Hola mis jóvenes y no tan jóvenes lectores.
No soy tan nueva en esto de las historias, pero es la primero que publico en Internet, o al menos en esta página.
Pero si es la primera historia de Homestuck que me atrevo a subir, espero críticas y comentarios.
Título: Chica Fantasma ¿Porqué arruinas todo?
Summary: "Tú no eres real, nada es real, todo lo que creía ver de niño no era real. Entonces, si no es real ¡¿Cómo carajos te puedo ver?!"
Disclaimer: Homestuck no es mío, si lo fuera no hubiera alcanzado su fama actual y estaría lleno yaoi.
Advertencias: Shonen-ai, las "dulces y melodiosas" palabras del querido Karkat y uno que otro personaje, brujería y locura.
Notas: Aradia aquí está muerta, pero aún conserva sus memorias y se comporta como si estuviera viva-Aunque a mí me salió un poco OoC, creo- . Como si fuera el web cómic, tiene sus poderes sobrenaturales.
Para no importunar más, sigo con la historia.
Capítulo 1: Necesito un favor.
Corres lo más rápido que puedes, la gente creería que te has olvidado algo o estás muy apurado para llegar a tu destino, cualquiera creería eso. Pero nadie lo hace, en realidad todos a tu alrededor te miran con preocupación, como si estuvieras loco por estar gritando maldiciones y uno que otro "Aléjate" a todo pulmón, posible persecución, pero nadie te persigue según los demás.
Un nadie que solo tú puedes ver.
Siempre creíste que era producto de tu imaginación, ya que, por culpa de "ellos" terminaste en un sillón en el consultorio de un psiquiatra, el cual hizo que toda tu infancia se fuera al tacho, simplemente por no querer aceptar que lo que veías era simplemente falso.
Llegas a un callejón, te metes ahí con la respiración entrecortada, apoyando tus manos en las rodillas, intentas recuperar el aliento mientras intentas asumir lo que te acaba de pasar.
- Karkat ¿Podrías escucharme?
Aquellas palabras te helaron, intentas recobrar conciencia de lo que pasa a tú alrededor, pero una desafortunada lata terminó con todas tus esperanzas de salir corriendo del lugar. Al parecer tu nombre es Karkat, así es como el otro ser presente te llamó. Caíste de cara al suelo, así que levantas la mirada viendo al ser que tienes al frente.
- Karkat, deja de huir, en realidad necesito que guardes la calma -La voz te sonaba familiar, pero a pesar de ello su apariencia no le favorecía a su petición.
Piel grisácea, como si no hubiera tenido contacto con el sol durante varios días, largo cabello ondeado castaño oscuro, lleno de polvo y pedazos de vidrio diminutos, el final de la larga falda estaba destrozada, dejando ver parte de las canillas, casi llegando a las rodillas. Pero lo que más aterrorizaba al joven castaño y de grandes ojeras era aquella mirada vacía, un par de ojos totalmente blancos.
- ¿Cómo sabes mi nombre? -Preguntas asustado.
-¿No te acuerdas de mí? -Viste que la chica -Por que eso suponías que es- al frente tuyo se sintió dolida, sientes algo de ¿Pena? ¿Por qué? Si ella te había perseguido hace un rato haciéndote quedar como un completo loco.
- Creo que... no –Contestas intentando recobrar la cordura, piensas que tal vez estás imaginando su apariencia actual. Te acomodas y quedas sentado frente a ella.
- Bueno, hace tiempo que no nos vemos, así que es normal que te hallas olvidado de mí. Soy yo, Aradia Megido -Ella se pone la mano al pecho, tú ahora estás más confundido que antes y el miedo que tenías regresó.
- P-Pero si tú estás…
- Muerta, lo sé -Y esas palabras quebraron lo poco de cordura que te quedaba.
Gritaste, te levantaste cómo pudiste pero una fuerza mayor a la tuya hizo que volvieras al suelo, levantaste la mirada y viste a Aradia flotando frente tuyo con la mano derecha levantada y una tenue luz blanca cubriéndola.- Si no quieres acabar como yo quédate quieto y escucha -Su voz espectral retumba en tus oídos.
- B-Bien -Tartamudeaste, aunque no lo admitas tu miedo aumentó con las palabras de la chica fantasma.
- Quiero pedirte un favor -Ahora su voz sonó calmada- Es algo muy importante...
Más tarde, ese mismo día…
- No.
- Pero.
- No, no y simplemente no -Repetiste haciendo movimientos raros con los brazos frente Aradia.
