Durarara! No me pertenece.

I'm Super Powerful: Cuando te conocí

Capítulo 1: La raza de Izaya

Izaya estaba sentado sobre el escritorio de su cuarto jugando con los pies moviéndolos adelante y atrás. Le habían dicho que habría junta, lo que le ponía de mal humor, suspiró.

–Odio las juntas… mis juguetes siempre intentan dominarme, esos magos crédulos –rió de su propia especie, con un toque psicópata –supongo que tengo que ir, estoy seguro que hablaran de mí, pero, tsk, estoy tan cansado.

Cerro sus ojos y se recostó sobre su escritorio, cuando unos ojos miel desconocidos llegaron a su mente. Abrió sus ojos y volvió a su antigua posición. Sentado de nuevo con una sonrisa, tomó un papel y parándose fue a sentarse como debía en su silla tomando una pluma y subiendo su cabeza, le hablo al cielo.

-Anda, habla.

En aquel papel decía esto:

"Orihara Izaya

15 años

Mago

Vocación humana de Informante de medio tiempo

Shinjuku -Ikebukuro"

E Izaya lo termino con esto:

"Raira Academy

Heiwajima Shizuo"

En ese momento paró, su sonrisa desvaneciéndose, cuando volvió a hablar a ese ser desconocido.

-No conozco en persona a Heiwajima Shizuo pero según recuerdo que leí, es un chico de mi edad que causa muchos problemas en sus escuelas por su fuerza y tiene muy mal genio…

Sonrío un momento soñador y saco su laptop buscando sobre Heiwajima Shizuo y viendo que entraría a su misma escuela: Raira Academy.

-Nah, ya lo conoceré mañana.

Guardo la pluma recordando que había escondido un papel cuando apenas tenía diez años y rio al pensar que le acababa de pasar lo mismo que hace seis años, saco el papel de su escritorio y lo vio riendo.

"Izaya Orihara

10 años

El mago más poderoso

¡Para romper la esclavitud humana y matar a los magos!"

No recordaba de lo que había estado pensando en aquel entonces y no lo entendía, ¿Romper la esclavitud? Por un momento rio en burla de sí mismo y del ser con el que había hecho eso. Entendía que los humanos estaban en muchas esclavitudes distintas, psicológicas y físicas, pero no las rompería si no fuera con la muerte y en serio, él y su familia eran magos ¿Cómo los podría matar, a su mounstrosa familia, a él mismo?

Sonó su alarma.

–No importa ¡Me voy! –Tomó su suéter negro y abrió la puerta, no había nadie, no se escuchaba nada. Izaya se puso audífonos. Se sentía raro y los últimos días le habían estado doliendo el cuerpo por periodos bastante prolongados.- Yo no estoy enfermo de ningún tipo ¿Será por la magia? Yo siempre he tenido magia, solo que cosas tan simples… espero que nadie lo note o que ellos no hablen sobre mi adolescencia, sería incomodo.

Y salió a la libertad.

Tarareaba por la calle una canción, confiando en sus sentidos de orientación, se metió a un callejón y rápidamente saltó por las paredes hasta llegar al techo donde pudo empezar a correr y brincar tan libre que podía sentirse más ligero a medida que iba saltando arriba de los edificios y tan rápido que apenas podía identificar los objetos, aunque no les pusiera atención.

Bajando, Izaya camino hacia donde se supone que sería la junta de su raza mágica.

De repente una idea un poco alarmante asalto su cabeza, podía sufrir uno de sus pequeños descontroles de magia, que antes no parecía tener, pero unos días antes desde que empezó a tenerlos se dio cuenta que desprendía una magia más fuerte que él no podía controlar, solo su familia se había dado cuenta por unos pequeños destrozos en la casa, pero nada de qué preocuparse.

No quería que se enteraran de que Orihara Izaya no podía controlarse, sería un deshonor para su nombre y su familia.

Ese hombre que los había citado no lo dejo practicar para controlar sus descontroles, esperaba que el día siguiente no se descontrolara en la academia.

