Hola! Un mini one-shot sobre el anime Inuyasha para todos ustedes :3
Sólo un mal sueño.
Correr, saltar, trepar.
Eso era lo que hacía constantemente: correr de alguien, saltar arbustos y trepar troncos caídos.
Era como si el mundo estuviera en llamas, como si alguien me persiguiera mientras se iban cayendo las cosas. No tenía sentido, no podía tenerlo, simplemente era completamente irreal, ¿verdad?
Y como si de algo se tratara, me detuve. Paré en seco, mientras embarro mis zapatillas. Algo me hizo querer dar la vuelta sobre mí misma, y ver a esa persona que me seguía. El corazón me latía rápidamente, y tenía miedo de encontrarme con alguien, alguien horrible.
Abrí mis ojos como platos al ver a nada más que a él. Únicamente, la persona que puedo amar más que a mí misma. Observé como me tendía la mano, confiado, mientras movía sus orejitas blancas de un lado a otro.
Pero otra persona apareció, y no me tocaba, simplemente era como si me arrastrara hacia él. Cada vez lo divisaba menos, se tornaba más borroso y me costaba respirar. Era como si me apretasen fuertemente el abdomen y me impidieran inspirar aire. No sé por qué lloraba, realmente no sentía miedo, pero sí sentía tristeza. Alcé mi mano, como si estuviera entrelazándola con la de él, y el corazón me latía desembocado.
- Inuyasha... - Susurré. Ya no podía verle, el terreno aún seguía siendo barro, y esa fuerza misteriosa me arrastraba cada vez más a la oscuridad.
Cada vez más...
No sé cómo, ni el por qué, pero me encontraba sentada encima del futón donde dormía. Mis latidos eran rápidos, y me costaba calmarme. Noté unas perladas gotas de sudor en mi frente, y mis ojos casi se desorbitan, con miedo a mirar hacia la izquierda del futón. No quería encontrarme con nada que no fuera él.
Pero me giré y lo encontré durmiendo, aún. No había gritado, por eso seguía con el leve ceño fruncido y las orejas pocas veces se movían. Me aferré a su brazo derecho fuertemente, y luego recosté mi cara sobre su pecho.
Sin embargo, parece que despertó y me miró algo confuso, para luego acariciar mi mata de pelo negra curvando una pequeña sonrisa. Yo sólo miré a los pies del futón. Pensé que no se despertaría.
- ¿Qué pasa, Kagome? - Su tono de leve preocupación me indicó exactamente eso. Es cierto, nunca me había despertado por la noche, pero hoy sí.
- Tuve un mal sueño. Nada más. - Miré a sus ojos y sonreí falsamente. No sabía que hora era con exactitud, pero apostaba que de madrugada y quería dormir lo suficiente como para tener energías mañana.
Pero me equivoqué. No se preocupó pero sí que preguntó. - ¿Nada más? - Me miró algo curioso. Sus orejas se movieron un poco más.
- Es sólo que... - Me aferré un poco más a él, poniéndome cómoda. - Tenía miedo de perderte. - Susurré con algo de tristeza.
Él solo cerró sus ojos. - Sabes que eso es mentira. - Me abrazó posesivamente por la cintura. - Tú eres mía, y yo soy tuyo. - Su respiración se tornó lenta. Se durmió.
- Sólo fue un mal sueño.
Y yo también caí dormida otra vez.
No es un AU, sin embargo, creo que hice algo de OOC en Kagome. Discúlpenme entonces, pero aún no me acostumbro a escribir sobre Inuyasha y tal.
