Rose Weasley tiene muchas cosas que molestan en sobremanera a Scorpius Malfoy.
Aunque, tal vez, lo más molesto de ella, físicamente hablando, sean sus pecas.
Posiblemente, Rose Weasley no sea consciente de lo molestas que estas pequeñas manchitas llegan a ser para Scorp.
Y es que cada vez que el rubio se sienta al lado de la pelirroja en clase, no puede evitar contarlas. Probablemente Rose desconozca este detalle, pero tiene en total 58 pecas, distribuidas uniformemente entre sus dos pómulos y el puente de su nariz.
25 en el lado izquierdo de su cara, 27 en el derecho, y seis repartidas de forma irregular por su respingona nariz.
Los dientes de Rose también son una fuente de problemas para el Slytherin. Son blancos y regulares, pero sus dos paletas son, tal vez, demasiado grandes para su boca, lo que muchas veces ha provocado que muchos alumnos (especialmente de la casa Slytherin) la hayan llamado conejo. Para Scorpius en cambio, lso dientes de Rose la hacen tener una expresión entre maliciosa y simpática, y cuando la Gryffindor le sonríe ( una vez al año, más o menos) Scorpius se sonroja y no puede evitar tartamudear, lo cual lo hace ver ridículo, lo cual nos lleva a la razón directa del odio del rubio hacia la sonrisa de la Weasley: los Malfoy NO tartamudean, ni hacen nada que les pueda hacer verse ridículos.
Aún así y a pesar de su nerviosismo, Malfoy comparte con todos los alumnos de Hogwarts la misma apreciación. Rose Weasley no es bonita, pues unidos a los defectos mencionados anteriormente, se puede señalar que la pelirroja es además larga y flacucha, y que su pelo pelirrojo es rebelde e imposible de domar, terriblemente rizado y encrespado.
En cuanto a lo demás, Scorp admite que sus ojos están bien. Son grandes, azules, y sus pestañas, aunque translúcidas, son largas y espesas.
A pesar de todo ello y que, desde luego, el físico de Rose, es como se ha mencionado anteriormente, terriblemente vulgar, a Scorp le sudan las manos cuando ella está cerca, y ha observado que esos ojos azules son, probablemente, los más bonitos que ha visto en su vida.
También ha determinado que su pelo tiene un divertido y agradable tono rojizo cuando le da el sol, y tras un accidental choque en la clase de Herbología, puede atestiguar que pese a estar encrespado, es agradablemente suave, y huele a lavanda y bergamota, la combinación de olores más agradable que la nariz de Scorpius ha podido oler jamás.
Al rubio también le agrada que Rose sea alta, pues tras tener que esconderse de Filch una noche especialmente movidita, se dio cuenta de que la Gryffindor encaja en sus brazos perfectamente. Que sea tan delgada no le preocupa demasiado. Ya engordará con el tiempo.
Por último, Scorpius ha reconocido que sus pecas parecen pequeños mordiscos de hada, y Scorpius se pregunta muchas veces como será besar cada uno de esos puntos marrones.
De esto, por supuesto, Rose no sabe nada, y Scorpius tampoco le da demasiada importancia. Al fin y al cabo, o es como si Rose Weasley le gustara ¿verdad? .
