Hola que tal, este es también un fanfic especial dedicado para ahora un amigo, Fenix, espero que te guste el ahorita prologo del fanfic que te dedicare, espero que te guste y sea de tu agrado.

AVISO: RECUERDEN QUE ESTO ES UN PROLOGO, NO EL PRIMER CAPITULO.

Summary: John vivía normal junto con toda su familia, un día cuando ellos se mudan a Hurricane, un inesperado encuentro termina con la tranquilidad de esta familia. En un desesperado intento por mantener a su familia a salvo, John acepta ser un espía en la pizzeria de Freddy Fazbear's pizza. ¿Qué le aguarda a John?¿Sera lo correcto lo que ahora esta haciendo?

Disclaimer: Five Nights at Freddy's no me pertenece a mi si no a Scott Cawthon, John es propiedad de Fenix Lynx, lo único que me pertenece es la historia.

P.S. No intenten el copypaste en esta historia, esto es propiedad de FlakyVickyHTF y de nadie mas, si quieren hacer algo (publicarlo en Youtube o en otra pagina), solo avísenme para yo permitirlo, pero también mencionen que es de mi propiedad la historia.


PROLOGO.

Jonh era un chico de 15 años de edad, este era pelirrojo de piel un tanto blanca y ojos verdes, este vestía de una playera roja, un pantalón de mezclilla y unos converse de color negro. El vivía con su familia, su madre Esmeralda, su padre Maximiliano, y su hermana menor, María. Ellos habían vivido mucho tiempo en Los Angeles, pero con una oportunidad de trabajo, ellos acabaron mudándose a una ciudad cercana, Hurricane.

John se despide se sus amigos y luego se retira con su familia. A pesar de que John era un joven alegre pero tímido, se sentía triste por no poder volver a sus amigos a menos de que volviera a Los Angeles a visitar a sus amigos.

-John... Hijo ¿Estas bien?- dice su madre sacando a John de sus pensamientos.

-¡¿Eh?! Oh... si, solo que pensaba en lo mucho que extrañare a los chicos- dice John desanimado.

-No te preocupes Jony, yo también extrañare a mis amigos- dice la hermana menor de John. Ella era un niña pelinegra con los azules y de piel blanca muy pálida, iba vestida de un vestido azul cielo, unas mayas blancas y unos zapatos azules como el vestido.

-Oh vamos María, Freddy, Billy y Samanta nunca te van a abandonar- dice John sonriente.

-Sam dice que ella nunca se iría a alguna parte si no estas tu- dice un poco molesta María, John ríe tímidamente por el comentario de la amiga imaginaria de su hermana.

-Mami, Billy dice que si nos podemos dormir en el camino- dice María en un tono inocente.

-Claro que si mi amor, el viaje va a durar por lo menos una horas, ustedes descansen mientras llegamos- dice su madre para lo que María se acomoda en el asiento para quedarse dormida.

John volteo a ver a su hermana, a pesar de que sus padres no lo notaban o lo creían como la típica imaginación de lo niños, John cuestionaba la existencia de los "amigos imaginarios" de su hermana, no sabía si ella realmente fingía muy bien la aparición de Billy, Freddy y Sam, o si ellos en verdad existían.

El no dejaba de ver a su hermana hasta que nota un espacio entre la puerta del auto y su hermana, era los suficientemente grande como para decir que el sentado ahí podía caber a la perfección.

-¿En verdad existirán?- Se dice en su mente John pero no le toma mucha importancia así que se acomoda e igual que su hermana, se queda dormido.

Sueño de John...

Era común para él soñar con recuerdos de su infancia, por lo usual solía ver como es que se encontró con sus amigos, pero era rara la vez que soñaba con algún recuerdo de María, solo que estos en su mayoría, eran de cuando ella era bebé, antes de encontrarse con Freddy, Sam y Billy. Esta ocasión fue diferente, esa fue la vez en la que su hermana le había presentado a Sam, Freddy y Billy.

Él estaba en la sala de su casa cuando María sube las escaleras de la azotea rápidamente.

