Bueno… esta es mi primer fanfic con ayuda de mi amiga tere n.n, gracias OuO.
Bueno, perdon si cometi errores soy nueva en esto, amo los MxN por eso hice uno :B ajamm.. humo bueno

Los dejo leyendo, disfruten :3 (aclaraciones al final)


Legos Rojos.

La Brisa, los rechinidos de los muebles, los rayos de la luna pasando por los cristales de la ventana, todo eso era un impedimento para dormir. ''Near'' cansado de intentar conservar el sueño, dando vueltas a toda la cama, decide levantarse con una bolsa llena de legos dirigiéndose a la sala común…

En otra habitación había un chico. Un chico con sus cabelleras rojas despeinadas, pensando solo en pasar otro nivel de su juego de PSP.

-Si tan solo ese maldito de Roger no me hubiera obligado a dormir- dijo el mientras miraba su video juego sobre la mesa de noche.

Después de un tiempo de pensar sobre aquello y preocupado, el pelirrojo se coloco sus gogles, tomo su PSP y se dirigió a donde es la sala común de wammy's house.

Los dos, sucesores de L, huérfanos, cruzando los pasillos de toda la institución. Algo les preocupaba, no sabían muy bien que era, simplemente querían desahogarse en sus vicios. Caminando por los corredores, acelerando el paso por la falta de paciencia, el de cabellos blancos hacia lo mismo de siempre, tomaba con su mano derecha un mechón de pelo y hacia bucles con el. Mientras el pelirrojo encendía un cigarro, para después colocarlo en su boca.

Al tiempo de unos pasos, ya estaban en el lugar, observando completamente la sala desde los marcos de las puertas. Distraídos por lo diferente que se veía aquel lugar de noche no notaban la presencia del otro, estaban tan entretenidos en todas las cortinas rojas de seda que colgaban desde el techo y tocaban la alfombra de un color marrón, contemplaban los grandes vitrales que hacían que la sala se viera de divertidos colores, miraban los candelabros elegantes en el techo, y sin mencionar los grandes libreros. Colocado junto a estos estaba una chimenea, donde Roger contaba las historias de L y otras más a los niños para entretenerlos los días nevados y fríos.

-Olle…- Algo interrumpió los pensamientos de Near hacia el lugar. -¿Qué haces aquí?..

-…- El de pijama blanca ignoro completamente al del otro lado de la habitación. Solo se sentó en una esquina y comenzó a sacar unas piezas de su bolsa una por una.

Y así comenzó el silencio en aquel lugar. El pelirrojo jugaba con su videojuego. Mientras, Near armaba una torre, que si se calcula, serian de unos 13 centímetros de altura.

El mayor de aquella sala miraba al mas pequeño de reojo, de vez en cuando pausaba su juego para contemplar sus ojos grises que brillaban por la luz de Luna. Near sabia que lo había estado observando, no le molestaba. Siempre había sido así, nada le parecía importante.

El de los gogles estaba tan frustrado por no haber podido pasar el ultimo circuito del Need for Speed, así que decidió relajarse entablando una conversación con el pequeño albino... Definitivamente, la falta de sueño no le hacia bien. Decidió sentarse a su lado para poder hablar mejor.

-Hola…- El adicto a los videojuegos se veía algo nervioso, era de sospecharse. No tenia muchos amigos en wammy's house. Podría decirse que su mejor y único amigo era Mello, un sujeto casi de su edad, con un aspecto gótico y sombrío. De cabello rubio y ojos azules.

-…- No hubo respuesta alguna. Así, provocando otro silencio incomodo.

-¿Cómo te llamas?-. Matt pensó que no tenia caso hablar con alguien como el. Personas que no socializaban. En cuanto este estuvo apunto de colocar sus brazos para un impulso a levantarse, escucho una voz suave pronunciando palabras..

-Near-.

-Mucho gusto… Yo soy..-

-Tu eres Matt- contesto el albino antes de que su compañero diera su respuesta.

