"No puedes arreglar algo que ya está arruinado, es tan estúpido como tratar de unir un millón se pedazos juntos a pesar de que estos ya están rotos."

Kyle observaba cada movimiento del azabache sentado a su costado, Stan. Si bien era su mejor amigo, ellos dos habían tenido una grave disputa hace unas cuantas semanas, por lo cual Stan le mostraba indiferencia incomodando en más de una ocasión al judío.

-¡Ey, judío!- Kyle no volteó, ya había escuchado esa voz en alguna otra parte.

-¿¡Qué quieres, culón!?- respondió con un hilo de voz.

-Oh, ¿Acaso el maricón va a llorar?- el de pelo castaño, insinuó con un tono burlón y a la vez provocador.

-Hoy no estoy de humor- esas fueron las únicas palabras que Kyle pudo pronunciar antes de colocar su cara entre sus brazos.

-¿Es por el hippie de Stan?- preguntó con seriedad mientras se atragantaba con un pedazo de sándwich-Que patético.

-No es tu asunto, Cartman- musitó un poco irritado.

-Lo sé- respondió con la mirada hacia el techo colocando una de sus manos en la mesa del comedor.

Eric suspiró y se retiró del lugar, obviamente Kyle no se inmutó de eso. Minutos de silencio y el de cabellos rojos levantó su cabeza para confirmar si es que habría estado solo en esos minutos.

-¿E-Eric?- tartamudeó por un instante, para luego darse cuenta de que "El Culo Gordo" se había ido.

Kyle se dirigió hacia el patio notando que nadie se encontraba en ese sitio, colocó una de sus suaves manos en el bolsillo de su abrigo. Mierda, las clases ya habían terminado y él seguía en la jodida escuela, quizás Stan habría regresado con Kenny o con Wendy, "¿Por qué carajo me importa si ese desgraciado se haya ido con alguien?" Aturdido por esto, tan solo se sentó al costado de un enorme árbol. Cerró los ojos y se mordió la comisura de los labios en un intento de no llorar, claro que no pudo, es obvio que lloró cual magdalena.

-S-Stan- sollozó tras recordar cada detalle de aquella pelea.

"¿Kyle?" las voces seguían aunque el pelirrojo intentara pararlas "¿Qué quieres, Stan?" no había consuelo, detener sus recuerdos era nulo. "Wendy y yo volvimos a salir" gritos provenían de él, como si le hubieran clavado una espada en el pecho. "Stan, ¿No crees que te hace daño?, ella te hirió una vez y puede volver a hacerlo" El no quería seguir recordando, dolía, era como si recibiera una patada en los cojones. "No lo creo"

-Un mal sueño- una voz conocida interrumpió su sesión de dolor-¿No?

-¿Q-qué haces aquí, pendejo?- no quería que el gordo lo humillara, no de nuevo.

-Oh, ¿Eres un jodido masoquista para querer seguir con eso?- su voz estaba ronca, como si un tronco había pasado por su garganta.

-N-no, ¿Cómo mierda sabes?

-Instinto, judío- musitó un tanto cansado, para luego darle la mano a Kyle.

"Una nueva amistad se ha formado en pueblo South Park, dicen que antes se odiaban a muerte, pero ahora se cuidan como si fueran hermanos."

Las cosas siempre tienen un giro repentino ¿No?