-¡John, John! Mira lo que encontré abajo en la azotea- dice María de 3 años. John da un suspiro y sigue a su hermana menor. Ambos bajan por las escaleras, María corre a la parte trasera de las escaleras, aquí empieza a ocurrir algo que John no recordaba que haya escuchado o visto. Se escuchaban unos susurros de niños, en el recuerdo no parecía importarle o no los escuchaba como el lo recordaba.

Cuando John llega ve sin importancia el lugar, pero en el recuerdo se veían unas sombras, 2 eran de niños y 1 era de una niña. En el recuerdo el parecía no verlos, no entendía el porque ahora que esta recordando esto que ocurrió, puede ver y escuchar todo esto.

-Mira...- su hermana señala a la sombra de un niño que se notaba, era el mas grande de los tres -... el es Billy...- luego señala al otro chico que se notaba era el mediano -... el es Freddy...- por ultimo, señala a la única niña, esta se veía mas joven que los niños -... y ella es Samanta- en eso, el recuerdo se vuelve totalmente negro y recuerdos al azar empiezan a invadir la mente de John, lo que mas le llamo la atención a John, fue de que en cada uno de esos recuerdos, los niños estaban presentes.

FIN DEL SUEÑO

-John...- dice su mamá tratando de despertar a su hijo -... John despierta, ya llegamos- John se levanta pero es deslumbrado por los rayos de sol que entraban por la ventana.

-¿Ya llegamos?- dice el aun adormilado.

-Si Jony, vamos a ver la nueva casa- dice María alegremente. John se levanta y sale del auto, este ve su casa y era una casa un tanto grande, pero no como para exagerar. Era una casa de madera (Es como la de Up para no describir todo, solo que esta era de una combinación de rojo y blanco). La familia sonríe muy alegremente y entra a la casa, por el interior era muy amplio, o según John, lo era porque aun no colocaban las cosas.

-María, ¿Estas pensando lo mismo que yo?- dice John con una cara un tanto sería, María lo mira con la misma cara -¿Correr por toda la casa para explorarla?- dice María sin apartar su mirada. John en el momento sale corriendo -Una carrerita al piso de arriba- María se impresiona y luego se queja -No es justo, no estaba lista- dice corriendo a las escaleras.

John llega al piso de arriba -¡Te gane!- dice haciendo un baile de la victoria. A los pocos segundos llega María -No se vale, eres mas rápido y además de que saliste antes- dice María con un puchero. John ríe por la expresión de su hermana -Je, perdón- dice John sonriendo tímidamente.

-Veamos que hay aquí arriba- dice John, María se adelanta y abre la primera puerta, este era un baño, no era la gran cosa, un baño cualquiera. John no le toma mucha importancia al baño y avanza al siguiente cuarto.

-Espera, Billy tiene que hacer del baño- dice María un poco molesta. John la mira -¿Y qué no puede hacer el solo?- dice John en tono burlón, María solo le hace un puchero, pero a los pocos segundos se escucha la cadena del baño, María abre la puerta -¿Ya terminaste?- dice ella, pero para John, lo único que escucho fue la nada, María una vez termina de revisar el baño, se dirige con su hermano -Ya todos listos- John la mira un poco extrañado, seguía dudando que Billy, Freddy y Samanta fueran solo amigos imaginarios.

Los 2 chicos se acercan al cuarto abriéndolo, este era muy grande y según ambos, este sería el cuarto de sus padres pues ellos siempre tomaban el mas grande. John inspecciona el lugar notando que este tenía una ventana grande donde se podía ver perfectamente la otra casa.

-Freddy espera- dice María corriendo al siguiente cuarto -María, no corras- dice John corriendo al siguiente cuarto, al llegar, nota que el cuarto se abre por si solo dejando ver otro cuarto grande, pero no tanto como el anterior. John y María entran al cuarto notando que este tenía un tono rosa.

-Este sera mi cuarto- dice María rápidamente, John solo hace un puchero -Diablos, pero conste que si me encuentro con algo mejor, yo me lo quedo, este sera el tuyo hasta que nos mudemos- dice John con una sonrisa victoriosa pues estaba el ultimo cuarto a lado del baño, y ya que el baño no era tan grande que digamos, probablemente este iba a ser un cuarto muy grande.

