DISCLAIMER: Los personajes usados en este fic son propiedad intelectual de la mangaka Rumiko Takahashi. La lista de besos es parte del la actividad del foro ¡Siéntate" Por un puñado de besos. La idea del fic es de autoría propia.


Primera entrada:
Espiando al hermano.


Miro nuevamente la hora, impaciente. Se suponía que se iban a juntar aquí, pero ya llevan más de 15 minutos de retraso. Vuelvo a mirar a través del arbusto que nos sirve de refugio, mientras Kagome se asegura que nadie nos descubra mientras esperamos. De pronto, escucho la inconfundible risa de mi hermano, así que regreso a mi posición de espionaje y le hago un gesto a mi amiga para que se oculte un poco más.

— Eso fue muy gracioso, Rin — suelta él entre risas, su gesto es sincero.

— ¿De verdad? ¡Pero si terminó todo estrellado en el suelo!

— Lo sé, vi la foto del señor Jaken cubierto de crema…

Vuelven a reír, están tomados de las manos y ahora se sientan en una de las bancas del parque, sin dejar de mirarse, puedo notar que siguen nerviosos, a pesar de que no es primera vez que salen, de todas formas, actúan como si fuese la primera cita. Debido a la distancia, pierdo un poco de la conversación, pero Rin se sonroja aún más y Kohaku parece un poco incómodo con sus palabras.

— Sí, debería ir a conversar con él… ¿segura que no me asesinará?

— El señor Sesshōmaru te tiene cariño, sabe que me cuidas…

— Una cosa es cuidarte, otra es salir contigo…

— ¿Acaso ya no me cuidarás?

— ¡Claro que sí! Pero es… distinto.

Noto como aprieta más la mano de su compañera, Kagome ahoga un grito cuando se da cuenta que se están acercando, yo le doy un golpe en las costillas para que se comporte, mientras siento mis mejillas enrojecer ante la tierna escena. Mi hermanito es un chico dulce, un poco tímido, pero decidido, aunque le costó bastante atreverse a invitar a salir a Rin. Sin embargo, yo lo apoyé en todo ese proceso de "no sé cómo decírselo/qué pasa si me rechaza/mejor sólo soy su amigo/enséñame cómo declararme" y ahora quería ver los frutos de mi esfuerzo. Levanto un poco más la vista, mirando como acortan distancia y se besan en los labios, tiernamente. El gesto es cálido, inocente, puro, no hay dobles intenciones, ni pensamientos teñidos de deseo, mucho menos lujuria. Es un beso profundo en sentimiento, no en el contacto; tanto así que me logra sobrepasar.

Mi hermanito Kohaku está dando su primer beso a Rin.

Kagome vuelve a ahogar un gritito con sus manos, yo la miró como señal de advertencia, luego sigo atenta a la pareja sin percatarme que alguien nos observa, hasta que escucho su voz.

— ¿A quién estamos espiando?

— Oye, ¿que esto no es un juego de niños? Yo ya superé la etapa de los espías…

Volteamos para encontrarnos con Miroku e InuYasha tras nosotras, sostienen un cono con helado cada uno y sonríen un tanto maliciosos. Ruedo los ojos, ¿por qué a mí? No necesito que nos pongan en evidencia, Kohaku jamás me perdonaría si lo sabe.

— Bajen la voz y escóndanse o se van — les indica Kagome, haciéndoles señas —. Es el hermano de Sango y su novia…

— ¿Tu hermano tiene novia? Vaya, pero si hasta él se maneja mejor que tú en ese aspecto…

Lo ignoro, mientras sigo observando a mi hermanito, que ahora termina el contacto y se pierde en la mirada de la adolescente a su lado, cuál de los dos con las mejillas más sonrojadas. Kohaku puede ser tan dulce, realmente es un niño adorable...

— ¿Era su primer beso?

— ¿Por qué no te metes en tus propios asuntos, Miroku?

— Sólo quería saber…

Guardo silencio, no quiero seguirle la plática, además de que intento escuchar algo más de lo que dicen Kohaku y Rin, aunque la distancia y sus nervios, que los hacen bajar la voz, no son mis mejores aliados en estos momentos. Suspiro, tratando de leer sus labios, aunque sea.

—… Sí, es probable que lo haga…

— Pero el señor Jaken te apoyaría… Somos muy unidos, después de todo. Me has cuidado mucho este tiempo.

— Bueno, sí… Rin. — Mi hermano la mira fijo, desde aquí no logro saber qué expresan sus ojos, pero presiento qué puede pasar, por lo que mis mejillas comienzan a teñirse de rojo, igual que las de ella. — Y-Yo… sé que debería hablar con el señor Sesshōmaru primero, pero… quiero saber si t-tú… tú aceptarías ser mi novia…

De acuerdo, no sólo son mis mejillas las que se tornan rojas, las de la nueva/futura pareja también, y creo que podemos sumar al sonrojo colectivo las de Kagome e InuYasha. Miroku no, es un imbécil y su reacción es esperable, después de todo: sonríe pícaramente. Rin asiente en respuesta, sin dejar de mirarlo a los ojos, se ven muy bien juntos. También sonrío, me hace muy feliz que Kohaku haya decidido declararse, más con Rin, ella es una chica encantadora y considerada. De verdad, creo que harán una pareja perfecta.