-¿sabes mi nombre?- Matt estaba algo asombrado. Algunos conocían como se llamaba, pero esos algunos… eran pocos.

-Si- contesto el de pelo blanco con sus mejillas un poco ruborizadas. El no se daba cuenta de ello, después de todo… estaba concentrado en su edificio. –Tu diste el discurso de año nuevo. Y tu también robaste dinero de Roger para comprar un juego-

Matt estaba algo sorprendido. Nadie supo que el fue quien robo él dinero de la cartera de el director, salvo Near.

-bien… y… ¿que haces?-

-construyo- Seco. Tan seco y frió es Near. Talvez por eso nadie hablaba con el, solamente el rubio mencionado antes. Aunque solo le dirigía la palabra para molestarle.

Matt tomo algo inseguro una pieza roja, era cuadrada y brillaba. La coloco gentilmente en una de las esquinas incompletas tratando de ayudar al pequeño.

-¿No tienes cosas que hacer?- Dijo Near algo enojado sin mirar a Matt y con su cabeza baja. El no necesitaba ayuda a armar sus edificios, el podía hacerlo solo.

-Pues.. realmente no.- El sujeto se acomodo estirando las piernas y recargándose sobre sus brazos cómodamente. –Pero me iré si eso quieres. No es mi intención molestarte-

No hubo respuesta de el menor. Era de esperarse, no había hablado mucho en toda su supuesta conversación. Pero Matt tomo ese silencio como un, Si. El pelirrojo se levanto, y se retiro de aquel cuarto con su PSP en mano. A unos pasos de la salida Matt vio de reojo a Near sobre su espalda.

-Que raro- se susurro a si mismo.

Near había escuchado perfectamente las palabras de Matt. Tenia buen oído, pero no le importo, el siguió con su edificio ya arruinado por el pelirrojo.

El chico que ya se había marchado, recobro el sueño. Lo único que quería hacer era volverse a dormir; al cabo no había terminado su juego debido a el pequeño que le llamaba la atención.

Matt, ya acostado en su cama, estaba cansado, no quería escuchar solamente que sus propios ronquidos. Aunque había algo que lo inquietaba, ese chico de cabello blanco, grande ojos de color gris, esas manos que se veían tan suaves, los labios rosas de aquel tal Near, era tan pequeño que le daban ganas de darle un beso en esas mejillas rosadas, no solo eso, también pensaba que detrás de esas grandes y arrugadas prendas, podría haber una figura tan suave y curveada que nadie se resistiría… ¿¡Pero que estaba pensando!? El no era así… pero, aquel niño se veía tan inocente. Tenia que.. pero no podría.. ¡No! De ninguna forma lo haría. Matt, ya adormilado pensó que no seria sano imaginar cosas tan sucias como aquellas. Por eso decidió recargar su cabeza en la almohada y dormir.

A la mañana siguiente, todos habían bajado a desayunar. Después de aquello, como de costumbre, los huérfanos tenían libertad de salir los fines de semana por la ciudad.

Matt, había notado algo extraño. Un lugar se encontraba vació en el comedor, tal vez un chico estaba enfermo, o había sido adoptado, también pudo escapar. Pero no habría razón para hacerlo, era un buen lugar. Aunque…

-Pensándolo bien. No eh visto al blanquito en toda la mañana-

-¿Dijiste algo?- dijo un rubio mordiendo una tableta de chocolate. Era Mello, el mejor amigo de matt.

-No…- había estado pensando en voz alta otra vez.

-Bien; acompáñame por mas chocolate. Los exámenes me ponen nervioso-

-Si…- Mientras tomaba un cigarrillo de su cajetilla y lo encendía.