Llego delante de un hombre alto que ya conocía, era la puerta del escondite, hecho por su familia para proteger las juntas mágicas. Esa estructura faltaba de puertas y por eso, debajo del brazo de la maquina se abría un portal que servía como entrada, aunque generalmente su padre pasaba por las paredes.

Escuchaba la voz del líder del área que acababa de llegar de una junta de jefes con el líder supremo, es decir, los líderes de los países fueron a hablar con el líder que controlaba a los magos de todo el mundo y hablaron sobre Japón, su zona, pero más precisamente hablaron sobre una familia, la familia Orihara.

"-No sé de dónde sacaba esas ideas el 'líder supremo' pero sé que tiene buen gusto e inteligencia al estarnos mirando- recordó Izaya que le decía a su papá – quiero que lo vigiles, aunque ya sabes cómo va a terminar esto.

Izaya en ese momento no había hablado, cuando su padre volvió a hablar.

-No me sorprende, ya que yo soy más poderoso y una gran amenaza. Piensan que en cualquier momento los podemos matar."

El padre de la familia Orihara era muy poderoso, rechazo el puesto de líder supremo después de casarse con su esposa, haciendo de menos ese nivel tan preciado. Era y gracias a eso Izaya tenía muy buena reputación.

Mientras, el líder de la zona hablaba mal de Izaya.

-…joven Orihara se está haciendo un peligro, hemos notado cambios en sus habilidades y como siempre… -El líder estaba hablando desde un piso más alto, al que Izaya se escabullía -…y con esa actitud que posee, llena de resentimiento y altanería, no dudara en atacarnos...

Estaba a punto de saltarle y humillarlo con su navaja cuando la voz de una niña con unos cuantos años menos que Izaya, interrumpió al anciano con su hermana menor detrás.

-¡No es verdad! ¡Iza-nii nunca nos atacaría!-Grito Mairu, su hermana menor, con Kururi atrás de ella.

-Iza-nii… no resentido…

El líder solo las miro con cara de molestia, pero ni modo, era discusión, no concierto. Les hablo a sus sirvientes, que son los compañeros de Izaya.

-¿Qué hacen las dos pequeñas Orihara aquí? Por favor, saquen a estas dos criaturas de aquí.

Miro a sus hermanas de solo doce años y brinco a su lado, muchos se sorprendieron y otros ya se lo esperaban. Estaba sorprendido como parecían hipnotizados por tenerle gran respeto al líder de zona, que aunque paso empujándolos y se quedó parado en medio de ellos no lo notaron.

Se escucharon algunos gritillos emocionados al ver a Izaya y sus padres suspirando.

-¿Crees que los atacare por resentimiento? Anciano, lastimas mis sentimientos– Dramatizo antes de carcajear maniáticamente con las manos en los bolsillos para luego de ponerse en una pose más defensiva– Que estupidez, solo los atacaría por diversión.

-Al fin llegaste, Izaya-chan, –le habló con voz dulce típica con él - probablemente ya los conoces, pero déjame te presentó a tus dos nuevos amigos, él es Yuki y él es Natsuno. Ambos eran de la edad de Izaya.

Yuki era un niño de estatura baja de cabello y ojos café con una personalidad tímida pero decidida.

Natsuno era un niño con cabello negro corto, ojos cafés y unos centímetros más bajo que él, se podía notar su seriedad y falta de paciencia.

-H-hola, yo soy Yuki, u-un gusto, seré tu nuevo amigo, el líder de zona es mi padre, espero llevarnos bien.

Natsuno no se presentó, aunque no era necesario.

-Efectivamente ya los conocía. Yo soy Orihara Izaya, el gran hijo mayor de la poderosa familia Orihara– Saludo como todo un caballero al estar en público. Vio a su papá en la primera fila sonriendo un poco pero con el ceño fruncido y los brazos cruzados- aunque por mi popularidad ya me deben conocer.

