"Cuando te acaricie me di cuenta que había vivido toda la vida con mis manos vacías"

—Alejandro Jodorowsky—

Fragmentos de Eternidad

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Hermano mayor: 22

Hermano menor: 18

Hermana menor: 14

*** Academia Shikon (clase 3-B) ***

—Oye InuYasha, hoy iremos a estudiar a tu casa.—le gritó un muchacho pelinegro de oscuros ojos azules entrando al salón.

—Tsk. ¿Porque tanto interés en ir a mi casa Miroku?—le dijo el ambarino sentado en su escritorio.

—InuYasha no seas aguafiestas, Kouga y Akitoki también vendrán…—le explicó su amigo.

—Eso es cierto, hay que estudiar para los finales. —dijo un joven pelinegro con sus cabellos amarrado en una alta coleta.

—¿Qué te traes entre manos Sarnoso?—gruñó InuYasha, —Es raro verte con un libro.

—Escucha bestia—le sujetó del suéter,— no puedo entender como una bestia como tú es hermano de una chica como Kagome.

Entonces el Taisho menor lo comprendió todo.

—Así que todos ustedes están detrás de mi pequeña hermana.—dijo con un tic en su ceja izquierda.

—No vamos a negar que Kagome-chan es linda para solo tener catorce años—agregó un chico castaño uniéndose a la conversación.

—Genial, ¿tú también Akitoki?—preguntó retóricamente el ambarino—El pervertido, el rabioso y el tonto… Kagome no tiene mucho de donde escoger.

—Miroku, no será que quieres cumplir una de tus fantasías tipo ero-mangas—le dijo Kouga.

—No nos hagamos los santos, todos nosotros hemos leído los ero-mangas donde las hermanitas se ofrecen a sus hermanos mayores—dijo Miroku con su nariz derramando sangre. —Onii-channn

—Yo pienso que ella es muy linda—dijo Akitoki.

—A mí me parece que este—Kouga señalo a Akitoki, —solo lee mangas shojo. —Los tres chicos asintieron de acuerdo.

—Vamos InuYasha, déjanos acercarnos a ella—suplicó Miroku.

—Aunque los deje hacerlo, Sesshomaru los va a matar si se acercan demasiado.

—Creo que nos habíamos olvidado de él, tu hermano en realidad da mucho miedo—a Akitoki le recorrió un escalofrió de solo pensar en la mirada asesina de Sesshomaru.

—Lo que yo me pregunto es…—dijo Kouga llamando su atención— ¿porque si tú eres solo cuatro años mayor que ella, no es tan pegada a ti como con Sesshomaru?

—Sesshomaru le lleva ocho años… y Kagome-chan no se aparta de su lado. —reflexionó Akitoki. InuYasha guardaba silencio.

—No creen que es posible que Sesshomaru nos haya llevado la delantera…—propuso Miroku.

— ¡Pero que pervertido eres Miroku!—le gritó InuYasha—Sesshomaru es un bastardo despreciable y cruel, no creo que haya hecho eso.

—Estas seguro, ¿no es muy sobreprotector con Kagome-chan?—Akitoki se llevó un dedo al mentón—Digo, no le deja hacer nada. Y pelea contigo cada vez que descubre que nos hizo pastelillos.

—Kagome es de condición débil—los chicos lo quedaron viendo,—Sesshomaru se preocupa mucho por ella.

—Eso no borra el hecho de que su guapa hermana lo prefiere a él—dijo Miroku, —además ella posee un tratamiento y en todo caso tú deberías ser más cercano a ella.

—Es una larga historia, Kagome siempre ha estado al cuidado de Sesshomaru, desde que era una bebé.

*** Mansión Taisho***

— ¡Kagome-sama! ¡Kagome-sama!—gritaba la vieja anciana Kaede recorriendo los jardines— ¿Dónde se metió esa niña?

—Señora Kaede—le llamo Shipoo, un mozo que trabajaba en la mansión—Vi a Kagome-sama subir a su habitación, dijo que estaba muy cansada y que dormiría antes de que Sesshomaru-sama regrese.

—Mandare a la señora Tsubaki a revisarla, ha estado horneando pastelillos toda la semana para los amigos de InuYasha. Sesshomaru-sama me reprenderá por permitirle hacerlos.

