Disclaimer: La historia NO me pertenece. Esta basada en la Pelicula "A moment to Remember" Personajes pertenecientes a Stephenie Meyer.
Todos humanos.
Sumary:- - Que dices? Porque desaparecería tu alma también? – tomo su rostro entre sus manos y la miro – déjamelo a mí, si? – le sonrió – Yo seré tu memoria... Yo seré tu corazón, entiendes? – Le limpio las lagrimas con sus pulgares – solo... no me dejes.
Tráiler en mi perfil! No olviden verlo n_n
Bueno chicas, este es nuevo. Pero no se preocupen, no tardare como los otros. Lo tenía hace un buen tiempo escrito. Esta completo, así que subiré capítulos todos los días, serán como 6 o 7, no más de 10. Espero que me apoyen. Es una historia realmente hermosa. Espero que la disfruten n_n
Un momento para recordar
CAPITULO I
Oiga, disculpe – se acerco un mendigo – podría convidarme fuego? – pregunto levantando su mano, donde se encontraba un cigarro. El hombre que estaba sentado en la banca, lo miro en silencio, para después levantar su mano. El mendigo vio y era una carta, confundido negó con la cabeza – no, no eso... fuego, tiene fuego? – pero el hombre solo observaba, el mendigo ya arto rodo los ojos pero la voz del hombre atrajo su atención
- Cuando un recuerdo se va... también el alma se va... dicen – susurro. El mendigo se sentó a los asiento de atrás [son esos asientos, que están pegados por el respaldar, logrando que se den la espalda, no sé si me entienden]
- Ah! Recuerdo
- Cuando un recuerdo se va, también el alma se va – volvió a repetir, pero esta vez mirando al vacio. Se encontraban en una estación de trenes
- Oiga hombre, déjeme contarle una historia acerca del recuerdo – hablo el mendigo – cuando te vi sentarte aquí, te vi fumar – le reprocho – eso es un recuerdo – pero el otro siguió en silencio – sabe que estoy esperando aquí? No el fuego de un cigarrillo, solo estoy esperando el fuego...
- ... Así que... Hey señorita... – la joven jugaba nerviosamente con los tickets en sus manos – Hey... – ella miro al mendigo – tiene fuego? – ella negó con la cabeza, logrando que el hombre bufara – cuando podre fumarme esto?
- "El tren se está aproximando, por favor permanezca detrás de la línea amarilla" – la chica miro la hora en su reloj, y empezó a buscar a alguien entre la gente. Espero... y espero... pero cuando el tren ya había partido, humillada y con tristeza, tomo su bolso y se levanto con lágrimas en los ojos. Necesitaba ir a un lugar seguro, mirando hacia todos lados cubriendo su boca con el dorso de la mano, para amortiguar los sollozos, encontró una cabina telefónica y se adentro. Ahí trato de calmarse, luego de unos minutos lo logro, dejando los tickets sobre el teléfono, se marcho.
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La joven ausente, entro a una tienda y saco una lata de bebida, Coca-Cola. Se acerco a la caja y la dejo sobre el mesón esperando que el chico con acné la atendiera.
- Son **** – ella solo asintió y le entrego el dinero, tomo una servilleta que había en el mesón y limpio la lata – Ag! No otra vez – se quejo el cajero, saco dinero de su bolsillo y le paso – aquí tiene – ella lo tomo y se dirigió a la puerta. Cuando iba a unas cuadras miro su mano, y bufo.
- Tonta – se murmuro ella misma, al darse cuenta que no había cogido la lata. Se devolvió al negocio y al abrir la puerta se encontró con un hombre, ambos trataban de pasar, pero siempre iban para el mismo lado, en ese momento ella se fijo que en la mano de aquel hombre iba una lata, una Coca-Cola. Lo miro y el hombre se apoyo en la puerta y fijo sus ojos en ella. La joven castaña miro hacia el mesón del cajero, y no vio su bebida. Así que, empezó a armar un pequeño rompecabezas... el hombre alto y de cabello cobrizo trato de pasar, pero ella se puso enfrente. El sin quitar sus ojos verdes de los ojos color chocolates, abrió su lata... y cuando iba a tomar un sorbo, la chica se lo quito y bebió ella.
