Esta es una historia escrita en conjunto con una amiga, y esta , estamos muy seguras de que esto probablemente no este ni cerca a lo que pase en "My blue heaven", pero nuestros corazoncitos Jisbon no aguantan mas, asi que esta historia es como una terapia para nosotras. De hecho esta es nuestra primera historia y nos gustaria saber que piensan, dejen un review please!.

Disclaimer

Hasta donde sabemos nuestro nombre no es Bruno Heller, asi que creo que no.

Gracias por leer!

Blue Love Triangle.

Era un día cualquiera para Patrick Jane, o por lo menos un día cualquiera de lo que había sido su vida por los últimos dos años.
Habían pasado dos años, si, dos años desde que el finalmente se había encontrado con RJ, con el monstruo que asesino brutalmente a su preciosa familia, a su adorada esposa y a su hermosa hija. Con el enemigo que había prácticamente secuestrado a Lisbon, a su Lisbon, que había tomado la sangre de Brett Patridge para dibujar su cara burlona, en la cara de su ángel, en la cara de su luz, en la cara de la única persona que el amaba.
Después de haber pasado diez años tras la pista de ese animal, finalmente se había encontrado con él... Y lo mas importante, había logrado matarle.
No había sido como el lo tenia planeado, no fue una muerte lenta y dolorosa, de hecho fue un solo disparo a la cabeza lo que había acabado con ese miserable.
Lo malo es que había sido en frente de Lisbon, la pobrecita tuvo que observar todo el acto, desde que empezaron a pelear hasta el disparo certero que acabo con la vida del asesino en serie RJ.
Aunque la peor parte fue que después de matarle tuvo que huir, había matado a un hombre importante en la ley de california, y todas las agencias de la ley estarían tras él.
De lo que más se arrepentía, era de que jamás tuvo la oportunidad de despedirse apropiadamente de Lisbon, si al final, fue ella la que le dijo que huyera, pero era porque tenia miedo por su vida, tenia miedo que algún seguidor de RJ quisiera tomar venganza sobre el por haber matado a su maestro. Pero aun así, le habría gustado tener el tiempo para despedirse de ella, para decirle todas esas cosas que siempre le quiso decir, empezando por decirle que la amaba, que la ama, que siempre la iba a amar, a disculparse por todas las veces que le mintió, que rompió su confianza, por todo el papeleo que tuvo que llenar por su culpa, por todas las disculpas que tuvo que dar en nombre de el, para que ninguno de los dos perdiera el trabajo. Pero mas que nada, por haberla dejado por todo ese tiempo.
Aunque hoy era un día diferente,no sabia porque pero presentía le iba a pasar. Y así fue, a las 8 de la mañana Micky, el hijo de la señora que le había alquilado el cuarto en Suramérica le llamo, diciéndole que la policía lo estaba buscando. Jane no sabia lo que estaba pasando, pero de repente llamaron a su puerta:
-Sr. Jane, somos del FBI, por favor abra la puerta, necesitamos hablar con usted.
Jane al principio se resistió e intento fingir que no estaba. Cuando le volvieron a hablar:
-Sr. Jane sabemos que esta ahí, si no abre tendremos que derribar la puerta.
Después de pensarlo unos segundos abrió la puerta, para su sorpresa, al abrir la puerta uno de los agentes lo agarró de las manos, haciéndole una llave al brazo y poniéndole las esposas, acto seguido le pusieron una venda en los ojos. Jane hizo todo lo que pudo para zafarse de ellos y huir, pero no pudo. Cuando se dio cuenta, ya estaba dentro de un automóvil, fue ahí cuando escucho una voz familiar...
-Jane, tiempo sin verte.
Jane no lo podía creer o estaba soñando, o alucinando o la que acababa de oír era la voz de Cho. Esto alegro un poco al ex-consultante, quien rápidamente esbozo una sonrisa:
- ¿Cho? Viejo amigo ¿Como has estado?.
El agente al oír la ironía en las palabras de Jane, se enojó un poco, pero recupero la compostura profesional y le dijo:
- Necesitamos hablar contigo.
- ¡Ah, si! ¿Y, era necesario que el FBI, me sacara de mi casa como si fuera un criminal? ¿No pudiste solo haberme pedido amablemente que te acompañara a hablar? ¿Tenias que sacarme a la fuerza?
Cho, con un semblante muy serio le dijo - Si, además recuerda que si eres un criminal, mataste a RJ, por lo tanto eres un asesino. Y si te hubiese pedido amablemente que nos acompañaras a hablar, te habrías negado.
- ¿Sobre que, querías hablar?- dijo Jane en un tono áspero, como fastidiado.
- El FBI necesita tu ayuda en un caso.
- Yo ya no resuelvo casos.- le respondió Jane.
- Lo se, pero el procurador general, ha solicitado tu ayuda específicamente. -Le dijo Cho, no muy convencido por como iba la situación

