¡Feliz…¿Navidad?!

Por: Lightkey27

Disclaimer: Los personajes de Fairy Tail no son de mi propiedad, sólo he utilizado los personajes para crear esta historia.

Este fanfic ha terminado siendo para la actividad del foro Cannon Island "Navidad: actividad especial" y hace referencia al prompt 34 "Fiesta de navidad" –eso creo, bueno al menos es el inicio- Espero que les guste.

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—Meredy-chan ¿Te encuentras bien? —la voz de su mejor amiga sonaba lejos, a kilómetros, incluso ella era incapaz de ver su imagen nítidamente aún cuando se había despertado hace mucho, sus ojos seguían empañados y su consciencia en algún lugar del mundo, creyó que se trataba de alguna alucinación, por lo cual prefirió seguir durmiendo e ignorar a la imagen de la peli azulada que tenía en frente.

La azulada hizo un puchero con su boca y llevó sus manos a sus caderas a modo de protesta, en los últimos días su amiga se había mostrado más cansada de lo normal, —Es debido a la universidad— pensaba, pero ni siquiera ella misma se lo creía, siendo evidente las ojeras que estaban marcadas bajo sus ojos y su inusual cabello despeinado, aquello la había preocupado desde la última vez que la vio y se prometió a sí misma que en cuánto estuviera libre iría a visitarla.

Y da la casualidad de que ese día es hoy

—¡Meredy-chan, despierta en este instante! —el grito de horror que exclamó la peli rosada fue de película, incluso terminó en el suelo al verse atrapada entre las mantas de su cama, miró a ambos lados intentando buscar algún indicio de peligro, pero sólo se encontró con las botas color marrón de su amiga.

—¡¿Qué rayos ocurre?! —exclamó energéticamente llevando su mano a su cabeza para aliviar un poco el dolor que el golpe le había proporcionado.

—Juvia está feliz de que por fin despertaras—le brindó una mano a su amiga para ayudarla a incorporarse, un sonoro bostezo fue lo que obtuvo a cambio, además de, por supuesto, una mirada con el ceño fruncido.

— ¿Qué haces aquí Juvia? —le preguntó aún con voz adormilada, se le hacía raro que estuviese espantándola a tan tempranas horas del día, sabiendo que su novio está a menos de una casa de distancia ya que era su vecino.

—Juvia está preocupada por ti, últimamente te vez algo agotada Meredy-cha ¡Y no intentes negarlo! —Agregó con su dedo índice al aire regañándola inmediatamente al ver las intenciones de la peli rosada, quien sólo atinó a cruzarse de brazos e inflar sus mejillas.

—Sabes que puedes decirle a Juvia lo que sucede ¿Verdad? —aquello era cierto, era imposible que le escondiera algo a ella, no con casi dos décadas de conocerse, la peli rosada suspiró con aires de derrota y dejó caer sus hombros, ya era hora de que se desahogara con alguien, no lo había hecho antes porque estaban en temporada de exámenes, pero ahora que estaban de vacaciones por las festividades de la época, finalmente tenía un tiempo para poner en orden su vida personal.

—Es Lyon—dijo con voz apagada, jugando con las esquinas del cobertor que ahora la cubría y envolvía, sólo dejando visible su rostro

—¿Lyon-sama vendrá a la ciudad? Esa es una buena noticia para ti Meredy-chan, ha estado todo el semestre ocupado y no ha tenido tiempo libre para visitarte…Uh…¿Por qué no estás feliz? —La sonrisa forzada que la ojiverde mostraba era mala señal, pero Juvia era incapaz de deducir la razón, por lo que necesitaría tener la información completa.

—¿No es sólo Lyon-sama quien te preocupa, verdad? —listo, había dado en el blanco, Meredy desvió la mirada hacia el suelo de inmediato, haciéndola lucir tan vulnerable.

—Jellal también dijo que vendría—un Oh de comprensión salió de los labios de Juvia, ahora lo entendía todo, la última navidad que celebraron juntos fue hace un año, Meredy y Lyon todavía no formalizaban su relación, pero para nadie era un secreto que entre ellos existía atracción mutua, no era un secreto ni siquiera para su hermano mayor,

Jellal Fernandes

El juez conocido, incluso a nivel internacional, por su fría imparcialidad, aquel que impone miedo a todo acusado que ante él, tenga la desgracia de presentarse, aquel que gracias a que fue un reconocido políglota y gran conocedor de casos inusuales imparte actualmente una clase perteneciente a la carrera de derecho.