Ambos salen del cuarto rosa y entran al ultimo cuarto, como John lo pensó, este era un cuarto muy grande, el incluso diría que era igual de grande que el primero que visitaron -Ja, gane uno mejor- dice John con victoria. María lo ve molesta -No es justo- John la mira con una sonrisa de oreja a oreja -Eso te pasa por hablar antes de tiempo- él empieza a reír enfureciendo mas a María.

-Bien, mi cuarto es también muy grande, y no eres admitido a entrar sin mi permiso- dice María con autoridad. John la voltea a ver con una sonrisa -Bien, bien, pero te aplico la misma regla- y en eso, ambos se estrechan las manos.

-¿Ya tan rápido haciendo acuerdos?- dice el padre de ambos el cual estaba recargado en el marco de la puerta. María y John lo voltean a ver y luego ríen -Je, creo que si- dice John.

-Pues vayan abajo que van a meter sus cosas a los cuartos- dice su padre saliendo del cuarto y bajando las escaleras, los 2 niños lo siguen notando que la mayor parte de abajo ya estaba lista con la excepción de la decoración. Los 2 se dirigen a lo que ahora era la sala notando algunas cajas ahí incluyendo su Wii U. John conecta la consola y luego los 2 se ponen a jugar el primer juego que encontraron Super Smash Bros. Solo paso una hora cuando sus cuartos ya estaban listos para ser decorados. Los 2 tomaron sus respectivas cosas y se las subieron al cuarto.

EN EL CUARTO DE MARÍA...

Ella colocaba sus juguetes en su mueble mas grande, ella estaba siendo ayudada por Billy, Freddy y Samanta (Ahora ya sabrán si son reales o no). Solo le tomo unos cuantos minutos acomodar cada unos de sus peluches. Una vez acaban de acomodar los peluches y juguetes, se van a decorar los demás muebles que estaban por ahí con dibujos, adornos y algunos juguetes sobrantes.

EN EL CUARTO DE JOHN...

El colocaba cuidadosamente cada objeto en su lugar, su guitarra la colocaba en la pared como decoración, ya que el no tocaba ya desde hace mucho tiempo, solo la utilizaba para eso, decoración. Una vez acomoda su guitarra sobre su cama, coloca sus posters, ya sea de sus bandas favoritas, de sus series y vídeo juegos favoritos. Cuando acaba, empieza a decorar sus muebles con adornos como una lampara de lava y algunos juguetes de su infancia, a lado de su cama, coloca su despertados y una lampara de noche.

-Listo, ya acabe- dice John mirando como había quedado su cuarto. El voltea a ver su ventana la cual estaba cerrada -Creo que esta obra maestra debe ventilarse un poco- dice John caminando a la ventana y abriéndola, este se asoma y respira aire.

-No hay nada mejor que respirar aire fresco- dice John con una cara pacifica hasta que un aroma a podrido invade su aire fresco -Que asco, ¿De donde vendrá ese olor?- dice notando que el olor provenía de la otra casa. El empieza a inspeccionar un poco la ventana notando que esta estaba abierta pero con las cortinas cerradas.

John siente un gran escalofrió cuando las cortinas son empujadas por el viento dejando ver a John un poco el cuarto. A pesar de que el cuarto estaba apagado, el nota que las paredes estaban mancadas y había unos bultos cerca de estas manchas.

-¿Qué estas mirando?- dice su padre el cual estaba a lodo de John, esta da un grito ahogado pues no había notado cuando su padre entro a su cuarto. Max empieza a reír -Aí perdón si te asuste- dice Max notando lo sorprendido que estaba su hijo.

-No te preocupes- dice John sonriendo tímidamente. Max lo ve con una sonrisa -Tu madre pregunta que si la acompañas a saludar a los vecinos- dice Max, John voltea a ver a la casa de a lado -Mmmm... si claro, suena interesante- dice John.

-Así se habla, vamos que no tenemos mucho tiempo- dice Max abrazando a su hijo amistosamente y luego saliendo del cuarto.