- Y acaso no sabe el procurador general, que soy un prófugo de la ley, que mate al asesino en serie mas buscado en los Estados Unidos, que mate a dos hombres mas que eran cómplices de RJ, y que deje morir a por lo menos seis hombres mas, sin contar al que casi dejo morir enterrandolo vivo.
-Si lo sabe- dijo Cho, pero también sabe que eres el mejor para resolver casos difíciles.

A estas alturas los demás agentes que los acompañaban tenían una cara de "y están seguros que este es el loco que quieren que nos ayude a resolver este caso tan importante"

A Jane sin embargo, no le importaba en lo mas mínimo la mirada amenazante de algunos agentes, ni la mirada de preocupación de la otra agente, la agente Kim Fisher, según su placa. Aunque tenia que admitir que su mirada, le recordaba un poco a la mirada de Lisbon, la primera vez que el entro al CBI. Solo que la de Lisbon era mas bella, era mas tierna, mas dulce, y mas iluminadora.
¡Oh, oh!, aquí iba de nuevo, pensando en Lisbon. Cualquier cosa que veía, oía, e incluso olía, le recordaba a ella, a Teresa Lisbon, a su Teresa Lisbon.
De pronto volvió a escuchar la voz de Cho, quien algo preocupado le estaba hablando.

- Jane... Jane... ¡Jane! ¿Me escuchas?
- ah... Que dices?... Umh... Claro que te escucho, que me estabas diciendo?

- El procurador general te ofrece un trato..., hace poco mataron a su mejor amigo de la infancia, el movió influencias para que el FBI, se encargara del caso, quería a los mejores trabajando en el caso. Pero de alguna forma, le llegaron los rumores que el mejor resolviendo casos eres tu. Y se le metió a la cabeza la idea de que te quiere a ti trabajando en el caso, para el FBI.

Jane se echo a reír a carcajadas, pero Cho seguía muy serio.

- Ja! Te deseo suerte explicándole al procurador general, que me negué a SU trato. - le dijo Jane un poco desafiante.

- Aun no termino de explicar el trato- le dijo Cho, y prosiguió - A cambio va a retirar todos los cargos en tu contra y te permitirá regresar libremente a Estados Unidos. Incluidos los cargos del asesinato de RJ.

Jane se quedo callado analizando la situación, pero después de un rato le respondió: -Te deseo suerte encontrando al asesino del amigo del procurador general, si me disculpas, tengo cosas que hacer.

Estaba a punto de bajarse del carro cuando Cho hablo de nuevo:

- Teresa...!

Jane se detuvo, quería saber que intenciones tenia Cho al mencionarle su nombre.

-¿Que pasa con Lisbon?- le dijo Jane. - ¿Esta ella bien?.

- No lo se, no ha hablado conmigo desde que te fuiste.

Jane volvió a sentarse esperando que Cho prosiguiera.

- Lo ultimo que oí, fue que se había convertido en la Sheriff de un pequeño pueblo en Washington... No he hablado con ella por muchas razones, para comenzar cuanto tu huiste ella quedo destrozada, no era la misma, así que decidí no llamarla
Porque podría hacer que te recordara. Luego intente contactar la, pero no me respondía ni a las llamadas ni a los mensajes, así que después de un tiempo, deje de intentar comunicarme con ella.

Jane le dijo - ¿y porque me la mencionas?

- A caso no es obvio, ella no me respondía porque estaba triste, porque te extrañaba; y estoy seguro de que todavía te extraña.
Se que te extraña, tanto como tu a ella.