Donde estudia su novio

Donde su hermano se enteró de su relación

Donde le hace notar al albino que no le agrada para nada el hecho de que le ocultara su vínculo con su adorada hermanita

En cada exposición, en cada ensayo.

Y seguramente, en esta navidad.

—Sé que Jellal está enojado porque no le dije acerca de Lyon y yo—Me lo recuerda cada vez que llama añadió para sí misma la menor de los Fernandes—Pero si Lyon no ha tenido tiempo de visitarme es gracias a él ¡Jellal es un inmaduro! Cada trabajo que le presenta debe hacerlo nuevamente ¡Y ni hablar de los trabajos en grupo! Lyon es el ser más responsable y elocuente que he conocido y Jellal sólo se encarga de ponerlo nervioso en las presentaciones ¡Ahhhg! —la azulada se acercó rápidamente a Meredy para impedir que se hiciera daño ya que por poco queda sin una parte de su cuero cabelludo, su hermano en verdad la sacaba de quicio cuando se comportaba de ese modo,

"Su modo protector"

—Pero Juvia cree que quizás esta sea una oportunidad para que hagan las paces—mencionó la joven Lockser con un dedo en su mejilla, como solía hacer cuando tenía un plan en mente —Si Lyon-sama y Jellal-san estarán de visita, Meredy-chan debe aprovechar la época de navidad para arreglar todo, desde disculparse por ocultarle las cosas a su hermano, hasta lograr que él lo acepte como tú lo has hecho ¿No te parece?

El plan de su amiga sonaba muy idealista, demasiado. Sabía que aquello sólo sería posible si Jellal no fuese Jellal, y hasta allí llegaba la ejecución de la idea, pero por alguna razón quería intentarlo, no perdía nada con mostrarle a Jellal por qué se enamoró de Lyon y así mismo hacer ver a su novio, que su hermano no es tan malo como parece, sólo es algo…sobreprotector.

—Eso suena algo… prometedor, vale la pena intentarlo—aceptó finalmente recibiendo un aplauso por parte de la peli azulada que fue correspondida por una leve sonrisa por parte de la Fernandes.

Sólo esperaba que Jellal no fuese tan difícil de manejar.

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—¿Todavía no acaba joven Vastia? —era el último examen que el albino debía presentar para finalmente ser libre de las asignaciones que traía consigo la universidad, sin embargo, por más que había estudiado, el profesor Fernandes parecía haber atinado a los temas que le eran difícil de manejar, razón por la cual, aún no había entregado, no podía concentrarse al tener la mirada del oji oliva sobre él, ya estaba lo suficientemente presionado para concentrarse, pero desafortunadamente el azulado parecía oler su temor, pues a pesar de que todavía quedaban cinco estudiantes, además de él, el peli azulado se empeñaba en circundar por su escritorio más veces que con los demás, acción que lo molestaba pues al estar el profesor distraído con él, le daba oportunidad a los demás para echar una ojeada a sus apuntes.

—Blendy, no crea que no la vi, diez puntos menos y a la próxima le anulo la prueba, sin derecho a presentarla nuevamente—bueno, al menos no dejaba que se pasaran de listo, pero aún así

¡Odiaba estar en esa situación!

Pero lo que más le causaba enfado ¡Era no saber por qué él lo odiaba tanto!

Al inicio de semestre supo, con sólo verlo, que era un profesor difícil, alguien a quien le gustaba el orden, la puntualidad, responsabilidad y eficiencia, cualidades que tuvo que pulir durante el transcurso de los días, porque a la mínima falla le bajaba una considerable cantidad de puntos.

Lo bueno era que, a pesar de ello, el albino tenía unas excelentes notas, después de todo, había sacrificado mucho para obtenerlas, y el mayor padecimiento que había tenido que sufrir era prácticamente anular los fines de semana de visita a su adorada novia Meredy, limitándose a conversaciones telefónicas y videos llamadas, la última vez que la visitó fue el primer sábado del semestre, antes de saber la clase de profesor con la que tendría que lidiar, le explicó la situación y ella, por alguna extraña razón, se mostró comprensiva, por supuesto que, no desaprovechó la visita de aquella vez, esa noche se convenció de que había valido la pena tres horas detrás del volante y la tranquila respiración de su exhausta — y complacida— novia, era evidencia de ello, sus cabellos rosas esparcidos por la almohada, su blanca piel en contraste con las sábanas, su desnudez que estaba oculta por las mismas,

¡Cuánto anhelaba que llegaran las vacaciones!

