Capitulo 1: Reencuentro.
La mañana llegaba y el ruido del despertador le informó de un nuevo día. Con mucha pereza se levantó y lo apagó. Tras unos momentos de relax, se levantó de la cama y fue hacia el baño, para despejarse y darse una ducha. Miró su rostro en el espejo, y pudo ver como una chica morena y con grandes ojos marrones de 23 años la miraba con una sonrisa en la cara. Aquel día era especial, estaba de vacaciones, y están iban a ser especiales. Tras unos años de solo contacto por teléfono e internet, volvería a ver a sus compañeros del host club.
Y es que ya habían pasado unos años en los que dejara la academia Ouran y fuera a la universidad, para licenciarse en Derecho, como siempre había querido. Sabía que sus antiguos compañeros habían hecho sus vidas y logrado sus metas, cosa que la alegraba mucho. Ella había logrado su sueño de ser abogada, y salió de la facultad con las máximas notas, por lo que consiguió trabajo muy rápido en un bufete de abogados de la ciudad.
Y tras tantos años, los volvería a ver. Tenía que admitir que los echaba de menos, no podía negarlo. Siempre tuvo más contacto con los gemelos, ya que en más de una ocasión la elegían para que llevara sus diseños en alguna que otra ocasión y siempre la llevaban a las fiestas que organizaban. Si, eran diseñadores y de los buenos. A ellos eran los únicos que veía muy de vez en cuando. De los demás, solo llamadas o cartas, cosa que la entristecía un poco, ya que le hubiera gustado mantener el contacto más a menudo con algún que otro host, aunque nunca lo admitiría en público.
De Tamaki, sabía que se había hecho cargo de la empresa de su padre, aunque su abuela se negara al principio, luego lo acepto al ver que era capaz de llevarla al frente, aunque de personalidad, por como hablaba con ella, no había cambiado mucho. Kyouya estaba también al frente de los hospitales de la familia Ootori, ya que su padre se había dado cuenta de la capacidad de su hijo para los negocios, dando a sus hijos mayores otra clase de cargos en distintos países. Honey se encargaba de la preparación de soldados para la guerra, aunque no participaba en ellas, solo instruía, ya que su familia no quería verlo en el frente. Tenía también un dojo junto a su primo, Mori, en el que daban clases de artes marciales y kendo a niños. Aparte, nadie sabía a qué más se dedicaba Mori, ya que nunca lo había mencionado.
Definitivamente, tenía ganas de estas vacaciones, había trabajado durante un año sin parar, hasta su jefe le dijo que se merecía unas largas vacaciones por su duro esfuerzo. De dio una ducha y se vistió, mientras escuchaba algo de música en la radio. Miró su maleta y se cercioró de que no le faltaba nada. No sabía dónde iba a ir, ya que había sido algo planeado por los chicos sin decirle nada, como en los viejos tiempos, aunque si le habían dicho que haría buen tiempo y llegara ropa ligera y de baño.
Así que metió su ropa de verano en la maleta, junto con algunos bikinis y algún que otro vestido de fiesta de los gemelos, ya que eran capaces de llevarla a algún sitio que requiriera etiqueta. Preparó su cartera y pasaporte, por si acaso.
En estos años, esa conciencia de género de la que carecía en su época de instituto había desaparecido, y se daba cuenta de las sensaciones de causaba a sus amigos. Se podría decir que en estos momentos era más femenina, y se cuidaba más. Así como su cuerpo también
había cambiado, proporcionándole curvas de mujer, y su cabello largo hasta la mitad de la espalda y cortado en capas, con muchas ondulaciones en su pelo. En general, se había vuelto una mujer de gran belleza.
Para ir de viaje, optó por ropa sencilla, no como los trajes de chaqueta que tenía que llevar normalmente al trabajo. Se puso unos pantalones negros anchos a la cadera y una camiseta de tirantas azul oscura. Sencillo y cómodo para viajar, además de que quería vestirse más juvenil de que costumbre, ya que no tenia ocasión normalmente.