—Kagome-sama es muy buena, lástima que su condición no le permita esforzarse mucho—dijo el pelirrojo, —InuYasha-sama ha traído nuevamente a sus amigos.

— ¡Que! Ese chico... estaría tranquila que de verdad vinieran a estudiar, lo único que hacen es jugar videojuegos y cortejar a Kagome-sama—se quejó la anciana, —Ya tiene dieciocho debería madurar un poco.

—Dudo que eso ocurra, eso solo pasa con Sesshomaru-sama.

—Sesshomaru-sama tenia responsabilidades, por eso creció demasiado rápido—vio a Shipoo sentir lastima por su amo,—Eso no es malo, la razón de que Sesshomaru-sama sea quien es, es gracias a Kagome-sama.

— ¿Eso no es malo señora Kaede?—preguntó el pelirrojo—Acaso no robó su infancia cuidar una niña que no es suya.

— ¡Cállate Shipoo! No hables de lo que no conoces—reprendió ella,—Sesshomaru-sama era un niño infeliz, hasta que Kagome-sama entró en su vida.

La anciana se dirigió a la cocina, seguramente los señores Taisho vendrían para la cena, al igual que Sesshomaru-sama vendría de la universidad.

*** Habitación de Kagome***

—"Hug, me siento muy cansada, Inu-nii me dijo que traería a sus amigos y he horneado muchos cupcakes para que coman mientras estudian. Sesshomaru-nii se molestará conmigo otra vez"

—Kagome-sama, Kaede-san me mandó a revisarte—la señora Tsubaki cruzaba la puerta, —chequeo de rutina.

— ¡Me siento muy cansada Tsubaki-san! —dijo la azabache con sus ojos mareados.

—Eso es porque hizo muchos pastelillos, el doctor le ha dicho que no debe sobre esforzarse.

—Hay algo que quiero hablar con Sesshomaru-Nii, quiero entrar al instituto—Tsubaki se sobresaltó,— ¿Eh? ¿Tsubaki-san?

—Dudo que acceda, pero él no puede resistirse a sus ojos de borrego degollado—vio a Kagome sonreír, —él hace todo lo que pida, pienso que Kagome-sama ya está muy grande para ser caprichosa.

—Tsubaki-san. Sessho-Nii es todo lo que tengo—dijo la azabache haciendo pucheros, —Además él siempre me consulta las cosas que hace.

—Si no fueran hermanos diría que parecen una pareja de recién casados. —soltó la mujer.

—Tsubaki-san, lo que acaba de decir es muy atrevido.

—Discúlpeme, con su permiso Kagome-sama—la mujer de cabellos grises se retiró.

—"Sessho-nii, siempre ha estado ahí para mí, desde que tengo conciencia. Todo mi mundo gira alrededor de él. No sé qué hice para que mis padres y mi hermano, Inu-nii; me odien, pero ellos la mayor parte del tiempo me ignoran.

Desayunamos, almorzamos y cenamos en la terraza o el jardín, nunca en el gran comedor, Sessho-nii trabaja desde que está en el tercer año de secundaria alta, debido a mi condición de salud nunca he pisado una escuela o instituto, dudo también ir a la universidad, pero mis padres no lo permitirán.

Creo que mi padre es quien más me detesta, apenas me dirige la palabra. Mi madre no se preocupa mucho por mí, pero de vez en cuando me visita para preguntarme como estoy y si quiero salir de compras. Inu-Nii es complicado, casi siempre se aleja de mí o se pone nervioso en mi presencia. La relación de mi padre con Sessho-Nii también es complicada, gracias a que Sessho-Nii es el mayor de todos, accede a sus peticiones"

La chica azabache se recostó en su cama, viendo los retratos que tenía en su mesa de noche, en todos ellos estaba su adorado hermano mayor.

*** Taisho Co. Oficina Principal ***

—Touga, he notado que Kagome atrae mucho a los chicos.—dijo Izayoi.

Como todas las tardes cuando no había mucho trabajo, estaba en la oficina de su esposo revisando los últimos detalles para el día siguiente.

—Ya lo sé Izayoi, pero ¿A qué quieres llegar con esto?—preguntó su marido.

