Hola!!
Bueno la verda soy algo nueva en esto de escribir fics, aunque ya haya empezado otro, que desúés deje boptado y que ahora voy a retomar, así que plis leánlo y me dicen que piensan para ver si tengo que mejorar algo, no se.
Se cuidan, nos vemos abajo.
Llegué hermanito
¡Apúrense que llegamos tarde!
Uno a uno fueron pasando la barrera del andén nueve y tres cuartos, y cuando Harry que era el último en la fila para atravesarla la traspasó, sonó el pitido del tren anunciando su partida.
¡Rápido!
Casi no llegamos –dijo un pelirrojo jadeante.
¿Y tu por qué crees que será? –preguntó su hermana irónicamente.
Que te acuestes a las 9 de la noche, no significa que todos tengamos que hacerlo también.
No, pero por culpa tuya casi perdemos el tren. Y no me acuesto a las 9.
¿Por qué por mi culpa?
¿Será porque tu te quedaste dormido y nos atrasaste a todos?
¡Ya basta! –exclamó Hermione enojada– Están haciendo que quedemos en ridículo, después siguen con su amable conversación de hermanos, pero ahora Ron y yo tenemos que ir al compartimiento de prefectos y tú y Harry podrían ir a buscar un vagón ¿no creen? –les espetó, mirando a ambos pelirrojos duramente.
Está bien –contestaron ambos a regañadientes.
¡Ron!
¿Qué?
¡Vamos!
Sí, claro.
Harry y Ginny siguieron caminando a través del pasillo del tren buscando un vagón vacío, cuando de repente se encontraron con un chico de dentadura algo torcida, cabello marrón oscuro y algo relleno.
Hola Neville –saludó Harry.
Hola Harry, Ginny. ¿Cómo han estado?
Bien ¿y tu?
Bien también. Estaba buscando un compartimento ¿Por qué no vienen conmigo?
Claro
Y bien ¿Qué han hecho este verano?
Pues... mi hermano Bill se iba a casar, pero debido a problemas de salud, tuvieron que posponer la boda –respondió Ginny un tanto apenada.
¿Todavía no se recupera bien de las mordidas? –Ginny negó lentamente con la cabeza
Miren aquí hay un compartimiento vacío –interrumpió Harry la triste conversación.
Perfecto, no creí que quedaran compartimentos vacíos a estas alturas.
Tengo que reconocer que yo tampoco, pero que más da.
Había pasado alrededor de una hora en la cual los tres chicos estuvieron conversando animadamente acerca de lo que habían hecho durante las vacaciones, cuando la puerta del compartimento se abrió y entraron por ella Ron y Hermione.
Ya llegamos –dijo Hermione, mientras ella y Ron entraban al compartimiento.
¿Qué tal la reunión? –preguntó Harry
Igual de aburrida que siempre.
¡Ron!
¿Qué? No puedes negar que son para quedarse dormido esas reuniones, aunque para ti...
¿Para mi qué?
Nada, nada.
Más te vale. En fin –dijo esta vez dirigiendo la mirada hacia los demás ocupantes del compartimento– fue lo mismo de siempre, el recordatorio de que tenemos que hacer cumplir las reglas, aunque no debemos sobrepasarnos, la asignación de los turnos para la ronda de vigilancia y bla, bla, bla.
Entonces Ron no estaba tan equivocado al decir que estuvo aburrida –se aventuró Neville a contradecir a la castaña.
Ese no es el punto, el punto es que...
Nos volvimos a equivocar Blaise –exclamó un chico rubio a otro moreno, quienes acababan de abrir la puerta del compartimiento donde los chicos se encontraban conversando.
¡Malfoy! –exclamó Hermione irritada.
¡Vaya que tenemos suerte! –exclamó el moreno, dirigiéndose al rubio, ignorando el comentario de la chica.
¡LARGO PAR DE VÍBORAS! –les gritó Ginny
¡Hey! Cuida los modales de tu novia cara rajada ¿No querrás que le pase nada cierto? –le espetó Draco a Harry.