Mientras estos caminaban por la acera, había una persona aun adentro. Este tenía aun sus pijamas, y se encontraba en la misma habitación en la que estaba la otra noche. Near, aun no acababa su torre, ahora estaba tan alta que tenia que subirse a un sillón para colocar más piezas. A unos cuantos centímetros de acabar su edificio, Roger entro por la puerta. Este estaba reprimiendo a Near porque jamás salía, talvez eso explicaba porque estaba tan pálido.

-Muchacho, tienes que salir. Convive con tus amigos- Decía el director de el lugar.

-No tengo amigos- Near continuaba con lo que hacia sin mirar al sujeto.

-Pues es tiempo de que hagas algunos. Sal a hacer amistades, y toma tu abrigo que esta helando afuera.-

-En un momento-

Roger ya cansado de insistir, salio de la habitación dejando solo al chico otra vez. Ero estaba pensó en hacer lo que le había indicado.

Tomo una capucha, obviamente blanca, y este salio afuera. Aun con sus pijamas, salio a dar una vuelta. No estaba acostumbrado a salir, y cuando lo hacia, solo se sentaba en una banca, ubicada en un parque enfrente de donde vivía. Para entretenerse se llevo un pequeño robot, no era mas grande que su mano, pero al menos serviría.

Cuando llego a su lugar preferido, se sentó a jugar. No prestaba a los demás compañeros que entraban a las tiendas de alrededor o que hacían deporte en la calle. El solo se concentraba en su pequeño robot.

Mientras Near seguía con su solitaria vida, los amigos seguían caminando por aquel lugar. Siempre juntos, algunos susurraban que parecían pareja, pero Mello siempre los hacia callar. Tenía poca paciencia. En lo que caminaban, conversaban de cualquier tontería que se les ocurriera.

-¿Alguna vez pensaste salir con una chica?- Dijo Matt mientras fumaba su cigarro.

-¿Por qué?-

-No lo se… Solo pregunto-

-Bueno- Termino la conversación con un largo silencio.

-¿Y con un chico?-

-¿¡Que cosas dices!? ¡No soy ningún raro!- Matt noto algo sonrojado al rubio. –Tal vez digan que parezco chica ¡Pero no es para exagerar idiota!.

-Lo siento. No quería ofenderte- Matt tomaba su cigarrillo con la mano y sacaba el humo de su boca.

-¡Pues piensa antes de preguntarme!. Y deja de fumar, es desagradable- Ya habían sido varias veces que se lo decía, pero jamás lo tomaba en cuenta.

Estaba comenzando a obscurecer. El pelirrojo y el rubio estaban en camino al orfanato, estos, habían pasado frente a Near. Como de costumbre se puso a discutir con el de pijamas un rato. Mello, al estar tan enojado, decide irse junto con su amigo dejando atrás al irritante blanquito.

-Mello- Dijo Matt mientras de detenía.

-¿Si?- Este paro a unos pasos de el mayor.

-Quiero fumarme otro antes de entrar.-

-De acuerdo, pero no te esperare.- Dijo el rubio mientras se marchaba. A Matt no le importaba regresar solo.

-Uno rápido y ya- Susurro este mientras buscaba algo en los bolsillos de su chaleco. -¡Mierda!- Había dejado tirar la cajetilla de cigarros. Tenia que encontrarla, era la ultima que le quedaba, y le era difícil conseguir mas, ya que Matt era menor de edad.

Busco desesperadamente por todo el lugar que había caminado, excepto en donde se encontraba Near. Así que volteo a la banca ocupada y… ¡Allí estaban! justamente enfrente de el pequeño. Decidió que ignoraría al menor por lo ocurrido la noche anterior. Se acerco, se agacho y tomo la caja medio vacía.

-Arruinaste mi torre- Solo se escucho una voz. La misma voz tan suave que Matt había escuchado era la de…

-Near- Dijo mientras se levantaba para ver desde arriba al chico. –No te había visto-

-Arruinaste mi torre- Seguía insistiendo.