El la miraba sorprendido y a la vez confuso, cuando termino le entrego la botella y se marcho, el sonrió al verla, con aquella sonrisa torcida, y se llevo la lata a los labios, pero se sorprendió aun mas, al no caer ni una gota. Sonriendo nuevamente la vio alejarse.
.-.-.
- Señorita, por favor, no tengo todo el tiempo – La castaña buscaba y buscaba en su bolso "Mi billetera" pensó angustiada, pero después recordó "la tienda" se bajo del autobús, y volvió a ese lugar.
El chico con acné cuando la vio sonrió, y se agacho un poco para sacar algunas cosas, y las dejo en el mesón. Eran su billetera... y la lata de bebida.
- Debe estar con la cabeza en otro lado – ella asintió recordando lo que había ocurrido con aquel hombre con cabellos cobrizos, nerviosa tomo sus cosas y salió con un pequeño "Gracias".
Al estar en la calle, miro hacia todos lados, por si él se encontraba por esos lugares aun, pero nada. Resignada se marcho, hacia el lugar el cual pensaba que nunca volvería.
- Hija – susurro su madre al verla en la puerta con los ojos hinchados, la mujer solo la tomo entre sus brazos y la acompaño hasta su habitación. La castaña entro y miro... todo seguía igual.
- Bella? – la voz de su pequeña hermana las hizo volver a ambas – Oh, así que has terminado con él? – el silencio contesto a la pequeña, ella no había terminado con él, sino al contrario – que te dije? Lo sabia!
- Vanessa! –la llamo su madre para sacarla de la habitación – hija, ya cenaste? – le pregunto dulcemente cuando la pequeña demonio se había marchado – estas hambrienta?
- Isabella – canto su hermana – papá va a matarte
- Vanessa basta! – le reto su madre
.-.-.
Pero ella no salió de su cuarto hasta el otro día, en la hora de comer. Su padre estaba ahí, en la cabecera, a su izquierda estaba su madre y al lado de esta su hermana, y ella al lado derecho. Todos comían en silencio lo único que se escuchaba eran los sonidos que hacían los servicios al chocarse.
.-.-.
- Es ella? – Bella levanto la mirada y vio a todos sus compañeros que la observaban, pero cuando ella los miraba ellos volvían la vista a su trabajo
- Ella no se ve estúpida, o lo que sea
- Si, mira sus ojos, parece astuta. Como al engañaron así?
- Te gusta tu escritorio? – ella se volteo al escuchar la voz de uno de sus superiores y mejores amigos, Alec.
- Si – asintió
- Bienvenido a nuestro equipo – se acerco y le dio la mano, ella la estrecho – que tal un nuevo comienzo en el piso nuevo? – ella rio un poco incomoda – siendo una mujer tan femenina y tan sensitiva como eres... Puedes hacer ropa de hombres?
Ese era el nuevo trabajo de ella, era modista de trajes, ternos, smokings, camisas... todo lo que un hombre elegante usa.
- Debes ayudarme, aprenderé – ya que ella solo acostumbraba a hacer trajes, pero para damas.
- Apuesto que lo harás – se acerco una mujer de pelo rojizo – te ves perfecta para el trabajo – le dijo después de evaluarla con la vista de pies a cabeza - Soy Victoria Lefevre – le estiro la mano, la castaña la miro un poco desconfiada, pero se recordó que ella era su nueva jefa. Así que se acerco y se la estrecho
- Un gusto, soy Isabella Swan
- Escuche bastante de ti – Bella arrugo el ceño – de Leah Black... la esposa de tu ex-novio – le explico lo ultimo – ella y yo fuimos al colegio juntas... pero ella, ya no es su esposa
.-.-.
- Bien, aquí? – le pregunto la peluquera, que era su amiga.
- Más – le indico
- Mas corto? – le pregunto sorprendida
- SI Jessica – le comento cansada
- Estas segura? – la castaña volvió a asentir – No entiendo en que piensas, cortarse el pelo no ayuda a olvidar el pasado – en el momento que iba a cortar la castaña hablo
- Espera! Creo que sería mejor cortarlo hasta aquí – le comento indicando con su dedo, un poco mas abajo de sus hombros, Angela suspiro, algo era algo... no podía creer que ese hermoso pelo que le llegaba hasta la cintura moriría solo por un estúpido pasado.
