-Es extraño tener a alguien más en la banda...- dijo Kord cruzado de brazos mientras miraba a Twist conversar con Pronto y Trixie.

-Amigo, de verdad comienzo a sospechar que tienes algo contra él.- respondió el líder.

-¿Y qué si fuera así? No sabemos nada de él, además de que su babosa versátil no me da nada de confianza.- se defendió el ingeniero.

-Pues eres el único que piensa eso. Relájate.- le dijo Eli.- Solo es un chico. Sé que será de gran ayuda para deshacernos de Blakk y de sus malvadas.

-Yo no lo creo del todo.- respondió aún grosero su desconfiado amigo.- Y no sé como puedes tú estar tan relajado.

-¿De qué hablas?

-¿Quieres una razón para ver diferente a Twist? Piénsalo, ahora hay otro humano en la Banda... Ahora hay otra opción para alguien...- dijo seriamente señalando con su cabeza a la chica, que se reía de algo que había dicho el rubio.

Kord no era ciego. Eli, a pesar de ser un héroe, continuaba siendo un muchacho, uno cuyo interés podía ser despertado por una mujer.

Hasta ahora solo tenía el ojo puesto en Trixie, y siendo el único humano del equipo, asumía que era visto de la misma manera por ella. ¿Realmente podría cambiar eso la presencia de otro chico?

-Estás viendo cosas, Kord.- dijo molesto acercándose a los demás. Pero el troll supo que al menos había hecho que el joven hiciera reaccionar sus sentimientos y despertara de la idea de que no podía haber competencia contra él por cierta lanzadora...

Ocho...