Cielo

Hikaru Hoshi

1

Cielo azul, al medio día.

Contempló nuevamente la nube blanca que se deslizaba sobre un inmenso cielo azul. Recordando viejas memorias del pasado, que acudían presurosas al encuentro que se avecinaba dentro de su cabeza.

Recordando viejos eventos.

Recordando viejos sentimientos.

Recordando…

Un suspiro, un lento suspiro que salió de sus labios levemente. Miro con renovada atención la nueva nube que se unía a otra, únicas en el cielo. Las memorias pueden contener buenas cosas, realmente alegres, que te pueden hacer reír nuevamente después de muchos años de haber ocurrido. Y cosas tristes, que cargaras contigo siempre. Por que han sido cosas que te han marcado con una seña invisible para muchos, para los que no sepan de tu historia. Y para Yoh, solo Anna conocía su señal.

Y volvió a recordar, un día hace muchos años, con un cielo azul igual de intenso al que veía ahora, estando con Anna al medio día…

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Dio un bocado a su bola de arroz felizmente, disfrutando plenamente de la hora del almuerzo, único descanso que tendría hasta la tarde, del entrenamiento que le imponía su abuelo, en una parte desierta de la enorme mansión donde antes habían habitado muchos aprendices de shaman como el y disfrutando de la compañía silenciosa de una pequeña rubia…

Miro de reojo a la niña que lo acompañaba, comiendo su propio almuerzo, hacia algunos días que le había pedido almorzar con el, por que nunca le había gustado comer solo, y ella solamente le había dado un seco movimiento de cabeza, asintiendo.

Habían pasado dos días desde eso, y ella no había pronunciado palabra alguna.

Como una persona podía permanecer callada tanto tiempo, intrigaba a su pequeña mente de sobremanera. Después de entrenar, habían acordado (Yoh lo había sugerido), encontrarse en la cocina, donde la señora Keiko les preparaba el almuerzo, ayudada siempre por la pequeña Tamao, que agachaba la cabeza desde que entraban a la cocina, y bueno… no la había visto con la cabeza alzada en mucho tiempo.

Volvió a darle un mordisco a su comida, pensando en un tema en el que Anna accediera a hablar. La música estaba descartada, por que ella tiraría por su lado y el por el suyo, Ayawa o Bob. No, quería algo más ameno, y preguntarle sobre el clima seria tonto, por que ni a él mismo le interesaba, y ella solo se encogería de hombros, desinteresada. No, aquí tenía que encontrar algo que la hiciera hablar.

Pero antes de llegar a alguna solución, una suave pero firme voz lo saco de su repentino ensimismamiento.

-¿Qué te parece nuestro compromiso?-

Miro a Anna, con un poco de asombro, observándola fijamente a los ojos, nunca se hubiera imaginado que ella le preguntara algo.

¿Qué pensaba de su compromiso?, bueno, nada a decir verdad, pero si quería hablar con ella esa no seria una buena respuesta.

No una muy inteligente al menos.

Miro de nuevo el cielo azul del medio día. Pensando. ¿Qué pensaba de su compromiso? No le molestaba, definitivamente, Anna le producía sensaciones que no sentía con ninguna otra niña, ni con Tamao, que era como tener una hermana. Anna le producía el deseo de mirarla siempre, y lo hacia siempre que podía, viéndola caminar por los vacios pasillos, produciendo un leve eco al caminar, con el corto cabello rubio ondulándose levemente con cada paso. Viéndola sentada durante horas, rezando un rosario interminable, y viéndola devorar galletas de arroz que tomaba de la despensa y siempre se comía de camino a su habitación.

Yoh también se sorprendía de comprobar todo lo que podía realmente observar a una persona.

Con Anna todo era diferente, y con un año estando comprometidos, simplemente ya no se hacia a la idea de pasar el resto de su vida con alguien más, alguien que no fuera Annita.