— Gracias — murmura mi hermano, sonriendo también y besándole la mejilla luego —. Prometo cuidarte aún más y hacerte muy feliz.

— Ya lo haces, Kohaku.

Se ponen de pie, sin soltarse de las manos, y comienzan a caminar, alejándose de nosotros. Suspiro al verlos desaparecer, agradecida de que no nos descubrieran. Me pongo de pie, haciéndole señas a mi amiga para que haga lo mismo y ahora sí, nos dirijamos a nuestra sesión de estudios en su casa.

— Bien, si nos apresuramos, quizá terminemos los capítulos que nos faltan del texto de literatura…

— Tienes razón. Ahm… ¿adiós? — Mientras se sacude la falda, mira a nuestras repentinas "visitas", despidiéndose dudosa.

— ¿Estudiarán literatura? Podríamos ayudarlas…

— No, gracias. Estamos bien así…

— Entonces, déjennos acompañarlas hasta su destino…

— ¿¡Qué!? — Tanto InuYasha como yo nos sorprendemos por su ofrecimiento, él simplemente se encoje de hombros antes de responder.

— No es seguro que dos chicas como ustedes, anden solas a estas horas…

— Ni siquiera anochece, no seas dramático. Podemos cuidarnos perfectamente por nuestra cuenta.

— Sí, además, nosotros también deberíamos irnos, Miroku… ¿no tenías una cita?

— En realidad, no. Sólo era para no pasar toda la tarde escuchando cómo te lamentas… — Ruedo los ojos ante el inminente desinterés de él al hecho de que le mintió a su mejor amigo.

— Yo no me lamento… en fin, me largo.

Ni siquiera se despide antes de marcharse, Miroku parece un tanto extrañado, debatiendo entre irse con su amigo o acompañarnos. Le hago un gesto a Kagome y comienzo a caminar, ignorando la cara de confusión que aún tiene él. Mi amiga se apresura en seguirme, noto sin dificultad que no comprende mucho.

— ¿Por qué no los dejaste acompañarnos? No pareciera que tuviesen otras intenciones…

— Kagome, con Miroku, siempre hay otras intenciones. Tú no lo conoces, mejor sigamos en lo nuestro.

Se encoje de hombros, negando con la cabeza para restarle importancia, luego me toma del brazo y, con sus ojos ilusionados y brillantes, cambia el tema de conversación.

— ¿No es romántico el primer beso? Ahh… cómo me gustaría que el mío fuese así de lindo…

— ¿No has dado un beso? — Se sonroja, pero niega en respuesta, yo sonrío un tanto maliciosa. — Ya va siendo hora, ¿no hay alguien que te guste?

— Bueno, sí… pero mejor olvídalo, es imposible… — Su sonrojo aumenta, luego vuelve a cambiar el tema. — ¿Crees que aprobemos el examen? Literatura no es mi fuerte, y el tuyo tampoco…

— Claro que lo haremos, sólo debemos estudiar. Por ahora, no seguiré preguntando más, pero cuando terminemos los exámenes, me dirás quién es.

— Sólo si tú me dices cómo fue tu primer beso…

— De acuerdo, pero todo a su tiempo — no estoy muy convencida, pero sé que debo darle algo a cambio de esa información, así que eventualmente tendría que compartir ese secreto con ella. De hecho, ahora que lo recuerdo, no sé por qué no le he contado de mi primer beso… Aunque, bueno, este tema de los besos tampoco es uno de mis favoritos, así que espero no tener que abordarlo muy seguido.


Palabras: 1305, sin contar notas ni disclaimer.


Holo de nuevo~ Lo sé, no debería estarme anotando en retos si ya tengo muchos pendientes (traducción, viñetas, actualizaciones varias...), pero... PERO la actividad es tentadora, la idea llegó como flechazo, y hay que aprovechar que es un proyecto no muy largo, así que ¡con ganas!

Quiero dejar mil agradecimientos a Nuez, que siempre me da ánimos para apuntarme con este tipo de ideas (o cualquiera), a Mor por haberme incitado -sexualmente, digo, mentalmente- a participar de la actividad, y a Onmi por ayudarle con el título del fic. Y a todas las piratas, que sin sus porras, de seguro esto seguiría en la carpeta de "pendiente" en lugar de haber sido publicado.

Cada capítulo se tratará de una pareja diferente, así que... ahí nos vemos, a ver cómo les queda el ojo xd

Nos leemos en algún lado~

Yumi~

Por la campaña "Con voz y voto": porque leer y/o agregar a Follow/Favs sin dejar review, es como agarrarme una teta y salir corriendo... no estamos para esos chistes, ¿verdad?