"Mientras sigue la junta nadie se podrá ir, ya que si se acaba antes el hechizo que cubre ese lugar avisara a los demás, tenemos que esperar a que acabe la junta hasta que tú lo mates, padre. Aunque, el que lo matemos alarmara a los otros líderes, también su esposa querrá una venganza y de nada sirve matar al anciano si aún tengo a sus dos hijos detrás de mí.

-Es una forma de amenaza, Izaya. Ellos no les pueden hacer nada mientras estemos nosotros sus padres en medio. No te confíes en tus habilidades, sigues siendo un crio. Aparte, mataras a su esposa hoy a horas de la madrugada, confió en ti.

-Sabes que mañana es mi primer día de clases.

-Has lo que te digo, o si no, no eres mi hijo."

Sus hermanas corrieron hacia él, abrazándolo de la cintura como niñas pequeñas. Ellas querían dejarle en claro a ese viejo que no se metiera con las poderosas hermanas Orihara, porque también estaban protegidas.

"Claro que lo puedo humillar sin ayuda de Iza-nii, pero no es digno de pelear con Orihara Mairu, necesita pelear con alguien de su mismo bajo nivel."

Ellas sabían que estaba empezando a perder el tiempo.

-"Aunque no es digno de mi grandiosa persona hacer eso, es muy…es para estúpidos.

-Te estoy escuchando, niño estúpido."

-Iza-nii, ¡ese viejo nos está molestando!

-… viejo… malo…

-Ya, ya –les acaricio la cabeza– que me están asfixiando.

-Izaya-chan, es de mala educación asistir sin ser invitados.

Izaya rio, el líder de zona desde pequeño lo molestaba, así que se la pasaba haciéndole bromas que nunca aprecio.

Su padre que estaba ignorándolo, sorpresivamente los volteo a ver, cuando sonó la alarma de la entrada.

Y ordenó en voz alta:

-La junta se termina, ahora, todos salgan antes de que se cierre la entrada y vayan a sus casas.

-Desafortunadamente anciano, hablaban sobre mí- dijo Izaya burlándose del destino que le esperaba el líder de zona.

Todos los magos obedecieron y salieron con temor, Izaya estaba sentado con Mairu y Kururi en sus piernas sentadas jugando con su cabello, tenía que asegurarse de que todos salieran y no se juntaran en otro lugar, así que salía al minuto de que el último había salido.

-Has invocado a la familia Orihara, afronta las consecuencias –sonrió y se despidió - Ya me voy, viejo.

Y sin más, dejo a su padre a solas con el jefe de la zona de magos.

-Iza-nii, ¿Por qué papá matara al anciano?

-Por nuestra seguridad, Mairu- dijo cansado Izaya.

-Ah…

Izaya había tenido que cargar a sus hermanas después de que Mairu haya expresado en voz alta que se había cansado y Kururi pidió subirse en su espalda, pero Mairu no se había quedado atrás.

-Se están yendo por diferentes lados.

-No importa, ya muchos se fueron a sus casas.

-¿No los estábamos persiguiendo?

-Me he encargado de ellos. Mientras, vamos a la casa a que descansen.

-No quiero, no es justo que papá sea el único que se divierta.

-Yo también creo lo mismo – susurró – que aburrido.

Llegaron a su casa e Izaya se fue a dar un baño cansado por llevar a sus dos hermanas en su espalda más de 3 km brincando y escalando.

-Iza-nii es un héroe, aunque a Kururi-nee siempre la querré más.

-Iza... mal…

-Ahora siempre está así. Kuru-nee no podemos quedarnos aquí ¡Tenemos que hacer algo!

-…Tu… preocupada….

-¡No estoy preocupada por él! ¡Solo que ya no es divertido molestarle! ¿Has visto como accedió a cargarnos todo el camino? ¡Eran como tres kilómetros e Iza-nii no peleo ni un poco!

-Iza-nii… triste…

-No, no lo está. Yo lo sabría si estuviera triste, es más que obvio que esta en alguna clase de aburrimientoúltimamente ¡O alguna clase de hechizo! Ayer lo descubrí durmiendo con su celular en la mano, vi lo que tenía pero no era nada ¡NADA!