—Bueno, ella es muy pegada a Sesshomaru y ellos… ya sabes— ella se levanto del sofa.

— ¿Ellos que? No entiendo tu punto—respondió el peli plata.

—Ellos en realidad no son hermanos, Sesshomaru ni siquiera sabe lo de su madre—la mujer comenzó a llorar.

—Ya deja de recordar el pasado—le regaño—Sesshomaru y Kagome son nuestros hijos.

—Tú la odias—le espeto la mujer.

—Admito que en un principio sí, pero yo te tenía conmigo y él no. —vio a la mujer enjugar sus lágrimas, —Además él no sabe de su existencia.

—Soy la única que cree que ellos son demasiado unidos—dijo retóricamente, — Sesshomaru piensa llevarse a Kagome con él cuando deje la casa dentro de poco.

— ¿Cómo es eso?—se sobresaltó el ambarino mayor, —él no me ha platicado nada.

—Me lo dijo a mí, dijo que nadie podría cuidar de Kagome y que cuando terminara la universidad se marcharía con ella—le dijo su mujer.

—Maldición, Sesshomaru teniendo el talento no quiere ser parte de esta compañía, ¡Que más debo hacer para que acceda!—planto sus puños en el escritorio—Kagome es la razón de sus trabajos sobrehumanos.

—Creo que nuestro hijo planeaba abandonar el nido desde hace mucho tiempo—Izayoi se acercó al escritorio, —revise sus estados de cuenta y tiene el suficiente capital para comprar una casa y vivir cómodamente, al parecer desde que entró a la universidad sus ingresos han mejorado.

—Amo a Inuyasha, pero él no tiene el talento de Sesshomaru en los negocios—se sentó nuevamente en su silla, —Kagome no puede pedir nada mas de mí, aparte de todo lo que ya le he dado.

—Y te lo agradezco Touga, le diste tu apellido y una familia. —dijo Izayoi.

—Puede que le haya dado mi apellido, pero quien le dio familia fue Sesshomaru. —Touga reflexiono, —Sesshomaru haría lo que sea por Kagome.

*** Universidad de Tokio***

—Taisho-san, gracias por su duro trabajo—le dijo una chica de cabellos castaños, —nos vemos mañana. Descanse.

—Hasta mañana Sara—respondió el ambarino.

Estaba en medio de un gran proyecto arquitectónico y querían su colaboración; él que había trabajado desde que entró a estudiar arquitectura en una firma de consultores y arquitectos, había ganado muy buena fama por sus trabajos. Ahora a pocos meses de salir un gran proyecto estaba en sus manos, debía consultar con Kagome sobre qué hacer, aunque de antemano sabía que ella lo apoyaría.

— ¿Estas preocupado por tu pequeña hermana?, Taisho—un chico pelinegro de cabellos ondulados lo sacaba de concentración.

—Inoportuno como siempre, Onigumo—el ambarino tomo sus cosas y las empezó a guardarlas.

—Tal parece que di en el blanco —, Naraku se acerco hasta el ambarino.

—Inuyasha y su grupo de amigos…—suspiro, — han estado llegando toda la semana y Kagome los atiende.

—Esos son celos, es normal que no te guste compartirla… ella es muy hermosa. —el pelinegro se relamió los labios. —tan inocente… confía tanto en su Onii-chan que haría cualquier cosa con él.

—Has leídos muchos ero-mangas Naraku. Tu mente esta tan perdida que estas imaginando cosas. —Respondió a secas.

—Deja de verla como una niña Sesshomaru, ya no lo es—el ambarino busco la salida, —Alguien te la va a robar.

—Ella es mi hermana menor, no haré eso con ella—dijo viéndolo desde su hombro, —No soy como tú.

—Ella seguirá creciendo, está acostumbrada a meterse en tus sábanas, en algún momento el deseo te consumirá… al igual que sucedió conmigo y Kagura.

—Maldito Naraku—renego. Como es que eran amigos, porque se hablaban de cosas privadas, —no le haré eso a ella.

—Alguna noche sentiras su hermoso cuerpo pegado al tuyo —, vio que el ambarino se iba, —desearía estar en tu lugar.