Jane se quedo callado analizando esta información, queriendo comprender mas de lo que le habían dicho.

Para sorpresa de ambos, esta vez fue la agente Fisher la que hablo: -Sr. Jane, se que usted y yo no nos conocemos personalmente, pero dejeme decirle, que estoy al tanto de la relación que usted y la agente Lisbon habían desarrollado con el paso de los años. Se que ustedes eran buenos amigos, y que se consideraban compañeros. Dejeme decirle que lo que usted y la agente tenían era mas que una simple amistad, era un lazo mas fuerte que eso; pero estoy segura que por causas externas como miedo a que el asesino en serie, los persiguiera aun mas por lo que sentían el uno por el otro..., se negaron sus sentimientos por mucho tiempo, hasta casi olvidar que los sentían, y cuando menos se dieron cuenta ¡Ya se habían enamorado!. Pero usted no iba a poder avanzar en su vida hasta que acabara con la persona que le robo su vida, y que le quitó su felicidad, no se dio cuenta de las consecuencias que este acto tendría hasta que fue demasiado tarde. Tuvo que pagar por sus acciones huyendo y dejando a la única persona que ama... A la agente Lisbon.

Durante el discurso de la agente Jane permaneció callado, con la cabeza abajo, mirando el suelo, apretando los puños, parecía tener los ojos rojos, y estar a punto de quebrarse enfrente de ellos, de empezar a llorar como un niño, por haber perdido cualquier esperanza de volver a comenzar. Pero no lo hizo, espero paciente hasta que la agente volvió a hablar.

-Sr. Jane, el día de hoy el FBI, le trae en bandeja de plata, la posibilidad de que usted se redima y que le sea posible regresar para poder comenzar una nueva vida, ayudando al FBI, obviamente. Pero no haría mas, que lo que ya hacia en el CBI. Por favor Sr. Jane, acepte nuestra oferta.

Jane seguía callado, y Cho estaba a punto de perder las esperanzas de convencerlo de regresar; cuando finalmente Jane habló:
- Esta bien, ya lo pensé bien, yo con gusto aceptaría el trato, pero hay un problema... Yo solo trabajo con mi compañera, y mi compañera como ustedes ya sabrán es Teresa Lisbon. Y la verdad, después de todo lo que la he hecho pasar, no creo que quiera volverme a ver nunca mas.

Cho le dijo:
-Tengo una idea... Que tal... si... le proponemos a Lisbon que nos ayude a resolver este caso, no la podemos obligar..., porque estoy casi seguro de que acabaría renunciando, y eso es algo que no queremos que pase; tampoco le diremos que tu nos ayudaras. Solo que el FBI necesita su ayuda porque ella ya ha lidiado con gente de este perfil, y sabe como manejarlos.
Después le contamos la verdadera misión, y que tu nos vas a ayudar.
En Jane se formo una sonrisa, solo llevaba diez minutos allí, y ya se recordaba porque Cho era su amigo.
- Si y cuando ella se quiera echar para atrás, le diremos que el procurador general ya sabe que ella va a trabajar en el caso y que si no participa tomaran acción legal en el caso. Se enojará al comienzo, pero luego accederá. *o al menos, eso espero* pensó Jane. -y como a ella no le gusta, que la regañen continuara con el trato.

- Bien, eso ¿quiere decir que accedes al trato?- pregunto Cho.

- Solo si Lisbon accede, si no, yo me regreso.

- ¡Esta decidido, vamos al aeropuerto!- dijo entusiasmada la agente Fisher.

Wow, esa mujer era como la combinación de Grace con Teresa. Hablando de Grace, adonde estarían la inocente pelirroja y su esposo. Umh... Esta era solo una de las muchas cosas que tendría que averiguar, cuando llegaran a Estados Unidos.
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El viaje fue tranquilo el FBI, ya se había encargado de obtener su documentación en orden para sacarlo de Suramérica. No fue un viaje largo, y pese a los intentos de Jane por conciliar el sueño, no durmió mas que un par de minutos. Estaba ansioso por volver, había muchas cosas que el quería hacer al regresar, y sobre todo no podía esperar a ver la reacción de Lisbon, cuando se diera cuenta que el había vuelto.