Se escuchó el eco de su grito y las dos voltearon por los pasillos en un total silencio, pero se escuchaba la regadera prendida.

-…alivio…

- Eso estuvo cerca… ¡tengo una idea! Kuru-nee, sígueme –fueron directamente al cuarto de Izaya y buscaron su ropa sucia sin encontrarla y llegaron a la conclusión de que se la habría quitado dentro de la bañera- Vamos, Kuru-nee.

Las dos entraron al baño con cuidado y encontraron en su chaqueta su celular, donde tenía escrito el nombre "Heiwajima Shizuo" y su biografía. Mairu escondió el aparato al escuchar la voz de Izaya y el ruido de la puerta de la regadera que las separaba se abría a una distancia prudente.

-¿No me pueden dejar en paz incluso cuando me baño?

-Te queríamos preguntar que si se siente bien el agua.

-Sí, se siente bien. Ahora, largo.

-¡Sí!~ - Salieron y se dirigieron a su cuarto, Mairu leyó detenidamente su biografía – Heiwajima Shizuo, ¿Eh? ¿Se meterá en la Academia Raira? Al parecer Iza-nii y Shizuo-san compartirán varias materias~

- Iza-nii… acosador.

-Ya lo creo~ Pero ¿Por qué Iza-nii tiene su biografía? ¿Ah captado el interés de mi hermano?

-Shizuo-san…Interesante…

-¿No significa que es gay?

- Iza-nii…

- No llores Kuru-nee ¿Qué tiene ese Shizuo Heiwajima que nosotras dos no?

Sin embargo, ellas no sabían quién estaba escuchándolas afuera de su cuarto.

-Así que las dos han decidido investigarme, ya veo.

Izaya se acomodó su mochila y golpeo la puerta.

-¡Shh! Escuche algo- Mairu guardo silencio - ¿Iza-nii? ¿Eres tú?

-Díganle a mamá que mañana no llegare a casa con ustedes.

OK! –Mairu y Kururi se asomaron por si ventana que daba a la entrada y vieron a Izaya salir- ¡Toma las mochilas para mañana! –Dijo Mairu -¡Vamos, Kuru-nee, esta es nuestra oportunidad!

Tomo a Kururi y ambas salieron tras Izaya.

Izaya solo podía repetir las palabras de su padre que decían "hermano responsable" con un ligero tic en la ceja mientras sentía que sus hermanas lo perseguían.

Sabiendo que podía tener un descontrol en clases, decidió entrenarse un poco ¿Y qué mejor lugar para entrenar que en un distrito tan peligroso como Ikebukuro? Se salvaría un par de veces hasta llegar para no limitarse y luego vería más detenidamente que tan fuerte era.

Usar sus poderes antes de investigarlos, sabía que era un acto insensato.

Iría a la entrada del portal que su padre había puesto para sus hijos que no sabían hacer portales para llegar a su casa de campo. Allí se acomodaría con sus hermanas y saldría a entrenar y a observar a los humanos.

Dentro del portal estaba seguro que ningún mago con excepción de sus hermanas lo verían practicar, sería una experiencia relajante con excepción de sus hermanas. Pero Izaya sabía que conocerse no sería una tarea fácil.

Izaya fue vigilando a los humanos hasta saber que clases de comportamientos y reacciones tenían, también leía muchos libros, lo que lo hizo el mejor en su salón más de una vez desde muy pequeña edad.

Se detuvo y cerró sus ojos, sintiendo que las dos presencias de sus hermanas se iban, fue allí cuando Izaya decidió voltear y seguirlas.

Poco a poco vio como a sus hermanas las habían acorralado un grupo de chicos en uno de sus pasadizos peatonales entre los edificios. Tomo su navaja pero no se descubrió, queriendo ver las reacciones de Mairu y Kururi ante esta situación. Ambas conservaban la calma y actuaban como siempre. Mairu volteo en su dirección viendo a Izaya, decepcionándose por no poder mantener su expedición en secreto. Y por más infantil que fuera, saco la lengua.