-Si… Perdón por lo de ayer, solo quería ayudarte y charlar.-

-No lo haces muy bien.-

-Hice lo mejor que pude- Dijo mientras se sentaba y dejaba escapar una amable sonrisa. -¿Qué traes ahí?- Matt estaba señalando las manos de Near.

-Es un juguete-

-¿Qué juguete es?-

-Un robot-

-Que bien…- era la conversación mas larga que había tenido con el albino. No estaba mal para un comienzo.

-¿Por qué Mello me odia?- Dijo Near despreocupado mientras movía su juguete entre manos.

-No te odia… solo…-

-Solo no me quiere- La respuesta de el menor le había causado gracia al pelirrojo, haciendo que este soltara una risita.

-No, solo esta celoso-

-¿Celoso de que? No tengo nada importante que envidiar.-

-Pueees, siempre se queja de que lo superas en cualquier cosa.- Esa respuesta hizo que hubiera un corto silencio. Después de rato, Near hablo.

-Ya me boy.- Dijo mientras tomaba su muñeco y se levantaba de la banca. –Es tarde.

-Te acompaño.- Matt seguía con la idea de no molestarle volver solo. Pero quería ser cortes con el pequeño de ir a su lado.

En el camino, no dejaba de pensar su sueño de la otra noche después de encontrarse con el blanco. Fue todo tan claro..

Estaba solo en su habitación, al menos eso, después de escuchar a alguien entrar por la puerta… Era Near, el pequeño blanquito que habia conocido esa noche y no dejaba de pensar.

-Near… que… ¿que haces aquí?- Dijo Matt cubierto con sus sabanas.

No hubo respuesta. No era de esperarse una, con lo poco que había hablado aquel rato, al pelirrojo no le impresiono…

-Pero.. ¿¡Pero que haces!? ¡Basta!- Matt tartamudeaba, su respiración se acortaba, ¿Por qué?.

El mayor estaba debajo de el pequeño. Este se encontraba besándole en cuello descontroladamente. El pelirrojo no duro tiempo resistiéndose, ya que se dejo llevar por el momento. Al rato de varios besos por el cuerpo, Matt tomo la tersa cara de Near y comenzó a acariciarla mientras lo besaba salvajemente. Introducía su lengua y el chico hacia lo mismo, solo se escuchaba el ruido de sus gemidos y toqueteos. Los dos ya con los labios remojados y revolcándose por la cama, por fin, el mayor se encontraba encima de Near intentando desabrocharle los botones de su camisa blanca. Pasando los minutos, se encontraban ya casi desnudos, ambos en ropa interior. Continuaron con los rasguños y besos, ambos tenían una erección visible en la única prenda que traían puesta. Matt estaba besando el cuello del otro, bajando lentamente hacia su pecho y lamiéndole un pezón, continuo camino abajo hasta besar lo que era su ombligo, sin detenerse siguió y siguió hasta llegar a su ropa interior blanca, en la que se podía ver un bulto en ella. Con sus manos, tomo el elástico y comenzó a bajarlo. Entre mas bajaba mas se veía el miembro de Near…

-Olle..- Algo interrumpió su recuerdo.

-Uh ¿Qué que?-

-Llegamos- Dijo el menor de cabello blanco mientras entraba a wammy's house.

Matt finalmente entro después de ¨revisar¨ el trasero de Near mientras este caminaba. Solo se dirigió a su habitación, tomo su PSP, y comenzó a jugar recostado en su cama. Esa noche decidió no cenar, pensaba mejor relajarse y meditar aquel sueño que tuvo. Y con meditar no se refieria a pensarlo…


Aclaraciones: Lo que esta en letra italica (cursiva) es para el sueño de matt, queria hacerlo falshback pero tere me regaño xDu asi que lo hize como recuerdo :3

Bueno, si tengo reviews subire el proximo cap. :3

Comentarios, alabanzas, tomatasos, amenasas de muerte a familiares, felicitaciones.. lo que quieran en review n.n

karla_ si quieren conocerme . Gracias por su tiempo n.n