Tsubasa Reservoir Chronicle/Horitsuba Gakuen pertenecen a las reinas del manga, CLAMP
Motivos.
Si hubiera tenido alguna razón rígida habría sido lógico. Pero no lo era, porque cuando su querido hermano le preguntaba el porque nada más que el mutismo salía de sus labios; el mutismo que resultaba tonto y le daba más culpa de una y otra manera.
¿No debería sentirse avergonzado? Pues no, el arrepentimiento se mudó hace mucho de su corazón, la inflamada pasión que tomó su lugar.
Estás jugando con fuego, Fai. No te quemes.
Yuui tenía razón. No sólo él saldría lastimado si las cosas no podían mantenerse bajo control; sin embargo el cauce ya no se detenía, era demasiado violento y ardientemente anhelante. Ocupaba toda su mente, su entendimiento y su sonrisa. La sonrisa que ahora solía presentarse más sincera, con el leve tinte de felicidad absoluta que antes no pudo expresar.
Incluso Kurogane-sensei lo había notado. Enojándose, llamándolo idiota casi al borde de la furia aunque no fuese su problema y así lo tomó después. Mirándole en el almuerzo cuanco contemplaba un punto fijo, como queriendo advertirle de su enfermiza dependencia. Esa que desecandenaba el completo caos en el área de maestros. Por ende, las clases ya no eran lo mismo, mucho menos en las aulas de aquellos alumnos que conocía muy bien...de los cuales parecía una tortura ocultar la verdad.
Porque uno ya la sabía.
Y ninguno de los dos podía evitarlo. Ni ese niño castaño ni él mismo, pues nadie deseaba detenerlo...¿Acaso no había sabido las consecuencias la primera vez? Incluso creyó que si era rechazado su corazón se rompería en pedazos, pero no fue así. La dulce boca que capturó en un destello de sorpresa supo corresponderle luego de algunos segundos; suavemente, sabiendo que firmaban una sentencia de perdición mientras el simple beso llegaba más lejos y los gemidos del cuarto ahogaban los ruidos exteriores.
Lo estás condenando.
Si alguna vez se decidía a acabar con ello, lo haría de la forma correcta. No hoy. No observando esos ojos miel tan expresivos que brillaban alegremente en clase de Química, era imposible pensar en borrar esa sonrisa de sus labios aunque fuere por su propio bien.
Y como Yuui entendía bien, él ya era adicto a ese niño...por muy doloroso que resultara depués.
N/A. ¡No es mi culpa! Me inspiré, no pude evitarlo. Ambientado en Horitsuba Galuen. Comentarios sinceros, por favor.