Hola mis queridos readers.

Este es mi primer fanfiction sobre Hetalia, espero que les guste porque yo ame escribir este primer capítulo. Es un fic YAOI!

Las pareja principal es PruCan pero meteré las siguientes también: Spamano, FrUk, Gerita, Giripan, AusHun, Dennor, SuFin, Rochu, LietPol (posiblemente).

One sided: Franada, México x Guatemala y UsUk.

También harán apariciones Hetalia Latinoamérica con mis propios OCs. En México me base más o menos en uno que vi en DevianArt al igual que varios otros países latinos. Y todos tendrán cierta tensión con España.

Será multi narrador.

Disclaimer: Los personajes de Hetalia no me pertenecen, le pertenecen a Hidekazu Himaruya. Todo es ficción basada en el anime y el manga.

POV España

No hay nada como despertarse con la luz del sol pegándote en la cara. Es como si te estuviera saludando. Déjame presentarme, soy Antonio, Antonio Fernández Carriedo. Un gusto.

¡Estoy muy emocionado! Más que de costumbre ¿Sabes porque? Bueno te diré que hoy inicia el nuevo año escolar en la academia. Adoro la academia, es divertida, los profesores son geniales y sobre todo los clubes. Bueno los demás estudiantes son agradables… algunos a veces.

Me vestí rápido con el uniforme y corbata azul de la academia. Algunas veces pienso que sería mejor ir a la academia sin tener que usar uniforme pero luego recuerdo que no tengo el mismo estilo para vestirme que mi amigo Francis y se me pasa. Francis es uno de mis mejores amigos junto con Gilbert, ambos son agradables pero a la vez algo escandalosos.

Guardo las llaves del departamento para no perderlas y después no poder entrar, ya me ha pasado; lo único que tengo que hacer es esperar a que Francis pase por mí, es muy amable en darme un aventón a la escuela, por el camino también recoge a Gilbert y a su hermano menor Ludwig.

Ya estando los cuatro en el auto, Francis y Gilbert comienzan a pelear por la música que deberíamos escuchar. Por un lado Gil quiere escuchar su nuevo CD de su banda de Heavy Metal favorita mientras que Francis prefiere un poco de música tranquila. Finalmente terminan pidiendo mi opinión porque saben que a Ludwig no le importa en lo más mínimo.

Tuve que evadir eso haciéndome el dormido. Qué bien que se lo creyeron. Fusosososo. A los cuantos minutos ya estábamos entrando al estacionamiento de la academia. Me desperté de mi sueño fingido para observar todo mejor. No identificaba caras nuevas, pero seguro habría alguna.

Francis se estaciono y bajamos del auto todos menos Gilbert, quien seguía quejándose de volver a clases.

"¡West!" a si llamaba a su hermano "Tengo paja de salir ¡Cárgame!"

Al principio pensé que Ludwig lo haría pero acabo sacándolo del auto jalándolo del cuello de la camisa. Lud era muy fuerte, más que Gilbert. No le digas que dije eso.

Francis aspiro el fresco aire veraniego que nos invadía "Debo admitir que extrañaba esto"

"Yo también" le seguí la corriente.

"Bien, gracias" dijo Ludwig "Tengo que irme"

"Ok ¡Te veré en casa, West!" Gilbert sí que era escandaloso algunas veces "¡No olvides comprar leche por el camino!"

Comenzamos a caminar hacia la academia. Francis no paraba de mirar a todas las chicas que nos encontramos. Gilbert nos guio hasta el centro del patio y se aseguró que todos voltearan a vernos. Se aclaró la garganta y lo que grito fue…

"¡El Bad Touch Trio ha llegado!" casi me caigo de la vergüenza pero tanto Francis como Gilbert disfrutaban de la atención que habían ganado.

Veras. Según Gilbert y Francis. Somos los tres chicos más populares y queridos de la escuela…bueno si eso fuera cierto Elizabeta no golpearía a Gil con un sartén, Francis no recibiría bofetadas todo el tiempo y por otro lado yo…seria querido por todos, sobre todo por Lovi y Alejandro.

¿Qué quiénes son? Bueno te explico. Lovi es una persona súper linda y adorable. Me encanta pellizcar sus mejillas regordetas y acariciar ese ricito tan chistoso que tiene. Aunque siempre termina golpeándome en el estómago, lo que me duele bastante. ¡Lovino! ¡¿Por qué me odias tanto?!

