Esta idea a estado rondando mi cabeza durante mucho tiempo, es mi primer fic de misterio suspenso y espero que no sea muy cliché para ustedes, estaba viendo pretty little liars y eso me ayudó a complementarlo porque me faltaban algunas cosas, no sean duros conmigo, espero que lo disfruten es muy diferente a lo que normalmente escribo bien...

Enjoy!


Carlos se encontraba al lado de sus amigos Kendall, Logan y James estaban disfrutando una agradable noche juntos, se había vuelto su costumbre desde que tenían memoria, siempre que alguno pasaba por un momento de estrés, ira, confusión, aburrimiento, se llamaban para poder conversar entre ellos y que esa horrible y extraña sensación cambiara.

Desde que los chicos se conocieron desde hace no más de dos años han pasado cosas inimaginables desde entonces, se cuentan absolutamente todo, pasan por todo juntos, para lo único que se separan son para las vacaciones de verano, sin embargo, se devuelven una semana antes para poder ponerse al día de sus travesuras, aventuras y cometidos.

James Diamond, primeramente el chico a la moda, ricachón, siempre se preocupa por su aspecto físico, que después de salir de la escuela seguiría su sueño de ser famoso, Logan Mitchell el sabelotodo del grupo, intuitivo y da un tanto de miedo cuando deja que su instinto lo guie, Kendall Knight un chico con dotes de líder, sencillo, atlético con unos de los promedios más altos de la clase solo para que la universidad de sus sueños se fijara en él, el ultimo pero menos importante es Carlos García, ¿Por dónde comenzar? Es un chico tierno, encantador y un tanto astuto, pero desde el comienzo reservó algunos datos que según él eran de poca importancia.

Volviendo en esos no tan cumplidos dos años de conocer a los chicos, estaba caminando apurado por los pasillos de la escuela, para él era un día normal de escuela, huir de algunos de los chicos que le perseguían incesantemente porque su pequeño cerebro no les daba para entender que no quería nada con nadie, por esa razón y muchas otras comenzó a ser odiado por casi todos los chicos, algunas chicas por haber enredado a sus novios, esto al pequeño solo le hacía gracia, sin decir ni hacer nada a los insultos de las chicas seguía derecho con una sonrisa arrogante en el rostro, siempre andaba con uno de sus mejores amigos Jett, era al que más le contaba de todo por ser tan cercano, fue del único chico que fue amigo después de sin querer coquetear con su novio Dak.

Cuando llegaron al salón de química, los ojos de Carlos se centraron en un lindo castaño, el cual no dejaba de hablar entusiastamente con uno de los nerds, con descaro caminó directo a él lo saludó de una manera atrevida, desde entonces le habló, se acercó y se dio cuenta que no era del tipo de material con el que le gustaba jugar, pero aun así le seguiría buscando porque por lo visto le había llegado de una manera que solo Jett logró.

A la siguiente semana vio a un hermoso rubio con unos hechizantes ojos verdes almorzando solo, su mirada se conectó con la de él causando que por su cuerpo pasaran fuegos artificiales, se sentó al lado de él para poder averiguar más de esa belleza andante, por supuesto era de lo más lindo que había visto jamás, sin duda lo agregaría su lista de amigos.

En unas horas, vio a Kendall con Logan juntos charlando en los pasillos llenos de gente, sin pensarlo dos veces se acercó con algo de enojo y comenzó a lanzarle indirectas a Logan, quien se las devolvió de manera directa y más ofensivas, cuando se calmaron empezaron a reír como locos lunáticos, se amigaron y desde entonces se unieron los cuatro por circunstancias de la vida.

Esa noche estaba fría, se les hacía acogedor estar en la casa de James, junto a la chimenea con las mantas en sus piernas frente al televisor viendo una película, era una de esas de drama puro que siempre terminan de manera cursi y reconfortante, de vez en cuando quitaban la vista del televisor para hacer una pequeña broma sobre la película.

―Sí, pero no cambia el hecho de que tenga un hermoso cuerpo. ¡No más lindo que el de mi novio! Pero tiene lo suyo.―Refutó James divertido a su amigo rubio el cual estaba a su lado.

