Capítulo 1:

Comenzaba un nuevo ciclo escolar en Hogwarts y los merodeadores iniciaban su cuarto año después de haber pasado unas vacaciones en la casa de James. Cuando ingresaron al Gran Comedor muchas chicas se empezaban a fijar en ellos y es que durante ese verano habían crecido más de lo que esperaban. Tanto Sirius como James pasaban por poco el metro setenta y Remus y Peter aunque se mantenían en el metro sesenta y algo se veían bien para su edad.

Sirius comenzaba a guiñar a muchas chicas que lo veían con ojos de admiración, James buscaba a su pelirroja con la mirada, pero cuando dio con ella, inmediatamente Lily giró su cabeza y le hizo una expresión de burla. Lo cual solo trajo burlas por parte de los otros tres chicos que presenciaron la escena.

-Para la próxima Jamie - le decía Sirius en tono de burla, mientras le daba palmadas en la espalda. Peter y Remus solo atinaban a reírse e imitar la acción provocando molestia en James.

-Ya verán cuando los dejen en ridículos a ustedes - dijo fastidiado.

-No creo que pase James, nosotros sí tenemos sentido común y no iríamos tras una imposible - le responde Remus ya dejando de reír.

Una vez tomaron asiento debido a una mirada de enojo de la profesora McGonaggall que ya iba a ingresar con los de primero.

Cuando terminó el banquete y después de seguir haciendo bulla hasta tarde decidieron que era hora de dormir, pero una vez tanto Sirius como Remus cayeron rendidos, los otros dos merodeadores se habían dispuesto a salir e ir a la sala común.

-¿Te has dado cuenta de eso cierto Peter? - preguntaba el de gafas una vez se habían sentado en los sillones cerca a la chimenea.

-La reacción de Remus ante lo que hacía Sirius en el comedor, era muy obvio - respondió mientras se recostaba más en el sillón.

-Están así desde verano, pero no hacen nada.

-Se mandan indirectas, pero el otro no se da cuenta, ¿qué debemos hacer? - le pregunta Peter a James, el cual se había puesto en una posición pensativa.

-Debemos sí o sí ayudarles dándoles un empujón, pero no tengo idea de cómo.

-Sería cuestión de analizarlos lo que queda de esta semana para así poder tomar una decisión.

-Tienes razón, pero hay que sacarles información a cada uno, yo persuadiré a Sirius en clases de Adivinación que es donde estamos los dos solos, y tú haz lo mismo con Remus en Runas Antiguas que es la que comparten ustedes, se mas hará fácil considerando el hecho de que Sirius me cuenta todo.

-Excepto esto - le recuerda Peter.

-Lo más probable es que se sienta avergonzado por tirar para el otro bando, uno no sabe, solo debemos ayudar a ambos, ¿está bien?

Peter asiente y deciden que era momento de irse a dormir ellos también.

Al día siguiente todo fluyó normal, fastidiar Slytherins, sacar de sus casillas a la proesora McGonaggall y planear nuevas bromas, pero toda la normalidad terminó cuando una chica se acercó a ellos, precisamente a Sirius. Peter inmediatamente se dio cuenta de la mirada de desprecio que le dedicó Remus a la chica, que a pesar de nos notoria, el conocerlo por tres años le permitía reconocer esa expresión.

Sirius como siempre caballeroso con las mujeres se levantó y siguió a la chica a donde ella le indicaba y con decir ya vuelvo se despidió.

El ambiente se tensó gracias al mal humor que se había generado en Remus y sumando a eso que, en unos días habría luna llena, hacía más pesada la carga.

James inmediatamente cambió de tema y empezó a hostigar a Remus sobre canciones de los Beatles y es que en dicho verano que pasaron junto habían empezado todos a escuchar sus canciones.

Remus olvidándose del otro tema empezó a contarles más sobre el grupo, considerando el hecho de que él sabía más de eso, calmando de esa forma el ambiente. Peter y James suspiraron internamente debido a eso.

Cuando llegó Sirius, tenía una gran sonrisa en el rostro y sabían que en cualquier momento les diría el por qué, pero no ahí.

Cuando estaban en su habitación fue que Sirius con una sonrisa más grande que la anterior gritó.

-¡TENGO NOVIA!

Eso solo generó una tensión más grande que la que había dejado al irse con la chica esa. Las expresiones de confusión por parte de James y Peter eran monumentales y ni que decir de la cara de enojo mal camuflado de Remus.

-¡Pero si ni siquiera la conoces! - gritó sin contenerse.

Eso solo provocó que todas las miradas que estaban puestas sobre Sirius se lanzasen sobre él.

-¿Y eso importa acaso? - preguntó Sirius aún sin quitar su expresión risueña de su rostro y es que para él, que ya tenía sabido del atractivo con el que contaba, era una hazaña tener ya a una chica a sus pies.

-¡Claro que importa, eso no será una relación normal! - respondió Remus otra ve alzando la voz y provocando que la sonrisa en el rostro de Sirius se transformará gradualmente en una mueca de fastidio.

-Somos jóvenes no estamos para tomarnos nada en serio - le respondió acercándose hacía la posición del joven licántropo.

Peter hizo un sonido de angustia e inmediatamente miró a James para que tratara de calmar la situación, James asintió y se puso inmediatamente entre los otros dos.

-Eeeh vamos chicos no es para que se molesten - dijo en tono gentil - por cierto felicidades Sirius por ser el más precoz - en un tono burlón lo último mientras le sacudía el cabello y le lanzaba una mirada a Peter para que se encargue de Remus.