Miró su reloj y vio que faltaban escasos cinco minutos para que la recogieran los gemelos, que habían insistido en ir a por ella. Revisó de última hora su equipaje y cogió un par de libros de lectura que había comprado el día anterior de su autor favorito, Moruniko Tayiko. Sabía que era un seudónimo, como dijeron en las noticias al salir a la venta su último libro, que ella ya tenía, al ser muy conocido, pero por lo visto, no quería que se supiera su verdadero nombre. Sus libros siempre eran de historias antiguas, que a ella le encantaban y los tenía todos.
Un sonido la sacó de sus pensamientos. Su móvil sonaba y era Kaoru.
¡Hola Kaoru! – dijo la chica con alegría.
Buenas Haruhi, ¿estás lista? –
Si, ahora mismo bajo – dijo ella, mientras cogía las llaves de su piso y despedía a sus padres en el altar. Si, Ranka-san había muerto hacia un par de años por una enfermedad, y aunque le había costado superarlo, ahora estaba mejor, además de que le había dicho a su padre que sonreiría por él.
Cogió su maleta y salió. Su casa ya no era igual que antes. Vivía en el mismo lugar, pero ahora eran unos edificios altos y ella vivía en el tercero. Una casa sencilla para una chica sencilla y con un sueldo normal. Bajo en el ascensor con la maleta y el bolso de mano. Salió a la calle y vio la limusina de sus amigos, los cuales salieron del vehículo en cuanto ella salió del edificio para saludarla y darle los acostumbrados abrazos asfixiantes.
¡Chicos! – dijo ella con alegría cuando los vio y los abrazó – Yo también me alegro de veros, pero no hace falta que me dejéis sin oxígeno –
Haruhi, hacia un año que no nos veíamos – dijo Kaoru, mientras no la soltaba.
Si, un año sin poder disfrutar de tu compañía – siguió Hikaru, quien tampoco la soltaba por nada en el mundo.
¡Vaya Haruhi! No sabía que tenías amigos tan guapos – dijo una voz de mujer desconocida. Haruhi se giró, y vio que era su vecina, Anoka Ayame, y también buena amiga.
¡Ayame! – Dijo Haruhi mientras iba a saludarla un momento - ¿Qué tal el viaje? –
Bien, bien, pero presenta a esos chicos – dijo ella con una sonrisa.
Hikaru, Kaoru – los chicos fueron hacia donde estaban las chicas – Os presento a Anoka Ayame, mi vecina y amiga desde hace unos años –
Es un placer – dijeron al unísono los gemelos mientras le besaban las manos.
Vaya Haruhi, no sabía que conocías a chicos así –
Son del instituto, ya te conté –
¿Estos son los gemelos del Host Club? – Haruhi asintió – Vaya, Haruhi me ha hablado de vuestro club, ya tenía ganas de conoceros –
¿Haruhi ha hablado de nosotros? – dijeron pícaramente los chicos.
Le he hablado de todos – dijo Haruhi.
Bueno, ha sido un placer, supongo que te ibas de vacaciones, ¿no? –
Así es –
¡Pues pásalo muy bien! – dijo Ayame mientras se despedía de la chica – Y a vosotros, ¡espero veros más a menudo! – dijo mientras se despedía de los gemelos.
Claro – dijo Kaoru con una sonrisa.
Bueno, vámonos que no llegamos – dijo Hikaru, sacando de su ensoñación a Kaoru.
Se montaron en la limusina mientras Ayame los despedía con la mano. Haruhi estaba contenta, ya que se iba de vacaciones con todos sus amigos de instituto, ya que hacía mucho que no los veía, si exceptuamos a los gemelos que ahora la acompañaban. En ese momento, la duda surgió en ella, ya que aun no sabía donde irían.
Etto, ¿Hikaru, Kaoru? – Dijo la chica, y ambos se giraron para verla - ¿Dónde vamos a ir estos 15 días? –
¿No te lo han dicho aun? – dijo Kaoru, con sorpresa.