―Tienes un punto James.― Respondió Kendall resignado cruzando los brazos sobre su pecho.

―No lo sé, he visto mejores.― Comentó Logan encogiéndose de hombros soltando un pequeño suspiro.

―En mi caso solo la usaría y luego la botaría así que me da igual si es buena o mala persona.― Carlos se encogió de hombros, se levantó de su lugar como si nada.―Iré por agua ¿Quieren algo?

―No gracias, solo quiero probar los labios de cierto chico pálido que está aquí cerca.―Coqueteó James importándole poco que Kendall estuviera en la mitad de ellos.―Logan… ¿Sabes lo mucho que me gustas verdad?

―Si bebé, lo sé.―Logan le respondió volteando pasando sobre el rubio, el cual se quejó y levantó de inmediato.―Te deseo tanto.

―Yo también te deseo.― La voz de Logan se perdió.

Carlos y Kendall incomodos huyeron del lugar para ir directo a la cocina, al llegar se dirigieron al refrigerado para poder ver lo que podrían comer, como siempre el más bajito rompió el silencio.

―Creo que esos dos necesitaran una habitación oscura y nosotros unos tapones de oídos.― Dijo divertido Carlos lamiendo un poco de glaseado de una cuchara.

―Sí, creo que se están tomando muy en serio su noviazgo a pesar de que llevan poco, creo que no durará mucho.―Respondió Kendall convencido de sus palabras dirigiéndose a la alacena.

―Yo creo todo lo contrario.―Refutó Carlos de manera tranquila sin moverse de su lugar.

Kendall volteó y lo miró entre despectivo y con sorpresa.― ¿Cómo puedes decirlo con tanta seguridad?― Preguntó arqueando una de sus cejas.

―Porque si fuera algo de un momento no usarían la palabra novio, además se les vio la química al verse, casi se babean encima.― Explicó Carlos caminando despacio para quedar frente al rubio.―Además yo sé que si fuera algo solo del momento, no volverían los momentos tan íntimos.

―Ha hablado la voz de la experiencia.―Kendall retorció los ojos con diversión.

Carlos lo miró divertido.― Huelo celos.― Afirmó con una sonrisa en su cara con un tono de voz triunfante.

― ¿Qué? ¡No! Definitivamente, estás demente.―Exclamó Kendall con una sonrisa en su cara, dio un paso hacía el pequeño, él no se movió para nada.

―No estoy demente, tú eras el que coqueteaba con Logan desde que lo conoció.― Carlos levantó la mirada y penetró la del rubio obstinadamente.

―Eso no es cierto, dices saber sobre de las cosas que te rodean, creo que no es cierto.― Kendall se acercó un poco, respondió la mirada del pequeño de la misma forma de la que él se la había dado instantes atrás.

Carlos se acercó a su amigo con una sonrisa triunfal.―Vamos, sé que quieres besarme.― Pasó una de sus manos por el torso del chico sintiéndolo estremecer.

―No…

Kendall se agachó un poco cayendo en los encantos de Carlos, no podía resistirlo por más que lo quisiera, esos ojos hechizaban a cualquiera que estuviera cerca, entre más cerca se encontraban sus rostros, más podían detectar el calor del otro, estaban a punto de rozar sus labios cuando se escuchó un ruido por fuera de la casa, el pequeño se asustó completamente, se separó de su amigo y miró para afuera para ver si podía encontrar algo, al rubio esto le pareció un tanto extraño y paranoico.

― ¿Estás bien Carlos?―Preguntó Kendall extrañado, sintiéndose aliviado pero al mismo tiempo un tanto decepcionado.

―S-Sí, vamos con los chicos.―Se limitó a decir Carlos algo nervioso.

Al llegar ambos a la sala se encontraron con unos tiernos, tranquilos y casi dormidos Logan y James, sonrieron de la ternura que les dio, después soltaron unos suspiros, volvieron a sus lugares.

El resto de la película para Kendall fue: Escuchar un ruido, ver como Carlos saltaba nervioso en su lugar y más aún se colocaba irremediablemente nervioso y asustado, poco a poco sus ojos se fueron cerrando, pero antes de caer en la inconsciencia vio como Carlos salió sigilosamente tratando que nadie lo viera, después cayó dormido pensando que era un sueño.

