Los personajes son propiedad de Rumiko Takahashi, excepto los creados por las presuntas escritoras. Este es un fanfiction creado sin fines lucrativos, únicamente con la finalidad de entretener a los lectores.

LOU & PAO CHAN´S FANFICTIONS

PRESENTS:

FEROZ 2: LA CONDENA QUE NOS UNE

PRÓLOGO

En algún lugar, muy alta en el cielo, debía brillar la luna y enviar sus rayos a la tierra, pero aquí, en el alejado poblado de Shikotsu-Toya, una tormenta de enero había ocultado el cielo con la nevada. El viento soplaba con violencia por la desierta avenida Haonari. Las máquinas quitanieves, pintadas de color butano, hacía ya mucho tiempo que decidieron dejar su inútil trabajo.

Masae Nousume, el jefe de señales del ferrocarril GS WM, había quedado aislado por la tormenta en una pequeña caseta de señales a unas nueve millas de la ciudad. La nieve había bloqueado su pequeño automotor a gasolina y decidió esperar a que pasara la tempestad, matando el tiempo con un solitario con su grasienta baraja, afuera, el viento pareció lanzar un grito agudo. Nousume, intranquilo, levantó la cabeza, pero casi enseguida volvió a bajar los ojos para concentrarse en el juego. ¡Al fin y al cabo sólo podía tratarse del viento!. . .

Pero el viento no suele arañar las puertas, ni gemir como pidiendo que se le deje entrar.

Nousume se puso de pie. Un hombre alto, flaco y larguirucho con chaqueta de lana sobre su overol de ferroviario; un cigarrillo le colgaba de la comisura de los labios. Su cara arrugada, típica de los habitantes de la región de Hokkaido, se iluminó con los tonos suavemente anaranjados de la luz de la lámpara de queroseno que colgaba de una de las paredes de la caseta.

De nuevo sonó aquel ruido, como si alguien arañara en la parte de fuera de la puerta.

Debe de ser algún perro extraviado que quiere que lo deje entrar, pensó Nousume. Si, no puede ser otra cosa. . .

Sin embargo no pudo evitar cierta vacilación. Sería inhumano dejarlo afuera con éste frío, se dijo a él mismo, aunque no puede decirse que haga calor en la caseta (pese a la estufa eléctrica alimentada por una batería, podía ver los halos de vapor que se escapaban de su boca cuando respiraba). Y no obstante sequía dudando.

Shikotsu-Toya estaba pasando por una mala temporada y habían corrido terribles presagios por el pueblo, por lo menos casi tan perturbadores como aquella tragedia ocurrida en uno de los alejados suburbios de Tokio, hace casi a un año. Un distrito aparentemente tranquilo como Shikotsu-Toya, delimitando con la urbanizada ciudad capital. Un pueblecito de nombre Nerima.

Antes de que hubiera decidido que hacer con aquel extraño visitante llegado de la noche, el suave gemido al otro lado de la puerta se convirtió en un rugido espeluznante. Se produjo un golpe atronador cuando "algo" increíblemente fuerte y pesado se lanzó contra la puerta. . .Aquel "algo" retrocedió. . .¡para volver a golpear! La puerta se conmovió en su marco y un soplo de viento dejó entrar por la parte de arriba del quicio, desencajado ya, unos copos de nieve.

Masae Nousume dirigió la vista a su alrededor, buscando algo con qué apuntalar la puerta, pero antes de que pudiera hacer otra cosa que tomar la endeble silla en la que estuvo sentado hasta hacía poco, aquel misterioso ser aullador golpeó de nuevo la puerta, con fuerza increíble, produciendo una gran grieta de arriba abajo.

Por unos momentos, la "cosa" pareció quedarse apresada en la abertura producida en la puerta por la ruptura de algunas de sus tablas, pataleando y embistiendo, su hocico contraído por un gruñido de rabia y sus amarillos ojos resplandecientes . . .¡El mayor lobo que Masae jamás viera con anterioridad!