Ahora te encuentras en el departamento que compartes con tu mejor amigo -Este por suerte no se hallaba presente- Pero ¿Por qué ocultarlo? Hace más de un año dejaron de ser amigos a pasar a ser algo más; novios como diría tu pareja sin temor a recibir un golpe por parte de tu avergonzada persona.
- Karkat, he visitado a todas las personas que han sido y son cercanas a él, eres el único que puede verme. Por favor, no va a ser durante mucho tiempo -Suplicaba la chica, pero a cada palabra que salía de sus fríos labios tú te negabas mucho más.
- Lo que me estás pidiendo es una locura Aradia, una total y simple locura.
- Pero-
- Sin peros -La interrumpes, mirándola con el ceño fruncido, tus ojos marrones ligeramente rojizos se clavaron en ella como si fueran un puñal, haciéndola sentir mal.
- Si no me ayudas no podré cruzar al "Otro lado" -Te dijo con un tono totalmente triste.- Solo quiero que él sepa que lo quiero, nada más.
- ¿Pero cómo quieres hacerlo? ¿Quieres que valla en frente de él y le diga "Oye Sollux, adivina que, me encontré con tu amiga muerta, Aradia, y me pidió que te dijera que ella te amaba mucho, mucho"? –La última pregunta la hiciste con un tono agudo, tratando imitar el de la chica, pero de una forma que la hiciera sonar estúpida.- Pues ni mierda -Dijiste fulminante, te volteas dando por terminada la conversación, y justo antes de avanzar un paso más para ir a la comodidad de tu habitación escuchas unos sollozos a tu espalda.- No puede ser -Murmuras volteando, y ahí la ves.
Aradia frotando sus manos contra sus ojos mientras lágrimas caían por sus grises mejillas.
Entonces te sentiste culpable, te acercas a ella.
-Oye, deja de llorar…-Ves que no hace caso a tus palabras. Simplemente no crees que es lo que vas a decir.- Está bien, te ayudaré -Dices de forma pesada, miras como ella se limpia las lágrimas y te sonríe como si nada hubiera pasado.
- Genial ¡Mañana empezamos! -Dice emocionada. O es bipolar o está jodidamente loca, piensas mirándola con el ceño fruncido.
- Bueno, con tal de que no me jodas el día.
- Tranquilo, no interrumpiré en nada, lo prometo -Ves como ella sonríe, una sonrisa estúpida piensas tú, te hace recordar a alguien... Alguien que tú quieres mucho... Alguien que tú quieres mucho y vive contigo... Contigo.
- ¡MIERDA! -Gritas exaltado, corres a una habitación que quedaba cerca de la sala, cerraste la puerta de golpe.- ¡ME OLVIDÉ DE GAMZEE!
Aradia se acerca flotando a la puerta que hace unos segundos se cerró de forma violenta, escuchó el sonido de agua cayendo de forma algo violenta, y un pequeño "Mierda, que fría" por parte del chico.
- Este ha de ser el baño -Piensa Aradia haciendo una gran deducción.- ¿Quién es Gamzee? -Pregunta en voz alta al otro lado de la puerta.
-¿No lo conoces? -Le respondes a Aradia con otra pregunta.- É-él es mi... bueno -Te sonrojas mientras pasas tus manos por los brazos, sintiendo leves marcas de mordidas en ellos.
- ¿Tu novio? -Pregunta divertida la chica fantasma, eso hace que te pongas más rojo.
- ¡Cierra tu puta boca, Megido! -Le gritas avergonzado, hasta ahora no entiendes por que te da vergüenza admitir que tú y él son pareja, simplemente lo sientes y ya, tal vez será la forma en la cual tu novio lo dice. Ni tú mismo llegas a entenderte.
- Oh, que rudo –Murmura Aradia para si misma, no está tan sorprendida de tu reacción.- Entonces sí lo es -Afirma la chica fantasma con una sonrisa bien marcada en sus labios.- ¿Vas a salir con él?
- Sí, y ahora cállate si no quieres que rompa nuestro trato -La chica obedeció, pero entonces algo de pronto se le ocurrió.
- ¿Y si Gamzee me puede ver? ¡Tal vez también pueda ayudarme! -Piensa felicitándose a si misma por la idea.
Eso significa que ahora la cita de dos iba a incluir a uno más.
Fin del capítulo 1.
¿Qué tal? Sugerencias/Comentarios/GamKar (?), todo bien recibido pero con amor y comprensión.