Mairu dio el primer golpe, derribando al chico que estaba enfrente.

Izaya suspiro y se adentró a la pelea.

-Veo que han decidido atacar a dos chicas, siendo ustedes cinco… ¿no les da vergüenza necesitar a más de uno contra dos niñas?- rio.

-¡Cállate!- Dijo uno de ellos gritando por la adrenalina y se abalanzo contra Izaya, pero el sin ningún problema lo esquivo y con su navaja le corto el cabello.

-Ups. Parece que ya no necesitaras ir más al estilista- Hizo señas con las manos.

Todos los demás habían detenido su pelea por ver a Izaya.

-¡T-tú!- el mismo chico tomo un pedazo de metal con el que intento golpear a Izaya, pero cuando fue a dar el golpe, quedo paralizado y cuando se dio cuenta, Izaya ya estaba a su espalda, planteándole una patada impulsada con magia en el cuello. El chico cayó al piso noqueado.

-..Iza-nii…

Mairu atesto un golpe hacia el que le quedaba a la izquierda. Cuando el que estaba a su derecha le dio un golpe a Kururi dando un gemido de dolor y otro aprovecho el que Mairu se distrajo para golpearla y tomo a Kururi del cabello golpeándola en la nariz con la rodilla pero ella no sufrió ningún daño grave gracias a que algo había detenido la pierna del chico haciendo lento el golpe.

Por una fracción de segundo, todos menos Izaya se cegaron con una luz azul, nadie supo de donde había venido.

-¿Ah?- Delante de Izaya apareció una esfera azul brillante que se extendía, que, antes de que se pudieran dar cuenta, cambio a un color rojo con ondas visibles cafés. Izaya sonrió sádicamente, sus ojos tornándose completamente blancos por un segundo entes de tornarse color rojo vino.

-¡E-eso no puede pasar! ¡Es imposible!

-¡¿Q-qué está pasando?! ¡¿Qué es ese chico?!

Sus pies no podían moverse, pronto la energía creció tragándoselos y detrás de Izaya apareció el símbolo de un sello mágico carmesí que reconocían era de la familia Orihara levantando a Izaya unos metros del piso, su cabeza estaba echada hacia atrás con las manos extendidas y sus ojos que al inicio se veían completamente blancos, se tornaron carmesí y esbozaba una sonrisa.

-¡Iza-nii!... ¡Kuru-nee, tenemos que irnos! ¡Esto me da mala espina!- Mairu, que estaba abrazando a Kururi, se levantó e intento correr sin ningún éxito- ¡N-no puedo!

"Esto va mal, mal, mal, mal. Creí que sería capaz de controlarme, no esperaba tanto poder, así que solo pude retener algo de energía, pero aun así la que no puedo retener, no quiero… Qué vergüenza, Izaya ¡Contrólate!"

Cuando sus hermanas dejaron de forcejear, sintieron como una energía se iba, sintiéndose más ligeras como si volaran en el espacio, las mareaba un poco, pero tenían bastante curiosidad. Sintieron como tocaban algo duro en su espalda y la ilusión a su alrededor desapareció. Ellas estaban ahora fuera de la energía recostadas.

-Mira, Kuru-nee- Había unas paredes azules que rodeaban la esfera de energía, ellas lo veían de por dentro. Los colores se intensificaron por un instante y ellas corrieron hasta traspasar las paredes y todo desapareció. No se veía ninguna señal ni de su hermano ni de la energía que se las había tragado por un instante, no había sangre ni ningún rastro de los pandilleros que las habían acorralado.

-…Iza-nii…

-No está muerto.

De repente ellas aparecieron delante del portal donde se dirigía Izaya.

-Ya no quiero volver hasta que se me haya pasado todo esto de Iza-nii, que me está confundiendo, entremos.

Volviendo al callejón, la ilusión desapareció completamente, Izaya quedo en medio de toda la sangre y ningún otro cuerpo, sino puro polvo de las cenizas que se pegaban a la sangre de lo que algún día había estado corriendo por sus venas.