La miro nuevamente y vio que ella se estaba cansando de esperar una respuesta. Que ella se molestara por que el no contestara cuando ella nunca lo hacia, le arranco una sonrisa de la cara antes de contestar:

-Me parece excelente, Annita- y con esto volvió a morder lo que quedaba de su bola de arroz, sin dejar de observarla. Y vio como sus pálidas mejillas tomaban un poco de color, para después apartar la vista de la suya.

-Ah…-

-¿Y a ti?- pregunto, expectante por oír una respuesta de ella, por seguir escuchando su voz.

-…-

-Recuerda que esto es entre dos, vamos, dime que piensas- la animó, sabiendo que Anna era muy reservada, pero si ella había preguntado, tal vez era por algo.

-Me importa lo que te importe a ti- respondió finalmente.-Por que quiero ser parte de tu vida…- no había alzado la vista para verlo, e Yoh prefirió ver el cielo, para no abochornarla más.

-Me alegra oírte decir eso- respondió sonrojado, ser románticos no estaba en la naturaleza de ninguno de los dos.

-Y…-

La miro de reojo.

-Y…Yo ya no veo mi vida sin ti.-Yoh volvió a agachar la cabeza sonrojado.

-Por que me llenaras de lujos y comodidades- declaro al final e Yoh sonrió levemente.

-Ji ji, bueno…mi abuelo me regañara si no vuelvo pronto- dijo levantándose del suave césped en donde había transcurrido su almuerzo.

-…- Anna seguía mirando al frente, pero Yoh sabia que no estaba molesta por el cambio de tema.

-Vamos, te acompaño- le tendió su mano, sin esperar realmente ofenderse si ella decidía no aceptarla, pero este día era de buena suerte y Anna levanto su mano lentamente hasta que sus dedos se toparon y el la ayudo a levantarse agarrando su mano firmemente.

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Miro su mano derecha, donde hacia tanto tiempo había estado la mano de Anna.

Y Anna, que lo estaba observando desde hacia rato, se daba una idea de lo que pasaba por su mente y sonrió. Camino hasta donde su prometido estaba acostado en el césped, debajo del árbol en el cementerio, como era su costumbre y le dio un leve puntapié en la pierna para que dejara su ensoñación.

-Ya es tarde- dijo con su voz fría, monótona e inexpresiva y dio media vuelta para regresar a la Pensión, cuando sintió un leve agarre en su mano izquierda, levanto para encontrarse con la sonrisa de Yoh.

-Si, no queremos que mi abuelo nos regañe.- y emprendieron juntos el camino de vuelta a casa, de nuevo tomados de la mano, de nuevo pensando que nunca estarían solos mientras estuvieran uno con el otro, y siempre bajo un extenso cielo azul.

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Holaaa!

Bueno aquí trayéndoles un nuevo fic, también como mi resurgimiento xD

Ya prometo actualizar todo lo demás!! No desesperen, (claro -.-U) y espero algunos reviews! 

También subo esto por la escasez de Yoh/Anna que hay, como decía Hikaru xDD

Bueno algunos datos de este fic:

En este episodio tienen alrededor de once años, por que en el manga se comprometen cuando tienen 10, con lo del onii y todo eso xDD o algo así jaja

Este es de los capítulos mas tiernos P

También para este capitulo use una de las ideas de Takei (levemente) en la que Amidamaru decide asustar a Yoh y a Anna pero al ver que van agarrados de la mano no se atreve, y me gusto para ponerse de final a este fic, como dije, levemente xDD

Va a tener 4 episodios, que ya estoy terminando, y no todos son recuerdos, como este. Ni tienen la misma edad en alguno de los capítulos :P pero eso lo dejare a su elección.

Bueno los dejare ya para que lean algo más xDD

Besitos a Momo y a Karlangas!! Que las quiero mucho y les dedico este fic!! 

Ya saben Reviews!! xDD