En las selvas amazónicas las dos tribus vuelven hacer enemigos naturales, después de una batalla contra los taladores, fue un éxito, sin embargo esto no es nada mas que una tregua. Era el amanecer, un pequeño guacamayo escarlata de ojos azules, sentado en un roca, estuvo recordando una discusión que tuvo con su padre.
-No entiendo por que tengo que ser el líder, le dije que nunca lo seré, Como desearía que esta guerra termine de una vez, esto apesta.- dijo molesto
-Bueno es mejor vaya a buscar algo de comer- salió volando en busca de una fruta.
Mientras tanto en el lado de los guacamayos spix azules, toda la tribu estaban dormidos, ya que el sol estaba a punto de salir. En un nido Vivian una familia, que no es nada menos que la familia de blu, fue un héroe que salvo esta selva de los taladores. Blu dormía al lado de su esposa perla, de repente comenzó a despertar, es lo mas raro por que el siempre despierta muy tarde, pero con el paso del tiempo se acostumbro despertar temprano, hasta que vio una pequeña ave en la entrada del nido, era bia que fue la primera en despertar para ver el amanecer.
-¿bia?, ¿que haces despierta a estas horas?- pregunto blu
-Ah buenos días papa-dijo bia- bueno desperté para ver el amanecer, ¿no es hermoso?.
-si es muy hermoso-decía blu, mirando asombrado el amanecer junto con su hija.
-papa, ¿puedo salir?-pregunto bia
-¿Qué?-dijo blu confundido.
-bueno, tengo que buscar una flor especial a mama- dijo bia
-bia no se, sabes cuantos animales salvajes hay en la selva- dijo blu algo preocupado
-Por favor-dijo bia con una cara de ternura.
Blu no resistió y finalmente le respondió.
-Muy bien, tu ganas puedes salir a buscar esa flor- dijo blu sonriendo
-gracias papi-dijo bia abrazando a su padre, hasta que le dio un beso en la mejilla.
-no me tardo- dijo mientras volaba
-Pero ten mucho cuidado- grito blu.
Al lado de una roca estaba un oso hormiguero dormido, de repente bia aterriza sobre su sombrero.
-Despierta, dormilón que tenemos que buscar una flor especial-dijo bia. Charlie se despertaba de todos modos.
Mientras tanto, el pequeño guacamayo rojo estaba buscando algo que comer, busco por todos lados de la selva, hasta que encontró un dulce mango.
-que suerte en encontrar este mango- dijo.
-Nunca había visto esta fruta, pero que mas da tengo hambre- agarro el mango hasta que se puso a comer.
En un lugar de la selva, bia y Charlie encontraron unas bellas flores.
Wow, son las flores mas hermosas que he visto, un perfecto regalo para mama- dijo bia, que iba a tomarlas hasta que escucho un ruido.
-¿ah? ¿escuchaste algo?- dijo bia confundida.
Quiso tomar las flores, pero decidió averiguar que era ese ruido, ya que su padre le advirtió sobre los peligros en la selva. Justo a tiempo ella y Charlie se escondieron detrás de una roca y lo que vieron fue un guacamayo escarlata comiendo un mango, esa ave tenia la misma edad que bia.
-un intruso invadió de nuestro lado, alguien tienen que darle una lección-dijo bia con una mirada malévola a Charlie, el oso hormiguero tenia la mirada confundida ya ella tuvo una idea.
-uff, eso si que fue un buen desayuno- dijo con un buen humor.
Pero entonces presintió que alguien lo observaba pero no le dio mucha importancia, ya que estaba a punto de partir el vuelo, hasta que algo lo atrapo entre sus patas y lo voltearon de cabeza para arriba.
-¿pero que demonios?-dijo confundido.
En ese instante llego bia aterrizando sobre una roca.
-será mejor que empiezas a hablar amigo-dijo bia molesta.
-¿Qué es lo que pasa contigo?, ¿Qué clase de broma es esta?, no sabes con quien te metiste- le dijo furiosamente a bia.
-bueno, a partir de ahora yo sere que haga las preguntas-dijo bia.
-¿sabes lo que acabas de hacer?-pregunto bia.
-¿Qué? solo estaba comiendo un mango no es para tanto- dijo relajado.
-Pues si no lo sabes, acabas de entrar al territorio de mi tribu- dijo bia molesta.
-¿estas hablando en serio?- riéndose a carcajadas, por escuchar lo que dijo bia le respondió.
-por si no lo sabes, tu estas en mi territorio- dijo enfurecido.
-estas muy equivocado, yo ya conozco toda la selva he estado aquí todo los días-dijo bia, hasta que le explico sobre los lados que iban estar las diferentes especies. Hasta que la ave se aburrió y le respondió.
-eres una sabelotodo, ¿lo sabias?- dijo en un tono burlón.
-oyes no me interrumpas cuando estoy hablando es una mala educación- dijo bia enfurecida.
-cerebrito-
-grosero-
-sabionda-
-maleducado-
-nerd-
-cerebro de plumas-
Decían ellos poniéndose apodos.
-serás tan amable de desatarme de estas lianas, odio decirlo pero eres muy buena haciendo nudos- dijo
-pues, en primera no estas atado en unas lianas-dijo bia.
Sin darse cuenta se fijo que no era unas lianas, era algo pegajoso, fue la lengua de Charlie .vio como el oso hormiguero le sonrió de manera burlona.
-Que asco-grito.- Dile a esa cosa que me suelte- dijo enfurecido.
Charlie lo miro con mucho enojo a la ave.
-Oyes ten más respeto con Charlie- dijo bia defendiendo a su amigo.
Pero en ese momento hubo otro ruido que los tres escucharon, un salvaje jaguar salió con un rugido asustándolos.
