Espero disfruten de la lectura, se aceptan sugerencias para ir reforzando la historia. Sin más, los dejo leyendo, adelante.


El sol estaba ocultándose lentamente, se podía apreciar un cielo claro con un tenue anaranjado, las aves aterrizando entre los árboles para poder acomodarse y descansar junto con aquel soplido del frío aire de esa tarde que estaba por oscurecer.

En cierto departamento se escuchaban unas voces y uno que otro grito absurdamente exagerados, eran las de 9 chicas reunidas, todas sentadas en los sillones de la sala y frente a ellas, una pequeña mesa en el centro con montones de papeleos revueltos y cuadernos. Papeles y apuntes del Consejo Estudiantil, sí, la Presidenta Kousaka Honoka era la dueña de los gritos por todo el desastre de hojas que veía.

-¡Esto es difícil, no creo que algo así se pueda hacer!- Me quejaba dejándome caer rendida.

-Es fácil, Honoka. Si repartimos varias de las actividades a los grupos, es posible que se realice.- Decía Umi con seriedad al tema.

-Así es Honoka-chan, además, hacer algo como esto sería bastante divertido.- Me comentaba Kotori sentada al lado mío.

-Sé que sería divertido pero, ¿no es demasiado trabajo?- Todas las presentes me miraron para después soltar un suspiro.

-Honoka, eres la Presidenta del Consejo, ¿aún sigues con lo mismo? Sé más responsable al cargo.- Se acercaba Eli desde la cocina con 4 vasos de té hacía nosotras.

-¡Estoy siendo responsable, Eli-chan! Pero como dije antes, esto es demasiado, y me lo piden a última hora.- Seguía quejándome por aquello.

-Parece ser que no cambias.- Se acercaba esta vez Nozomi, sonriente con otros 5 vasos de té.

-Vamos Honoka, todas las alumnas lo piden a gritos, todas estas propuestas… Todas quieren montar una 'escuela embrujada'.- Recalcaba Maki tomando un vaso de té que Nozomi le ofrecía.

-¡El simple hecho de imaginármelo hace que me emocione-nya, ¿no te parece Kayo-chin?- Rin saltaba de emoción y miraba a Hanayo que se encontraba a su lado.

-Creo que sería estupendo. Será bastante divertido estar de noche en la escuela con todos esos disfraces.- Por poco pensé que Hanayo me comprendería pero, ella también quiere lo mismo…

-Esa noche se levantarán todos los espíritus y estarán entre nosotras.- Sonreía maliciosa Nozomi seguido de algunas muecas en su rostro.

-Deja eso Nozomi, si acaso sólo habrá brujas y vampiros repetidos, lo de siempre.- Se unía Nico a la conversación ya acabándose su té. Ella no suena muy interesada al parecer.

-¡Qué bien!- Alzaba un poco la voz Kotori.

-¿Qué sucede, Kotori?- Le preguntaba Umi.

-Le he comentado a mamá sobre el tema en texto y nos ha dado el permiso de hacerlo, solamente que le presentemos toda la programación antes de movernos para verificarlo.- Nos mostraba la respuesta de la Directora en su celular. ¿En qué momento comenzó a teclear? Fue rápida…

-Aun así, hacer por completo TODA la escuela "embrujada" será difícil, aunque repartiéramos algunas de las actividades a los grupos.

-Será fácil si todos se ponen a trabajar desde ya. Quedará genial, cada grupo con juegos en sus respectivas aulas, los pasillos tenebrosamente decorados, los patios con tumbas y neblina artificial, además, podrán asistir invitados y alumnos de otras escuelas siempre y cuando presenten su identificación de estudiante, ¿no?- Eli lo dice muy animada, ¿qué acaso a ella no le daban miedo estas cosas?

-¡Exacto! Además, Honoka-chan. ¿No te gustaría ver por esos lugares a Tsubasa-san?- Nozomi se me acercaba levantando sus cejas de arriba-abajo.

-¿Tsubasa? No… No creo que eso sea una buena idea…- Y en realidad no lo era, sería algo terrible.

-¿Qué sucede con Tsubasa-san? La viste la semana pasada, ¿no es así?- Me preguntaba Umi.

-¿Será acaso que Tsubasa-san rompió tu corazón?- Nozomi de nuevo con eso…

-¡NO! ¡Simplemente ella no puede asistir, tiene cosas mucho más importantes que hacer!- Alcé la voz levantándome de donde estaba sentada, todas tenían rostros confundidos y otras con sorpresa. Lo dije bastante molesta.