Izaya no podía creerlo, había escuchado los gritos de los cinco pidiéndole piedad y maldiciéndolo. Aunque sus vidas no tenían sentido desde el principio, al final solo eran manchas de sangre, los había matado más cruel de lo normal con su padre.

Él anteriormente había dejado que sus hermanas lo siguieran para entrenarlas también, pero ahora temía por su seguridad y nunca dejaría que sus hermanas lo vieran en ese estado de moralidad débil. Suspiro, tampoco dejaría que ellas se hiciesen victimas con sus padres para que lo echen de casa.

-¡Argh! ¡Qué vergüenza!- Tapo su rostro con sus manos un momento de vergüenza.

-Ah~ eso fue increíble~ -Gimió feliz. Sonrío con una sonrisa perversa y se dio cuenta que sus ojos en ese momento se habían tornado rojos -ya es hora de irse. ~

-Tenemos que dormir, Kuro-nee.

-…No…dormir…

-Yo tampoco- Mairu abrazo a Kururi, ellas estaban en su cuarto de la casa de campo de la familia Orihara, en el segundo piso. Sin darse cuenta de la tercera presencia afuera de su ventana, donde estaba Izaya tomado de una de las gárgolas con figura de dragón y apoyado en el marco de la ventana las veía.

-Está bien…- susurró y se bajó, yendo a campo abierto -Empezaremos con algo fácil…

Cerró los ojos, y se concentró. Paso minutos pero nada paso.

-Primero piensa, el problema de descontrol es cuando sube un poco mi ira… no he tenido ningún descontrol en la calle, ni en la discusión, solo cuando me forcé un poco… no, no fue cuando ellos tomaron a Mairu y golpearon a Kururi…

Cerró los ojos y estiro sus brazos

Miro hacia la puerta y vio a Mairu salir.

-¿Aún no han comido? Les traeré algo.

-Iza-nii.

-¿Qué? ¿Necesitas algún ingrediente especial?

-No, s-sobre lo de hace rato.

-¿Qué hay sobre eso?

-N-nada.

-¿Quieres comer algo en especial?

-¡Sushi!

Mairu corrió al lado de su hermano traspasando el portal.

-¡Delicioso!- Grito Mairu. Ambos estaban sentados en los juegos del parque.

-¡Ya lo creo!- Se metió otro pedazo de sushi- ¡Oghh, Mairu!

-¿Pasa algo?

-¡Se me estaba olvidando! ¡No se te olvide bañarte y no duermas tarde!

-¿Oh? ¡Vaya que pareces mi madre! ¿Harás algo para no poderme recordar en casa?

-Entrenare.

-Vaya- Comió otro pedazo de sushi- ¿Vas a asesinar más pandilleros?

Izaya casi se ahoga.

-Mairu, me ofendes- dijo con pose exagerada- si yo amo a los humanos.

-¿Cómo los mataste? No alcance a ver la última parte.

-Te diré cuando crezcas.

-¡No es justo, Iza-nii!- Empezó a agitar el brazo de Izaya.

-Aquí está el sushi de Kururi, asegúrate de que lo coma en menos de una hora y báñense.

-¡Iza…!

-Adiós- Izaya corrió escondiéndose en la oscuridad.

-¿Iza-nii? ¿Estás allí? ¡Ah, tienes que estar bromeando! ¡¿Quién quiere practicar contigo de todas maneras?!- Mairu dio media vuelta y corrió. Izaya se aseguró de ver si volvía al portal y suspiro.

-¡Bien, ahora…! ¿Dónde se supone que vive ella?

Camino por la calle.

-No quería llegar a esto, pero.

"-Papá, papá ¿Estas despierto?

-¿Ya la mataste?

-No me diste ni su dirección.

-Eso no es una excusa para un Orihara.

-¡Si la es, viejo!

-¡Háblame con respeto! ¡Eres un informante de medio tiempo! ¡Es un insulto que alguien de la familia Orihara no haga bien su trabajo! ¡Cuando llegues a casa te pondré a memorizar direcciones!"