Llegaron del aeropuerto a eso de las 4 de la mañana, los agentes estaban cansados, y la mayoría había obtenido permiso para irse a casa a descansar. Solo se quedaron Cho, Fisher y Jane; ellos fueron al hotel "Sweet Home" en Washington, debían de tratar de dormir un poco, antes de enfrentarse a Lisbon, para tratar de convencerla que los ayudara en la misión.

Se ubicaron en sus habitaciones, los agentes se durmieron rápidamente, estaban muy cansados. Lastimosamente Jane no corrió con la misma suerte y permaneció despierto, aunque en su caso, fue algo bueno. Le daba la oportunidad de pensar en todo lo que había pasado en las ultimas horas, además necesitaba inventar alguna excusa que pudiera decirle a Lisbon,para impedir que ella lo golpeara en la cara o se negara a trabajar con él.
Después de un rato decidió que seria mejor hacerlo de manera espontánea, ella le creería más si él no planeaba como debían ir las cosas.

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Eran las 9 de la mañana cuando los agentes se reunieron. Era hora, Cho tomó su teléfono y marco el número del celular de Lisbon. Tenían tiempo sin verse, pero seguía siendo, el numero 1 en marcación rápida.

El teléfono sonó dos veces antes de que contestaran, y si, la que contesto era...
- Lisbon...-
- Umh... Jefa, soy yo Cho...
- ¡Ah...! Hola Cho, ¿Que tal?, ¿Como te va?...

* La misma respuesta, aprendida de Jane, claro esta* pensó Cho.

- Muy bien... Umh... Jefa... Te llamo... Porque necesito un favor...
-Umh.. Ok, de... De... ¿Que se trata? ¿Que necesitas?
- Necesito tu ayuda con un caso, veras recientemente mataron al mejor amigo de infancia del gobernador, así que el movió influencias para que participaran solo los mejores en el caso. Pero... De alguna forma, le llegaron los rumores de que tu eras la mejor resolviendo casos de alto perfil, y se le metió a la cabeza la idea de que te quiere a ti trabajando en el caso. Jefa... Porfavor... ¿Podrías ayudarme en este caso?. Si no lo haces el procurador me estará presionando y empezará a molestar hasta que aceptes ayudarnos... ¿Que dices? ¿Aceptas?.

Ella lo pensó un par de segundos y luego dijo:
- Esta bien, te ayudare en el caso... Me darás detalles?.

- Umh...- dijo Cho, mientras preguntaba con la mirada a Jane y a la agente Fisher, que le respondía a Lisbon.

Ambos le hicieron señales de: ¡NNNOOO! Con las manos y la cara. Cho entendió el mensaje y se lo dijo a Lisbon...

- No, jefa será mejor que nos reunamos en la escena del crimen, para que yo te pueda dar la información detallada.
- ah... Ok... Y Cho?
- Si, ¿jefa?
- Ya no soy tu jefa... ¿recuerdas...?
Cho se quedo pensando en eso y le respondió:
- Es la costumbre, lo siento, ¡adiós! Te mando la información por correo y te veo en la escena en 30 minutos

No le dio tiempo a Lisbon de responder, porque ya le había colgado.
Al finalizar la llamada los dos agentes y Jane dieron un suspiro de alivio, por lo que habían oído en la conversación, Lisbon no sospechaba nada, o por lo menos... No todavía.

Así fue en 30 minutos exactamente Cho y su "equipo" * si se le puede llamar así, a una agente y a un ex-consultor-ex-estafador* pensó Cho, habían llegado a la escena del crimen.
Habían pasado cerca de 13 horas desde que habían hallado el cuerpo de Peter O'Laws, un programador de computadoras, de 53 años, casado, sin hijos, vivía con su madre Dalila Farrek y con su esposa Olivia O'Laws.
La escena del crimen se había conservado perfectamente, porque hacia mucho frío, y además con solo ver la policía la gente se había amotinado, para enterarse de lo que había pasado. Aunque ninguno tuvo el valor de acercarse mucho al ver a toda esa gente con armas.
Lisbon llego 5 minutos después que ellos, y no había notado al equipo de Cho, ni siquiera a Cho, pero se acerco rápidamente al lugar donde estaba el cuerpo. Se agacho, para intentar a adivinar la causa de muerte, y fue ahí cuando se dio cuenta que había un par de ojos observando lo que hacia y riendo un poco. Se levanto algo indignada *no estoy aquí, para hacer bromas* pensó y era justo lo que iba a decirle al extraño que se encontraba riendo a sus espaldas. Así que se dio vuelta y...
- ¡Oh por Dios...! Ja... Ja... Jan...
- Te ayudo a terminar... JANE... Aunque casi lo terminas, bien hecho.