Ya todos estaban afuera, visitaron a muchos vecinos, la mayoría eran casados y con familia, y otros eran solteros, durante todo el recorrido, John no encontraba a algún chico que pudiera tener como amigo, la mayoría eran niños menores de 10 años y si tenía la suerte de toparse con un joven, este era muy serio o uno que se creía la gran cosa (los que se creen populares y que hacen especialmente bullying). Ninguno era el tipo de chicos que a John le agradaran (en el buen sentido pervertidos). Cuando ya estaban a punto de llegar a la penúltima casa, una de color blanco con azul cielo, una chica rápidamente arrebasa a la familia. Esta entra a la casa donde se dirigían.

Los 4 se miran y luego se dirigen a la casa azul cielo. Esmeralda toca la puerta y esta se abre a los pocos segundos siendo la chica de hace poco la que atiende. John al instante queda petrificado, la chica era muy bonita, ella era una chica un tanto voluminosa pero no para exagerar, tu cabello era castaño con tonalidades rojizas y amarillas, sus ojos eran de color miel, iba vestida de una blusa negra que la hacía resaltar mucho, unos jeans oscuros y unos converse negros.

-Hola que tal ¿Qué se les ofrece?- dice ella con indiferencia. Esmeralda sonríe -Hola, somos los nuevos vecino, él es mi esposo Maximiliano y ellos son mis hijos, María y John, y yo soy Esmeralda, ¿Con quien tengo el gusto de hablar?- presenta Esmeralda para recibir una amigable sonrisa de la chica -Hola, gusto en conocerlos, yo soy Nícol- dice la chica.

-Un gusto el conocerte Nícol- dice Max extendiendo la mano, Nícol recibe formalmente su mano -También es un gusto Maximiliano- dice Nícol. Max le sonríe amistosamente - Oh, solo dime Max- dice él -Esta bien Max- dice Nícol con una sonrisa tímida.

-Bueno, a sido un gusto conocerte, pero ya es un poco tarde así que nos vamos- dice Esmeralda mirando su teléfono -Claro, a sido un gusto conocerlos, y si necesitan algo, no duden en llamarme- dice Nícol con una sonrisa.

La familia una vez se despiden, se van a la ultima casa donde John había detectado ese horrible aroma. Esmeralda toca la puerta.

-Mami, a Freddy, Billy y Sam no les agrada esta casa- dice María poniéndose nerviosa. Esmeralda la ve con una sonrisa fingida pues le hartaba que su hija le hiciera mas caso a sus "amigos imaginarios" que a ella -No digas eso, solo es un vecino- dice Esmeralda volteando a ver la puerta. John en el momento se pone nervioso pues siempre que Freddy comentaba algo que le daba miedo o lo ponía nervioso, en verdad era por una buena razón como cuando se rompió la pierna por no creer lo que su hermana le dijo, Freddy le comento de que no bajara las escaleras porque estaban rotas y era cierto.

Un hombre finalmente abre la puerta después de unos 5 minutos. Este era un hombre adulto de unos aproximados 40 años, estaba vestido con un traje casual morado, su cabello era negro con una pequeña tonalidad morada y sus ojos eran grises -Hola que tal. Ustedes deben ser los nuevos vecinos ¿O me equivoco?- dice el hombre con un tono extraño, casi como si estuviera hablando con niños.

-Hola que tal, me llamo Esmeralda, él es mi esposo Maximiliano y ellos son mis hijos, María y John- dice Esmeralda alegremente. El hombre voltea a ver a los niños y con una sonrisa se agacha saludando a María -Hola pequeña, es un gusto el conocerte- María en el momento siente miedo pero corresponde el saludo -Ho-hola señor, ta-también es un gusto- dice ella nerviosa.

-Me llamo Robert- dice el hombre levantándose y ahora dirigiéndose a la familia. Esmeralda sonríe -Es un gusto Robert- dice Esmeralda. Robert mira su reloj y nota que ya eran las 8 de la noche.

-8 de la noche, ya es tarde...- él voltea a ver a la familia -... ¿Quieren cenar aquí? Ya tengo listo todo, pero como ustedes gusten- dice amablemente Robert.

-Claro, nos encantaría cenar con usted- dice amablemente Max.

Todos entran a la casa y como era correspondido, todos se sentaron a cenar. Mientras los adultos platicaban de sus respectivas vidas, John y María se sentían incómodos, mas María que John.