—"Maldito Naraku"—volvió a renegar, —Kagome era solo una niña en el cuerpo de una mujer, era inocente y por eso cada noche ella llegaba a su habitación y se metía en su cama, ella dormía abrazada a él, con sus pechos pegados en su espalda y su sexo sobre su pierna. Él tenía un enorme autocontrol, por su mente aún cruzaban los retazos del pasado.

Naraku tenía razón, alguien se la iba a quitar, pero lo que Sesshomaru no se espero fue que hubiesen tantos interesados en su hermana, incluso en su propia familia.

*** Fragmentos de Eternidad***

Inuyasha Taisho, el hermano de el medio. Medio hermano de Sesshomaru y Kagome. Desde pequeño siempre acaparó la atención de todos, rezagando a Sesshomaru y a Kagome. Cuando descubrió que su hermano mayor prefería a su hermana en lugar de él, empezó a odiarla y su odio creció con los años hasta que descubrió que su hermano mayor lo detestaba.

Sesshomaru nunca se mostró amable con él, nunca le sonrió, le conto un cuento o lo defendió, incluso Sesshomaru le llego a decir que era una molestia tenerlo cerca. Kagome en cambio nunca le guardo rencor, y al ver lo amable que era la niña a pesar de su crueldad, cambió. Cuando su hermana cumplió los doce años empezó a notar lo bonita que era, su amor por ella creció cuando ella se empezó a encariñar con él, pero al no saber como actuar junto a ella provocaba malos entendidos con la pequeña azabache.

—Kagome, no tienes que venir a verme mientras estoy estudiando—le regañaba siempre, ella solo sonreía y salía corriendo.

—Inu-nii estudia mucho por eso le traje galletas—decía la pequeña azabache.

—No te en cariñoso conmigo—, murmuraba el chico al verla irse.

El amor hacia la pequeña azabache creció con el tiempo y se volvió un amor prohibido, un amor que crecía en las profundidades de su corazón y que su hermano mayor se daba cuenta. Sus amigos se habían ido y la cena pronto estaría lista, lo bueno es que no vería la cara de su hermano mientras comía.

—Maldito Sesshomaru—maldijo, solo en su habitación, "¿Cómo hace para saber las cosas…?"

—Inu-Nii…—la chica azabache asomaba sus narices en su habitación, —Discúlpeme, Sesshomaru –Nii te regañara por mi culpa…

—No es tu culpa Kagome, yo no debí avisarte que vendrían — renegó desde su cama. Se levantó para salir de ahí.

Ella se acercó y le abrazo por la espalda. Él se tensó al instante sintiendo el aroma que emanaba de su hermana.

—Lo siento Inuyasha—dijo ella. —No quiero que Sesshomaru-Nii te regañe…

—Ya no soy un niño pequeño, Kagome…—apretó las manos de su hermana que se enlazaban en su pecho—puedo defenderme solo…

Se sintió un cerdo, por el rumbo que sus pensamientos estaban tomando, pero no podía evitar pensar en tener a su hermana desnuda en la cama con él. Kagome se alejó lentamente alegando que Sesshomaru vendría pronto de la universidad y que ella debía prepararse para la cena.

—Maldito Sesshomaru—volvió a mascullar —vete al infierno.

*** Fragmentos de Eternidad***

—Kagome, hay algo que debo platicar contigo—le dijo su hermano durante la cena, —Es acerca de un nuevo proyecto.

— ¿Es muy importante?—pregunto ella. Estaban cenando en la terraza, al aire de primavera traía un delicioso aroma que llenaba sus fosas nasales. Un único crisantemo adornaba su mesa, la flor favorita de la azabache. Sesshomaru asintió.

—Me han dado carta abierta para la construcción del nuevo edifico en Shanghái, pero tendría que mudarme a China mientras el proyecto esté en pie.

—Sesshomaru… por supuesto que debes aceptar, ese edificio te impulsará en tu carrera como arquitecto—dijo ella eufórica — No te preocupes por mí, yo estaré bien.

—No seas tonta Kagome—, dijo su hermano rompiendo la atmosfera.— Tu viene conmigo.

La azabache no podía aguantar su gozo, al fin saldría de su prisión, al fin cambiaría de aires.

