Palabras: 489
Rating:
T
Advertencias:
Yaoi, mención de temas sexuales y What if.
Pareja:
KakaObi.

"Naruto pertenece a Masashi Kishimoto"

"Este fic está participando en el Reto: ¡Humor de cuarta!, del foro Secreto en el Valle del Fin".

[~]

···El robo del Icha Icha···

[~]

La aldea de Konoha fue puesta en estado de emergencia máxima. Se ordenó que nadie entrara ni saliera de la idea. La preocupación se palpaba en el ambiente.

—Los he mandado a llamar porque son los únicos en quienes confío para esta importante misión— comenzó a hablar el sexto Hokage, manteniendo su seria mirada en los cinco presentes que en un tiempo conformaron el equipo siete.

—Sabe que haremos lo que sea por usted— declaró seriamente Yamato.

Los tres jóvenes asintieron de acuerdo con el Anbu.

—¡Nosotros podemos con lo que sea, solo díganos de qué se trata!— el rubio no perdía su hiperactividad con nada.

—Bien. La misión es… Encontrar al ladrón de mi Icha-Icha—

Apenas terminó de hablar casi todos cayeron al suelo. ¿¡Qué rayos?!

—¡Eso no es ninguna misión! Es una tontería que haya puesto a la aldea en ese estado y que nos envíe a buscar un tonto libro pervertido— se quejó Naruto cruzándose de brazos, ganándose un golpe en la cabeza de parte de Sakura quien alegó que por muy pervertido que el Hatake fuera ahora era su Hokage por lo cual merecía respeto y obediencia, así que buscarían el libro.

—¿No sería mejor solo comprar otro?— opinó el castaño nervioso.

—No. Ese libro era edición especial, además… —hizo una pausa y suspiró— Me ha acompañado en muchos momentos— respondió con nostalgia haciendo que a todos les cayera una gota enorme por la cabeza.

Hubo un momento de completo silencio antes de que la puerta de la oficina se abriera de golpe.

—¡¿Qué estás haciendo, bakakashi?! ¡¿Por qué pusiste a la aldea en estado de emergencia?!— Obito escandaloso y revoltoso como siempre, al menos era lo que Kakashi pensó tras verlo entrar.

—Ha ocurrido una gran tragedia —era notorio el sarcasmo— Alguien robó el Icha-Icha del pervertido Hokage— explicó Sasuke hastiado.

—¡Nos llamó a todos de emergencia! Ni siquiera me dejó terminar mi ramen, ni bañarme por las prisas, ¡de veras!— lloriqueaba el Uzumaki.

Sakura miró asqueada a su compañero apartándose varios pasos de él; entretanto Obito enarcaba una ceja mirando al peliplata antes de sacar el libro de su porta-shuriken.

—Nadie te ha robado nada, lo dejaste en mi casa ayer después de que…—se sonrojó y calló, acercándose al escritorio, colocando el libro allí.

La oficina se hundió en un silencio sepulcral, roto solamente por Sasuke.

—Ayer no dejó dormir al Clan entero por gritos, como si no nos supiéramos ya su nombre y el de Obito, y hoy nos llama de emergencia para pedirnos que busquemos su estúpido libro que ni siquiera había sido robado— conforme hablaba se acercaba a donde su ex maestro con un aura completamente asesina.

El rostro del Uchiha mayor se tornó de un lindo rojo fosforescente mientras que el Hokage sonreía nervioso por el futuro intento de asesinato por parte de su alumno favorito.

Quizás para la próxima no exageraría tanto cuando no encontrara su libro.


Jajajaj... Soy pésima para el humor _ _

Ojala les haya sacado aunque sea una sonrisa, si es así se los agradecería con un review ^^~

¡Gracias por leer!