-Oye María...- dice John en un susurro a María, ella lo voltea a ver con nerviosismo -... ¿Qué te dice Freddy sobre este lugar?- María voltea a ver a su lado quedándose en silencio un momento, luego vuelve a ver a su hermano e igual en un susurro -Dice que ese hombre lo pone muy nervioso, que hay algo en el que no le agrada- esto pone mas nervioso a John.

-Em, disculpe señor Robert...- dice John llamando la atención de Robert -... necesito usar el baño, ¿Donde se encuentra?- dice un poco nervioso.

-Sube las escaleras y la ultima puerta a la derecha- dice Robert para lo que John se levanta y sube rápido las escaleras. El se dirige al baño pero se detiene frente una puerta donde permanecía un leve pero detectable aroma a podrido. John no sabía si investigar que era ese aroma o seguir par ir al baño.

Su curiosidad pudo mas que él y se dirige al cuarto, John abre la puerta notando de que el lugar seguía un tanto oscuro, él enciende la luz notando que era el cuarto que vio desde su cuarto. Las paredes estaban salpicadas con algo rojo y en el suelo habían varios bultos de ropa sucia, era el cuarto de lavado (XD creyeron que era una escena del crimen ¿Verdad? ja ja ja ja). John se calma al saber que solo era ese cuarto, él se acerca a las manchas rojas para oler que eran, solo era un poco de pintura ya fresca, pero combinada con el horrible olor de la ropa sucia, creaban un horrible olor a podrido.

John respira hondo y luego sale del cuarto para dirigirse al baño.

Cuando baja para volver a la cena con su familia, nota que todos ya estaban en la puerta esperando a John. Él no pregunta ni se queja, solo se dirige con su familia, esa casa aun lo ponía nervioso.

-Gracias por la cena señor Robert- dice Esmeralda amablemente. Robert le sonríe -El gusto es mio, fue agradable poder cenar en compañía de alguien- dice Robert. Después la familia se retira a su casa para poder descansar.

Era media noche, todos ya estaban dormidos con excepción de John el cual no podía dormir pues no dejaba de pensar en la casa del señor Robert, algo en esa casa le parecía extraño. De un momento a otro escucha su puerta abrirse, el voltea a ver pero no había nada. John se había puesto nervioso pues sabía que todos estaban dormidos, él se sienta en su cama para ver mejor la puerta pero seguía sin ver algo o alguien ahí hasta que el cuarto de María se abre, ya que esta estaba justo enfrente de su cuarto, pudo notar su interior.

John fuerza la vista por la poca luz que había, pero no notaba nada. Estaba a punto de acostarse otra vez hasta que su ventana se abre por el viento dejando entrar luz hasta el curto de María. John queda en shock, había alguien parado a lado de la cama de María, era la sombra de su recuerdo, era Billy y lo estaba viendo fijamente. A los pocos segundos que para John fueron minutos, la sombra de Billy desapareció.

John espero unos segundos para asegurarse de que nada mas fuera a pasar, él se levanta y se dirige a la ventana para cerrarla. A punto de realizar esto, el nota a Robert en el cuarto de lavado, nota que alguien estaba ahí con él, una mujer, esta estaba totalmente atada, se notaba con miedo. John no reaccionaba, solo estaba mirando la escena.

Robert después de unos segundos se acerca a la mujer con un cuchillo en mano. En ese momento, John no lo pensó mas y sale corriendo a la casa de Robert para tratar de detenerlo. En silencio se introduce en la casa y se dirige al cuarto de lavado con un cuchillo que tomo de su casa. La puerta estaba abierta, John cuidadosamente se asoma notando de que Robert no estaba en el cuarto, solo el cadáver de la mujer.

John mira a todas partes para ubicar a Robert, pero no se da cuenta de que este se encontraba detrás de él. De un movimiento rápido, desarma a John y lo somete.

-Increíble que seas tan silencioso y supersticioso John...- dice Robert con el cuchillo apuntando a la cabeza de John -... pero debes ser mas rápido en pensamiento como para ganarme- dice Robert. John tenía miedo de morir y acabar como esa mujer, él empieza a llorar levemente.