No, el último con el que hablé fue con Tamaki ayer, y me dijo que llevara ropa ligera y de baño, pero no me dijo donde iríamos –
Vaya, pues pensaba que ya te lo habrían dicho – dijo Hikaru, mientras su hermano asentía con la cabeza como diciendo "eso, eso".
¿Y dónde vamos? – dijo ella, ya con impaciencia.
Los gemelos se miraron, y luego dijeron que aun no dirían nada, ya que sería una sorpresa. Ella intentó por todos los medios sacarles información, y solo consiguió que dijeran que iban hacia el aeropuerto, y en ese momento, ella agradeció el llevar el pasaporte a mano.
¿Y es un viaje largo? – dijo la chica.
Pues… - dijo Kaoru, pensando si decirle o no – Digamos que sí, es algo largo –
Pues entonces menos mal que traigo algo para entretenerme –
¿Cómo? ¿No nos vas a hacer caso durante el viaje? – dijeron a la vez, simulando enfado.
Claro que sí, pero si es muy largo, en algún momento querré relajarme un poco leyendo – dijo ella mientras les enseñaba el libro que tenía.
Está bien – dijo Hikaru
¿Y con qué compañía volamos? – dijo ella, imaginando lo que les habría costado el billete de avión y pensando en lo que tendría que pagarles.
¿Compañía? Vamos en el avión de Kyouya – dijo Kaoru, como si fuera lo más normal del mundo.
¿Kyouya tiene un avión privado? – dijo Haruhi sorprendida.
Siguieron hablando hasta que llegaron al aeropuerto internacional de Tokio. Allí esperaron un poco en una sala especial que Kyouya había reservado para cuando fueran llegando sus amigos, así que fueron hacia allí. Les ofrecieron algo de tomar, pero Haruhi lo rechazó diciendo que había desayunado hacía poco tiempo y que por ahora no tenía ganas de tomar nada. Siguieron hablando, hasta que uno de los host hizo su aparición, más concretamente, el host indiferente.
Buenos días amigos –
¡Kyouya! Que de tiempo – dijeron los gemelos, lanzándose casi a saludar al joven.
Kyouya estaba cambiado. Sus 24 años le sentaban de maravilla, a ojos de Haruhi. Lucía como siempre, serio y formal, pero estaba aun mas apuesto que en época de instituto, además de tener ahora la responsabilidad de los hospitales de la familia. Iba con unos vaqueros oscuros y una camisa de color azul claro, con algunos botones de arriba abiertos y, como siempre, con sus gafas.
Hola Kyouya – dijo Haruhi, y el chico se giró para ver a la chica, la cual también había cambiado.
Haruhi – dijo el chico mientras cogía su mano y la besaba con elegancia, cosa que arrancó una sonrisa a la chica – Has cambiado mucho, estas más bella –
Vaya, gracias Kyouya – aquel comentario había hecho que la cara de Haruhi se sonrojara, ya que cualquiera en su situación lo habría hecho.
Chicos, voy a ver si todo está en orden, ahora vuelvo. Los demás no deben tardar – dijo el chico, mientras se iba para hablar con su piloto.
Así que se volvieron a quedar los tres solos, mientras esperaban al resto del club. El siguiente fue el host de tipo Loli-shota.
¡Honey! – dijeron los gemelos, mientras lo saludaban.
Honey también había cambiado bastante, pues había crecido y ya se le veía mas adulto, con sus 25 años, aunque en su rostro aun tenia algunos rasgos de su forma de ser inocente. Se acercó a Haruhi para saludarla, dándole un abrazo.
¡Haruhi! – A la chica le resultó raro que no dijera "Haru-chan" - ¿Cómo has estado? –
Bien, Honey, ¿te seguimos llamando así o prefieres por tu nombre? –
Llamarme durante estas vacaciones Honey, para recordar el instituto –
Honey, ¿y Mori? – dijo Kaoru, y todos se dieron cuenta de que venía solo.