Bueno la verdad no creo que me odie. Lo considero mi mejor amigo también, a los dos nos gustan los tomates. Lovino puede tener un carácter algo fuerte a veces pero en el fondo… muy muy en el fondo es afectivo a su manera.

Y seguro te preguntaras quien es Alejandro. Bien, nosotros tenemos una historia algo complicada. Lo conozco de pequeño, podría decirse que nos criamos juntos. Solía visitarle seguido y éramos muy unidos. De pequeños éramos un grupo muy grande de amigos pero con el tiempo todo fue empeorando. Ellos permanecieron unidos pero comenzaron a alejarse de mí. Alejandro siguió conmigo pero con el tiempo se volvió igual de distante que los demás. Eso algunas veces me deprime.

¿Cuánto tiempo estuve fantaseando? Bueno para mi sorpresa, Gilbert y Francis se habían separado de mí. Vaya que soy distraído. Mire la hora. Será mejor que me vaya a clase.

POV Canadá

"Matthew ¿Me estas escuchando?"

La voz de mi hermano me hizo volver a la realidad. Me había quedado pasmado mirando la academia. Era un edificio enorme parecido desde mi punto de vista a un castillo.

"S…si…Alfred" dije con nerviosismo. Este sería mi primer día en la academia. A diferencia de mi hermano, yo había estudiado anteriormente en un internado al norte de Francia. Todo esto era difícil para mí: nueva escuela, nuevas personas…el mismo Alfred.

Bueno a diferencia de mi hermano, mi cabello es más liso y largo, además tengo un ricito que cae hacia adelante haciendo bucles. Uso unas gafas iguales a mi hermano y ambos tenemos ojos azules. Aún sigo sin comprender como es que nos confunden tanto si somos muy diferentes, sobre todo en personalidad. Yo soy un poco tímido y Alfred es todo lo contrario.

Para ser sincero, Alfred me molesta un poco. Lo quiero pero hay veces en que no lo soporto y…

"¿Alfred?" vi cómo se iba alejando solo dejándome con un pedazo de papel en mano.

"Ese es tu horario… ¡See you soon, bro!" ¡¿Qué?! Me ha dejado solo, típico de él. Comencé a caminar por el patio, al parecer no llamaba mucho la atención, nadie me miraba en lo absoluto.

Decidí sentarme bajo la sombra de un árbol y leer el horario que Alfred me había dado.

Antes de siquiera ojearlo, algo salto del árbol y cayo enfrente de mi asustándome mucho.

"¡Hey Jones! ¡Este es mi árbol, recuérdalo!" dijo apuntándome con el dedo. Rápidamente me puse de pie.

No parecía amenazante… bueno no tanto. Tenía el cabello rubio rojizo, sus ojos eran rojos y un pequeño colmillo salía de su boca. Además del uniforme y unos guantes llevaba puesto un pequeño sombrero de copa.

"Me…me estas confundiendo" dije nervioso "Él es mi hermano… yo soy Matthew, Matthew Williams"

"¿Matthew Williams?" se quedó pensativo "Jamás he escuchado ese nombre" su expresión cambio totalmente, dio una sonrisa algo siniestra "Debes ser nuevo"

Me limite a asentir mientras el comenzaba a rodearme.

"Interesante" lo escuche susurrar "Bien, ya que eres nuevo te diré una importante lección" me jalo de la corbata haciendo que lo viera a la cara "Nadie toca el árbol de Vladimir Popescu"

Algo me dijo que él era Vladimir Popescu.

"¡Hey Vlad! ¿Ya terminaste de molestar al chico?" dijo otra voz. Vladimir me soltó casi al instante que el llego.

"No…no lo estaba molestando" parecía esta intimidado por la presencia de aquel chico.

El otro solo se cruzó de brazos "Tienes tres segundo para irte y llevas dos" Vladimir salió corriendo casi a la velocidad de la luz "¿Te encuentras bien?"

Me encontré en un corto trance. Aquel chico parecía un ser angelical, era rubio de hermoso y largo cabello, tenía unos hermosos y profundos ojos azules. Me quede embobado un momento sin darme cuenta.

"¿Estas bien, mon ami? Pareces un poco desorientado"

Agite la cabeza volviendo a la realidad "Ah… si, lo estoy" espero no haberme ruborizado, hubiera sido muy vergonzoso.