Lisbon estaba realmente impactada de verlo, que tuvo un mareo y se iba a caer, eso claro, si no hubiera sido porque un par de brazos de un ex-consultor la habían detenido para que no se golpeara. Ella cerró los ojos, aun pensaba que todo eso era solo una alucinación, pero al abrirlos se encontró...
- Cariño... ¿Estas bien...?
- No me llames cariño...! - le dijo Lisbon muy enojada, y parecía que cada segundo que pasaba su ira incrementaba mas...
- Jane... ¿Que demonios estas haciendo aquí? Que no sabes que acá esta el FBI, todos esos que andan con esas chaquetas azules con letras amarillas atrás que dicen FBI, SON DEL FBI!.- dijo susurrando.
Jane la seguía mirando sonriente:
- Lo se... - le dijo.

Ella intentó levantarse, pero Jane la detuvo:
- Tranquila, espera un poco mas, si no lo haces te vas a volver a caer. A menos, claro..., que sea eso lo que quieras...- Le dijo con una sonrisa picara

Ella se limito a fulminarlo con la mirada, pero obedeció, a final de cuentas el tenia razón, si se levantaba muy rápido se iba a volver a caer, aunque quería dejar claro que no se quedaba ahí en sus brazos porque quisiera, sino porque no tenia opción.

Cho había presenciado toda la escena, pero no había tenido el valor de intervenir, por miedo a que la jefa, lo fuera a regañar... Umh... No, no la jefa... Umh... Que Lisbon lo fuera a regañar... Que horrible, tendría que acostumbrarse a llamarla Lisbon o de otra forma que no fuera "jefa".

Pero tenia que hacerlo, tenia que ir e intervenir en esa situación antes de que Lisbon se marchara y perdieran cualquier oportunidad de tener a ambos *ex-consultor-ex-estafador y ex-jefa-ex-agente*.
Así que decidido Cho camino hacia donde estaban ellos dos.

- Hola jefa... Te sientes bien...?- para cuando llego Jane ya había ayudado a Lisbon a ponerse de pie y a incorporarse.
- Que si estoy bien?! Ja, no estoy tan segura, porque estoy viendo a Jane, y la verdad no estoy muy convencida de que no este alucinando...
- Uh... Yo puedo aclarar eso- dijo Jane- No, no soy una alucinación, si fuera una alucinación, no te había atrapado cuando te caíste... ¿Recuerdas...?
- Callate, Jane... Ahora Cho, podrías explicarme, que esta haciendo ÉL aquí?!- le dijo dirigiéndole una mirada a Jane.

- Veras, el gobernador también pidió a Jane en el caso- respondió Cho.
- Y no pensaste en decírmelo antes...?
- Te dije que te explicaría detalladamente cuando llegaramos a la escena... Y, pues estamos en la escena...

Lisbon estaba realmente enojada, Cho le había ocultado información importante, que probablemente le habría perjudicado al momento de decidir si entraba o no al caso.

- Lo lamento Cho, pero yo no puedo trabajar con él... Me retiro del caso.
- Eso ya no es posible- dijo Cho- el gobernador ya fue informado de tu participación en el caso y si no nos ayudas, tomaran acción legal contra ti.

Lisbon se quedó pensando, esta vez realmente se la habían hecho. Habían "olvidado" información importante, para que ella accediera al caso y luego no tuviera mas opción que estar ahí... Inteligente, debió habersele ocurrido a Cho, y Jane perfeccionó la idea.

- Bien, voy a seguir con el caso- avanzó un par de pasos hacia Jane- Pero si me molestas, no lo pensare dos veces para golpearte en la cara. ¿Entendido?.
- Tu no lo varias , ¿Cierto?- pregunto con una sonrisa Jane.
- Pruébame- le dijo Lisbon en un tono desafiante

Lisbon volvió a centrarse en el cuerpo de la víctima, e igual lo hicieron los dos hombres. Cho le dio el resto de la información de la víctima e iban a distribuirse las entrevistas cuando...