Hable con él ayer y me dijo que vendría desde su casa –
¿Ya no estáis juntos siempre? – dijo Hikaru.
No, aunque seguimos teniendo mucha relación, le quitamos el peso de protegerme, así que hace su vida, ¡aunque al principio le costó! – dijo con gracia y todos rieron un poco ante semejante comentario.
Siguieron charlando, poniéndose al corriente de todo. Llegó Kyouya, para decirles que todo estaba en orden. Haruhi intentó que le dijeran a donde iban, pero ninguno dijo nada, ya que era una sorpresa. Al poco rato llegó el host principesco.
¡Hola mis niños! – dijo Tamaki, mientras iba para abrazarlos a todos.
Este no había cambiado nada. A pesar de estar al frente de una empresa, seguía siendo el tipo que dramatiza y exagera las cosas, si bien físicamente ya estaba más maduro. Abrazo a todos los allí presentes, menos a Kyouya, quien le lanzó una mirada de "atrévete y verás", y casi asfixia a Haruhi, pero ella le pellizcó la mano para que dejara su abrazo, ya que se estaba ahogando.
Estuvieron allí hasta que llego el último host, el tipo salvaje.
¡Takashi! – dijo Honey alegremente mientras lo abrazaba.
Hola Mitsukuni – dijo mientras saludaba a su primo. Luego fue saludando a los demás.
Mori había cambiado, como todos. Ahora, a sus 25 años, se le veía más maduro que nunca, y físicamente, se podía ver que estaba en buena forma. La ropa que llevaba era casual, y en su rostro podía verse la sombra de una barba, así como su pelo estaba ahora más largo que antaño. Mori fue saludando a todos los que estaban allí, y se sorprendió al ver a Haruhi tan cambiada, como todos los demás al verla.
Bueno, vamos todos al avión – dijo Kyouya, mientras todos cogían sus cosas de mano y se disponían a subir al avión privado de Kyouya. Las maletas ya estaban dentro.
¿A dónde vamos? – preguntó inocentemente Haruhi, esperando que alguno dijera algo o se le escapara, pero nuevamente sus planes fueron frustrados.
¡Es una sorpresa! – dijeron los gemelos y Tamaki a la vez, mientras los demás sonreían, en especial un host, que miraba disimuladamente a Haruhi.
"A cambiado tanto físicamente, está más bella que antes, aunque no ha cambiado su forma de ser", pensó para sí mismo el host.
Haruhi estaba feliz. Al fin se había reencontrado con sus amigos de instituto, y estaban muy cambiados físicamente, aunque por dentro seguían siendo igual que antes. Aunque, estaba feliz especialmente porque veía de nuevo a su host favorito, aquel que le había robado el corazón sin él saberlo, ya que nunca se lo dijo, no siquiera cuando se despidieron la última vez que se vieron.
La seriedad de su rostro la había cautivado desde que llegó al club, y se fue enamorando poco a poco, aunque jamás dejó que esos sentimientos los supiera, ya fuera por temer un rechazo o por miedo. Sabía que él no se burlaría de ella, pero aun así, prefirió el amar en silencio. Y ahora estaba tan guapo, había cambiado y la madurez se había acentuado en su rostro.
Los años le habían sentado muy bien. Siguiendo sus pensamientos, subió al avión de Kyouya, poniendo así rumbo a sus vacaciones.
C O N T I N U A R A
¡¡Hola!! Esto es una historia que se me acaba de ocurrir, no os preocupes, que el otro fic de Ouran lo voy a seguir, pero esto, no sé, de repente se me vino a la cabeza. De momento no voy a poner de que pareja se trata, aunque casi lo he dicho, con la descripcion que doy, jejeje!! dejen sus opiniones!
Espero que me dejen reviews, y así seguiré la historia!
Muchos besoss!!
XtinaOdss
