KHR: Si, no me pertenece, es de Amano ;w;
Aclaraciones: Relación Ghei ¿ok? :3
By: Reborn
February 4th
Y lo besa.
Lo besa con tanta urgencia y pasión que, por un minuto cree saborear un metálico y salado líquido proveniente de su boca.
No le toma importancia y adentra su lengua ávida en aquella cavidad, sus brazos pasan de su rostro hasta llegar a la cintura, pero la mano juguetona derecha no se detiene ahí: busca palpar algo más. Llega hasta los bolsillos traseros y con una lujuriosa sonrisa poco conocida en él, mira a su amante poco antes de empotrarlo contra la pared.
En verdad, era todo un milagro que no hubiese explotado antes.
Dejando un hilo de saliva a su paso. Su lengua se desliza por todo el cuello mientras sus manos se rompen –o destrozan, lo cual da lo mismo- la blanca camisa de su amante para luego sacarse su propia camisa ayudado por unas temblorosas y excitadas manos contrarias. Inhalan tanto aire como pueden porque ambos presienten que se les va la vida en ello.
Cuando baja hasta su abdomen su delgada línea de saliva se ve interrumpida por una repentina acción del contrario.
Siente como las piernas del menor se entrelazan en su cintura apegándose, más a él haciéndole sentir no solo tela. Inmediatamente en su mente se forman miles de razones de porque el menor inició tal acción. Traga saliva ante la más probable.
Detiene el tercero –o décimo- beso para mirarlo directo a los ojos pidiendo una explicación visual por la acción anteriormente hecha; y lo único que ve son unas orbes negras con deslumbrante brillo que lo miran tan apasionadamente que…
- Hazlo
El mayor empieza a sudar frío debido a lo pedido. Con unas temblorosas se desliza hasta el broche del negro pantalón del menor, lo desabrocha como puede mientras el otro lo besa encarecidamente por todo el cuello causando más que simple excitación en él.
Cuando llega hasta el miembro del menor y toca la punta, es testigo de cómo el de orbes negras da un espasmo involuntario deteniendo todo su accionar.
Sonríe y sin ninguna duda, en su cabeza comienza…
- Her-Herbívoro…
Esa voz comienza a ser una cacofonía dulce que podría disfrutar por mucho tiempo. Porque una voz así llamándolo sólo a él era…
- Herbívoro estúpido ¿Me estás escuchando?
Y toda la fantasía se hace añicos. Abre los ojos y ve a Hibari frente a él con su acostumbrada seriedad. Empieza a ordenar sus ideas del porqué diablos no está disfrutando de lo anterior hasta que llega una lógica y estúpida conclusión:
Estaba soñando.
Pero que buen sueño maldición-
Sonríe para sus adentros mientras se aclara un poco la garganta.
- Lo siento Kyouya-kun ¿Qué decías? –se disculpa con una –no- inocente y brillante sonrisa.
Por un momento el presidente del comité disciplinario de Namimori se que queda sorprendido por la sincera sonrisa a la que es expuesto, porque es tan hermosa que siente envidia y unas ganas inmensas –internas, claro- de tocar. Unas pequeñas motas rojas se depositan en cada mejilla.
- Fe-Feliz cum-Cu-Cumpleaños –articula bajo, bajito. Sólo para que le idiota blondo lo escuche.
- Jajaja. Gracias Kyouya-kun pero ¿y mi regalo? –pregunta con falsa pena.
- … -Okey eso no se lo esperaba porque, uno ¿era su obligación darle un regalo?- No tengo uno.
- Eso se puede arreglar entonces
E Hibari queda exhorto por unos segundos antes de recibir un repentino pero no por eso menos delicioso beso. Y cerrando los ojos dejándose llevar por la adrenalina del momento, dejándose besar.
A lo lejos Dino jura que puede escuchar a Hibird entonando la melodía de Feliz Cumpleaños. Sonríe entre los besos enterrando su rostro en el cuello del moreno.
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