El dejo salir una leve risa "¿Viste como corrió? Fue graciosísimo" se limpió una lagrima que le había salido por la risa antes de recuperar la compostura "Pardon, donde están mis modales, me llamo Francis Bonnefoy" me dirigió una sonrisa amigable "No hace falta que te presentes, escuche que eres Matthew Williams"

"Si…ah… soy nuevo aquí"

"Me di cuenta. Algo me dice que estas algo perdido ¿Quieres que te ayude?"

"Por supuesto" trate de no verme muy emocionado.

"Con todo gusto ¿Me permites tu horario?" le extendí el papel sin poner pero y lo ojeo rápidamente "Que suerte que la primera clase de todos sea un electivo*"

*(Paraescolar, extracurricular, clase extra)

Entramos al edificio, obviamente era mejor por dentro que por fuera. Había demasiados pasillos, casilleros, puertas y ventanales. Comparado con la academia mi antiguo internado sería un circo.

Sin previo aviso me rodeo con su brazo. Empezaba a sentirme algo incómodo pero era una sensación un tanto agradable.

Para ser sincero, no sé cómo entablar una conversación con alguien así que espere a que el dijera algo.

"Así que… Matthew ¿Dónde estudiabas antes?" gracias a dios que dijo algo.

"Esto, estudiaba en un internado en Francia" ya me sentía más cómodo con su compañía, pero el hecho de que me estuviera abrazando era otra cosa.

Francis parecía sorprendido con mi respuesta.

"Mon diu, como habrás notado soy francés, vaya que el mundo es pequeño" ya había notado que era francés por su acento. Debo admitir que me gusta recibir atención, aunque sea un poco.

"Lo es pero soy canadiense" le explique, su sonrisa pareció agrandarse aún más.

"Mejor aún, sinceramente Alfred no es mi persona favorita" la mía tampoco pero tengo que aguantarlo "No es nada personal… bueno si es personal y además él puede ser algo…"

"¿Egocéntrico? ¿Entrometido? ¿Ruidoso?"

"Sí, claro que sí y sobretodo ruidoso. Ohonhonhonhon~" ambos reímos hasta que él se detuvo frente a un aula "Parece que te entretuve demasiado" volvió a mirar mi horario y se sorprendió "Ammm… ¿Tu escogiste esta clase?"

"La verdad le pedí a Alfred que escogiera las clases por mi ¿Por qué?"

Parecía querer contener una risa "Ya lo veras" me devolvió el horario "Si quieres puedes buscarme a fin de clases para llevarte a recorrer los clubes y escojas a cual unirte ¿trato?"

"Trato, gracias Francis" se despidió de mi lanzándome un beso. Solo espero no entrar a clase sonrojado.

Entre al aula y mire la pizarra, donde resaltaba el nombre de la clase que era…

¡Ciencias de la vida! ¡Alfred voy a matarte!

La profesora me miro extrañada. Como si… olvídenlo seguro me confundió con Alfred. Antes de que dijera algo saque una nota de mi mochila y se la entregue. Pareció entenderlo todo.

Volvió a dirigirse a la clase "Bueno parece que tenemos un nuevo estudiante, él se acaba de mudar de Francia. Háganlo sentir bienvenido" no era necesario que me introdujera pero da igual.

Mire la clase, nadie me prestaba atención. Note que la mayoría de los que estaban eran hombres. Bueno, Alfred dijo había chicos en mayoría.

"Hay un lugar vacío junto a Beilschmidt"

Me dirigí al lugar vacío. Mi compañero de asiento parecía estar dormido sobre la mesa, solo pude ver su cabello rubio platinado. Me senté ignorándolo.

Busque un cuaderno para anotar en mi mochila. Sentí una extraña sensación a mis espaldas. Algo parecido a un escalofrió. Al voltearme descubrí que él me miraba de una manera muy intensa, con sus ojos rojizos. No voy a mentir, me había atemorizado.

No volteaba a mirarlo, solo me concentraba en la pizarra y un poco en lo que la profesora, cuyo nombre era Zia Hassan, decía. Primero nos dio la bienvenida a todos y comenzó a explicar que una de las fases más difíciles que una persona puede tener es formar una familia.

"Para este año decidí que haríamos un proyecto para practicar esta fase" abrió una enorme caja que había sobre el escritorio y saco lo que parecía un animal de peluche "Tendrán que cuidar y criar a su propio bebe"

Alguien con aspecto japonés levanto la mano "¿No deberían ser bebes humanos?"

