¿Cómo mierda termine haciendo esto? Se preguntaba reiteradamente Christopher, aunque más le valía a todos llamarlo Mole ze ¡Esto es tú culpa marica! ¿Acaso no pudiste escoger una forma menos ridícula de celebrar el puto cumpleaños de tu hijo? Murmuraba tratando de pasar desapercibido, en tanto se escabullía detrás de un muñeco de nieve que adornaba el patio delantero de Gregory... Claro ¿Quién otro imbécil arreglaría con tanto esmero un pedazo de parterre? ¡Hasta el perro tenia un collar con motivos navideños! –Maldito, te dije que vendría, demonios, ¿No podías siquiera guardar al bicho ese?– Observaba de reojo al Siberiano que se paseaba dichoso en tan amplio lugar. Dejándolo alterado cada vez que se acercaba a una distancia reducida. Carajo, y yo que me tomo la jodida molestia de comprarte algo Divago manteniendo presente el regalo en su cabeza ¿Y cómo olvidarlo? Estuvo apunto de hacer una fila interminable para pagarlo, sin mencionar la odiosa tarea de elegir lo adecuado… Al final termino por envolverle una de sus tantas pertenencias que yacían en casa ¡Ni de joda esperaría tanto en una la fila!
–Mierda…–
Luego de esquivar aquel monstruo de cuatro patas que lo acorralo hace unos pocos minutos, huyendo como si no hubiera mañana venidero cuando se acercaba a olfatearlo. Ahora Mole permanecía parado frente al umbral del hogar del rubio, esperando y meditando… Maldición necesitaba un cigarro con urgencia, ya que los músculos parecían habérsele contraído logrando que recuperara la cordura ¡No, era una estúpida idea regalarle algo a ese presumido! Sobretodo al recordar las misiones que últimamente le asignaba… Siempre bajo tierra. Por lo menos me permiten usar mi pala...Además también se lo debía ¿no? Eran la copla culminante dentro de esa agencia secreta, y por más que trataba de ignorarlo mantenía vigente las muchas veces en que Gregory dejo su puesto al mando, corriendo incluso hasta el mismo campo de batalla para socorrerle y viceversa.
Un regalo en Noche Buena no significaba nada… ¿Igualmente eso era lo que hacían los amigos? ¿Cierto?
"Esto es de maricones" Bosquejo una sonrisa nostálgica, antes de exclamar a todo pulmón – ¡Gregory cabrón engreído! ¡Aquí tienes tu mierda de regalo, métetela por donde te quepa carajo! ¡Joyeux Noel! – Dejo el regalo sobre el tapete de Bienvenida, dando media vuelta y regresando por donde mismo había llegado.
No tardo demasiado para que el rubio recién llamado abriera la puerta aturdido por haber creído escuchar la voz de su compañero, hallando de inmediato el regalo mal envuelto y descuidado frente a sus pies. –Vaya…No pensé que vendrías tan temprano– Musito, leyendo enseguida la tarjeta que venia con este.
"La luz se atenúa y la oscuridad me rodea, pero encontrare la fuerza y mi orgullo brotara. Porque aunque muera obtendremos nuestra libertad" Releyó un par de veces tratando de recordar aquellas palabras, quedando libre de dudas cuando desenvolvió el paquete sosteniendo la vieja bandera de La Resistance-
Y La Resistance triunfo…
–Merry Christmas Chris!– Levanto la voz casi adivinando que Christopher permanecía allí oculto el algún arbusto o copa de árbol – ¡Por cierto... Solté a los perros por precaución!–
–¡Ahg! ¡Maldito hijo de puta! –
Tacos.
