Capítulo 1. El Comienzo

Me encontraba sentada en el ventanal de mi cuarto meditando, "¿qué fue lo que hice mal?" había echo todo lo que se encontraba en mi alcance, pero aun así ella se había ido, me sentía desolado y sin poder avanzar, en privado a veces me ponía a leer sus viejos mensajes en mi teléfono, cosas bonitas, como aquella vez que me escribió "te estaba llamando porque quería escuchar tu voz" eso me había hecho ilusión, pero sabía que si escuchaba su voz haría todo lo posible para volverle a ver, aunque eso es lo que estoy haciendo "¿Qué es lo que estoy haciendo?" me pregunto cada vez que analizo quien mueve mis actos, y es solo ella, siento que quizás sea un capricho o niñería mía, pero siento que no puedo vivir sin ella, siento que se han llevado un pedazo de mí, y que vivo como lo hago ahora solo porque quiero volver a encontrarla.

Nuestra historia para quien no la sabe comenzó así:

Flash Back

Yo Edward Cullen un chico de una vida normal y cotidiana, vivía con mis padres Carlisle y Esme, mi hermano mayor Emmet y mi hermanita Alice; a mis 22 aún no había tenido una relación duradera, al contrario de mis hermanos, Emmet se casaría pronto con Rosalie y Alice estaba saliendo con Jasper un amigo mío y el hermano pequeño de Rose, yo en cambio solía salir a menudo con mi amiga Jessica, sabía que le gustaba, pero aun así no la lograba ver como más que una amiga, como una hermana cuando mucho; pero un día la vi, tan delicada parecía una niña frágil, era una amiga de Alice, Isabella Swan. Isabella tenía 16 años, en unos 2 meses tendría 17, pero eso no me importaba.

Un día se me lanzo a los brazos, la bese con algo de miedo ya que sentía que si era rudo se rompería en mil pedazos.

-Quiero sentirte mas.- me dijo, pero aun sentía miedo.

Después de aquella ocasión no la solía ver a menudo, esta apenado por lo de aquella vez, pero los pequeños encuentros fueron los mejores, una vez ya no podía más y cuando planeaba pedirle que fuera mi novia se me adelanto, y no dejo que le respondiera enseguida.

-Tú me gustas, de verdad aunque eres extraño, me llamas la atención, seamos novios, pero ehhh no me respondas ahora que me sentiría ofendida que no lo pensaras.- eso había dicho, pero yo ya sabía la respuesta.

Durante unos días estuve rondando su casa, pero no lograba verla para darle respuesta, un día me moleste ya que solo hablábamos vía mensajes, le escribí "Quiero verte de hace más de una semana, ya tengo tu respuesta" un "Hoy llegare temprano a casa, yo también quiero verte".

-Si, quiero ser tu novio.- le dije apenas la vi mientras me agachaba para besarla.

-¿Acaso estabas esperando que fuera exactamente hoy, para darme respuesta?- pregunto mientras se separaba un poco de mi para verme la cara, su pregunta me dejo fuera de base.

-¿Por qué lo dices?- pregunte extrañado.

- Hoy es 23, justo a un mes de mí cumpleaños.- dijo, pero realmente no me había percatado de la fecha, pero en un mes habría una razón más para celebrar.

-Realmente no, solo que no te había podido ver, y te lo quería decir en persona.- ahora la cosa, sería decirle a nuestros padres de los nuestro, ese pensamiento me dejo frio.

-¿Qué sucede?- me pregunto Bella al ver cómo me tense frente a ella.

-Pues, como le diremos a Charlie, a Carlisle y Esme de los nuestro y sin decir de Emmet, Alice y Jacob.- ella lucia tranquila y calmada, yo solo estaba temeroso de lo que diría Charlie el padre de Bella, a su hermano Jacob le daba casi igual, Alice por su lado estaría más que alegre, Emmet por su parte no sé cómo reaccionaría.

-Quédate tranquilo, Charlie tiene que respetar mi decisión, sea cual sea.- dijo sosteniendo mi mano, con una voz dulce pero decidida.