—Joven Vastia, le sugiero que se concentre en el examen…y que no lo ensalive, por favor—sin haberse dado cuenta se había quedado ensimismado pensando en su novia ¡Hasta había estado babeando el examen!

¡Cuánto la extrañaba!

Sacudió su cabeza para deshacerse de esos pensamientos, miró el reloj que estaba en la pared, sobre el profesor que — para variar— lo miraba atentamente.

¿Es que había tenido algo en el rostro durante todo el tiempo que dura el examen? Bah, no era momento de pensar en ello, había comprobado que le quedaban veinte minutos para completar la pregunta que le hacía falta, que para su desgracia, era la que más puntos valía, era una fortuna que se hubiese preparado bien para el examen, de otro modo se hubiese encontrado en la situación abismal que atravesaban sus compañeros al haber creído las palabras del profesor

"Vendrá lo mismo que dimos en clases"

Novatos, ¿Qué nunca aprenden? Esa es la clásica mentira de todos los profesores, se relajó un poco y respiró profundamente, no se estaba concentrando, el tiempo avanzaba y el espacio en el papel seguía sin llenarse, estaba seguro de que había estudiado ese tema, releyó la pregunta para que su subconsciente despertara y colaborada con la información que aún no salía a flote,

Explique, con detalles, de qué trata la insolvencia transfronteriza

La sabía, conocía la respuesta, pero no lograba ordenar sus ideas

—Les quedan quince minutos—anunció el profesor, ¡Demonios! Lo tenía en la punta de la lengua, casi lo logra, el estado, deudas, economía ¡Insolvencia! Ya está, por fin lo había logrado recordar, miró el reloj una vez más y sonrió al ver que le quedaba tiempo suficiente para contestar.

—Manos a la obra—pensó y dio inicio a dejar salir a flote su gran capacidad para responder este tipo de preguntas, escribía a la velocidad de la luz, tanto que estaba seguro de que si movía el bolígrafo más rápido estaría a nada de quemar el papel, y aquello no lo convenía, era mejor no arriesgarse. Escuchó como el profesor se levantaba de la silla, aunque hubiese intentado hacer el menor ruido posible, y comenzó a retirar los exámenes de sus compañeros, eso lo hizo darse prisa, ya tenía tres párrafos copiados, pero la aclaración de "Con detalles" no estaba en vano, había tenido la experiencia de colocar sólo lo necesario en una de las primeras pruebas que realizó, y tener que aguantarse las palabrotas que le quería dedicar al profesor al ver la cantidad de puntos que le restó debido a su "Explicación insuficiente" ya había aprendido la lección. Cuando terminó de contestar, a tan sólo dos minutos de dar por finalizado el examen, se levantó de su asiento y dándole un beso a la hoja, entregó la prueba.

—¡Vaya! el primero en entregar, felicidades Vastia, tenga una feliz navidad—por alguna razón aquellas palabras dichas por el profesor no sonaron tan frías, como era costumbre, sino como si en verdad, definitivamente y desde el fondo de su corazón, le deseara una feliz navidad, eso era nuevo, así que no hizo nada más que sonreír y retirarse.

Tras cerrar la puerta no pudo evitar dar un gran salto en el aire a modo de celebración ¡Era libre! Finalmente era libre, no más exámenes, no más presentaciones, si no hubiese estado en el pasillo de la universidad gritaría lo más alto posible para celebrar, pero decidió contenerse hasta llegar a casa, a reunirse con su amada.

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—Entonces, fue un semestre difícil, ¡Pero me alegra que mantuvieras tus buenas notas a pesar de ello! Tener una beca no te da el lujo de reprobar ninguna materia—una sonriente albina felicitaba a Lyon mientras hacían la fila para pedir un café, el Vastia, había acordado con su prima encontrarse en la conocida pastelería, Kreuz Heart, ya que ella era la dueña de la casa donde se estaba alojando durante esos seis meses, ya que no estaba en el campus central de la universidad en la ciudad, donde vive actualmente, sino en el anexo de la facultad de derecho debido a que están realizando reparaciones a la sede principal, su prima Mirajane le ofreció alojamiento durante ese semestre para que no tuviera que gastar en el alquiler de apartamentos o gastos innecesarios.

