Nota de la Autora: Hola! aquí estoy de nuevo, esperando que les guste esta nueva historia, decidiré continuarla de acuerdo al número de reviews así que dejen feedback. NO soy dueña de los derechos de ninguno de estos personajes ni de la serie (qué más quisiera yo!) DISFRUTEN!

Cap 1

-AAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHH!

-Merlín nos ayude-rezaba por lo bajo Madame Pomfrey mientras escuchaba a la parturienta gritar cada contracción después de 10 horas de trabajo de parto.

-No es el mejor día para que nazca este bebé-coincidió Remus Lupin mientras escuchaba la tormenta estrellarse contra los muros de la cabaña.

-AAAAAAAAAAAAAAAAAAAaaaahhh!

-Pobre niña, pobres chicos, ¿de verdad él no sospecha nada?-preguntó la anciana enfermera

El ex profesor de Defensa negó con la cabeza: -No, Dumblendore pensó que esto era lo mejor. Yo no estoy de acuerdo, Harry merece saber que va a tener un hijo. Sin embargo…en estos tiempos lo más importante es la guerra, y si Harry hubiera conocido todo esto… Podría haber abandonado todo para estar junto a ellos.

-O podría haber luchado con más convicción para salvaguardar el futuro de su familia- dictaminó Madame Pomfrey de manera cortante y entrando en la habitación de la futura madre.

_FLASH BACK_

Hermione se encontraba frente a su ex director del colegio, en esos momentos tenía 19 años y el mundo mágico se encontraba en completa anarquía, Lord Voldemort y sus seguidores se habían hecho poco a poco con el poder, primero con el Ministerio de Magia, luego con el colegio. Los llamados "sangre sucia" eran perseguidos y vendidos como esclavos, los que eran más afortunados eran rápidamente asesinados.

Dumblendore se creía muerto, y pronto así sería, el veneno inyectado por el anillo de los Gaunt lo había sometido a la incapacidad total, a la pérdida de sus poderes, y al deterioro de su ya anciano cuerpo. Se había convertido en una piltrafa humana, que con voz moribunda todavía dictaminaba el futuro del mundo mágico.

Fue esa misma voz la que le solicitó a Hermione Granger abandonar la Orden del Fénix, abandonar la búsqueda de la Diadema de Ravenclaw y abandonar también a Harry Potter, el padre de su futuro hijo….

-¿Qué te dijo Dumblendore? ¿Por qué pidió hablar contigo? ¿Es que no entiende lo peligroso que fue para nosotros venir aquí? ¡Y sin contar lo lejos! ¡Estábamos en Albania!-preguntaba obstinado el pelinegro.

-Me llamó- ¿cómo iba a tener la fuerza para hacer esto? ¿Cómo?-me llamó por medidas de seguridad Harry. Estoy en la mira de Voldemort, sus mortífagos están buscándome y la Orden piensa que debo ponerme a salvo.

Harry la observó de forma penetrante, con una mirada que estaba a punto de hacerla derrumbar por completo:

-No me pidas que me trague esta Hermione, desde que empezó la guerra los mortífagos te están siguiendo y nunca has puesto remiendas en seguirme y luchar a mi lado ¿Qué es lo que en verdad sucede?

-¿por qué no puede simplemente aceptar la versión oficial? En realidad es tan patética que ni yo misma la aceptaría.- ¡¿QUÉ QUIERES QUE TE DIGA? ¿Qué ME CANSÉ? ¿Qué QUIERO RECUPERAR A MIS PADRES? La orden puso a mi disposición guardarnos bajo el hechizo fidelius, así podré desencantarlos y estar con ellos hasta que termine la guerra.

Harry la tomó por un brazo y la pegó a su cuerpo penetrando su mirada, el calor que irradiaba la embotaba, haciéndola sentir a su merced, tan de él, tan suya que pronto no podría seguirle mintiendo.

-¿Y yo? ¿Qué pasará conmigo? ¿Con nosotros?-le dijo rozando sus labios con su aliento.

-ya te ayudé Harry, te he ayudado toda mi vida, dame mi libertad, déjame estar con los míos… Nosotros….somos tan diferentes Harry, esto nunca iba a funcionar, me remuerde la culpa haber roto el corazón de Ron, ¡él es nuestro amigo! Con él se suponía que iba a terminar, yo con Ron, tú con Ginny, eso fue lo que debió ser. Y mira, nos involucramos, herimos a las personas que más queríamos, a la gente que siempre nos ha apoyado. No puedo mirar a los Weasleys a la cara nunca más.

Harry la siguió escrutando con la mirada:- ya no los amábamos, la distancia y la guerra hizo de nuestros destinos un juego. Yo nunca creí que terminaría enamorado de ti, mi amiga la come-libros ¡y aquí estoy! ¡Loco hasta el tuétano por ti! Por tu mirada, por tu sonrisa, por tu cuerpo, por todo lo que me haces sentir mientras que el resto se va a la mierda, y no me arrepiento. ¡Claro que me siento mal por el dolor que le creé a Ron, a Ginny y al resto! Pero nunca los engañamos, ellos supieron desde el primer momento que nuestros sentimientos habían cambiado y no les quedó más que aceptarlo…

-Dame mi libertad Harry-tendría que dar un discurso a la desesperada- ya no aguanto esto: esconderme, pelear, estar con Ron todos los días y odiarme por no amarlo a él. Es demasiado, ya no puedo seguir, no tengo fuerzas para seguir. Por favor, te lo pido, te lo imploro, déjame ir.

El niño que vivió, su amor, la observó con tristeza y también con rencor, nunca en su vida podría olvidar esa mirada de acero sobre ella, como si cortara el lazo espiritual que alguna vez había existido entre ellos:

-Nunca has sido mía, puedes marcharte cuándo gustes-dicho esto la soltó poco a poco y se alejó de ella cómo un sonámbulo, sintiendo que estaba viviendo una situación irreal, sacada de sus más oscuras pesadillas.

Y a cada paso que él daba alejándose de ella más pesada se sentía, tanto, que terminó en el suelo de madera llorando con el corazón desgarrado. Allí la encontró Lupin y la llevó a la que sería su prisión personal en los próximos 8 meses.

_FIN DEL FLASHBACK_

!

-puja una vez más Hermione, ya está aquí, una vez más y todo habrá terminado.

La chica se concentró y pujó con todas las fuerzas que le quedaban, ya no podía más, el sudor pegaba el cabello a su frente y el terrible presentimiento no abandonaba sus entrañas, se sintió al borde del abismo y luego lo escuchó: el llanto que inicia a la criatura en el sufrimiento de la vida.

-¡Es una niña!- exclamó feliz la enfermera tomando a la nena y envolviéndola mientras la acercaba a la exhausta madre que la observó con adoración:

-¡es hermosa!-respondió acariciando su rosado rostro y llorando, notó su cabello azabache, los hoyuelos de sus mejillas, las miniaturas de sus deditos, no quería dormir nunca más sino verla hasta la infinidad. Ver a Ella, su hija, la hija de Harry, pero la inconsciencia pronto le ganó.

-¿Harry?

El chico se le acercó, estaba pálido; Cuando lo tuvo cerca lo tomó de la mano, pero pronto la retiró, estaba frío.

-¿Harry?

-Huye, huye Hermione.

A las 2 de la mañana del 21 de agosto nació Ella Potter Granger…

A las 2 de la mañana del 21 de agosto Albus Dumblendore exhaló, sólo, su último respiro…

A las 2 de la mañana del 21 de agosto Tom Riddle cayó para siempre…

A las 2 de la mañana del 21 de agosto murió Harry Potter…