Genos la Niñera

Era una noche común y corriente en la que el androide Genos se encontraba leyendo tranquilamente una revista en su apartamento de ciudad Z, hacía varios años que ya no vivía con su Sensei, por consejo de este último Genos salió a buscar "Su propio Camino lejos de la protección de su honorable maestro " para alcanzar el verdadero poder.

Un sonido de 8 bits se escucha en la sala, era nada menos que el teléfono celular de Genos y su curioso RingTone.

-¿Quién podrá ser a estas horas? De seguro es alguien de la asociación de héroes pidiendo ayuda para derrotar algún Monstruo. – Genos contesta con tranquilidad.

-¿Eh Genos, que tal? –Al escuchar la voz de la persona tras la llamada la mirada del ciborg se tornó nublada.

-¡Se-Sensei eres Tú!

-Sí, soy yo ¿Te sucede algo?

-Perdón Sensei no pude evitar emocionarme al escuchar su voz.

-Oh si, bueno, te llamaba para pedirte un encargo.

-Acepto.

-Oye, Pero aun no te he dicho de que va todo esto.

-No diga mas Sensei, sea cual sea la situación para la cual usted me necesite yo aceptaré sin titubeos, estoy en deuda con usted por sus invaluables enseñanzas y consejos, lo menos que puedo hacer es serle util, así que ya sabe cuenta conmigo para esto y para todo lo que usted necesite. –Dice Genos resplandeciendo de epicidad.

-Ya veo ¿estás seguro?

-Si Sensei.

-Muy bien, te veo en mi apartamento mañana a las 8:00 am.

-Allí estaré, cuente conmigo.

-bye bye. –Se despide Saitama.

En ese momento Genos sentía el concepto del deber correr por todo su robótico ser, al fin tenía esa oportunidad de demostrar toda la gratitud que sentía por su maestro y al mismo tiempo demostrarle todo lo que había avanzado por sí mismo.

-¡No te defraudaré Sensei! -exclama con energía Genos, mientras cierra su puño derecho con decisión.

–¡Bien, mañana será el día!.

Y así rápidamente pasó la noche y llegó la mañana.

Eran las 7:45 Am, Un somnoliento Saitama procedía a salir del edificio donde vivía, se encontraba llevando una bolsa de basura hasta el bote de desechos. En su camino de vuelta al edificio El héroe calvo nota algo.

-¿Genos?

- Sensei.

-¿Hace cuánto estas ahí parado?

-2 horas, 53 minutos y 47 segundos con 15 milésimas.

-Oh vaya, viniste muy temprano, bien, bueno ya que estas aquí ¿podrías hacerme un favor e ir a la tienda por unas cosas? te esperaré arriba.

-Por supuesto Sensei ¿Qué necesita?

Saitama da las instrucciones a su discípulo y ambos parten en direcciones distintas.

El tiempo corre y Genos al fin arriba al apartamento de su Sensei llevando consigo dos bolsas de supermercado, toca el timbre dos veces y la puerta aún seguía cerrada, antes de tocar la tercera vez la puerta es cubierta por un aura verde y se abre de repente.

-Pasa. –Dice una mujer menuda de cabello verde que se encontraba levitando al mismo tiempo que miraba a Genos con recelo.

La puerta se cierra mientras Genos entra y se dispone a dejar las bolsas sobre la mesa, de inmediato nota que hay unas maletas cerca de la puerta ¿Para que serán?

Mientras tanto La pequeña mujer no dejaba de clavar su mirada en el cyborg.

Tras un breve incomodo silencio la Heroína Clase S rompe el silencio.

-Demon Cyborg.

-¿eh?

-¿Tienes alguna idea en lo que te has metido? –Bufa la peli verde.

Genos la miró y recordó ciertos eventos, hace varios años por alguna extraña razón ella y su maestro comenzaron a salir luego al cabo de un tiempo terminaron por irse a vivir juntos, esos fueron los tiempos en que Genos Partió a su viaje de "entrenamiento e iluminación" dispuesto por la infinita sabiduría de su Sensei en donde estuvo alejado de la asociación de héroes y la sociedad por 5 años, hasta que hace unos meses regresó a ciudad Z. –¿Que misteriosa fuerza astral o fenómeno dimensional ocasiono que su Sensei y esa irritante enana terminaran juntos?

-¿Qué la habrá visto el Sensei á Tornado? – se preguntó el androide en voz baja.

-¿¡Que has dicho!?

-Nada, nada. Por cierto a que te referías con meterme en algo.

-Oh Genos, supuse que eras tú cuando escuché el timbre. –interrumpe un Saitama vestido con unos pantalones cortos y una camisa hawaiana.

Ambos miran al Calvo.

-Sensei por cierto ¿qué era eso encargo que querías pedirme?

-Ah sí, Genos… -Dice Saitama poniendo un gesto serio y sombrío.

-Sensei. –Responde Cyborg esperando alguna respuesta épica de su maestro.

-Necesito que vigiles a los niños por una semana. –Dice Saitama sonriendo amablemente.

-¿Niños? ¿Qué niños?

-Nuestros dos hijos, tarado. -Interrumpe la esper, flotando hacia donde estaba Saitama y poniéndose a su lado.

-¿Ustedes tienen hijos? –Pregunta un atónito Genos el cual estaba a punto de sufrir un corto circuito.

-Oh, si ¿No lo sabias? –Se pregunta el héroe calvo rascándose la cabeza. –de todas maneras es mejor que los conozcas. ¡Nadare, Saigetsu vengan!

Ante Genos aparecieron dos pequeños niños de cabello negro, un niño, y una niña, por su apariencia ambos oscilaban entre lo años. La niña tenía un vestido negro y llevaba el pelo peinado en dos coletas mientras sonreía con una dulzura descomunal, por otra parte el niño tenía el pelo alborotado y parecía no estar muy contento.

-Hola señor Robot yo soy Nadare. –Agrega la pequeña con un tono angelical.

-Y yo Saigetsu. –Susurra el chico, volteando la vista.

-¿Ya sabes a que me refería pedazo de hojalata? –Interrumpe Tatsumaki. -Si algo malo le pasa a mis bebes te convertiré en un Picasso ¿entiendes?

En un segundo Saitama se posa al lado de Genos y secretea en su oreja "No le hagas caso es muy sobreprotectora" al momento que regresa nuevamente al lado de la esper y toma las maletas.

-Te dejé una lista de las cosas que los niños necesitan hacer, apréndela como si fuera tu nombre. –Amenaza la heroína.

-Tats, Se nos hace tarde debemos irnos.

Al escuchar esto la peli verde se dirige hacia donde estaban los pequeños y acaricia la cabellera de ambos mientras sonríe amablemente. –Volveremos pronto pequeños, pórtense bien. Tras esto Tatsumaki se gira y da una mirada punzante a Genos mientras se retira levitando por la puerta.

-Eh, Genos, cuida bien de los chicos, confió en ti.. emm por cierto, ten cuidado Nadare. –Saitama sonríe dice adiós con su mano derecha y cierra la puerta con fuerza.

De inmediato la pequeña levita hacia donde estaba Genos, poniéndose hombro con hombro con él.

-Bien señor robot ¿A qué es lo primero que vamos a jugar?

-Error 404. –Responde el androide.

-¿Ehh?

Fin

Notas: Nadáre quiere decir Avalancha.

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