Sus rugidos resonaban terriblemente siniestros, como si fuesen palabras pronunciadas por una garganta humana.

La puerta acabó por astillarse del todo, crujió y cedió. En un momento, aquella "cosa" estaría adentro.

En un rincón de la cabaña , entre un montón de herramientas viejas, había un pesado píco apoyado contra la pared. Masae se precipitó para hacerse con él. Mientras tanto, el lobo había logrado librarse de la puerta; se abrió paso hacia el interior de la caseta y se agachó como si se preparara para saltar sobre el acorralado hombre, al que miraba fijamente con sus terribles ojos amarillos. Las orejas, echadas hacia atrás, parecían dos triángulos pequeños de piel peluda casi pegados a la cabeza, la lengua le colgaba jadeante. Tras él, la nieve entraba a ráfagas por la puerta, totalmente rota por el centro.

Con un rugido el animal saltó para atacar a Masae, que volteó el pico.

¡Sólo una vez!

La luz de la lámpara se reflejaba fuera, desigualmente, sobre la nieve helada y a través de la puerta destrozada.

El viento continuaba aullando y gimiendo.

¡Comenzaron los gritos!

Algo inhumano había llegado a Shikotsu-Toya, algo tan invisible como la luna oculta por la tormenta que debía cabalgar por el cielo, muy alta por encima de cualquier persona. No había ninguna razón que justificara su llegada precisamente en estos momentos, como no la habría tampoco para la llegada del cáncer, o de un psicópata que llevara en su mente la idea del asesinato, o de un tornado mortal.

Simplemente había sonado la hora, como éste era precisamente el lugar, esta pequeña ciudad del estado este de Hokkaido, donde las reuniones de los fieles en sus tradicionales templos constituía un acontecimiento, donde aun las excursiones al aire libre eran relatadas fielmente en el semanario local. Un semanario que en su próxima edición tendría en sus páginas noticias más tétricas.

Fuera de la caseta, las huellas de una bestia enorme cuya simetría era algo monstruosamente intermedio entre humana y animal, comenzaban lentamente a ser cubiertas por la nieve, que no cesaba de caer. El aullar del viento parecía tener un tono salvaje de alegría, como si disfrutara con la tragedia. Un sonido horrible, desprovisto de todo corazón, en el que no había nada de Dios ni de luz. Todo era negro invierno y un hielo oscuro que congelaba el alma.

El ciclo de una bestia insaciable había comenzado. . .de nuevo.

LOU: ah como pasa el tiempo. . .parece que fue ayer cuando intentábamos escribir los primeros capítulos de la primer saga de FEROZ. . .¡y henos aquí ahora! Bien, el tiempo no pasa en vano y menos la idea de sacar una secuela de aquel fic, cosa que ha revoloteado en nuestras mentes mas de una vez (al menos en la mia xD)

PAO CHAN: bueno concuerdo con mi adorable sister jeje, preparat algo asi como lo que ahora ven escrito tampoco fue muy fácil. De hecho hace creo que ya van dos años desde que sacamos la primer parte, y sacar esta secuela pues tardó eso. . .dos años o año y medio. . .pero esperamos cumplir sus expectativas. Personalmente yo tenía muchas ganas de seguir con una trama asi. . adoro aquello que es paranoico y extraño, y pues fics como este no se ven muy a menudo TT.

LOU: TU LO HAS DICHO SIS!!, ok, antes de despedirnos solo recordemos brevemente el descenlace de la primera parte (para aquellos que no lo recuerden tan bien). . .bueno Akane no salío bien librada pero por lo menos tuvo la oportunidad de vengarse, claro, llevándose a Ranma consigo y condenándolo a la misma maldición, la familia los dio por muertos y ahora solo queda la incógnita ¿Qué ocurrió después? Bueno, eso sólo el destino y nosotras lo sabemos. . .BYE Y SIGAN LEYENDO!!