"Creí que sería más divertido y menos espeluznante que fueran animales, son robóticos y pueden actuar como cualquier cachorro a diferencia que estos pueden hablar" explico y comenzó a sacar más animales de la caja "Es un proyecto en parejas, así que para hacerlo más sencillo será como están sentados"

Vida, ¿Por qué me odias tanto?

La profesora nos había dejado nuestro "bebe" en la mesa. Era un tierno oso blanco. Lo tome para verlo mejor, era tan esponjoso y adorable.

"El resto de la clase decidirán con su pareja el nombre de su bebe" explico Zia "El cachorro tiene un botón en la espalda que es donde se enciende" fue lo último que nos dijo, después de eso se fue a su escritorio a leer una revista.

"¡Es un panda, aru~!" grito emocionado alguien de atrás. Al principio pensé que era una chica por la coleta que tenía pero llegue a la conclusión que era un chico. Su compañero era un chico alto y con bufanda.

"¿Podemos llamarlo girasol?" le pregunto insistente.

"Bien" respondió el otro. Me quede embobado mirando a los demás.

"¡Hey, despierta!" mi compañero me daba de golpecitos en el hombro para llamar mi atención "Concéntrate en el tuyo" me reprendió.

"Perdón" el solo rodo los ojos. Busque el botón entre todo el pelaje del oso hasta que logre encenderlo. Sus ojos comenzaron a brillar y comenzó a mover sus patitas.

"¿Quién eres?" me pregunto el oso.

Antes de que pudiera responder, Beilschmit me corto "Que te quede claro que tú eres la mamá"

"Por mi está bien" le respondí sin dejar de ver al oso "Soy Matthew"

"Soy Gilbert" por un segundo pensé que el oso me estaba hablando pero había sido el chico albino "Creo que el oso necesita un nombre"

"Eso parece ¿Tienes alguno?"

"Umm… estaba pensando en… ¡Gilbear!"

Emmm… no era un mal nombre pero parecía que al oso no le gustaba.

"Estaba pensando que tal vez podríamos llamarlo Kumajiro" al oso pareció agradarle.

"Como sea" Gilbert volvió a rodar los ojos. Me preguntaba porque tomaba esta clase si no le importaba en lo absoluto.

"Tú, del que no me acuerdo su nombre, aliéntame" me pidió Kumajiro.

"Soy Matthew"

"Kesesesese~" Gilbert soltó la risa más extraña que he escuchado pero era mejor verlo sonreír "¿Qué se supone que come?"

Yo también tenía esa duda. Mire a mi alrededor, todos los alimentaban con comida normal. Se me ocurrió una loca idea…

Saque el desayuno que le había preparado a Alfred pero "olvido", seguro compraría hamburguesas en la cafetería. Era media docena de panqueques en forma de oso… que conveniente.

"Come esto Kumajiro" le di uno y comenzó a masticarlo. Pareció gustarle.

Gilbert tenia puesta su mirada en mi de nuevo; me sentía nervioso, normalmente no le llamo mucho la atención de la gente. Pero… parecía que eso comenzaba a cambiar, primero Francis se comportó muy amable conmigo, debo admitir que fue un gesto muy considerado de su parte. Bueno él no me conocía, hasta me defendió de aquel tipo Vladimir.

Francis parecía sacado de un cuento de caballeros que solían contarnos en el internado.

"¿Quién eres?" pregunto una voz, para mí no tan grata sorpresa era Kumajiro.

"Que soy Matthew tu… ¿papá?" le dije algo confuso.

"Yo soy el papá que no se te olvide" me reprimió Gilbert.

"¿No es la cosita más linda del mundo aru~?"

"Sí que lo es" sonrió el chico de la bufanda. Parece muy espeluznante.

"Oye ¿Me estas escuchando?" Gilbert me chasqueo los dedos. Vaya que me distraje mucho con chico chino y el alto.

"¡Ahh! ¿Qué…que estabas diciendo?"

"Que tú lo cuidas hoy y mañana veremos qué hacemos con el"

"Pe…pero… ¿Por qué yo?"

"Porque tú eres la mamá ¿duh?"

Quería gritarle, decirle él también era responsable del pequeño Kumajiro pero solo me salió decirle esto: "Okay"

Después sonó el timbre de cambio de clase y mi compañero se fue, carcajeándose con su extraña risa "Kesesesese~"

Revise mi horario de nuevo. La siguiente clase era Historia, pero recordé el detalle que no sé dónde está el salón. Lo malo es que Francis ya no estaba aquí para guiarme, creo que tendré que pedírselo a alguien más.

