Este es otro de los trabajos de mi buen amigo jm1681, este fic es bastante largo y espero poder traerles al menos un cap al día.

Sin más preámbulo ahí tiene todo lo que su cerebro tiene para entregar y sus comentarios.

Nota del Autor: Bueno, mi auto-exilio de Black Lagoon duro ¿qué? ¿13 días?

Lo que tenemos aquí es básicamente un ejercicio de sexo. Nunca he sido bueno para escribir sobre sexo, así que el viernes pasado me senté a escribir una escena con mis peones favoritos. En el proceso recordé una idea que había tenido hace unos meses y bueno, 12000 y algo palabras después, termine con 5 escenas que vale la pena practicar y un fic.

Como siempre, soy bastante aprehensivo de mi trabajo, pero extrañamente, me siento bastante bien sobre este. Trate de mantener un cierto balance en lo que se refiere al sexo, espero que sea ni mucho ni muy poco.

Bueno, mis notas de autor están casi tan largas como algunos de mis fics. Una vez más. No tengo soy dueño de Black Lagoon.


Como la mayoría de las mañanas en Roanapur, el sol brillaba a través de las agrietadas persianas del departamento de Rock. El japonés había puesto su cama intencionalmente en esa posición para que el sol al levantarse lo despertará. Esta mañana, sin embargo, la cama de Rock estaba aun perfectamente hecha y su ocupante brillaba por su ausencia. Al otro lado de la cuidad, en cambio, la cama de Revy había estado trabajando doble turno, triple incluso si se tomaba en cuenta el abuso que ella y Rock habían puesto en el pobre mueble durante la noche.

Todo había comenzado una semana antes, con lo que parecía un viaje rutinario al Yellow Flag. Rock y Revy estaban sentados en el bar bebiendo para olvidar el dolor de largos días de trabajo. Hacia menos de un mes Rock había tenido que observar como la heredera de un clan Yakuza de solo 16 años de edad forzaba una cuchilla por su garganta, dejándolo preguntándose exactamente donde estaba él en el mundo. Rock sabía que nunca sería como la atrevida pistolera que tenía por compañera o como el hombre a su izquierda, cuyo nombre desconocía, pero después de pasar tanto tiempo en la oscura Roanapur, se preguntaba, ¿volvería a ser normal alguna vez? Sin deseos de seguir cuestionando las calamidades de la vida, siguió ahogando sus pensamientos en su vaso de Bacardi 151

-¿Tenias una novia en Japón, Rock?- fue la pregunta que su compañera sintió la necesidad de preguntar.

-¿Qué?- respondió girando lentamente su cara hacia ella, como si no la hubiera escuchado.

-¿Tenias una "amiga con beneficios"?

A pesar de que se había acostumbrado al vocabulario de Revy, el tono de su pregunta y su humor causaron que respondiera un poco disgustado

-¿Por qué te importa?

¿Qué le importaba?, en su línea de trabajo, Revy no podía darse el tiempo para una relación, no que tuviera el deseo de tratar con el apego que conllevaban. Obteniendo lo que quería, cuando lo quería, sin nombres o ataduras, solo el sexo ocasional. Aun sabiendo que las relaciones "inter-office" nunca eran una buena idea, cuando estuvieron solos en Japón, Revy había comenzado a pensar en el prospecto de intentar y llevar a Rock a su cama. Que fuera apuesto no ayudaba para nada, ni el hecho de que pasaban una increíble cantidad de tiempo juntos durante el cual ella no estaba haciéndose cargo de sus "negocios".

-Nunca te pregunté y tú nunca lo mencionaste- dijo Revy mientras su compañero vaciaba de golpe el nuevo trago que Bao le había servido.

-Pensé que los curiosos eran mal vistos aquí- Dijo Rock observando como Bao le servía otro trago.

-Y yo pensé que a gracia de beber era olvidar todas esas estúpidas reglas sociales, esas reglas no aplican cuando estas ebrio, mierdesilla.- y no se podía negar que estaban ebrios.

-¿Qué dices, Rock?- preguntó Revy con una ligera sonrisa- hemos tenido un largo día, déjame escuchar algo interesante.-

-No- fue la simple respuesta.

-¿A qué te refieres con no?- dijo Revy desdeñosamente.

-No tenía a nadie, Revy- respondió el hombre de negocios volviéndose hacia ella viéndose increíblemente deprimido.- ¿estas feliz ahora?

A pesar de la confusión provocada por el alcohol, Revy sintió una pisca de tristeza, a pesar de que sus intenciones no podían haber sido más egoístas, nunca había intentado hacerle daño. Ordenando sus pensamientos encontró la mejor versión de una disculpa que era capaz de producir.