- Solo recuerda, que el tiempo remedia todo – fue lo último que le dijo antes de cortarle el pelo.
.-.-.-.3mesesdespues.-.-.-.
- Se siente muy bien saliendo con mi niña – ella se giro y vio a su padre manejando.
- Papá, no me odias? – el arrugo el ceño – le he dado a la familia un mal nombre, has tenido que ir a la comisaria muchas veces a causa mía
- Lo hice? – le pregunto con una pequeña sonrisa, ella bufo –olvidar fácilmente, es un regalo – un poco más serio agrego – deja que se vayan tus viejos errores. Haz un nuevo comienzo hija.
Siguieron en el auto en silencio, pero ya no eran tan incomodo como al principio, su padre se desvió en el camino. Se dirigió hacia una faena de construcción, se estaciono.
- No tomare mucho tiempo, quieres acompañarme? – le pregunto mientras se desabrochaba el cinturón de seguridad
- Ve tu, me llenare de polvo si salgo – comento riendo, su padre rio también y salió. Lo vio acercarse a un obrero y este le entrego un casco. Ella para pasar el rato, prendió la radio del vehículo
-"Con la soñolienta brisa primaveral alrededor tuyo, aquí una canción para levantarte. Volveré mañana y esta es la ultima canción por hoy. La Paloma [link de la canción en mi perfil]" – escucho al locutor de radio
.-.-.-.
- Que pasa contigo? Si no terminamos esto ahora mismo, que vas hacer con eso! – le reclamo al mas joven
- Es que acaso estoy hablándole a una pared? Estamos hablando con rodeos, basta de desperdiciar mi tiempo – Charlie Swan al ver la discuta entre los trabajadores se acerco a ellos
- Hijo de... – pero el obrero se detuvo al ver a su jefe – señor – lo saludo
- Cual es el problema...?
- Oh! Newton, Michael Newton – se presento - Señor, los camiones de cemento están todos aquí – le comunico – pero este granuja no les dejara hacer su trabajo – apunto al joven, este solo se dio media vuelta rascándose la parte detrás del cuello – sabes cuánto nos costara si los mandamos de vuelta? – se acerco a él
- Bien! Adelante! Echa el montón de mierda, no será mi lio después de todo – se giro para marcharse - no me vengas a llorar después, demonios! – se alejo tirando su casco
- Que dem... quien se cree que es? – lo siguió, Charlie Swan al ver algo raro. También lo hizo
- Espera, eres el capataz, no? – el chico se detuvo y lo miro – cuál es tu nombre?
- Esta es la 30va vez que me lo ha preguntado – bufo – Soy Edward Masen – Charlie rio
- Cierto, disculpa Masen – le golpeo el hombro – ahora dime, cual es el problema?
- Problema? El problema es que el molde no es lo bastante fuerte para sostener el concreto
- De que hablas chico! – le grito el viejo
- Llovió un montón la semana pasada, y ni siquiera hemos hecho el andamiajes! Que si colapsa después de que la gente se instale? Eh!
- Colapsar? No seas de mal agüero, chico!
- Basta, calmémonos. Está bien, Masen. Déjame echar un vistazo
- Claro – murmuro mirando fijamente a Newton que aun reclamaba. Lo llevo y le mostro. – ve? De ningún modo podemos terminar esto para mañana a la mañana – se enderezaron – hágalo pasado mañana, por su propio bien – dicho esto, inclino un poco la cabeza y se giro
- No sabes lo que estás diciendo – siguió hablando Mike – solo eres un carpintero asustado! – Masen recogió su casco y se lo puso
- Mire, solo le digo esto de mi experiencia, hágalo hoy y colapsara – se acerco a Swan – si no quieres estar en las portadas de las noticias, no lo haga - y dicho esto se marcho.
Al llegar abajo, se quito el casco y encendió un cigarro. Paso por al lado de un carísimo auto y pensó inmediatamente que sería de ese Swan.
