Espero que les guste mi historia.
No me pertenece Gakuen Alice.
Era un día como cualquiera, tranquilo hasta que...
"Sakura-san" grito Ruka Nogi su expretendiete: después de que ella empezara su relación con Natsume, el comprendió que Natsume la necesitaba mas que el... para poco después se empezara a darse cuenta que le gustaba cierta inventora mejor amiga de la castaña.
"¿Que pasa Ruka-pyon?" pregunto la castaña con un poco de preocupación.
"Es Natsume se encerró en su cuarto, cuando quise entrar me grito que no quería que nadie lo viera, que era un monstruo, por favor Sakura-san ve ha ver lo que le pasa" respondió el rubio con preocupación.
"okey ire en este momento" comento la castaña, después de despedirse de Ruka su mente estaba sumida en pensamientos "por que Natsume diría eso tengo que apresurarme" antes de que se diera cuenta se encontraba en la entrada de los dormitorios de los chicos.
Subió desesperada mente hasta llegar al cuarto correspondiente de un cierto azabache.
"¿Natsume estas ahí?" pregunto con voz preocupada, al no haber respuesta acerco su mano a la perilla para luego girarla lentamente y abrir la puerta sin hacer un solo ruido.
Natsume al tener su oído muy desarrollado por su entrenamiento para las misiones pudo escuchar pasos, pero no pudo reconocer quien era ya que su habitación estaba en su totalidad oscura.
"Natsume...?" hablo un poco pensativa la castaña sin darse cuenta que el azabache la había oído.
"¡Vete! Mikan... no mereces estar con un monstruo como yo" exclamo Natsume.
"Por favor Natsume que te pasa dímelo te lo ruego..." comento la castaña con mucha preocupación.
"Yo no merezco estar con alguien como tu...! yo soy un asesino despiadado, no tengo derecho a tener amigos, he tomado tantas vidas con estas manos..." exclamo con voz quebradiza Natsume.
Mikan al oír esas palabras salir de Natsume, de inmediato lo abrazo y le dijo "No es cierto Natsume, por favor no digas eso tu me tienes a mi y a los demás, si es necesario me convertiré en tu luz que ilumine tu camino mucho mas fuerte que el mismo sol, para que no me pierdas de vista..."
Natsume al escuchar esas palabras le regreso el abrazo a Mikan, para después Mikan empezar a sentir en su mejilla las primeras lagrimas que Natsume tubo que retener por mas de 4 años...
"Por favor nunca me dejes Mikan..." exclamo Natsume.
"Nunca" respondió la castaña.