-Debes de haberte sentido solo-

-Repito: ¿por qué te importa?- Rock respondió malhumorado.

-Vamos, dame un poco de crédito, quieres. A veces me sacas de quicio pero somos amigos, ¿no?-

-Seguro- respondió simplemente antes de volver a mirar fijamente su vaso.

Revy sintió como un vacío se formaba en ella a tiempo que observaba silenciosamente el triste estado de Rock, en los últimos meses, el japonés se había vuelto el amigo más cercano que había tenido y viéndolo en ese estado estaba comenzando a afectarla a ella también. En ese momento, viéndolo tan malhumorado Revy sintió el deseo de animarlo.

-¿Quieres que le dispare a alguien?- dijo sacando una de sus pistolas, después de haber buscado en su cerebro por algo que lo animara o al menos que lo sacara de ese humor.

-¿Por qué mierda querría que le disparas a alguien?- a pesar de que no había sido lo mejor o lo más brillante que decir, había tenido el efecto deseando, hacerlo reaccionar.

-No sé- respondió volviendo a guardar su arma- a mí siempre me hace sentir mejor.-

-Bueno, yo no soy tu, Revy. A mí no me hace sentir mejor ver gente morir. De hecho creo que una pequeña parte de mi muere cada vez que veo a alguien ser asesinado.-fue la respuesta de Rock.

-Uno de estos días, Rock- la culpa sobre el humor en el que Rock se encontraba se desvaneció rápidamente luego de escuchar ese tono tan condescendiente.

-Uno de estos días ¿Qué?-

-Uno de estos días te darás cuenta de lo insignificante que es la vida en verdad- dijo encendiendo un cigarro y cruzaba as piernas- el mejor consejo que puedo darte compañero: toma lo que sea que quieres mientras tengas la oportunidad, porque un día no serás nada más que comida de gusanos.-

-Es bueno saber que siempre puedo contar contigo para animarme, Revy- luego de esa declaración Rock vacio otro vaso.

-¿Qué mierda esperabas, Rock? Estas ahí sentado como si tu perro favorito hubiera muerto, y ¿por quién? ¿Por qué? ¿Yukio? Dame un maldito descanso.-

-Ella no merecía la mano que le toco vivir.-

-Mierda… -golpeando el vaso que acaba de beber, se levantó de su asiento y replicó- ahórrame esta maldita conversación.-

-¿A dónde vas?-

-A echar una meada mientras lloras con otro trago.-

"Toma lo que sea que quieras mientras tengas la oportunidad" Las palabras de Reby seguían plagando su cabeza al tiempo llevaba el vaso a su boca. Dejando su vaso de golpe Rock se levantó rápidamente de su asiento. Después de casi caerse se dirigió rápidamente al baño. La puerta del baño de damas estaba cerrándose tras Revy cuando Rock entró tras ella, evitando que pudiera cerrarla.

-¿Qué demonios etas haciendo, mal...?- gritó Revy a la defensiva.

-Estoy tomando lo que puedo mientras tengo la maldita oportunidad- respondió Rock, forzando su mano en sus shorts, provocando que el cuerpo de Revy temblara al sentir sus dedos dentro ella de paso evitando que terminara de hablar.

-¿Estás seguro de esto?- pregunto Revy luchando por mantener la cabeza clara a pesar de que Rock estaba golpeando todos los puntos que debía.

-¿Qué mierda tengo que perder?- fue toda a respuesta que consiguió, Rock seguía trabajando dentro de ella causando que sus ojos rodaran y que su cabeza cayera hacia atrás haciendo que tuviera q luchar por mantenerse de pie.

-Esa es una buena respuesta- dijo Revy levantando la cabeza y abriendo sus ojos para mirarlo.

Alcanzando la puerta y poniéndole el seguro noto que Rock desabrochaba su cinturón, provocando que sus shorts cayeran al suelo, ella comenzó a trabajar en desabrochar el cinturón de Rock dejando caer sus pantalones al suelo. Así como él tenía sus manos en ella, ahora ella tenía sus manos en él. Como Revy había luchado para mantener un nivel de cordura unos momentos antes, Rock se encontró en la misma situación cuando sus manos, sorprendentemente delicadas rodearon esa sensible parte de su anatomía.