- Teresa...?!

Lisbon se dio la vuelta y saludo al hombre.

- James... Que... Que haces aquí...?
- Estaba corriendo por aquí cuando vi a ese montón de policías y decidí venir a ver que pasaba.
- Ah...

En eso Cho recibió una llamada y tuvo que dejarlos para contestar.
Jane pudo ver lo incomoda que se sentía Lisbon ante tal situación, así que decidió dejarlos "solos".

- Uh... Lisbon tengo que irme me necesitan por allá, pero ya regreso. Un placer conocerle Señor...?- le dijo al hombre, mientras extendía su mano de manera cordial.

- Walls. Me llamo James Walls.
- Ah, todo un gusto, ya vuelvo Lisbon...
- Jane...! Jane...?! Espera per...
Amh... James mira ahora mismo estoy ocupada trabajando en un caso así que me tengo que ir...
- Teresa, se que estas ocupada, pero podríamos un día de estos tomarnos un café...?
- Ah... Claro, tu di cuando, adiós!

Lisbon se fue lo mas rápido que pudo, quería encontrar a Jane para golpearlo por haberla dejado sola en una situación como esa.
Lo hallo recostado en su auto, observandola hasta que llego al frente:
- Me agrada ¿Cuando volverán a verse? - Dijo Jane en un tono sarcástico.

- No pienso hablar de temas personales contigo. - respondió Lisbon mas tranquila que antes.

- Oh...! Vamos Lisbon, dime... dime... anda dime quien es. Hablar te hará sentir mejor, ¿sabes?.

Lisbon solo se le quedo viendo con una cara de *aja, por poco y te creo* y le dijo:
-Jane, honestamente no quiero hablar contigo al respecto. Además, recuerdas cuando te dije que si me molestabas, te iba a golpear en la cara...
- Si...
- Pues me estas molestando...!
- Pero, por favor, Lisbon, Quiiiiiiiieeeeeeroooooo sabeeeeer!
- Ah, quieres saber?
- Si, dime por favor!
- Esta bien, te lo diré..., te lo diré justo después de que dejes de ser una persona molesta, es decir, justo después de que dejes de ser tu!

Jane estaba sorprendido por la reacción de ella, así que prefirió pedirle disculpas...

- Lisbon, perdón... Yo... Yo, solo estaba jugando- le dijo con la cabeza abajo y la mirada triste.

Lisbon se sintió mal, por haberlo dejado así, y decidió disculparse también...
-No... Yo soy la que debe disculparse, pero Jane, es solo que me acabo de acostumbrar a mi vida sin ti, y ya debo de acostumbrarme a mi vida contigo

- Bueno, yo te puedo ayudar a que te acostumbres- bromeo Jane
- Si, si puedes- sonrió Lisbon.

La agente Fisher y Cho habían visto todo el espectáculo y lo habían disfrutado al máximo, era entretenido ver a esos dos pelear. *No llevaban juntos mas de veinte minutos y ya actuaban como antes, discutiendo fuerte, pidiéndose disculpas, hablando con el corazón y disimulando con un chiste o una broma. No hay duda estos dos años debieron haber sido una tortura para estos dos* pensó Cho.
Se dirigió a ellos para presentar a la agente Fisher a Lisbon y decirles a quienes deberían entrevistar...
- Lisbon ella es la agente Kim Fisher, Jane tu ya la conocias.
- Fisher ella es la agente Lisbon.
- Un placer agente Lisbon, he escuchado maravillas de usted y estoy ansiosa de trabajar con ambos- dijo dirigiendose a Jane y a Lisbon.
- Igualmente- dijo Lisbon

Jane se limito a sonreir y asentir con la cabeza.

-Bien -dijo Cho- la victima vivia con su esposa, hay que entrevistar a su madre.
- ¿Cho?- pregunto Lisbon- ¿quien encontro el cuerpo?
- Ah! de eso queria hablar con ustedes chicos... Los que encontraron el cuerpo fueron….

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