Su padre empezó a guiarlo por Ikebukuro hasta llegar en frente de una casa blanca de buen parecer.

-¿Aquí es? Es muy linda, no sabía que ese anciano tenía buen gusto. ~

"-Concéntrate y esfuérzate. El cuarto de ella está en el segundo piso, de hecho, lo puedes ver justo enfrente a la izquierda de la casa, aunque su esposo acaba de fallecer, así que no te aseguro que está dormida, pero allí esta ella.

-¡Y no duermas tarde que mañana tienes escuela!- Gritó su mamá.

-Sí."

Izaya junto sus manos delante de la puerta, cerrando los ojos y concentrándose. Por más que trato no podía hacer nada, cuando su paciencia acabo y salió ira salió disparada la bola de energía que había causado tanto daño esa misma noche, quemo la puerta completamente haciéndola cenizas haciendo ruido.

-¡Mierda!

Se escucharon unos pasos de pantuflas y se asomó la señora con su pijama apropiada para la hora que era.

-¿Quien está allí? ¿Yuki? Dejaste la puerta abierta…-se acercó a la puerta- l-la puerta.

Izaya saco sus navajas y se las lanzo, dándole en el pecho y en el cuello.

-Has hecho mal.

-¿Iza-chan? No dejare que entres a mi casa.

Ella dijo unas palabras tosiendo sangre y empezaron a salir esferas de energía por las paredes hacia él pero Izaya fácilmente esquivo.

-Vamos, es tu casa la que estas adornando. Podrías intentar darme a mí.

-Ustedes lo mataron, yo lo sé…- dijo volviendo a echar sangre, e intentando sacar una navaja con su mano libre sin lograrlo.

-¿Oh, enserio? ¡Oh, pero que persona tan inteligente!- dijo Izaya con sarcasmo.

Ella empezó a respirar entrecortadamente cayendo de rodillas. Izaya se acercó con su navaja apuntándole, sin embargo, no lo hacía de una manera amenazante.

-Sin… sin mi esposo… nada importa.

-Pero estas luchando por proteger a tus hijos, lo que significa que si te importa, enserio, ¿Qué crees que pensaría Yuki-chan y Namy si te escucharan decir eso?

Ella se detuvo.

-…Yuki…Natsuno… - dijo mientras cayó hincada por la falta de energía.

Izaya se acercó y saco sus navajas metiéndolas en una pequeña bolsita.

-¿Dejaras a Yuki sin una madre?- Dijo en la puerta.

-¡Tú!- Bajo Natsuno corriendo, tenía un bate en la mano y corría directo hacia él.

Izaya le lanzo la misma nava que uso en su madre enterrándose en su pulmón exitosamente y usó la magia para deslizarse detrás de él y a una velocidad impresionante lo empujó contra el cuerpo de su madre golpeándolo en la columna al mismo momento e inmovilizándolo de una forma rápida para sacarle la navaja sin anestesia y salir.

-¿Mamá? ¿Natsu? ¿Qué está pasando?- Bajo Yuki antes de llenar sus ojos de lágrimas- M-mamá, ¡Mamá! ¡Natsu, ayudame!... ¡Natsuno!

-Natsuno… Yuki… los… amo…

-¡Mamá! ¡Natsu-chan! ¡No me dejen! ¡Se los ruego…! ¡No se vayan!

Izaya miraba la escena de fuera de la ventana mientras posaba sus manos en sus bolsillos con sus navajas. Suspiro al escuchar el grito.

-Pensaba que me divertiría más con Natsuno- Y corrió hacia el portal.

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¡Qué emoción! Mi primer fic de Durarara! Al fin subido! No pensaba publicarlos hasta más de dos meses o más pero se me acaba de ocurrir y mejor lo hago antes de que me arrepienta!

Espero que hayan disfrutado del capítulo número uno de I'm super Powerful CTC. Me gustaría saber lo que piensan de la trama!

~¡Feliz Navidad!~