Disclaimer: Todos los personajes que aparecen en este documento son propiedad de George R. R. Martin, este fic no tiene fines lucrativos ni cosa que se le parezca.
Aclaración: trabajo que pertenece al reto El Norte no Olvida del foro Se acerca el invierno.
Dedicatoria: no sé si esto se pueda aquí, pero quiero dedicárselo a Flory. en un fic que desarrollo en el contexto de la rebelión de Robert, su personaje (Florence Stark) es melliza de Brandon y enamorada de Dustin. Espero que estas tres viñetas te resulten simpáticas. Si gano, será para ti.
Like a Friend, a Brother I.
Están jugando al escondite.
Willam se conoce la fortaleza de punta a cabo, demuestra su agilidad al escurrirse entre los pasadizos de Fuerte Túmulo como un gato particularmente astuto. A Brandon se le antoja que esa sonrisita suya, dibujándosele como tímida en la cara pálida, también es un poco felina y bastante aviesa. Idéntica a la que él mismo exhibe la mayoría de las veces, sobre todo cuando la alegría es tal que le anega el pecho y le nubla los ojos.
Igual que ahora. Va perdiendo el juego, pero a fin de cuentas el propósito siempre ha sido jugar y no ganar, o al menos en opinión del heredero de Invernalia. Se está divirtiendo, corriendo detrás del rastro del escurridizo Dustin se siente más vivo que nunca. Y feliz, también. Desde que llegó a Túmulo Largo no deja de preguntarse por qué no tuvo un hermano parecido a Willam, tan indómito y alegre como él mismo. Se responde a menudo que así está mejor. Ambos tienen su propio botín, no pueden envidiarse puesto que viven en condiciones semejantes. Y se agradan el uno al otro, claro.
–¡Willam! –Le grita, medio riendo y medio frustrado por no poder encontrarle todavía–. ¿Dónde estás?
No recibe respuesta, claro. Tampoco tiene suficientes esperanzas de que su amigo terminase el juego ahora que lleva evidente ventaja. Recorre los pasillos que apenas comienza a memorizarse y maldice a su compañero de juego con terribles blasfemias de las que Lady Dustin se sentiría bastante avergonzada, luego suspira para sus adentros recordándose que la severa madre del joven heredero había partido hacia los Riachuelos hacía poco menos de media luna. Por eso tienen tanta libertad de jugar a sus anchas como los niños que son. Libertad… Brandon aspira por la nariz, jurando que puede sentir su aroma dulce y narcótico, aquello que le fascina, le…
–¡Por Túmulo Largo! –Interrumpe juvilosa la voz chillona de Willam Dustin, propinándole un empujón amistoso. Brandon blasfema nuevamente.
–¡Has hecho trampa! ¡Tú conoces la casa!
Pero no está enojado. Si Willam sonríe así, entonces él también se siente feliz. Hermanos, piensa.