— Eso es increíble! Sessho-Nii, te acompañaré, iremos a Shangai.

—Será dentro de unos meses, justo después de graduarme.

—Ya quiero visitar ese lugar, si es posible me gustaría estudiar ahí en un instituto, soy más fuerte que antes y he mejorado bastante, ya no más tutores.

—Lo pensaré —dijo el ambarino a la súplica de su hermana.

—¡Sí! Iremos a Shangai —Kagome abrazo a Sesshomaru.

A sus catorce años Kagome Taisho iba a conocer otra ciudad, otro lugar distinto del que alguna vez pensó conocer, luego de la cena al pasar por el estudio de su padre escuchó voces que conocía muy bien.

—Entiende esto de una maldita vez! —gritó Sesshomaru, —No estoy interesado en tu empresa o tu dinero, me marcho de esta casa junto a Kagome, ella nunca les ha importado.

—Eres tú quién debe entender Sesshomaru —vociferó su padre —Es tu deber como mi hijo, tal vez tu no necesites mi dinero pero ella sí, y si te vas definitivamente le quitaré su parte de la herencia.

—Buscaré como salir adelante sin tú ayuda —, respondió el ambarino para salir del lugar.

Al salir ve a Kagome junto a la puerta sorprendida y triste. Su mirada cae en su padre quién también sale del lugar. Sesshomaru se dirige a su habitación furioso, maldecia a su padre por intentar amargar su viaje antes de comenzarlo.

—Otou-san —dijo ella levantándose —Yo hablaré con él y lo haré reflexionar. A Sessho-Nii le gusta hacer las cosas por sí mismo, es muy orgulloso.

—Hazlo, a ti sí te escucha —respondió Touga para luego irse. Debía reconocer que Izayoi tenía razón en algo, Kagome era muy guapa.

Kagome corrió a la habitación de su hermano, ella nunca tocaba la puerta al entrar, porque ella era la única que entraba a esa habitación además de su hermano. Buscó a su hermano pero no estaba en ningún lado y recordó que cuando su hermano esta muy molesto, toma un largo baño. Al abrir la puerta del baño ve a su hermano sentado junto a la tina, con una expresión furiosa. Ella caminó en puntillas y se sentó junto a él, lo abrazo por el abdomen y acomodó su cabeza en su regazo.

—Eres como un gato... —le dijo su hermano. Ella sonríe como estrella.

—¡Me gustan los gatos! —dijo ella. Él levanta la comisura de sus labios. —Hace mucho que no nos bañamos juntos.

—Ya no estás en edad de bañarte conmigo. —dijo su hermano.

—Me gustaba hacerlo, ¿Recuerdas que yo tallaba tu espalda?

—Recuerdo lavar tu cabello.

—¿Porque no podemos seguir como antes? —preguntó ella.

—Porque hemos crecido, Kagome —, dijo Sesshomaru cansado de su insistencia. Él podía ser su hermano, pero no dejaba de ser hombre, acaso ella no entendía.

—Está bien, es sólo que extraño a Sessho-Nii.

—¿Porque me extrañas? Todos los días aunque te vas a tu habitación amaneces en mi cama.

Kagome volvió a sonreír.

—Es que no puedo quitarme esa costumbre, no sé como haré cuando Sessho-Nii se case.

Kagome dejó de sonreír y suspiro con verdadera tristeza, ella se iba a sentir muy sola.

—No está en mis planes casarme todavía, Kagome—, dijo acariciando su cabello.

—Otou-san quiere lo mejor para nosotros, al final cuando Otou-san muera su empresa nos quedará y si él confía en Sesshomaru-Nii es porque sabe de lo que es capaz.

—¿Es buena idea aceptar su oferta?

—Por supuesto, Inu-Nii no es tan bueno en esto como Sessho-Nii y padre lo sabe. Además tengo muy buenos recuerdos en esta casa con Sesshomaru-Nii.

—Hablaré con padre mañana, por hoy será mejor dormir. Puedes dormir aquí, Kagome.

—¡Sí! Iré a bañarme a mi habitación, vuelvo enseguida.

Él no podía detener la montaña rusa de sus sentimientos, su hermana no lo entendía. A su mente regreso el pasado y su pasado con Kagome.