Marinette sabe que Adrien es un adicto a lo dulce y siempre queda embelesado con los Croissants.

Tikki sabe que Plagg es un adicto al Camembert y siempre tiene ese peculiar olor.

Eran unos adictos que no se conformaban. Nunca lo hacían y siempre pedían más y más.

Lo mismo con las muestras de afectos.

Adrien quería que Marinette lo besara. Una y otra vez.

Plagg quería que Tikki lo abrazara. Y nunca lo soltara.

Sin embargo aunque parecía que se quejaran de cómo eran, la verdad, es que Marinette y Tikki aman a esos glotones.