Siempre he pensado que cuando aparecía una pantalla en negro con las palabras Game Over significaba un largo descanso para meditar y volver a mi antigua vida como un personaje secundario de los que se encuentran merodeando por las ciudades y villas. Créanme, no es agradable despertarte un día y encontrarte como protagonista en una larga series de juegos que, cuyos nombres, preferiría olvidar.
Es una larga pesadilla saber que cuando estás empezando a dormirte un hombre con una larga bata que se hace llamar "Profesor" aparezca en tu sueño iluminado por un foco de luz. Lo sé, en sí no debería darme miedo, pero es en esos momentos cuando pierdo la memoria y no soy capaz de recordar ni siquiera mi nombre o sexo –es curioso, siempre he estado seguro que era un chico, pero siempre me quedo perplejo cuando me pregunta: "¿eres un chico o una chica?"- o el nombre de mi antiguo amigo y rival de la infancia. Y cuando ya has intentado recordar se produce un destello. Sí, ya sabes lo que significa, seguro que te ha pasado muchas veces. Te encuentras cegado y de repente te ves reducido de tamaño en un mundo en dos dimensiones donde no puedes hablar, aunque seas capaz de establecer un diálogo.
Y es en este preciso instante cuando te conviertes en un héroe cuyo destino está tan lejano y vago que siempre sabrás que nunca lo podrás completar: hazte con todos los pokemon, medallas y conviértete en el entrenador más fuerte. Tus pasos están controlados por una fuerza misteriosa que te obligan a desviarte continuamente de tu camino, ni te deja descansar en ningún momento. Después de caminar durante horas y días, encontrarme con personajes extravagantes que parecen no tener casa, y luchar contra otros entrenadores que, a mi juicio, no tienen conocimientos para combatir, llegas hasta el final. ¿Para luego qué? Para ver esa pantalla que te hace creer que por fin has cumplido tu misión y puedes descansar. ¡Ah, que equivocado estaba! Incluso sin nada que hacer, sigo estando como protagonista.
¿Sabes por qué te cuento este pesar, querido jugador? Serás lo último que leas en el preciso momento en que apagues la videoconsola. Disfruta de estos últimos segundos de lectura.