Bella que estaba dentro lo miro al principio confundida "donde lo he visto?", pero después su expresión cambio a una sorprendida, "la bebida!" se acordó. Planeaba bajarse pero en ese instante sintió la puerta abrirse, su padre había llegado.
- Que temperamento que tiene – exclamo, mientras ambos se colocaban el cinturón
- Quien?
- Olvídalo cielo, vamos a comer – y arranco el auto, pasando por al lado de Edward, Bella se giro y lo vio apoyarse en un camión mientras exhalaba el humo del cigarro.
.-.-.
- Pensé que las renovaciones podrían estar hechas ahora – comento Bella después de ver la oficina de su amigo en un estado deplorable
- Me estafaron – se explico suspirando – tenia a mi colega para que haga el proyecto, pero tomo el dinero y se fue – Bella lo miro asombrado – y además, ya le pague – se cruzo de brazos y camino por toda la sala – demonios! – golpeo uno de los andamios
- Déjame ver qué puedo hacer – él se giro a verla – puede haber una salida, Alec
- En serio? Como cual?
- Conozco gente – le sonrió
- Realmente te lo agradecería – le sonrió
- De acuerdo, solo dame un tiempo – camino hacia afuera y llamo a su padre
.-.-.
- Papá, estás seguro? – le pregunto feliz mientras dejaba su taza de café en la mesa
- Por supuesto! Al fin y al cabo soy tu pelele* favorito, no? – rio su padre por el teléfono
- No – rio ella – no eres mi pelele! Eres mi navidad!
- Navidad? – pregunto confundido, a lo que ella rio más fuerte.
- Digo mi Papa Noël - rio
- Ok, basta. Te enviare a alguien. Deja que los chicos acuerden con él. Bien?
- De acuerdo
- Te debo advertir que él es un poco rudo... y violento. No lo molestes
.-.-.
- La persona estará aquí en unos momentos
- De verdad, gracias por la ayuda Bella
- Descuida. Ven vamos a buscarlo – se dirigieron al ascensor para ir a buscar al empleado que su padre había mandado. Pero cuando las puertas de este se abrieron, la castaña se sorprendió "es él" pensó. Era el hombre cobrizo que había visto en la tienda y en la construcción. El hombre la miro, mientras guardaba algo en su cinturón de herramientas, solo que él lo llevaba colgando del hombro.
- Wow, ya esta aquí – la chica salió de su trance y se giro evitando mirarlo – tomemos un café en mi oficina – le ofreció Alec a Edward
- Donde está el lugar? – le pregunto ignorando la invitación. Isabella aprovecho ese momento para salir a paso apresurado
- Oh, bueno... es por aquí – al llegar, el cobrizo miro todo y se saco su chaqueta quedando con una camiseta blanca que se adhería a su pecho, la castaña lo miraba desde lejos, a través de una cortina de plástico transparente
- Donde están los planos del piso? – pregunto mientras se ponía un lápiz sobre su oreja [no sé cómo explicar eso, pero creo que entienden xd]
- No tenemos ninguno. El tipo se escapo – el cobrizo asintió
- Porque el empapelado esta hecho trizas?
- Oh, no tengo idea... pero... hey! Que está haciendo! – Alec alarmado, veía como Edward empezó a rasgar el empapelado de la pared, y después con su martillo golpeaba la pared. Bella escondió una risita.
Después de un tiempo, salió de ahí y fue hacia una maquina de bebidas, introdujo el dinero y luego selecciono cual quería. Se acuclillo y espero, hasta que esta salio. Estiro su mano para sacarla pero una entro y la saco, ella rápidamente se levanto y se giro, sorprendiéndose al encontrar al cobrizo cerca de ella. Se recargo contra la maquina levantando las manos en modo de protección. El limpio la lata, la abrió, y comenzó a beber... con la cabeza ligeramente levantada. La castaña miro hacia el frente y su vista dio con su garganta, hipnotizada por el movimiento que hacia su manzana de Adán*. Cuando termino, le entrego la lata y se giro marchándose del lugar, dejando a Bella sorprendida.
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