Kendall se removió con algo de incomodidad en su lugar, ya que dormir en la alfombra no era nada cómodo, abrió los ojos despacio y se encontró con Carlos mirándolo con algo de preocupación, Carlos tocó su mejilla, al abrir completamente los ojos el sol le molestó un poco

― ¿Carlos?― Preguntó Kendall un poco desorientado, sentándose de tal forma que pudiera verlo directo a los ojos.

―Sí Kendall, solo quiero decirte que debes tener cuidado, hay alguien que quiere hacerte daño y a los chicos.― Comenzó con una sonrisita en el rostro.

― ¿Qué? No te comprendo.― Kendall le miró confundido dirigió ambas manos a los hombros del pequeño, pensando que era una broma lo agitó para que reaccionara y dejara de jugarle tales bromas.

―Por favor Kendall, contrólate. Esto está pasando por errores míos del pasado que están comenzando a tomar flote, quieren vengarse de mí y los usarán a ustedes para hacerme sufrir, en especial a ti, pero no creo que lo sepan.

― ¿A mí?―Averiguó Kendall curioso, quedó estático en su lugar como si lo hubieran clavado allí.

―Sí porque tú eres la primera persona que despertó sentimientos en mí, te quiero mucho Kenny.― Se acercó a él, le dio un suave abrazo.

Kendall sonrió triunfante, besó su cabeza con delicadeza.―Vamos, sé que quieres besarme.―Susurró divertido alejándolo de su cuerpo, lo miró directo a los ojos.

Carlos sin pensarlo dos veces se acercó a él, lo besó como si fuera la última vez que lo vería, sus labios danzaron a tal ritmo y sincronización que parecía que ya conocían los labios del otro sabiendo que era la primera vez que compartían tan acto, en especial Kendall era la primera vez que besaba a un chico y más a una persona que le gustara tanto como Carlos, poco a poco cayeron en el alfombrado, sus cuerpos se hacían propios el uno al otro.

Se escuchó un ruido en las escaleras, Carlos se levantó asustado, sin dar explicaciones se dirigió a la entrada, volteó y miró por última vez a su Kendall.

―Por ahora es todo lo que puedes saber de mí, te quiero Kendall.―Y después de decir esto desapareció por la penumbra de la entrada.

―Y yo a ti Carlos.

El ruido se escuchó más fuerte, eso molesto de sobremanera Kendall, se agitó en su lugar, sintió que alguien lo agitó de una manera brutal hasta que se dio cuenta que no Carlos no estaba a su lado, el que lo estaba era Logan, con lágrimas en sus ojos, desesperado con el celular en su mano.

―Kendall, Carlos no está se fue desde anoche y no volvió, creo que pensó que no lo veríamos pero desgraciadamente yo si lo hice.―Logan se sentó al lado del rubio.―Mande a James a buscarlo, aún no llega con noticias de él.

Kendall se preocupó también, pero pensándolo bien, el sueño que tuvo se sintió más real de lo que debería haberse sentido.

James entró con una mueca en su cara, se sentó junto a los chicos.

― ¿Encontraste algo?― Preguntó Kendall estirándose un poco, en su voz se podía escuchar un tanto de preocupación, todavía se sentía aturdido por la noticia.

―No, pero encontré esto.― James sacó el destruido celular de Carlos de uno de los bolsillos de su abrigo.―Es el celular de Carlos y una nota en ella.

Si alguno de ustedes ha encontrado esto, de seguro ya se dieron cuenta de que su amadísimo amigo despareció, no me hagan enojar o les puede pasar lo mismo que a él.

En ese momento Kendall se acordó de las palabras de Carlos en su sueño.

Solo quiero decirte que debes tener cuidado, hay alguien que quiere hacerte daño y a los chicos.

No sabían que esa era la punta del Iceberg, tenían muchas cosas que averiguar de su amigo y quienes eran que querían hacerles daño y Kendall esperaba con toda ansia que Carlos estuviera bien o al menos con vida…


Muchas gracias por leer, saben me hacen inmensamente feliz, amm no sé que más decir solo... Esperen próximo capitulo