-Remus vamos por algo a las cocinas que durante la cena no pude comer mucho -le pide Peter poniendo su mejor cara de cachorro obteniendo un asentimiento por parte del otro, dejando inmediatamente el cuarto.

Los dos morenos se mantuvieron en un silencio algo incómodo el cual fue roto por James.

-¿Por qué haces esto?

-¿Hacer qué? - le responde Sirius sin quitar su cara de fastidio y sentándose en su cama - ya se parecen a mi madre criticando lo que hago.

-Pero es que está mal lo que estás haciendo - le dice James - estás jugando lo más probable con los sentimientos de esa chica, a la cual ni conoces solo por diversión.

-No tengo nada mejor que hacer.

-Sí, sí tienes, no seas necio que me he dado cuenta - dijo James decidido a sacarle toda la información que necesitaba para comenzar su plan.

En las cocinas Remus y Peter se encontraban comiendo algo de chocolate, Peter consideró necesario hacer que su amigo consumiera su preciado vicio para disipar la tensión generada por culpa de Sirius, ya había pasado una media hora y consideraba correcto empezar a bombardearlo con preguntas.

-¿Por qué te interesa tanto que Sirius tenga pareja? - preguntó como quien no quiere la cosa, provocando que Remus se atorara y empezara a toser sonrojándose en el proceso.

-No me interesa - dijo tratando de desviar el tema, pero Peter estaba empecinado en hacerlo decir lo que quería escuchar.

-Eso no es lo que reflejas - contratacó, Remus solo empezó a comer de manera más tosca su preciado chocolate, mientras trataba de ignorar el dolor que estaba sintiendo en su pecho.

-No es cierto, en serio no me interesa lo que haga ese idiota.

-Ahora lo llamas idiota. Admite que te interesa de alguna manera lo que hace, después de todo es su vida, no sé por qué ponerle peros para que no haga lo que quiere -siguió diciendo Peter.

-Es que no está bien lo que está haciendo, va a jugar con los sentimientos de alguien.

-Pero si a ti no te interesa lo que le pase a la chica, no te cae bien, se nota - al decir eso Peter un trozo de chocolate salió volando de la mano de Remus debido a la presión que había mantenido sobre él, eso provocó que Peter sonriera victorioso - ¿te gusta Sirius cierto? - se arriesgó preguntar obteniendo una mirada llorosa por parte de su amigo, por lo que se acercó a él y lo abrazó, ya que él sabía lo que se sentía amar a alguien y sentir que a este no le importas.

A diferencia de Peter, James solo recibió un puñetazo por parte de Sirius y terminó peleándose con su hermano del alma, todo por según Sirius haberlo llamado homosexual.

James admite que fue muy directo con la pregunta, pero no esperaba dicha reacción. Estaba enojado, uno porque eso demostraba que Sirius no confiaba en él y dos por el dolor que estaba incrementando. Tuvo que salir del cuarto y se acostó en uno de los sillones enfurruñado, su enojo era tal que espantó a unos chicos de primero que temían acercarse a él.

Cuando escuchó la puerta de la sala común abrirse vio como Remus subía a toda velocidad a la habitación y vio que Peter iba en el mismo camino, pero él fue más rápido y lo detuvo antes de que suba, pero sin querer le jaló con mucha fuerza el brazo provocando que este se tropezara por lo que lo tuvo que atraparlo rápido.

Lo que no esperó fue caerse también. Genial otro dolor a parte del de su ojo.

-Ah lo siento - dijo con pesar debido a que su espalda le dolía, lo que no esperó era tener el rostro de Peter tan cerca suyo lo que provocó que se sonrojara rápido e inmediatamente se parara ayudando también a Peter que, también con un sonrojo en el rostro, lo miró sorprendido.

-¿Fue Sirius? -preguntó y él asintió - te fue demasiado mal - le dice mientras acaricia sin querer la zona golpeada - lo siento, será mejor que se te cure eso, vamos a la enfermería.

Camino a la enfermería James decidió preguntarle cómo le había ido con Remus.

-Me fue bien, admitió que le gusta Sirius, pero se puso demasiado sensible. Me sentí mal por eso.

-Pero eso es un gran paso que ya hemos hecho - le recalca James - aunque yo aún no avanzo nada con Sirius y solo recibí un puñetazo

-El cual puede ser de frustración por sentirse descubierto - le interrumpe Peter.

-Será mejor hacer que pase un poco más de tiempo - sugiere James dando por terminada esa conversación.

Pasó el mes de setiembre y todo iba de mal en peor desde la perspectiva de James y Peter, la tensión entre Sirius y Remus era mayor y esto debido a que el moreno pasaba más tiempo con su novia que con ellos.

Peter había empezado a hablar más con Remus y de esa forma obtenía información que les podía servir a James y a él para persuadir a Sirius para juntarse con Remus, pero las circunstancias no lo permitían.

-Me fastidia todo esto - dice James con molestia mientras se sentaba en su cama - de seguir así le tendremos que decir adiós a nuestra broma de Halloween - y con eso comenzó su drama por faltas de bromas.

-Te doy la razón, Sirius está a cada rato con esa chica que hasta incluso se olvidó de nosotros y Remus anda desganado - concuerda Peter con él, mientras que hacía el ensayo de Encantamientos que tenía que presentar en unos días.

-No sé qué hacer, Sirius ni siquiera me habla y se supone es mi mejor amigo - se quejaba nuevamente James.

-Ya se le pasará, como tú dijiste hay que darle tiempo - le recuerda Peter.

-Tienes razón, pero espero que la situación no empeore.