-Je, tengo una propuesta para ti...- dice Robert, John alza un poco la mirada, lo suficiente como para ver a Robert -... te dejo ir, pero tu te convertirás en mi aprendiz, espía y marioneta- dice Robert con una gran y sádica sonrisa, John tenía pensado el que una vez lo liberara, rápidamente le avisaría a la policía para que vinieran a arrestar a Robert -Esta bien- dice John con un poco de miedo.

-Je, crees que soy un tonto, se que avisaras a las autoridades, así que te advierto algo...- John en el momento se pone nervioso -...Tendré a alguien vigilandote en cubierto, si me entero de que le has comentado a alguien sobre esto, mato a toda tu familia, ¿Entendido?- dice Robert seriamente. John estaba atrapado, no tenía salida, si aceptaba, tendría que hacer lo que Robert le pidiera, pero si no lo hacía, él moriría sin dudarlo. John con pesar, acepta la propuesta -Acepto- Robert le sonríe -Entonces esta hecho...- él se quita de encima y ayuda a levantar a John -...Vete de aquí y no olvides que tengo a alguien vigilandote día y noche- John se sentía triste, ¿como pudo aceptar? ¿que le obligara a hacer?

John baja las escaleras en silencio abriendo la puerta -Adiós- dice John antes de salir, Robert nuevamente le sonríe -Adiós Marioneta- John se sorprende por el apodo pero prefiere solo irse de ahí.

A la mañana siguiente, John se levanta de su cama, baja y desayuna con su familia. Como siempre, John se sienta a lado de su hermana -Buenos días- dice John un tanto desanimado. María solo lo ve y luego continua desayunando, a John se le había hecho extraño -¿Que no me vas a saludar?- dice John desconcertado por el comportamiento de su hermanita.

-Billy me dijo lo que hiciste anoche- fue lo único que dice María par luego acabar su desayuno e irse de la cocina. John se sorprendió, ¿Billy no estaba vigilando en la noche? eso da miedo. María regresa al comedor -...pero no le diré a nadie, no quiero morir- dice María con indiferencia, luego se va a la sala a ver televisión un rato.

John no sabía que decir, agradecer de que su hermana no diría nada, o insultar a Billy una hora por revelar su secreto. Él se levanta de su asiento, deja su plato vacío en la cocina y luego regresa notando una nota en la mesa del comedor. John va y toma la nota y viendo que decía.

Marioneta...

Esta sera tu primera misión...

Deje algo muy importante en la pizzeria de Freddy Fazbear's Pizza, necesito que lo recuperes antes de que alguien se de cuenta, los encontraras dentro de los animatronicos de la pizzeria, Bonnie, Chica, Freddy, Foxy y uno adicional que solo aparece por las noches.

Es super importante que las recuperes y para ello, tendrás que trabajar en ese lugar como guardia nocturno, pero te advierto que no sera tan fácil. Esos animatronicos tienen algo en contra de los guardias así que debes tener mucho cuidado o podrías morir.

De cualquier forma, tratare de que eso no pase pues te necesitare en mas trabajitos.

ATTE: Robert Vicent.

Eso lo puso nervioso, sobre todo porque puso en letras negras e incluso subrayado el tener cuidado. Había escuchado de ese lugar, que estaba embrujado o algo por el estilo, pero nunca se imagino el que ese lugar fuera realmente peligroso, pero... si quería mantener a su familia a salvo, tendría que aceptar cualquier reto, fuera lo que fuera.

John respira hondo -Ok, hora de trabajar- dice el con una actitud positiva.


Bueno, hasta aquí el prologo de esta nueva historia, espero que les haya gustado sobre todo a ti Fenix, créanme que ahora si tuve un día muy pesado pues hoy fue la misa de mi papá el cual cumple un año desde que falleció, y bueno, visita familiar yay (sarcasmo), mi cuarto se convirtió en un campo de guerra y créanme que si salí herida, pero bueno, ya me voy a descansar.

Espero sus reviews para continuar la historia, aunque la historia que sigue es "Una vida tras la cortina" esperen actualización.

Soy FlakyVickyHTF despidiéndose desde la guerra. Bye