Naruto no me pertenece. Sus personajes originales pertenecen a Masashi Kishimoto.

Advertencias: Mundo alternativo, muy alternativo[?].

Curiosidades: Esta historia vino a mi mente mientras escuchaba canciones, así que tardé unas 4 horas en hacerla. Así que lamento que fuera tan corta;;


¡Disfruten!


Ingenua

I know
The past will catch you up as you run faster.

Tenía 17 años cuando se enamoró por primera vez. Ella creyó que el amor era su salvación en ese entonces.

Al principio, todo era hermoso para ella. Vamos, era un amor inocente, o eso parecía a vista de otras personas.

¿Qué podría resultar en un amorío de jóvenes? Una estupidez, claro. Pero a fin de cuentas, un amor inocente.

Todos se equivocaron, no era un amor inocente como todos creían. A veces los jóvenes (o la mayoría de ellos) no están cuerdos.

Sakura se fijó en él por ser diferente. En un principio se sintió terriblemente atraída, ¿quién no lo haría? Él siempre pareció tan tranquilo y a la vez tan maduro que lo hacía ver atractivo.

La primera vez que hablaron fue por una apuesta, los amigos de Sai le apostaron tener una cita con Sakura, y lo consiguió siendo tan directo y divertido con ella. Antes de eso, ambos ni siquiera sabían su nombre, simplemente se vieron en una fiesta y ocurrió. Sakura era linda por su cabello largo y rosa (no olvidemos sus ojos verdes) que fue la que más llamó la atención en los amigos de él.

Pasaron los días y tuvieron su primera cita, hicieron una gran conexión, pensó Sakura. Después de eso, no se vieron por varias semanas y tampoco hablaron, Sakura llegó a extrañarle, después de todo cayó a los pies da Sai. Para ella eran nuevos los sentimientos, era… inocente.

A los dos meses se volvieron encontrar en una fiesta, las emociones salieron en Sakura al verle y rápidamente se esfumaron al ver que estaba acompañado de una chica rubia, su vieja mejor amiga. Ino la notó en aquél día y siguieron teniendo comunicación. Fue difícil para la pelirrosa juntarse con la rubia en los siguientes días cuando ya le gustaba Sai pues ellos dos eran pareja.

No pudo evitar que sus sentimientos crecieran, Ino siempre hablaba de él y eso la derrotaba, le gustaba cada vez más. A parte que Sakura y Sai platicaban cuando Ino estaba lejos. Obviamente terminaron gustándose.

Un día mientras Ino estuvo de viaje, ellos se encontraron en un parque por casualidad y hablaron como si fuesen los mejores amigos, porque eso estaban siendo para los ojos de las personas menos para ellos que querían conocerse mucho mejor. Ese mismo día Sai se atrevió a robarle un beso y… comenzó el dolor.

La culpa se adueño de la mente de Sakura, no entendía nada y tampoco quería entender. No podía seguir viendo a sus amigos juntos, le dolía. Sai por su parte, buscaba a Sakura y la llenaba de tristeza, sus confesiones dolían y le apagaban.

Sakura no era capaz de contarle a su mejor amiga lo que estaba pasando con su novio, seguramente se enojaría y la mandaría a la mierda antes de pensar si eran ciertas sus palabras.

Y mientras más se callaba, Sai aprovechaba de acercarse.

Accidentalmente, se enamoraron.

Pero… Sakura dejó de sentirse culpable cuando se enteró que Ino siempre le fue infiel a Sai con un tal Shikamaru.

Sai se mostró indiferente, él ya lo sabía desde hace tiempo. Y Sakura… se marchitó al creer que servía de remplazo.

A pesar de doler, la rosada siguió viendo a Sai.

Comenzaron haber cambios. Sai cambió, se volvió frío, indiferente y sin ninguna preocupación en mente. Se alejaba lentamente y ella no sabía qué hacer. Lloró incontables veces por él, se preocupaba a diario y la ansiedad se apoderó de su vida, marchitándola.

Su corazón no sabía qué sentir, dolía amarlo como deshacerse de él. Ella quería alejarse, sin embargo cada vez que pasaba un Sai salía con que no podía vivir sin ella.

Sin darse cuenta su amor se transformó en una obsesión.

Y aquél lindo chico se transformó en un hijo de puta.

Y aquella dulce niña se transformó en una chica necesitada de amor.

"El hijo de puta" se aprovechó de romper a esa chica, lastimándola por diversión, jugando con sus sentimientos, confundiéndola con sus impulsos y dañándola hasta agotar sus sentimientos.

Sakura dejó de ser libre, tan dañada no podía salir adelante. Se resignó. No podía contar con nadie ni siquiera su familia, la tomarían de estúpida y sería la burla.

No bastó con marchitar sus sueños y su corazón, Sai llegó a agredirla físicamente cada vez que sus celos se presentaban por la falta de confianza, cuando él era quién engañaba y no ella.

Sólo una maldita vez tuvieron sexo y Sakura quedó embarazada. Al enterarse huyó como pudo de Sai, él no sería un buen padre, lo sabía perfectamente. Sin decirle nada se escondió.

Al principio llegó a odiar al niño en su vientre pero al final terminó amándolo, era una criatura inocente y ella era la tonta después de todo.

Sus padres al enterarse se enojaron, ¿qué padres no lo harían?

Sin embargo, aceptaron la situación, no podían abandonar a su única hija, la amaban.

Y así, finalizó su historia con Sai. Nunca le buscó para explicarle porque le dejó y fácilmente no era necesario.

A sus 19 años tuvo a su hijo, amándolo con cada célula de su ser desde el embarazo.

Con ese nacimiento, llegó la felicidad en su vida.

El infierno había terminado.