El universo y los personajes de Boku no Hero Academia son propiedad de Kohei Horikoshi, a mi solo me gusta jugar con ellos.

Fue una mera improvisación mi participación, lo hago con mucho amor, pero de verdad no esperen mucho.

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1. Pijama

La comodidad antes que la belleza, era un lema de vida para Uraraka, que solía llevar a la práctica todos los días.

(Sinmencionarqueaveceslabellezacuestadineroquenotiene).

Aunque ese no es el tema acá.

Así que por las noches, a diferencia de sus amigas, no podía darse el lujo de usar satén o seda, o cualquier lencería hecha de tela que cuesta más que su ingreso mensual.

Por ello, prefiere ir hasta el último cajón de su armario, ese que destinó para su novio desde que formalizaron su relación. Y no porque él vaya a dormir seguido a su departamento, porque Bakugo tenía muy en claro determinadas reglas que terminaban por frustrar a Uraraka cuando quería recibir amor.

Designó ese pequeño lugar para la ropa que había empezado a robar, no, no, no, robar suena mal, adueñarse del armario de su novio, sí, eso era lo más acercado a la realidad. Buscó entre chaquetas y camisas hasta encontrar su favorita.

La playera predilecta era simple, pero agresiva; como Bakugo. Negra, con una calavera blanca. A ella le gustaba usarla (por ser varias tallas más grande y muy cómoda) porque olía a él.

Se desvistió hasta quedar en ropa interior, para luego deslizar la prenda por su cuerpo. La tela comenzaba a volverse áspera por el uso continuo, pero aquello no le molestó, al contrario, emulaba la sensación de las callosas manos de su novio recorrer su cuerpo.

Sí, definitivamente la ropa de Bakugo era la mejor pijama.

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Procuraré que la mayoría de los capítulos sean cortos y concisos, de lo contrario, me atrasaré más. Espero traer actualización doble para ponerme al día pronto.

Y como regalo especia, intentaré que sean en su mayoría rosa, mantendré a raya mi vena angst.

¡Hasta la próxima!