-Nozomi, es suficiente de bromas. Honoka se está esforzando en verdad con los asuntos del Consejo desde que ustedes ya no están, tiene presiones… No la molesten así.-Ella lo decía en serio, gracias por el apoyo Maki.

-Disculpa si fui a demasiado, Honoka-chan, pero, ¿por qué te enojas así?- Decía Nozomi con notoria tristeza en su voz.

-No… No estoy enojada, es sólo que… Sólo no la metan a ella en esto, no me la mencionen de ahora en adelante.- El escuchar su nombre anteriormente me puso nerviosa y aún lo estaba, las demás comenzaban a notarlo.

-Honoka, si se puede saber… ¿Sucedió algo entre tú y ella?- Se acercaba Eli hasta mí.

-¿Te dijo o te hizo algo malo?- Se atrevía a preguntar ahora Hanayo. Rayos, estoy preocupándolas mucho con la reacción de hace un momento.

-¿Honoka-chan?- No, no Kotori, por favor, no me pongas esa cara.

-Ch-chicas, no es nada serio de que preocuparse, ¿de acuerdo? Dejando eso de lado, ¿saben qué? siempre sí haremos la escuela embrujada si tanto la piden. Cuento con su apoyo.- En cuanto terminé por decir aquello, guardé rápidamente todos los papeles a mi mochila y me dirigí a la salida, todas estaban en silencio… Lo siento pero, no quería quedarme toda una noche siendo bombardeada por preguntas que estaban empezando a incomodarme… Y pensar que fui yo quien tuvo la "brillante" idea de pasar la noche en el departamento de Nozomi, vaya…

-¡Espera, Honoka!- Antes de que mi cuerpo estuviera fuera de aquel departamento, un agarre me detuvo y éste era de Maki.-¿En verdad estás bien? ¿Por qué te vas?- Me preguntaba algo triste mientras me soltaba de ese agarre.

-Estoy bien, Maki, no te preocupes. Pasen buenas noches.- Le dediqué una leve sonrisa y después me marché del lugar.

.

.

Haah… ¿Ahora qué pensarán de mí? Creo que hasta este punto ya no importa, sólo dejaré "eso" de lado y cuando llegue a casa me pondré hacer los apuntes de las actividades correspondientes para cada grupo y así tenerlo todo en orden. Halloween está por acercarse y si se quiere lograr una escuela "embrujada", se tiene que trabajar desde ya.

Seguí caminando por las calles en plena noche, dando vueltas mirando los puestos que alumbraban sus anuncios, sobre todo los nocturnos bares. Tenía que hacer algo de tiempo para no llegar tan pronto a casa, necesitaba inventarme alguna excusa del por qué regresé, si se suponía que me quedaría a dormir con las demás. Igual, no creo que sea ningún problema, yo soy la Presidenta del Consejo Estudiantil, por lo tanto es mi deber hacerme cargo de todo el papeleo, siempre involucro a las demás… Pero tengo mis razones, desde que las de tercero se graduaron siempre proponía ir a reunirnos con ellas, para así estar todas juntas compartiendo. También cualquier pretexto que me salía del Consejo que no podía resolver, lo valía. Eli, Nozomi y Nico estaban ahí, compartiendo con nosotras a pesar de sus problemas personales o universitarios, ellas nos daban tiempo estando ocupadas. Lo hago para no perder contacto con las chicas pero esta noche, creo que lo arruiné con mi pésima actitud…

Me había perdido en mis pensamientos para darme cuenta después de que caminaba sin un rumbo fijo, volteé a mis alrededores y estaba por una calle pequeña, oscura y con sólo un poste de luz parpadeando, esta calle no tiene mucha actividad en la noche, por lo mismo, falta de alumbramiento. No le tomé mucha importancia así que seguí caminando en esa misma calle, sólo tomaré una "ruta de emergencia" que se encontraba más adelante entre dos paredes, un pequeño callejón que acortaba mi camino de llegar más rápido a casa. Cuando estuve a punto de querer pasar por ese callejón, un extraño quejido hizo que me detuviera y retrocediera, por instinto pegué mi espalda contra la pared, se escuchaban sollozos prominentes del callejón pero… Iban perdiendo fuerza, y luego escuché a alguien hablar.