Ella puede decir lo que quiera Malfoy.
Vaya, vaya a san Potter le salieron agallas, quien lo diría –exclamó Blaise divertido.
Lárguense de aquí malditas serpientes.
¿Y quién nos obliga?
Yo.
Y yo.
Y yo.
También yo.
¡Hey! No se olviden de mí –dijo Neville.
Jajaja si hasta el cabeza de chorlito cree que puede darnos ordenes.
Suficiente. Lárguense o les echo un maleficio a ambos –los amenazó Hermione.
Cállate sangre sucia insoportable. Además hoy día es mi día de "no a la violencia", solo veníamos a ver si los rumores eran ciertos.
¿Qué rumores? –preguntó Ron.
Eres hijo de un miembro del ministerio y ¿no lo sabes? Qué bajo has caído Weasley –le dijo Blaise con una sonrisa sarcástica en su rostro.
¡Maldito bastardo! Dinos qué está pasando –pero su pregunta quedó en el aire, ya que los Slytherins se habían marchado.
¿De qué habrán estado hablando?
No tengo ni la menor idea.
Una vez en el gran salón, luego de horas y horas de viaje en el tren y ya ubicados cada uno en las mesas de sus respectivas casas, los alumnos se callaron inmediatamente al ver que Albus Dumbledore se levantaba de su asiento para saludar.
Bienvenidos a un nuevo año en Hogwarts. Antes de que empiece la selección de los de primer año, tengo el agrado de decirles que este año comenzará a desarrollarse una nueva actividad entre los colegios de magia en Europa, y si da buen resultado se extenderá a todos los colegios de magia del mundo.
Los cuchicheos entre los alumnos no tardaron en empezar, se escuchaban todas las hipótesis posibles, desde un torneo como el de los tres magos, pero con más participantes, hasta que todos los colegios se fusionarían para hacer una sola gran academia de magia.
Dumbledore carraspeó un poco para llamar la atención de los alumnos, quienes se callaron inmediatamente para ver si las especulaciones que habían hecho cada uno de ellos estaban correctas o erradas.
Gracias. Como les decía, esta nueva actividad entre los colegios de magia europeos se trata de un intercambio. Varios alumnos y alumnas a partir de este año vendrán a estudiar aquí por un año y ustedes también, por supuesto podrán ir a estudiar al extranjero. Por ser este el primer año, vinieron a este colegio solo 3 alumnas quienes ingresarán a los cursos de séptimo año de su correspondiente casa. Las alumnas de intercambio serán seleccionadas después de los alumnos de primer año. ¡Que comience la selección!
Cuando diga su nombre, deben acercarse, sentarse sobre el taburete, les colocaré el sombrero seleccionador y él decidirá cuál es la casa más apropiada para ustedes –explicó la profesora McGonagall
Aileen Andrews.
Hufflepuff.
Thomas Becker.
Ravenclaw.
Denise Richards
Gryffindor.
Así siguió la selección hasta que fue el turno de las tres chicas de intercambio. Todos estaban expectantes.
Elizabeth Elric –Una chica alta, delgada, de ojos azules y rubia se dirigió hacia donde estaba la profesora.
Slytherin –anunció el sombrero seleccionador, luego de unos segundos.
La casa en cuestión prorrumpió en aplausos, pero al contrario de lo que podrían haber pensado, ella no fue hasta la mesa, sino que se paró a un lado, aparentemente esperando a que otra de las chicas fuera seleccionada también.
Sydney Potter –la chica debía medir alrededor de 1.60 metros, pelirroja y de ojos negros se dirigió hacia el taburete.
Al escuchar el apellido de la chica al principio todos se quedaron tan inmóviles como si estuvieran petrificados mientras trataban de asimilar la información, pero luego la mayoría volteaba a ver a Harry, quien estaba en estado de shock, al mismo tiempo que a Sydney se le formaba una sonrisa en la cara sin que nadie se diera cuenta de ello.
Slytherin.
La mesa volvió a prorrumpir en a plausos, orgullosos de que dos de las tres chicas que estaban de intercambio estuvieran en su casa, al mismo tiempo que Harry salía de su ensimismamiento.