—Sí, aún no lo creo, solamente me falta un semestre y tendré mi título universitario—añadió con tono esperanzador el chico acto seguido realizaron su orden y no tardaron mucho en obtener su pedido dirigiéndose a la mesa para degustar sus bebidas, la mirada soñadora que tenía el albino le pareció sumamente adorable a Mirajane, le alegraba mucho el que todo resultara bien, académicamente hablando por supuesto.

—Por cierto, ¿Cuándo llegará Erza? Es extraño que no esté a tiempo—preguntó Lyon al percatarse de la hora y mirando a ambos lados en busca de una cabellera escarlata, encontrándola finalmente.

—¡Erza-chan! —la llamó Mirajane —¡Por aquí! —la mencionada esbozó una sonrisa al ver los rostros familiares de sus amigos y se dirigió a toda prisa hacia ellos.

—Lo lamento, acababan de abrir una pastelería en el aeropuerto y no pude evitar adentrarme en ella—dijo con un sonrojo en señal de vergüenza.

—No importa Erza-chan, lo que cuenta es que ya llegaste y ¿Adivina quién salió de vacaciones? —preguntó la Strauss dirigiendo su mirada hacia el chico que los acompañaba.

—Es una buena noticia Lyon—felicitó la Scarlet —Espero que tus notas no hayan bajado ni un poco—advirtió en un rápido cambio de actitud.

—Estoy seguro de que me va a ir bien en todo, excepto en la clase de derecho comercial —dijo de modo desanimado —El profesor se encargó de quitarme mi promedio de noventa y ocho.

—¿De verdad? Eso no suena muy profesional que digamos—comentó la peli escarlata mientras sacaba una caja que contenía un pastel de fresas, el cual, obviamente no iba a compartir.

—Sí, el profesor era sumamente estricto, por fortuna pude salir adelante, pero a cambio no he visto a Meredy en meses—un Aw por parte de todo el restaurante hizo eco en el local, en ningún momento el joven Vastia se había percatado de que todo estaba en absoluto silencio, y que su voz grave —y galante— resonaba sin interrupciones.

—Es muy adorable de tu parte el hecho de que la tengas presente en tu vida Lyon—felicitó Erza con mirada enternecida al ver como Lyon se sonrojaba debido a sus declaraciones, le recordaba tanto a aquel compañero que conoció durante su estadía en la ONU como traductora e intérprete del idioma francés, hace ya tres años cuando comenzaba su labor, comenzó a sentir nostalgia por aquellos tiempos, definitivamente sabía que sólo existía un hombre como él en el mundo, tan elegante y a la vez tan informal, tan serio, pero con sus momentos de humor, tan elocuente en sus discursos internacionales y tan tímido cuando se encontraba junto a ella.

Jamás había conocido a alguien que fuera tan contradictorio y que mostrara tantas facetas al mismo tiempo.

—¿Sucede algo Erza? Te ves algo roja—la ojiazul la despertó de su ensoñación pudo notar como Lyon bebía de su café y la observaba con atención, probablemente con miedo a preguntar sobre el motivo de su sonrojo, mientras que la albina la miraba con una sonrisa en el rostro.

—¿Estabas pensando en él? ¿No es así Er-chan? —el tono maléfico con el que lo dijo la Strauss no le agradó para nada, su amiga podía ser una cantante muy famosa y lucir como un ángel en sus presentaciones, pero lo que la mayoría de las personas no sabían es que ella es la reencarnación del demonio cuando se enoja, y si no, que alguien le pregunte a Laxus, su novio, que aún sigue en el hospital por haberle armado un escándalo en el último evento al que asistieron.

—¿Él? ¿Acaso hay alguien así en tu vida Erza? —La curiosidad de Lyon había despertado y al ver la reacción de la peli escarlata confirmó sus sospechas, quien diría que hasta la temerosa Titania, apodada así por la misma organización donde trabajaba, podía llegar a enamorarse. Le alegraba, pues la conoció en una subasta de caridad al que había asistido gracias al trabajo de su prima, y jamás le había visto con algún chico, lo que le extrañaba pues para nadie era un secreto que era una mujer muy hermosa y que llamaría la atención de cualquier hombre, pero eso sería hasta que la conocieran cuando se enoja, afortunadamente no tuvo que vivir esa traumática experiencia, sino un tipo que trabajaba con la Scarlet del cual su prima le comentó que no se le ha vuelto a ver por los alrededores, y no le extrañaría para nada ya que la joven lo había sorprendido en plena presentación de los embajadores, golpeando a un pobre cachorro.