No había necesidad de esperar a que poleras o camisas fueran removidas, en cuanto sus boxers estaban a medio camino de sus piernas, Revy se encargó de sacar su ropa interior y Rock forzó su espalda contra la puerta. Con un corto salto Revy puso sus piernas alrededor de su cintura y con su mano se encargó de guiarlo, Rock había puesto sus manos tras ella como soporte, sus miradas se encontraban por un momento, la anticipación clara en ambos. Esto era algo que se veía venir desde hace mucho tiempo entre ambos y aunque este no era el mejor lugar para su primer encuentro, ¿había otro lugar que fuera más apropiado?

Bajando sus caderas al mismo tiempo que él se empujaba a si mismo hacia adelante, sus cuerpos se combinaron en un violeto movimiento. Sus miradas se encontraron cuando Revy recuperaba el aliento y ambos permanecían sin moverse perdidos en los ojos del otro. Lentamente una inocente sonrisa se formó en ambas caras; la vida de Rock podría haber terminado en ese instante y él podría haber muerto como un hombre muy feliz. Cualquier cosa que ella dijera después, nunca podría borrar la pureza de esa sonrisa.

-¿Bueno y ahora qué, Rock?

Con esa pregunta en el aire Rock de a poco fue desarrollando un ritmo constante de jadeos y quejidos. El alcohol en su sangre causo que la situación fuese haciéndose camino en su mente lentamente, pero aun así de una manera hermosa. La calidez que lo rodeaba, el placer que sin duda estaba entregándole a su increíble compañera, el sonido de su voz cuando gritaba en éxtasis.

-Mierda- cada cierto tiempo una palabrota escaba de los labios de Revy.

-¿Revy…?-preguntó Rock

-Sigue…-sabiendo que era lo que él estaba preguntado esa fue lo única respuesta que fue capaz de dar cuando él seguía llenándola con embeleso.

Su paso bajo un poco en intensidad y Rock dejo escapar un quejido al tiempo que dejaba escapar hasta lo último de sí mismo en ella. Revy en tanto dejo colapsar su cabeza en el hombro de su compañero con sus brazos sujetos tras él. Casi como si estuviera preguntándole a través del gesto, Rock puso sus manos en su cintura y la ayudo a poner en pie al tipo que permitía q sus cuerpos se separaran. Cuando sus pies tocaron el piso, Revy soltó sus brazos y se permitió a si misma buscar apoyo en la puerta a su espalda.

-¿Te sientes mejor?- preguntó en entre bocanadas.

Apoyando sus manos contra la pared para mantener el equilibrio intentando volver a la normalidad; sin duda había disfrutado el mejor sexo de su vida, con la mujer más asombrosa que había conocido y lo único en lo que podía concentrarse era en no vomitar.

-¿Rock? ¿Estás bien?- pregunto Revy inclinando su cabeza a un lado.

-¿Acabo de cometer el error más grande de mi vida?- pregunto él ahora que todas las potenciales ramificaciones del imprudente acto cruzaban su cabeza.

-Por mi bien, de verdad espero que no.- dijo Revy inclinándose para recoger su ropa interior y sus shorts. Poniéndose sus ropas y en un acto de afección sin precedente le ofreció una sonrisa y poniendo sus delicadas manos en su cara- Oye…-cuando sus ojos se encontraron continuo- no me molesta, Rock.-

-Como si el peso de mundo hubiera desaparecido de mis hombros- dijo Rock mientras unas gotas de sudor rodaban por su cara.

-¿Qué?-

-Preguntaste si me sentía mejor- respondió provocando una pequeña risita en Revy- cuando despierte con resaca mañana, sé que esta parecerá la peor idea de mi vida, pero en este momento, no creo que alguna vez me halla sentido mejor.

-Bien- replicó Revy observando a Rock se agachaba para arreglarse sus bóxer y pantalones- estaré en el bar- dijo con una sonrisa abriendo la puerta.

Procediendo a arreglar su cinturón mientras Revy salía del baño, la observo alejarse sintiendo que ella era una diosa, al menos para él y a pesar de que su cuerpo seguía bajo los efectos el alcohol, la sonrisa de Rock era incontrolable. Pero antes de que la puerta pudiera cerrarse completamente tras ella, Revy la detuvo y girando su cabeza para mirarlo preguntó:

-¿Mañana a la misma hora?-

-¿Qué?

-No te hagas el idiota. Ambos sabemos que lo disfrutamos- dijo soltando la puerta- nos estaríamos jodiendo a nosotros mismo si no lo hiciéramos de nuevo.-


Nota del Traductor: Puede que suba otro capítulo durante el día, aunque no sé, acá llueve y llueve y no me dan ánimos de hacer nada, pero este fic es largo así que esperen más al menos un capitulo al día.

Si no han visto Black Lagoon, como me paso a mi cuando comencé a trabajar en este fic, la recomiendo bastante.