-Sshh, no te esfuerces, pronto todo terminará.- Esa voz me hizo estremecer, y era porque temía de quien estaba pensando.

Seguí escuchando atenta, quería confirmar que no fuera ella, que no lo fuera. Se escuchaba sonidos muy extraños y un olor que estaba empezando a reconocer, este olor es…

-Honoka… Sé que eres tú, conozco tu respiración y puedo escucharla. Deja de ocultarte y sal.- Me descubrió y al hablarme con voz más clara la reconocí por completo, definitivamente era ella.

Hice lo que me pidió y me adentré lentamente a ese callejón hasta donde estaba ella. No muy al fondo podía apreciar unos ojos verdes brillar intensamente. A cada paso que daba temblaba, uno por miedo y segundo porque podía oler ese olor fuertemente ferroso que estaba poniéndome ansiosa, sí, era sangre lo que olía.

Estábamos frente a frente, ella… Tsubasa me miraba sería, nota que le tengo miedo. Sus ropas tenían rastros de sangre junto con su boca, posiblemente de la víctima, una chica joven que sostenía del cuello, de rodillas y con la cabeza baja, igual sus ropas tenían sangre y esta no se movía…

-Tsubasa… ¿Ella está… muerta?- Pregunté con temor pero era más que obvio que lo estuviera, pero por lo menos esperaba que no fuese así.

-¿Tú qué crees, Honoka? Creo que es obvio con verla, ¿no es así?- Levantaba el rostro de la pobre chica, su cuello y parte del hombro estaban desgarrados. -¿Quieres un poco?- Me preguntaba sonriendo.

-¿¡E-Estás bromeando!? Tsubasa, esto está mal… Me dijiste que no harías algo así.

-No, la que está bromeando eres tú. Sabes que tengo que alimentarme, TENEMOS que alimentarnos. Dime Honoka, ¿qué fue lo qué te paso la semana pasada e hice por ti?

-Tú me convertiste en un… Monstruo…

-¡No, Honoka, no! Te salve la vida, eso fue lo que hice. De no haber sido por mí que pasaba por ahí, habrías muerto. Vaya que esos dos chicos tenían buena fuerza, te apuñalaron dos veces en el estómago, heridas muy profundas, y tu sangre fue lo que me llevo hacía ti. ¡Crack aquí y crack allá! ¿Recuerdas el sonido de sus cuellos cuando se los rompía?- Carcajeó con eso último.

-No tenías que recordármelo. Yo no tenía idea de que me asaltarían y tú… fueras una chupa sangre.

-Diles vampiros, suena mejor, ¿no te lo expliqué ya? Deja de llorar y más importante aún, ¿no has bebido sangre desde que te convertí?- Levantaba el cuerpo de la chica y lo metía a un contenedor de basura del callejón, toda despreocupada como si se tratara de simple basura… Frente a mis ojos, eso es horrible.

-No puedo hacer algo así, o lo que estás haciendo en este momento. ¡No quiero herir a nadie! No puedo aceptar ser un monstruo…

-Pues si sigues así de necia, tarde o temprano te dará verdaderamente hambre. Puedes seguir comiendo cosas normales, pero para seguir viviendo y sanando tus heridas, necesitas de la sangre. No quiero que me culpes si llegas a lastimar a alguna de tus amigas, tienes un buen Buffet después de todo.

-Son personas a las que quiero, ¡¿cómo puedes ser tan sínica?!- impulsivamente empuje a Tsubasa hacía atrás y esta sólo me miro con mala cara.

-Escucha bien, Honoka. Aliméntate rápido de lo que sea porque después no soportarás la desesperación. Yo traté de hacer lo mismo que tú y me fue bastante mal al principio, era un completo desastre lo que hacía. Te lo digo por tu bien, ¿entiendes?- La tenía a pocos centímetros de mi rostro, mirándome con esos ojos desafiantes. Me presionaba con su dedo índice sobre mi pecho… yo sólo quite su mano bruscamente de mí.

-Tu tal "cosa de vampirismo" no me controlará, no me permitiré ser como tú.

-Hmph! Eso ya lo veremos.- Se limpió la sangre que tenía en sus labios para después restregármelo en mi blusa como si fuese una servilleta.-Nos vemos.- Brincó a lo alto saliendo del callejón y se fue saltando entre techo y techo.

-Sera mejor que me apresure en llegar a casa, debo organizar lo del evento de la escuela. Yo seguiré con mi vida normal, ¡ya lo verás!


Continuará...