Y si hay algo de lo que se enteró ese día, es que Erza Scarlet es una defensora, internacional, de los animales.

—Y-Yo…b-bueno…e-es decir

—Lyon, no avergüences a Er-chan, mejor vayamos a casa, estoy segura de que querrás irte esta misma noche a la casa de Meredy—aconsejó Mirajane salvando a Erza de decir alguna barbaridad y haciendo que el albino se olvidara por completo del tema al mencionar a su novia.

—Eso ni lo dudes, Meredy me llamó antes del examen y me dijo que quiere que pasemos la navidad en familia quiere que sea una navidad inolvidable ya que su hermano, también irá ¿Les apetece ir? Después de todo entre más seamos mejor ¿Qué dicen?

—Eso suena genial Lyon, pero lamento mucho decirte que mis hermanos y yo pasaremos navidad en casa de Laxus, sus primos estarán de visita y ya sabes qué tipo de relación tienen, debo ir a ayudar—expuso la albina haciendo referencia a "Los Raijinshuu" apellido al cual pertenecen los inseparables primos del rubio y que, según ella y su instinto de Cupido, dos de ellos están interesados en sus hermanos menores, por lo que debe ir a supervisar la situación y dar el visto bueno.

Es una tarea de los hermanos mayores

—Entiendo, es una lástima ¿Qué dices tú Erza? ¿Aceptas la invitación? —preguntó el chico, pero la peli escarlata estaba más concentrada en lo que acababa de salir de la boca de su amiga.

—¡Laxus y tú están juntos de nuevo! —explotó repentinamente, ganándose la mirada de varios de los presentes y llegando a asustar a Lyon, Mirajane por su parte le dedicó una de sus típicas sonrisas amables a su amiga, las cuales ella ya conocía, pues sólo las veía cuando hacía algo que no debía hacer.

—Er-chan…—amenazó sutil, pero maquiavélicamente, la albina, logrando que Erza sudara frío al haber hecho enojar a su amiga.

—L-Lo siento—se disculpó de inmediato —Es que no me lo habías dicho—acusó haciendo un puchero infantil.

—Para eso fue esta reunión, además de celebrar las vacaciones de Lyon, quería ponerte al día, pero te me has adelantado…¿Todo está bien Er-chan? —cuestionó repentinamente al notar el cambio de actitud que tuvo la Scarlet.

—Sí, no pasa nada ¿Qué me estaban diciendo antes de que los interrumpiera?

—Te pregunté que si querías pasar navidad en casa de Meredy—le respondió Lyon cordialmente.

—¿En serio? ¿Me estás invitando? —preguntó sorprendida ante la invitación, sin mencionar que emocionada, los últimos años solía celebrar navidad en casa, viendo algún maratón de películas de navidad, o revisando su móvil en busca de noticias que llamaran su atención, pues aunque su trabajo era 24/7 sus jefes le daban esos días libres para que se relajara y descansara un poco, desconociendo por completo que a Erza le costaba admitir que, a pesar de sus años, seguía soltera y no era de las que le gustaba ir a incomodar a sus amigos, aunque esto último fuera producto de su activa mente, pues ella siempre sería bienvenida a celebrar junto a ellos.

—Por supuesto, te has convertido en parte de la familia Erza, qué mejor manera de celebrarlo que en navidad—dijo sonriente el Vastia llegando a conmover a la chica.

—En ese caso, acepto, muchas gracias—la había invadido una alegría inmensa por el repentino cambio de planes, con el que estaba totalmente a gusto, después de todo no pasaría navidad sola y eso era algo nuevo para ella.

—Bueno, no se diga más ¡Vamos a empacar! —festejó inmediatamente la joven traductora, sin embargo Mirajane intervino en su celebración para llevarla al baño, excusándose con el albino y prometiendo regresar pronto.

—¿Te sientes mal Mirajane? ¿Por qué me has traído aquí? —Preguntó la Scarlet a la albina y llevando sus manos a su rostro tras creer haber encontrado la respuesta —¡Oh por Dios, tú querías de mi pastel de fresas! ¡Lo siento tanto, debí haber compartido!