"Eh… disculpa" le dije a un chico con aspecto japonés "¿Sabes dónde está el salón del primer grado? Debo llegar a clase de Historia"

"Si, sígueme por favor, tenemos la misma clase" me respondió.

Que alegría encontrar gente tan amable.

"No me presente, espero que me disculpes" hizo una reverencia "Konichiwa, mi nombre es Kiku Honda"

"Mucho gusto, mi nombre es Matthew"

"El gusto es mío, espero que te sientas bienvenido" Vaya que era formal. Comenzó a caminar y yo lo seguí tratando de igualar su paso. Pensé en hacerle plática pero mientras caminábamos, Kiku tenía la mirada perdida.

¿Qué estaría pensando?

POV Japón

Este chico se parece mucho a Alfred ¿Sera igual de escandaloso? Espero que no, aunque, no lo parece mucho, se ve más calmado.

Observe que cargaba un cachorro de oso blanco… claro estaba en el mismo electivo que yo. Suerte que mi compañero fue el que se llevó él bebe.

"Disculpa… Kiku" apenas y pude oírle, ya que su voz era muy baja "¿Qué animalito te dieron?"

Sonreí un poco y respondí "Un gato" Matthew solo se me quedo viendo y luego sonrió.

"Yo tengo un oso blanco, se llama Kuma…Kumajiro, creo" ¿Creo? Seguramente tenía lagunas mentales.

Sin darme cuenta ya habíamos llegado al salón. Estaba medio vacío así que lo guie y le dije que podía sentarse al lado mío.

"Gracias, Kiku"

Me conto un poco de su antigua escuela y de porque tuvo que mudarse con su hermano Alfred. Sí, no había notado que eran hermanos.

En ese momento llegaron mis dos amigos, Ludwig-san y Feliciano-kun.

"Ve~ ¡Kiku! Te extrañe mucho" Se abalanzo sobre mí y comenzó a abrazarme.

"Pero si lo vimos esta mañana" intervino Ludwig.

"En tiempo italiano es mucho" cuando por fin me soltó, note que Matthew nos miraba algo extrañado.

Sería mejor iniciar una presentación más correcta "Ludwig-san, Feliciano-kun. Quiero presentarles a Matthew-san, es nuevo en la academia"

"Un gusto" respondió formalmente el rubio alemán.

Feliciano se quedó mirándolo fijamente un momento "Ve~ ¡Te pareces a Alfred Jones!"

Matthew-san entrecerró los ojos y dijo con su débil voz "No me parezco a Alfred"

"Es su hermano canadiense" termine diciendo.

"Bienvenido Matthew" Ahora Feliciano se abalanzo sobre él, aunque pareció no importarle mucho a Matthew, de hecho le devolvió el abrazo de una tierna manera.

Observe el gesto incomodo que Ludwig había puesto. El alemán solo tomo al italiano del cuello de la camisa y lo separo del chico canadiense.

"Controla tus ímpetus, Feliciano" lo reprendió. Cualquier persona diría que Ludwig Beilschmidt no era alguien celoso, pero si se trataba de Feliciano podía ser muy posesivo. A muchos les tomó por sorpresa que se volvieran pareja y algunos otros, como Lovino-kun, enloquecieron ante la noticia. La verdad para mí fue bastante obvio que ambos se gustaban.

El pobre Matthew no sabía que responder y solo dio unas pequeñas disculpas. El timbre volvió a sonar y el profesor entro.

No podía estar concentrado en clase, apenas y supe el tema. Mi mente estaba inundada de pensamientos sobre él. Aquel chico de cabello castaño que había conocido en la biblioteca el último día de clases.

Heracles Karpusi jamás me había llamado atención en lo más mínimo, solo me acordaba de el por qué solía dormir durante todas las clases y siempre sacaba buenas notas.

Él se encontraba ahora en la misma clase, en el último asiento y yo no me atrevía siquiera a voltear. No estaba seguro si estaba aún despierto, pero él no dejaba mi mente por alguna razón.

Recuerdo aquella tarde en la biblioteca. Me había escondido ahí para evitar a Feliciano y Ludwig, ya que era muy incómodo estar con ellos en ese momento en que comenzaban su relación. Estaba feliz por ellos pero eso no le quitaba lo incómodo. Empezaba a sentirme como la tercera rueda de una bicicleta, solo un estorbo innecesario.

