Rated: K

Advertencia: Lenguaje soez y algo de OoC (Out of Character)

Disclaimer: Kuroko no basket no me pertece, todos los créditos de las fumadas a Tadatoshi Fujimaki.


NO SOY UNA PERSONA ANTIPÁTICA, TENGO AMABILIDAD SELECTIVA

Kuroko a veces se pregunta por qué sigue aguantando a Kise. Mitad por costumbre, supone.

.

.

.

Kuroko a veces se pregunta por qué sigue aguantando a Kise.

Mitad por costumbre, supone.

Kurokocchi esto, Kurokocchi lo otro, Kurokocchi aquello, Kurokocchi, Kurokocchi, Kurokocchi. Kuroko se dio cuenta de que aquello estaba llegando demasiado lejos cuando en un examen de literatura, en el hueco para su nombre, casi escribe Kurokocchi (un claro ultraje imperdonable).

Él no es Kurokocchi, el es Kuroko Tetsuya, un hombre hecho y derecho —o bueno, al menos eso le dice su abuela, que él ya es todo un hombrecito—. Entonces Tetsuya se arma de valor como se arma de desodorante cada mañana y se planta delante de Kise Ryota a tempranas horas de la mañana. Rápido y directo, ese es su estilo. Porque un hombre siempre va de frente, y siempre enfrenta a sus problemas.

El problema de Kuroko era el mismísimo Kise en si, por si aún no estaba claro del todo.

—Kise-kun. —lo llama y Kise se lleva el susto de su vida y tres infartos seguidos.

Joder con aparecer de la nada.

—¡Kurokocchi!

Y Kuroko frunce el ceño. Ahí estaba, justo a: su némesis. Le pitaban los oídos y se le fundían las neuronas. —Kise-kun, quería pedirte que...

—¿Te apetece ir al Maji esta tarde? ¡Yo te invito a un batido! —lo interrumpe, porque obviamente todo lo que sale de la boca de Kurokocchi es oro, pero a Kise se la resbala, aparentemente— Me han pagado de más por mi última sesión, así que tengo dinero de sobra.

—No. Kise-kun, quería pedirte que...

—¡O a dos! ¿Te parece?

No, no le parece. Porque Kuroko quiere estamparle un Ignitte pass en la cara y decirle que... —Me parece.

Decirle que no sabe que quería decirle, porque ya siente la vainilla en su boca.

—Nos vemos entonces a las siete en Maji, ¡Hasta luego, Kurokocchi!

Ah, ya se acuerda de que era lo que quería decirle. Kuroko aguanta a Kise día tras día y no sabe por qué. Mitad por costumbre, supone.

La otra mitad por la vainilla.


¡Epa!

¿Cómo os va la vida? Hace una eternidad (no tanto) que no traigo nada por aquí.

He estado muy ocupada (obsesionándome con Kuroko no Basket) con los exámenes.

Espero que os haya gustado esta cosa de aquí.

No es KiKuro, porque los shippeo pero no los shippeo y es que le doy al AllKuro aparentemente en una mayoría pero me puede la versión amigos hasta el infinito y más allá de la Kiseki no Sedai porque se me hacen bebés adorables.

En fin, que ya nos vermos por aquí.

Viernestrece.