—No es eso Er-chan—la tranquilizó de inmediato la Strauss —Quiero pedirte un favor ¿De acuerdo? —preguntó con una leve inclinación de su cabeza y aquella dulce voz que la caracterizaba.

—Por supuesto, ni siquiera debes preguntar ¿De qué se trata?

—Laxus está por salir del hospital, por lo que tendré que ir a buscarlo e inmediatamente nos iremos hacia la casa de su abuelo, así que no podré llevar a Lyon a casa de Meredy ¿Podrías llevarlo tú? Me da mucha vergüenza no haber previsto esto y tener que molestarte, yo…

—¡No hay problema! —Interrumpió emocionada la peli escarlata —Yo me encargo—dijo con orgullo —No te preocupes Mira, no es ninguna molestia ¡Será un viaje legendario! —la albina podía jurar que los ojos de su amiga no podían lucir más brillantes y no era para extrañarse, Erza amaba los viajes largos en los que se podía ir cantando en el camino o ganando algún juego de palabras, eso lo recordaba por las excursiones que hicieron durante la secundaria, donde está demás decir que ella era la más entusiasmada.

Una vez terminada la charla se dirigieron, riendo por algún chiste que había contado Mirajane, hacia la mesa donde dejaron a Lyon quien estaba al teléfono.

—¿En serio? Bueno, no sé si Mirajane pueda, le preguntaré y te aviso ¿Está bien? —Lyon colgó la llamada, no sin antes despedirse cariñosamente de su novia y dirigió su atención hacia las recién llegadas.

—¿Sucedió algo? —cuestionó Mirajane tomando asiento.

—No…bueno sí, lo que ocurre es que Meredy me llamó pidiéndome que si podíamos darle un aventón a su hermano, parece que su coche tiene una falla y en la estación de autobuses ya no hay boletos disponibles ¿Te importaría llevarlo?

—Eh, bueno, respecto a eso, yo no…

—¡No hay problema! ¡Dile a tu amigo que es más que bienvenido! —exclamó Erza con aquel brillo en sus ojos que había tenido hace unos momentos —Mirajane no podrá llevarte, así que lo haré yo ¿Bien?

—B-Bien—No tenía objeción, después de todo era la única opción que tenía para ver a su novia.

—Me alegro que no tengas problemas, de cualquier forma estaré pendiente al teléfono para que me llamen cuando lleguen ¿Está bien?

—¡Perfecto!

Luego de haber salido del establecimiento llegaron a la casa de los albinos y en media hora estaban listos para partir, tras despedirse de la albina, con la promesa de llamarla por cualquiera situación, Erza y Lyon, con la Scarlet al volante, se dirigían a la dirección que Meredy les había proporcionado para que recogieran a su hermano.

—Y dime Lyon ¿Cómo es el hermano de Meredy? —preguntó curiosa por saber con qué tipo de persona iba a tener que lidiar durante casi tres horas.

—A decir verdad, no lo recuerdo muy bien, sólo nos encontramos en la fiesta de navidad del año pasado, pero ni siquiera llegué a verle la cara tuvo una emergencia y se fue casi al instante—respondió el albino que iba de copiloto.

—Vaya, parece que estamos ante un señor misterioso, no te preocupes, si resulta ser un amargado lo pondré en su lugar—dijo guiñándole un ojo y con extrema confianza la peli roja, y sin embargo cuando se estacionó frente a la casa e hizo sonar el claxon, se vio despojaba de todo aquello que presumía tan sólo segundos antes.

—¡Jellal/Profesor Fernándes!

Sería un largo viaje para este trío.

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N/A: ¡Hola! Bueno qué les puedo decir, primero muchas gracias por arriesgarse a leer esto, fue hecho con mucho amor OwO y originalmente iba a ser un one-shot, pero las cosas no salieron como lo tenía planeado y es por eso que tendrá dos partes, pero bueno, decidí trabajar con mi amado Lyredy y explotar la relación que tendrían Jellal y Lyon buhahahaha :D así que se me hizo imposible no incluir Jerza, y mención gruvia y Miraxus, que en el próximo capítulo tendrán más participación –lo juro-

En fin, muchas gracias por leer, en serio se los agradezco mucho, este año definitivamente NO ha sido mi año con los fanfics, pero qué se le va a hacer, ¡Oh! Y sé que a veces cuesta, pero –saca su tacita- ¿Me regalan un review? Quiero saber su opinión acerca de la historia nwn/

¡Gracias por leer!