...

-Aunque sea sábado debes levantarte temprano. Sabes muy bien que tenemos mucho que hacer.

Le arrojó una camisa limpia a la cara para que se la pusiera y se retiró de la habitación para darle un poco de privacidad.

El pelirrojo se desperezó y se vistió rápidamente, se acercó a su amada y le plantó un beso en sus labios. La joven se movió un poco y sonrió perfectamente. El chico le devolvió la sonrisa y se retiró de la habitación aún soñoliento. Lo único que pedía era una noche "tranquila" y que lo dejaran en paz hasta por lo menos el medio día. Maldito trabajo. Maldito quidditch. Malditas clases de auror. Maldito Potter.

Asomó su cabeza a la cocina y vio al chico de cabellos azabache y ojos esmeraldas leyendo el periódico y tomando un café plácidamente. Se acercó y se sirvió un café para él.

-Tú vienes a mi casa solo para robarme el café y despertarme de mis maravillosas noches, ¿cierto?

-Olvidas mencionar que además te robo el periódico antes de que tú lo puedas ojear.

El pelirrojo lo miró con odio y se concentró en su taza de color naranja con una inscripción de los "Chudley Canons".

-Ron debemos estar en el campo de entrenamiento en 10 minutos... ¿tienes tu varita, tarea y la escoba? ¿Cierto?

El pelirrojo escupió su café por todas partes.

-¿¿TAREA?? ¿¿QUIÉN DIJO ALGO SOBRE UNA TAREA??

-La historia de los aurores en el siglo XV. Ron, esa tarea es evaluada con el 50% de la nota final. Lo han recordado las cinco últimas clases teóricas.

-¿Cuenta si uno estaba dormido los últimos 30 minutos de clase?

-¿Las últimas 5 clases?

-Ehm... ¿si?

-¿Cuando las clases duran solo 45 minutos al día?

-Aja

-Ron en serio debes preocuparte más por aprobar el curso. Si sigues así no podrás ser auror! Sabes que no dejan repetir los cursos!

-Lo sé Harry... es que... las últimas semanas...

-¿Han sido un sueño? Lo mismo me dices siempre, desde que tú y Hermione tuvieron esa loca idea de casarse.

-Es que tú no entiendes... estar casado es como...

-¿Ser atado eternamente?, ¿Mantener esa responsabilidad toda tu vida?...

-No, quería decir...

-El paraíso Ron, lo sé. Me lo dices todos los días.

Ambos se mantuvieron en silencio. Miraban a la mesa como si fuera muy interesante.


En la habitación una joven se sentaba en la cama estirándose. Había pasado una muy buena noche y le provocaba un café bien caliente con unos hot cakes bañados en una miel muy dulce... y un jugo de fresas con leche, y no hablar de... ¡MOMENTO! ¿no estaba a dieta?

Pero es que hacía años que no comía unos buenos hot cakes con miel... ¡NO! ¡PODER MENTAL HERMIONE! ¡PODER MENTAL!

La chica se reprimió mentalmente mientras se ponía una bata para abrigarse. Bajó a la cocina y se encontró con su esposo y con su amigo.

-¡Hola chicos! Amor...- la chica se acercó al pelirrojo y le plantó un besito en los labios. El chico la acomodó en sus piernas, quedando ella sentada encima de él ambos mirándose con una sonrisa flor de labios.

-Ejem... ejem...- Harry se aclaró la garganta recordando a la joven pareja que estaba presente.- ¿Ya pensaste en como hacer con lo de la tarea?

-¿Tarea? ¿Qué tarea Ronnie?- preguntó ella juguetonamente.

-Una del curso de auror- respondió en tono de "aguafiestas"

- Ah! ¿La que tiene el 50% de la nota?- dijo Hermione interesada.

-Mira Ron! Hasta tu esposa sabe más del curso que T estás tomando... jajajajajaja- rió Harry.

Y es que Hermione había decidido seguir la elección de ambos. Decidió ser una auror, pero el detalle era que a ella la habían adelantado de curso hace un par de meses de acuerdo con su capacidad mental.

Hermione se paró rápidamente de su asiento y corrió al estudio.

Ambos quedaron desconcertados ante esto.

-Así que como ya no esta la biblioteca, cada vez que tiene una duda es: AL ESTUDIO!!

El pelirrojo lo miró amenazadoramente.

La joven regresó con un pergamino enrollado en su mano.

-Me acordé que te habías olvidado la tarea en el estudio... cariño...- dijo ella guiñándole un ojo.

-Ah si! Es verdad...

-Bueno chicos ya váyanse! O llegarán tarde!

-OK. Vamos Ron... ¿Tienes todo?

-Sí, ¿tú?

-Mi mochila está en la sala...

-Ah...

Ambos amigos se esfumaron entre las llamas verdes que habían encendido.

Hermione miró con compasión la chimenea. Sabía que estaba mal que ella le hubiera hecho la tarea, pero lo amaba tanto que no lo podía dejar reprobar el curso. Miró a su estómago que le rugía con fuerza. Aún tenía hambre.


N/A: Bueno ¿QUE LES PARECE? espero q les guste...

Habrá más cosas en el futuro y esta promete ser una de mis mejores historias. ¨

Sujerencias, tomatazos, opiniones, etc (todo menos virus!!) A mi buzón de reviews!!