Al bajar del taburete, la chica se dirigió donde se encontraba Elizabeth y juntas fueron a sentarse al lado de un chico rubio platinado en la mesa de Slytherin, mientras esperaban la selección de la última alumna de intercambio.
Giulia Edwards –la chica tenía el cabello marrón medianamente oscuro, ojos color miel y debía medir alrededor de 1.60 metros también.
Gryffindor.
Esta vez fueron los Gryffindors en armar escándalo, al menos tenían a una de las chicas de intercambio en su casa.
Hermione apenas vio que Giulia se bajaba del taburete se apresuró a hacerle un espacio al lado suyo en la mesa y apenas julia se sentó, se presentó.
Hola, mi nombre es Hermione Granger.
Un gusto en conocerte Hermione.
Hola me llamo Ron Weasley –saludó Ron –y este es mi amigo Harry.
Hola, mucho gusto conocer... ¿Eres Harry Potter?
Mmmm… Déjame pensar. Sí, creo que sí –contestó Harry provocando la risa de los que e lo habían escuchado.
Encantada –comentó sonriente.
¿Te puedo hacer una pregunta?
Claro.
No acostumbro preguntar esto, porque generalmente no me pasa, pero es que cada vez que me preguntan si soy Harry Potter siempre me miran la cicatriz, y tú no lo hiciste¿por qué?
Giulia sonrió divertida con la pregunta – no necesito mirarte la cicatriz para saber si me estás diciendo la verdad. Si me dices que eres Harry Potter no tendría por qué dudar de ello y si no dudo de tu respuesta no tengo para que comprobarlo mirando tu cicatriz ¿no crees? –Su respuesta fue tan inesperada y tan lógica si uno se ponía a pensar, que los dejó a todos marcando ocupado y Giulia preocupada por el silencio que se había formado preguntó– ¿Qué pasó¿Por qué de repente todos se quedaron callados como si hubiera dicho algo malo?
Es que tu respuesta fue tan sincera como inesperada –aclaró Hermione.
¿Por qué?
Porque generalmente la gente aunque le diga que soy yo y me miren la cicatriz lo único que hacen es decir "no puedo creerlo" o "no puede ser".
Estúpidos.
¿Qué?
Es que ¿qué sentido tendría decir que eres otra persona? Piénsalo por un momento y dime ¿para qué¿Tan mala está la autoestima de la gente para que quiera pretender ser otra persona?
Pues... –trató de decir algo Harry.
¿Sabes algo Giulia? Creo que nos vamos a llevar bien. –dijo Hermione.
Eso espero.
Cuando Dumbledore se percató de que ya todos habían dejado los platos limpios, se paró, cesando así todas las conversaciones. Dijo:
Ya es hora de ir a la cama, deben descansar porque mañana será su primer día de clases. Buenas noches.
En la mesa de Slytherin Sydney se dirigió a Elizabeth.
Riza acompáñame por favor, y ya sabes en caso de que sea necesario tu...
Sí, sí ya lo sé –la interrumpió.
Caminaron juntas hasta la mesa de Gryffindor de donde Harry, Ginny y Giulia se estaban retirando, ya que Ron y Hermione se habían adelantado para guiar a los niños nuevos a la sala común.
Harry –justo cuando disponía empezar a subir las escaleras, sintió que lo llamaban y al voltearse se sorprendió al ver a las dos nuevas Slytherins frente a él.
Por fin tengo el placer de verte Harry, después de 16 años... un momento ¿he dicho placer?
¿Nos conocemos de algún lado?
¡Y tienes el descaro de preguntarlo! –dijo exasperada Sydney– eres tal cual como supuse que serías Harry James Potter.
¿Cómo sabes tú mi segundo nombre?
¿Cómo sabes tú mi segundo nombre? –le imitó– eres patético¿No sabes que las tradiciones de familia van de generación en generación? Entonces te lo aclaro, la tradición familiar, en este caso, es ponerle de segundo nombre al bebé si es hombre el nombre de su padre y si es mujer el nombre de su madre ¿Tu pobre cerebrito puede procesar esa información o es demasiado para él?
