La hermosa luna iluminaba las calles solitarias de la ladea de Konoha, eran tiempos de paz, tiempos en los que los aldeanos y ninjas disfrutaban del cálido verano que se les ofrecía. ¡Y que noche!.

Refrescante, pero no al punto de dar frío. Era calida con viento, iluminada y con las millones de estrellas. ¡Perfecta Noche para sentir el rose del viento veraniego en la mitad de su rostro, calmado sin preocuparse de enemigos en busca de venganza ni en invasiones!. Una noche perfecta para leer el Icha Icha paradise, pensaría Hatake Kakashi, el cual en ese momento disfrutaba en un gran árbol de la luz Natural.

Pero todo lo bueno llega a su fin, demasiado rápido para quienes lo disfrutan…

Rodó su único ojo visible, al escuchar unos gritillos ni muy lejos ni muy cerca. Suspiro cansinamente mientras se disponía a huir al ruido que provocaban ciertas jóvenes…

¡Molestas!

Pero cual fue su sorpresa y por no decir curiosidad, al escuchar cierto gritillo familiar, demasiado familiar para él. Sin duda alguna, tenía bien definida aquella voz aguda y juvenil…

Giro sus talones sobre si mismo. Cerciorarse de la integridad y del estado de su compañera de equipo y ex alumna no era un pecado. ¡Bah! Quien osaría a faltarle el respeto a la única integrante femenina del equipo 7, conformado por muy celosos compañeros; El portador del Kiuuby, el portador del Sharingan, y el Ninja copia. Y no solo eso, discípula de la Hokage, la cual por cierto no solo había heredado ese mal humor y carácter fuerte, sino también esa temida súper fuerza.

Pero como bien dije… solo era cierta precaución que tenia que tomar para irse a dormir tranquilo.

Salto ágilmente por los techos, 5 o 4 cuando mucho. Se acerco lo suficiente a uno de las zonas familiares y urbanizada de Konoha. Era una vivienda decorada sutilmente con un beige, c una tienda de flores abajo con el nombre de Yamanaka's y justo encima de esta, la habitación con un pasteloso rosado de donde provenía no solo la voz de Sakura, sino de muchas otras chicas de su generación.

¡Vaya, mayor pervertido que era!. Estaba mal averiguar la causa de tanto alboroto, estaba muy mal, pero quien quita que no pasaba por ahí para saludar…Y en todo caso de alguna forma lo estaría haciendo. Siempre fue muy protector con sus alumnos…aun con semejantes grandulones.

- Ne, ne… ¡El equipo 7!- No identifico la voz, pero con cuan emoción nombraban aquel equipo al cual pertenecía, y cual fue su sorpresa al escuchar risillas divertidas, y suspiros.

Pero entre todos distinguió un gruñido…

-Ne Sakura-chan, no seas aburrida… Tienes a los Hombres mas guapos de Konoha rozando cada hombro- ¿Los hombres mas guapos de Konoha?. Estaba halago y como no, considerado entre las femeninas aun sin descubrir su rostro como un hombre guapo. Vaya consideración.

- ¡Naruto-kun, Sasuke-kun y Kakashi-sensei!-

-¡Ino-chan!- Grito Sakura, y por el tono quebrado de su voz, supuso que estaba avergonzada. ¿Acaso Sakura no lo veía así?. ¿O era vergüenza?. Sea lo que sea era intrigante… se acomodo un poco entre los arbustos. Curioso.

-¡Acéptalo!-

-¡Ten-ten!-

-Ne, Ne… Naruto-kun es muy guapo-

Kakashi alzo sus cejas. ¿Qué Naruto que…?.

- Con sus ojos azules, y esa sonrisa…! Tan tierno! ¿A que no Hinata-chan?-

¿Naruto es… tierno?

- Y esa torpe naturaleza que me saca de quicio…- Continuo Sakura.

- Pero que no puedes vivir sin ella…-

Hubo unas tantas risas y gritillos. Kakashi rodó sus ojos.

-¡Sasuke-kun!-

-Con esos ojos azabaches, Grrr-

- su cabello rebelde, esa sonrisa altanera…-

- Ese orgullo que aplasta…- de nuevo Sakura. Que ya hacia un tiempo había dejado su amor infantil, y en cierto modo era un tanto extraño era escuchar esas palabras de su boca.

- Y ¿A quien no le gustan los maduros?-

- A caso no provoca arrancarle esa mascara al sexy kakashi-sensei…-

- y ese chaleco…-

Kakashi sintió como su cara iba tornando un tanto caliente. No es que le diera mucha importancia, pero…¡Por Dios, que cosas piensan esas niñas!, ya no tenían ninguna moral para poder decirle pervertido.

Distinguió la risa de Sakura. Una risa avergonzada.

- ¡y que decir de los cuerpasos que se gastan esos tres!-

Kakashi trago pesado. Esto estaba mal… Y era el hecho de que esas pervertidas estaban ocasionando todo ese daño e influenciado la mente inocente de Sakura. ¡Que arpías!.

-Ne Sakura…¿Con cual de tus tres compañeros… Te acostarías?-

Hubo un silencio incomodo. Y un pre-infarto por parte de Kakashi. Pero lo que mas le impresiono y lo dejo en estado catatónico fue la respuesta de su inocente Sakura.

-Naruto, definitivamente NO, es como un hermano para mí. Sasuke, seria un poco salvaje y tosco... Pero quien quita que no sea un gatito domable en la cama...- Unas risitas se escuchó por la habitación mientras la voz precavida de Sakura seguía abriéndose paso.- Siempre he querido saber como es el rostro de Kakashi-sensei. Con esos pectorales…Uhmm, me gustaría….-

Entre aullidos picaros de lobos, risas, y almohadas voladoras, yacía un moribundo Hatake.

Él único inocente aquí, era él. Un vil engañado bajo esos ojitos jades de pura inocencia. Un hombre que se reprimía la sensación que le causaba cada vez que su alumna se agachaba, o miraba más allá de donde debía. ¡Y ni se diga cuando soñaba con ella con escenas poco decorosas!, él se sentía culpable…

Sin duda, las mujeres eran de temer.

Tuvo que controlar su respiración. Bien decía el dicho de que la curiosidad mato al gato.

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