Capítulo 1

Desde el principio:


(POVS KURT)

En días como estos me pregunto si tiene algún sentido seguir viviendo, en días como este quisiera tenerla a ella de nuevo a mi lado, pero sé que no vendría por mucho que lo desee.

Todo comenzó hace algunas semanas, nos habían entregado nuestras cartas de las universidades a las que habíamos aplicado, y como al universo le encanta verme sufrir, no entre a NYADA, pero ella lo consiguió no importando que hubiera arruinado su audición y la hubiera hecho dos veces.

Luego una semana después me entero que mi novio, la persona que pensé que me apoyaría en estos difíciles momentos resulto ser un perfecto imbécil de primera clase, porque se acostó, perdón…llevaba acostándose desde las regionales con ese puto autoproclamado, cara de suricato de Smythe, solo porque no estaba listo para perder mi virginidad con él.

Y esto se le suma el hecho de que tanto mis amigos como mi padre y…Carole, han decidido darme por sentado.

Lo de mi padre, puedo comprenderlo, pues él está en su campaña por la senaduría, pero cada vez que vuelve a casa, solo se la pasa hablando con mi hermanastro, lo más triste es que no recuerdo la última vez que me pregunto cómo había estado mi día.

Pero los que se llevan el globo de oro por ser los peores imbéciles de todo Ohio se lo llevan mis "amigos", y es que en cuanto mi ex-novio se trasfirió al principio del año, ellos comenzaron a andar con él y me dejaron de lado.

Las chicas lo llamaban para que les diera consejos de moda (los cuales con solo con verlo les puedo decir que es una hipocresía, por que en serio ¿Quién en su sano juicio usa tirantes y corbatines hoy en día?) y los muchachos lo llamaban para que tuvieran salidas de "chicos" y jugaran con juegos violentos de machos.

Pero lo peor del caso es que lo hacían en mi consola que se encontraba en mi cuarto, o sea que sabían que yo tenía juegos de "macho", pero solo que yo no lo era, y eso era lo que más me dolía.

Y lo mejor de todo era que cuando me entere de la traición de ese hobbit gelificado, ellos prefirieron ponerse de su lado, con el patético argumento de que yo era un mojigato, y que los hombres tienen necesidades, otra vez recalcándome que no era un hombre.

Pero todavía viene lo mejor, cuando ganamos las nacionales (por fin), en Nueva York, no solo tuve que soportar la mirada de superioridad de Smythe cuando se besaba con ese hobbit en frente de mi cara, porque él, vino a "apoyar" a su novio; yo simplemente me retire sin decir nada, no porque me sintiera herido, hacía mucho tiempo que ya lo había superado, sino por el asco de ver a una puta y a un tramposo pomposo narcisista besarse entre ellos.

Una vez que llegue al hotel donde nos alojábamos simplemente me tire en la cama y comencé a llorar preguntándome que había hecho yo para merecer todo esto, lo único que me reconfortaba era que por un error en los cuartos, me toco una habitación para mí solo, asi no le daría la satisfacción a esos malditos de verme en este estado.

Al día siguiente, el señor Schuester nos había dado dos horas para recorrer la ciudad, pero con la condición de que fuéramos en parejas y gracias a la adición de Smythe al grupo, tuve que ir solo, lo cual no me importó, porque asi es como había estado desde hace meses, y siendo honesto prefería estar solo que con uno de esos idiotas.

Faltando solo media hora, volví al hotel, para encontrarme con la linda sorpresa de que ellos ya se habían ido por que el vuelo se había adelantado y fue en ese preciso momento cuando me di cuanta cuan invisible y poco importante era para todos ellos, ni siquiera al maestro le importo dejarme en una ciudad desconocida a mi suerte.

Ya sin nada más que hacer tome mis maletas y me dirigí a un Starbucks donde pedí un café negro cargado, y me senté a la espera de algo, lo que fuera, una señal que me indicara que mi vida valía algo, y cuando estaba a punto de resignarme, un hombre de color con un traje oscuro, y un parche en el ojo se me acerco.

Al principio tuve miedo de que fuera un asaltante, pero luego se presentó.


-Flashback-

-Disculpe, ¿me puedo sentar?-dijo el hombre con parche.

-Claro-dije un poco desconfiado.

-Bueno, hablemos claro, mi nombre es Nick Fury y soy jefe de S.H.I.E.L.D.

-Ok-fue todo lo que dije sin comprender que quiere este hombre de mí.

-Mira Kurt, sabemos todo de ti, y quien eres en realidad.

-¿A qué se refiere?-dije muy nervioso.

-Sabemos todo de ti, y también sabemos de quién eres pariente.

-Bueno, si saben todo eso, ¿qué es exactamente lo que quiere de mí?-dije mientras sostenía mi cuchilla de bolsillo.

-Que te nos unas.

-¿A S.H.I.E.L.D?-dije muy lentamente, mientras guardaba mi cuchillo en su lugar.

-No, a los vengadores.

-No hablara enserio-dije sin creerme sus palabras.

-Por supuesto que lo dijo enserio.

-Pero solo soy un muchacho recién graduado, ¿en qué les puedo servir?

-Sabemos de tus habilidades especiales, asi que, ¿Qué dices?

Un propósito, eso era todo lo que había estado buscando, un propósito por el cual vivir y luchar.

-Claro, no es como si tuviera algo que hacer ahora que no entre en la universidad.

-Esplendido, y hablando del tema, por tu ayuda, haremos que entres en la universidad que tu elijas.

Sin nada más que decir nos dimos un apretón de manos y salimos del establecimiento.

-Fin de flashback-


Es por eso que ahora mismo, me encuentro en uno de los elevadores principales de la torre Stark admirando la vista panorámica de la ciudad de Nueva York.

Una vez que se abren las puertas yo simplemente sigo a Fury, que me guía hacia una sala donde se encontraban cinco personas las cuales me miraban muy expectantes, pero uno de ellos me veiasonriente y un poco confundido se acerca corriendo hacia mi abrazándome, mientras decía.

-Kurt

Emocionado de ver a la única persona que no creía poder volver a ver, (además de mi madre), lo abrace con todas mis fuerzas mientras le decía algo lloroso.

-Tío Clint.

Notas del autor: Hola, primero quisiera darles las gracias a quienes se hayan detenido a leer esta historia, y bueno, quisiera saber si quieren que la continué. Y de ser así voy a tratar de hacerlo lo mas seguido que pueda.

-bye