No sé quién te crees que eres para hablarme así cuando yo no te he hecho nada, llegaste al país hace un par de horas, ni siquiera te conozco.
¿Ni siquiera me conoces? Déjame reírme, aunque pensándolo bien mejor te refresco un poco la memoria. Me preguntaste quien me creo que soy para hablarte así, pues verás no creo ser nadie más que yo, Sydney Lilian Potter ¿Ahora te das cuenta¿O todavía dices no conocerme hermanito? –dijo la chica recalcando la palabra hermanito.
No puede ser... yo... –no podía ser ella, no podía ser verdad, ella había muerto¡Dumbledore le había dicho que había muerto!
Sí, si puede ser y de echo ¿Te digo una cosa? Así es y no puedes hacer nada para cambiarlo.
Tú deberías estar muerta.
¿Así es como recibes a tu hermana? –le preguntó con cara de asco– ¿Diciéndole que debiera estar muerta? Sabes algo, nunca esperé una gran bienvenida de tu parte, pero después de tantos años no pensé que desearas que estuviera muerta.
Syd yo...
¡No te atrevas a llamarme Syd! No eres nadie con quien tenga la suficiente confianza para que puedas hacerlo –explotó la chica dejando de lado la máscara de frialdad que tuvo durante toda la conversación y demostrando la ira que en realidad sentía– tú solo eres un idiota que cuando se enteró que tenía una hermana lo único que hizo fue decir está bien, nunca te preocupaste por saber quién era, ni como era, ni siquiera donde estaba.
¡Pensé que estabas muerta¡Además tu tampoco te preocupaste de contactarme en 16 años!
¡Porque no podía! Me dijeron que no valías la pena, ya que siendo mi hermano te habías olvidado de mí, y nunca tuve una lechuza ni siquiera para escribirle a mis amigos porque mis tutores tenían miedo de que te fuera a escribir a ti.
¿Y se puede saber cómo en 16 años no tuviste dinero para comprarte una lechuza?
Ellos nunca me dieron dinero, ni me dijeron cuál era mi bóveda precisamente por la razón que te acabo de dar.
¿Quién diablos son ellos?
Mis tutores tarado, los que hicieron las veces de padres para mi, tal como para ti lo hicieron esos estúpidos tíos que tenemos, lo que debe haber sido mucho más agradable por cierto.
No sabes de que estás hablando.
¡Claro que sé de que estoy hablando¿Nunca sentiste que te vigilaban o que te miraban desde algún lugar escondido? No, definitivamente tú no sabes lo que es sufrir de verdad.
¿Que no sé que es sufrir? –preguntó el chica indignado.
No, no lo sabes, yo tuve que vivir en el mismo infierno todos estos años, mientras tú estabas, bueno hay que admitirlo, no de lo mejor, pero al fin y al cabo libre con los Dursley ¿Y sabes que es lo peor? Que todo esto es culpa tuya.
¡¿Mi culpa?!
¿Y de quien más? Por TU culpa nuestros padres están muertos, por TU culpa tuve que estar en el mismo infierno todos estos años...
Syd –le advirtió Elizabeth.
Gracias a tu...
¡Syd!
Estúpida p...
¡SYD! gritó esta vez la Slytherin, al ver que su amiga no reaccionaba con simples advertencias.
¿Qué? –dijo mirando a Elizabeth, quien levantó una ceja, haciendo que comprendiera el mensaje – tienes razón, no vale la pena seguir gritándole a este tarado, eso no cambiará las cosas.
Dicho y hecho, dio la vuelta y se marchó seguida por Elizabeth.
Ahí está, el primer cap de mi fic, espero que les haya gustado y si le encuentran alguna similitud con los 2 primeros capis de mi 1° fic es porque en un principio se basó de ese,pero desués de los 2 primero caps (del anterior) no tienen nada que ver.
R&R
Se cuidan .
JuLiAGrInT