Pero volviendo a lo importante. La biblioteca estaba completamente vacía, o eso creía yo. La bibliotecaria había tomado un descanso y yo me había escabullido hasta uno de los sofás y comencé a leer un poco de manga. Escuche un raro maullido.

Pero… ¿Qué hace un gato aquí? Pensé y de nuevo lo escuche. La curiosidad me gano, entonces fui a investigar de qué se trataba. ¿Era un gato lo que provocaba aquel sonido? Sí. Pero de donde había salido, esa fue la sorpresa que me lleve cuando vi que el gato dentro de una playera.

Ahí estaba el, rodeado de una montaña de libros sobre todas las mitologías conocidas. Llamo mi atención que leía sobre leyendas japonesas en ese momento.

El pequeño gatito salto de su playera y corrió hacia donde estaba yo. No pude resistirme al gatito así que me agache y lo acaricie.

"Se supone que no debería haber nadie aquí" al escucharlo me tense y me reincorpore.

"Lo…lo lamento, te pido que me disculpes…ya me iba"

El me detuvo "No tienes por qué hacerlo, quédate el tiempo que quieras"

"Gracias…eh…"

"Heracles" solo sonrió y el minino volvió a su playera de un salto.

"¡Kiku Honda!" aquel grito hizo que me saliera de mis pensamientos. Todos me miraban. Qué vergüenza.

"Lo siento" me disculpe. El profesor me había preguntado algo y no había respondido. Lo que yo consideraba una falta de respeto "No sé cómo responderle"

"Bien; señor Karpusi, pase a la pizarra y explique lo que sepa de mitología griega"

El pasó al frente sin voltearme a ver y yo solo lo observe de espaldas. Empezó a hablar de los dioses; no le preste atención en lo más mínimo.

Note que tanto Matthew como Feliciano me miraron raro. Escondí mi rostro en mi libro ignorándolos. Sentí como algo me picaba el brazo continuamente. Voltee hacia el lado de Matthew y el me susurro.

"Tu libro está al revés"

Hoy no es mi mejor día, me la paso haciendo el ridículo. Como quisiera ser invisible en este momento.

"Ve~ ¿Kiku, estas bien?" me pregunto Feliciano.

"Si…si lo estoy, Feliciano-kun, no te preocupes debo estar un poco distraído hoy"

"¿Seguro? ¿No te duele nada? ¿Quieres que te lleve a la enfermería?" me agradaban las buenas intenciones de Feliciano, pero sabía que nada de eso me ayudaría con mi problema.

Este día, el destino se decidió a dejarme el ridículo.

Hoy en la clase electiva solo había dos lugares libres: el que estaba al lado del hermano de Ludwig y el que estaba al lado de Heracles. Y decidí sentarme junto al griego, me decepcione al saber que él no me reconocía.

Al saber que tendríamos que cuidar a un cachorro juntos no pude evitar sentirme extraño. Para nuestra suerte nos habían dado un gato, al cual el llamo Nekokichi. Era extraño tener que cuidar un cachorro, y era aún más tener que cuidar a un cachorro con él.

Por un lado veía a Matthew, quien se veía muy feliz con su pequeño Kumajiro, y por el otro veía a mi hermano Yao con su bebe panda gritando lo adorable que era. Él tenia de pareja a Iván Braginsky, el ruso alto a quien todo el mundo le tenía miedo… todos excepto Yao, quien por alguna extraña razón no lo veía como el resto lo hacía.

¡Agh! Ni siquiera tenía intención de meterme a esa clase. La única razón por lo que lo hice fue por Heracles, aunque sonara muy infantil era la verdad todo era por él.

Pase la siguiente clase en silencio hasta que tocaron el timbre del descanso. Feliciano y Ludwig fueron los primeros en salir.

Mire a Matthew y comencé a pensar que tal vez debería conseguir nuevas amistades.

Es mi primera vez escribiendo Yaoi. Espero que les haya gustado el primer capítulo.

Este es un collab con mi amiga Fanofsaiyanprince.

Si estaba medio cursi perdónenme. Cursi es mi segundo nombre y no estoy orgullosa de eso.

Aceptamos preguntas, sugerencias, los insultos también pero no nos importan

Nos vemos el próximo capitulo