Antes de leer, debo advertir que estoy enamorada de Saitama y el nunca hace nada mal, asi que no se sorprendan si lo pinto como a el príncipe azul owo.
Saitama no era tonto.
Saitama no era tonto, nunca lo fue el simplemente dejaba pasar las cosas, no le gustaba complicarse.
Hacía tiempo que veía, sentía y notaba todas las acciones de Genos. Al principio se sintió incomodo pero dejo de importarle conforme pasaban los días calmándose a si mismo diciendo "Asi es Genos".
Genos oliendo sus sudaderas antes de ser lavadas con una devoción y una firme misión de grabarse el olor.
Genos cocinando cada capricho que él tenía con cariño.
Genos fingiendo tener frio por las noches para acurrucarse más cerca de él.
Genos observándolo embobadamente cuando salía del baño solo con pantalones.
Genos celándole cuando cualquier amenaza (Llámese Sonic) se acercaba.
Genos tomando misiones por el para ahorrarle la fatiga.
Genos comprándole mangas o dulces para consentirle.
Genos.
Genos.
Genos.
Genos.
Un escalofrió le recorrió todo el cuerpo al darse cuenta de sus propios pensamientos. El joven Cyborg no salía y no había salido de sus pensamientos hace mucho tiempo. Si tuviera cabello en ese instante lo estaría halando con desesperación. Hacía tiempo que había dejado de "No importarle"
Pero Saitama no era tonto, no señor, él no era tonto. A él no le gustaba complicarse…
-Oye Genos… - Saitama se acercó por la espalda al Cyborg y lo abrazo - ... ¿Quieres salir conmigo?
… Pero de vez en cuando una que otra complicación valía la pena.
Agradezco la lectura :)
